Cómo maltear la cebada

4 partes:Comprar la cebadaRemojar y secar la cervezaGerminar la cebadaDeshidratar la malta de cebada

La mayoría de cerveceros artesanales compran cebada malteada a negocios que fabrican cerveza artesanal. Sin embargo, con la experiencia, es probable que ellos quieran maltear sus propios granos para que su trabajo sea más artesanal. La cebada puede ser malteada en casa, pero debes tener especial cuidado de mantener las temperaturas estables y aireadas a fin de evitar la contaminación por bacterias y moho.

      1. Ve a un lugar donde se venda comida para animales de granja, a una granja o a una tienda donde vendan productos para hacer cerveza. Compra cebada verde que provenga directo de una cosecha. Normalmente puedes utilizar la cebada que se emplea para alimentar ganado.

      2. Compra cantidades pequeñas para comenzar. Probablemente tengas que comprar un saco de 20 kilos (50 lb), pero lo mejor será que empieces con 4 kilos (10 lb) o menos hasta que te acostumbres al proceso de malteado.

      3. Elige cebada que sea baja en proteínas. Las variedades con un alto porcentaje de proteínas pueden dar como resultado una cerveza poco filtrada.

      4. Revisa la cebada antes de llevarla a casa. Asegúrate de que haya pocos granos rotos y nada de moho ni bichos. [1]

      5. Compra algunas cubetas de grado alimenticio. Será mejor que tengas varias de modo que puedas remojar y escurrir la cebada en esta parte del proceso.

      6. Llena una de las cubetas con una cantidad de entre 500 g (1 lb) y 4 kg (10 lb) de cebada. Necesitas suficiente espacio y agua para que todos los granos floten. Si tienes dudas, utiliza menos cebada, no más, ya que la cebada crece cuando absorbe humedad.

      7. Llena la cubeta con agua tibia. Si la dureza del agua es alta, utiliza un filtro purificador en tu grifo mientras llenas la cubeta. Llénala hasta el borde y déjala rebalsar un instante.

          • Permitir que el agua se rebalse ayudará a deshacerse de la tierra y restos que quedan en ella. [2]

      8. Deja que la cebada repose en el agua por dos horas. Los granos flotarán durante este tiempo. Si no están flotando, es probable que la cubeta que estás usando sea muy pequeña.

      9. Escurre la cebada con un colador fino mientras viertes el agua en otra cubeta. Coloca los granos sobre bandejas en capas delgadas y déjalos secar por ocho horas.

      10. Limpia la primera cubeta que utilizaste. Vuelve a vaciarle la cebada. Cubre los granos con agua tibia y déjalos remojar por dos horas más.

      11. Vuelve a escurrirlos y déjalos secar por ocho horas.

      12. Repite el ciclo de remojado y secado una vez más. Veinticuatro horas después de haber realizado este proceso, ya deberías poder ver brotes o raíces creciendo en la base de los granos de cebada. Cuando veas que un 95% de los granos ha brotado, continúa con la siguiente parte del proceso.

      13. Elige una superficie limpia y fresca donde germinar los granos. El suelo o un mostrador de concreto son ideales. Asimismo, la habitación debe estar bien ventilada y permanecer a 18 ºC (64° F).

      14. Esparce la cebada en una sola capa. Dale vuelta a los granos cada dos horas para evitar la contaminación por bacterias o la formación de moho.

      15. Rocíales un poco de agua fresca de vez en cuando. Continúa con este proceso por dos a cinco días más.

      16. Parte un grano con una cuchilla de afeitar o una navaja para ver el crecimiento de las radículas dentro de este. Una radícula es la hoja blanca que crece dentro del grano mientras este germina. Una vez que la hoja ha crecido entre 80 y 100 % del tamaño del grano, pasa a la siguiente parte.

          • Parte un grano para revisar la germinación todos los días durante cinco días.

      17. Elije un lugar donde secar los granos. Este debe tener una temperatura estable de entre 30 ºC y 50 ºC (90 y 125° F) por hasta dos días. Puedes utilizar un deshidratador a una potencia baja, un horno con la luz prendida o un lugar o habitación que reciba sol y esté protegido.

          • Comprueba la temperatura del lugar que estás considerando de antemano a fin de garantizar que esta sea la correcta para secar la malta.

      18. Deja la cebada malteada en el horno o deshidratador por alrededor de 24 horas. Si la estás secando fuera de casa, déjala por aproximadamente 2 días. Dale vuelta a la malta cada media hora. [3]

      19. Seca los granos hasta que solo tengan un 10 % de humedad. La manera más fácil de calcular esto es pesarlos. Si pesa 10 % más de lo que pesaba en un inicio, está listo.

      20. Separa la cebada en pequeños grupos y, poco a poco, colócalos en un colador grande y sacúdelos. La idea es separar los granos de las pequeñas raíces. Luego, bota las raíces a la basura.

      21. Coloca la cebada en un saco o bolsa y utilízala después de unos días o una semana. Muele los granos que utilizarás para hacer tu cerveza.

      22. Considera tostar la cebada a 135 ºC (275 °F) por una hora para obtener una malta tipo pale o a 180 ºC (350 °F) por 15 a 30 minutos para obtener malta tipo crystal o caramel. Puedes tostarlos a 180 ºC (350 °F) por una hora para obtener malta tipo brown.

Parte 4 de 4: Deshidratar la malta de cebada

Parte 3 de 4: Germinar la cebada

Parte 2 de 4: Remojar y secar la cerveza

Parte 1 de 4: Comprar la cebada

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Cosas que necesitarás

    • Saco de cebada

    • Agua

    • Cubetas de grado alimenticio

    • Espátulas para darle vuelta a los granos

    • Colador de mano

    • Habitación con temperatura estable

    • Balanza

    • Deshidratador u horno o lugar fuera de la casa para secar los granos

    • Mostrador o suelo donde secar los granos

    • Colador grande

    • Bolsas

    • Temporizador