EL SUEÑO DE UNA MUJER
Sonó la alarma, eran las seis y media de la mañana. Marta se sobresaltó, abrió los ojos y los volvió a cerrar. Había tenido un sueño, donde se veía llevando una vida familiar y laboral feliz y no quería abandonarlo, pero la realidad bombardeó su mente. Se levantó dando tumbos de un lado a otro, hasta lograr llegar a la ducha.
El agua resbalaba por su rostro, mezclada con sus lágrimas. La angustia le atenazaba la boca del estómago. Otro día más de trabajo y otro menos de su realización como mujer. Tres décadas de estudio, másteres y cursos, pero muchas relaciones fallidas y un gran vacío interior.
Cada día veía como muchas de las mujeres que trabajaban con ella, luchaban para mantener sus puestos, por causa de un permiso maternal, cuidado de padres o enfermedad de sus hijos. Las humillaciones de las que alguna vez fue testigo la indignaban. A Laura, su compañera de mesa, la trasladaron a otro departamento para que no protestara, con la excusa de que estaría más tranquila para cuidar a su hija y diciéndole que la estaban haciendo un favor.
En su lugar colocaron a un hombre, que se quedó con su trabajo. Con el cambio, Laura perdió parte de su sueldo y a la vez lo más doloroso de todo, a su hija de una leucemia.
Cuando Marta recibió la noticia, no pudo evitarlo, apretó los puños y las mandíbulas, todo su cuerpo se estremeció de rabia e impotencia y un fuego interior pareció quemarle las entrañas.
Ahora, mientras revivía aquel episodio tan triste, se preguntaba por qué no fue capaz de hacer nada para ayudar a Laura; eso era algo que nunca se perdonaría.
Salió de la ducha y se preparó un café caliente. De pronto recordó el sueño y empezó a sonreír. Sintió que el miedo empezaba a desvanecerse y tomó una decisión. Cuando llegó al trabajo, sin pensarlo y segura de sí misma, entró a hablar con su jefe y le presentó la dimisión.
Al salir su rostro irradiaba felicidad, sus ojos se llenaron de lágrimas de alegría. Cogió su móvil, hizo una llamada y se marchó.
En ese momento, se sintió más libre que nunca y decidió que lucharía con todas sus fuerzas para que su sueño, se hiciera realidad.
Autora: Manisa Write