Un maestro requiere de un sin número de cualidades las cuales yo como maestro en formación poseo perseverancia, entusiasmo, tolerancia y sobre todo un conocimiento en formación en el área de Historia, entre otros. El ser una persona con ideales neutrales me permite poder trabajar con diferentes opiniones los cuales a la hora de trabajar con estudiantes me permite comprender su contestación y entablar un diálogo. Por consiguiente, esa característica me hace muy comprensivo y amigable para que las personas puedan contar conmigo en cualquier situación.
Un educador debe ser un ente que facilite el conocimiento para que el estudiante pueda comprender y debatir, en el área de historia, sobre temas relevantes sobre el mundo que los rodea. En todo su esplendor el educador debe tratar de que su clase sea una en donde haya una dialogisidad entre el educador-educando. Según Freire el maestro debe promover que los estudiantes adquieran un pensamiento crítico en donde la creación sea la base que el maestro debe utilizar para que los estudiantes adquieran un conocimiento más vasto. Además, el educador debe adaptarse a las necesidades del estudiantado para promover un mejor aprendizaje. Por ejemplo: los niños excepcionales requieren un acomodo especial para cada uno; niños con problemas de aprendizaje requerirán otro tipo de método enseñanza; los niños con un diferente método de aprendizaje requerirán que el educador los evalúe de otra forma que no sea la tradicional ya que dicho estudiante puede aprender de diferentes formas.
Yo como maestro en formación, capto y entiendo cabalmente las implicaciones que con lleva ser un maestro.
El educador siempre tiene el ser que lo motiva a dar el paso a ser un maestro. Como maestro en formación mi motivación a dar el paso hacia el área de la enseñanza (educación) fueron varias personas que han cambiado mi vida y aconsejado que la educación es primordial en la vida y por ende se necesitan maestros con vocación que faciliten la enseñanza. La primera persona que me motivó ser maestro fue mi padre. Su vocación de maestro en el área de las matemáticas me impuso un reto de querer igualarlo o llegar a ser un mejor maestro ya que siempre me decía “no te conformes con el mundo, ve y cámbialo desde sus raíces que empieza aquí en el aula escolar”. Segundo, mis maestros durante la vida escolar me motivaron a ser ellos, pero siendo yo. Por consiguiente, debía ser un maestro, pero a la vez estar dispuesto a ser un estudiante. Tercero, un amigo que es un maestro en formación me impulso a que tomar la decisión de ser un maestro porque observaba en mi que tenía vocación y voluntad para desempeñarme de una manera fructífera en el área de la enseñanza. En conclusión, hay muchos más factores que influyeron en mi decisión como mi pareja de vida, madre, amistades y los mismos estudiantes (menores) que observaban que tenía un don para poder explicarles sus dudas.
Para concluir, el maestro debe tener características que lo resalten ante todos como: compromiso con el estudiantado, en cual debe ser pieza clave a la hora de enseñanza y justo, para considerar cualquier situación que ocurra en el aula escolar. Un maestro como el que yo aspiro a ser debe reunir todas esas cualidades y muchas otras más. Yo, José C. Santos Ramos, me comprometo fielmente a ser un maestro que propicie el pensamiento crítico en el aula escolar para que el estudiante comprenda, analice, procese, excluya y observe la realidad adyacente.