Juan Gelman

El sello

La mañana lustrosa sube

por los techos de la ciudad

con mucha fiebre hoy. La mujer

del niño en la espalda tiene

una mano donde empieza la ausencia

de otros y el cielo

provincial se agolpa allí.

Esa mano parece

un vacío agrietado por la rapidez.

Es del tamaño de lo que no sucede

y se le posa una mosca ahora

más real que la calle

por donde la mujer se va y

su mano queda

sellando el aire.


Juan Gelman enValer la pena, Ciudad de México [1996-2000]