Municipio de la provincia de Badajoz, en la comunidad autónoma de Extremadura.
La villa resurgió en el siglo XV, cuando don Juan de Zúñiga y Pimentel, último maestre de la Orden de Alcántara, se asentó en ella, fundando en Zalamea su Academia humanística, donde el Antonio de Nebrija terminó de escribir su Gramática de la lengua castellana, publicada en 1492, el primer intento de reducir a reglas una lengua romance.
Después de que Zúñiga renunciase al maestrazgo de la Orden de Alcántara (1594), Nebrija reside en Zalamea, trasladándose desde Alcántara, donde tenía casas:
“Su casa se mantiene al presente a las espaldas de la Fortaleza a la parte de levante, a donde dicen del Postigo; tiene la portada de canterías con canes, y arco de lo mismo, y encima de ella una Ventana con molduras de Buena obra.”
(Discurso de la antigüedad de Zalamea (1634), de Juan Tamayo de Salazar)