y bastante queso rallado antes de meter en el horno.
Macarrones de otra forma
Se prepara una salsa boloñesa como se indica en su sitio.
Se hace una besamel etérea, y cuando está hecha se le añade un poco de salsa de tomate de forma que tome cierto color rosáceo.
Se cuecen macarrones ocho minutos, y una vez cocidos se mezclan con la boloñesa, removiendo todo bien.
En una fuente que pueda ir al horno se colocan los macarrones con la boloñesa formando un lecho. Por encima se vierte la besamel, procurando que lo cubra todo, y se cubre con una capa de queso rallado. Se mete al horno durante un rato para que el pastel se caliente y el queso se funda –si se han quedado fríos o es de un día para otro–, o se gratina, simplemente, si se acaba de hacer.
También se puede hacer echándolo por capas: capa de macarrones, encima besamel, encima queso rallado, encima boloñesa, encima más macarrones, etc., para acabar con capa de besamel y capa de queso. Se mete a gratinar y resulta una especie de pastel que se corta en porciones con una paleta. Todo esto de la besamel y el tomate y los macarrones..., etc., a los niños les priva.
La pasta, como macarrones o espaguetis, se puede preparar de muchas formas, pero todas vienen a ser lo mismo. Se cuece la pasta y se mezcla con la salsa, ya sea boloñesa, pesto, salsa de tomate a secas, carbonara, aceite con ajo y guindilla fritos, etc.
Canelones
Hay que preparar una besamel y un relleno. El relleno puede ser de varias clases, como carne o pescado picados, etc., pero siempre mezclado con salsa de tomate. Por ejemplo, se pocha una cebolla con un poco de ajo y zanahoria, también un poco de pimiento, y cuando todo está más o menos hecho se añade algo de carne picada procedente de las sobras de un cocido o chorizo desmigado, o ambas cosas añadidas de un poco de foie-gras del bueno...; en fin, sírvase a su gusto. Se le da una vuelta en la sartén (si es carne picada cruda habrás que guisarla más, hasta que se haga) y se añade salsa de tomate. Se revuelve todo de forma que se haga una masa y ya tenemos confeccionado el relleno.
Los canelones se cuecen o se meten en agua fría para que se ablanden y se vuelvan manejables –eso ya lo dice el envase–, y se rellenan y dan forma de cilindro. Se colocan en fila en una fuente de horno y se riegan con la besamel, que estará hecha, cubriéndolos bien. Todo ello se cubre de una capa de queso rallado a la que se puede añadir pan rallado, pimienta en polvo, orégano, etc. Se mete la fuente al horno, se gratina un rato y se comen muy calientes.
Una fideuá viene a ser como una paella, y se hace de manera muy parecida y en el mismo cacharro, la paella, con la salvedad de que en vez de arroz lleva los característicos fideos gordos que se utilizan en su confección.
En líneas generales, el procedimiento es este: se comienza friendo algo de cebolla y ajo picados, un poco de pimiento y un par de tomates pelados y picados. Sobre esta base, una vez algo frita, se rehogan los fideos y demás elementos (el pescado y marisco que se utilice, pues la fideuá, que yo sepa, no se hace con carne).