En esta página se detallan la siguientes recetas:

Caldo del cocido, caldo gallego y caldo verde portugués.

Salsas madres: española, mayonesa, besamel y vinagreta.

Otras salsas: blanca, de tomate, al-i-oli, salsa rosa, almodrote, mojo, vizcaína,

boloñesa, de queso, de mostaza, de pimienta, de yogur,

pesto, ajoblanco, agridulce y de berenjenas.

Aliños: universal y anaranjado.

CALDOS

Caldo del cocido

Se hace en olla exprés (rápida) con carne de vaca (morcillo, falda), algo de jamón, buena cantidad de huesos (de vaca y jamón), gallina (caparazón) y verdura, nabo, zanahoria, puerro, etc. Este es caldo clásico del cocido, y para más detalles puede verse su preparación en la página dedicada a «cocidos de legumbres».

Caldo gallego

Se hace un caldo en olla exprés con carne, huesos de vaca y de lacón. Aparte se cuecen unas judías blancas hasta que estén hechas, y buena cantidad de grelos, que son las hojas del nabo; cuesta encontrar esta verdura fuera de Galicia, pero es imprescindible, puesto que es lo que da carácter al plato.

Se mezcla el caldo con las judías y la verdura en un puchero holgado, y en él se ponen a cocer bastantes trozos de patatas, que se mantienen allí hasta que estén hechas (unos 20 minutos). Luego se deja reposar (mejor si es toda la noche), se sacan los huesos, se recalienta y se come.

En Galicia es costumbre añadir tocino (unto), pero esto es optativo y añade demasiada grasa al guiso, aunque si se tiene de buena calidad se puede utilizar, puesto que le da un característico sabor.

Caldo verde portugués

Es una sopa de patata y repollo, uno de los platos nacionales portugueses, pues lo dan en todas partes.