moldes escultura

Escultura

Los talleres de escultura han sido parte de la historia de la ciudad de Quito, desde los inicios de la vida colonial de la ciudad. La Escuela de San Andrés ubicada en el convento de San Francisco, creada poco después de la fundación española de la ciudad, da cuenta de ello. En los siglos XVII y XVIII los talleres de escultores quiteños proliferaron en Quito. Se destacaron varios artistas como Bernardo de Legarda, José Olmos Pampite y muchos otros más.


La tradición de la escultura quiteña permanece en las calles del Centro Histórico, en donde a pesar del paso del tiempo y de las dificultades, todavía se puede conocer los procesos de la escultura en madera tradicional, mezclada con nuevas técnicas.

Marcovid taller de arte

Víctor Muñoz es el propietario de este taller; se unió al proyecto expositivo ya que en el Centro Histórico aún se puede encontrar cultura y arte. Su taller tiene más de 50 años de existencia y ha pasado por varias generaciones. El padre del Sr. Muñoz aprendió el oficio de escultor con un maestro italiano que se radicó en Quito hace muchos años atrás; con él trabajó en el Teatro Bolívar y en el Hotel Majestic.


El Sr. Muñoz aprendió de su padre el oficio de escultor, usando uno de los moldes que es parte de la exhibición. Actualmente, se usan materiales nuevos como la fibra de vidrio o el caucho, pero Víctor no ha dejado de usar los elementos antiguos. El molde prestado al museo fue parte del proceso de creación de una escultura de la Virgen de La Merced, ubicada en el Valle del Chota.