“Vayan e inviten a todos al banquete”
LUNES: EVANGELIO DE LA SEMANA
El Domund, que tiene como inspiración el pasaje evangélico de San Mateo de “Vayan e inviten a todos al banquete”, una imagen de la misión en la que se refleja el estilo, los destinatarios y el fin último de la misión.
“Para la Jornada Mundial de las Misiones de este año he elegido el tema de la parábola evangélica del banquete nupcial”, dice el Papa en el inicio de su mensaje. Este pasaje en el que el rey, protagonista del relato, envía a sus siervos a los cruces de los caminos para invitar a todos al banquete, da pie a “destacar algunos aspectos importantes de la evangelización”. Con el estilo didáctico y cercano que caracteriza al Papa Francisco, se analiza cada parte del lema propuesto para este Domund, comenzando con el “¡Vayan e inviten!”. Son los “dos verbos que expresan el núcleo de la misión”. Fue lo que el mismo Jesús “dijo a los discípulos, tanto antes como después de su resurrección: ¡Vayan!, involucrándolos en su misma misión”.
E inspirado en este envío, el Papa da las gracias “a los misioneros y misioneras que, respondiendo a la llamada de Cristo, han dejado todo para ir lejos de su patria y llevar la Buena Noticia allí donde la gente todavía no la ha recibido o la ha acogido recientemente. Queridos hermanos, vuestra generosa entrega es la expresión tangible del compromiso de la misión ad gentes que Jesús confió a sus discípulos: «Vayan, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos» (Mt 28,19). Por eso continuemos rezando y dando gracias a Dios por nuevas y numerosas vocaciones misioneras dedicadas a la evangelización”.
MARTES: VEMOS UN VÍDEO MOTIVADOR
VISUALIZA ESTE VIDEO
Mira este video y piensa qué hacer para estar feliz y vivir con ilusión de lunes a domingo.
MIÉRCOLES: PARADA
Intenta responder a estas dos preguntas:
¿CÓMO VENGO? ¿CÓMO ME SIENTO?
JUEVES: DAMOS GRACIAS
Quédate con una frase de esta canción cantada por el grupo de Hakuna. Grupo formado por jóvenes cuyo objetivo es dar a conocer a Dios a través de la música.
VIERNES: CUENTO
¿Imaginas un mundo que prefiere morir de hambre antes de ayudar al menos a no morir al otro? En realidad, ese mundo tan egoísta existe, muy a nuestro pesar.
El cuento de Jorge Bucay ‘El país de las cucharas’, nos trae una perfecta metáfora y nos plantea una reflexión sobre dos posibles mundos:
Un mundo en donde las personas solo piensan en ellas y son incapaces de fijarse en las necesidades de los otros. Un mundo en donde impera el egoísmo. Ese mundo es el que representa la sala negra, en donde las personas, a pesar de tener montones montones de comida, morían de hambre, cegadas por su egocentrismo. Solo sabían quejarse, sin buscar una solución, sin encontrar salida. Simplemente, se dejaban morir.
Un mundo en donde todos colaboran y unos ayudan a los otros, con lo que al final todos salen beneficiados. En la sala blanca, la empatía movía a todos los comensales a ayudar a la persona que tenían enfrente. De esta forma, al final ellos también recibían ayuda, y nadie moría de hambre. El trabajo en equipo, que es un trabajo solidario, al final obtiene mejores resultados. Más aún si se mueven por un sentimiento de empatía hacia el otro.
¿Te das cuenta? Al final, la única forma de sobrevivir era pensando en el otro… En nuestras manos está, porque al final, la decisión sobre qué mundo queremos la tenemos que tomar cada uno de nosotros. Y tú, ¿en qué sala te gustaría estar, en la sala negra o en la blanca?