Dublin
Dublin
1 Movilidad de grupo de 9 alumnos y alumnas de B2.1 y B2.2 del 6 al 13 de abril de 2025.
Estudiantes y profesorado acompañante partimos a primera hora de la mañana desde nuestra escuela. Horas de viaje por tierra y aire hasta desembarcar en tierras irlandesas. Primera parada: las casas de las host families. Eso sí, siempre queda tiempo para una reagrupación en el pub más cercano a la estación para estrenar la aventura.
Empezamos el día yendo a nuestra escuela de acogida, en otro país, con nuevos profesores y nuevos compañeros, de múltiples nacionalidades. Para empezar bien la semana, nos embarcamos en un tour a pie por la ciudad guiados por un profesor nativo que conoce la zona como la palma de su mano. Vemos por primera vez sitios icónicos como la estatua de Molly Malone, el banco sin ventanas, el GPO o el infame monumento (The Millenium Spire), de los cuales aprendemos desde la auténtica perspectiva local. La tarde se completa con la visita de los alumnos al Art Gallery Museum y a la noche un poco de animación con música en directo en Temple Bar.
Se empieza a asentar la rutina de clases matutinas en la escuela de acogida. Tras reponer fuerzas en un picnic improvisado en un parque para aprovechar el tiempo primaveral las fotos con nuestra bandera Erasmus lucen genial bajo un sol radiante. La visita a la catedral de San Patricio nos permite empaparnos de la historia religiosa que marca la historia del país, especialmente en contraste con su vecina, la Catedral de laSantísima Trinidad, que es la cara de la otra parte del cristianismo. Una ironía perfecta que refleja lo lejos y lo cerca que han estado siempre las gentes que conviven allí. Nosotros, en honor a la convivencia entre distintos pueblos, pasamo sla noche brindando con compañeros de todas partes, sentados en la misma mesa.
Los participantes en nuestra movilidad Erasmus+ siguen sus clases mientras los profesores acompañantes nos reunimos con otras escuelas interesadas en participar en proyectos Erasmus+. Es una ocasión estupenda para establecer contactos para futuras movilidades. Nos reagrupamos a primera hora de la tarde en Trinity College. Visitar esta prestigiosa institución es una parada cultural obligatoria. La exhibición de “Book of Kells” ofrece una atención al detalle exquisita celebrando el patrimonio local y su historia. La famosa biblioteca que todos hemos visto alguna vez en fotos es tan imponente como la imaginábamos a pesar de estar parcialmente vacía en la actualidad por restauración. La mitad de la semana lo marca el evento de “pub night”, una reunión de lo más animada con estudiantes de diversos rincones del mundo. De esta noche tan animada sale la entrevista, uno de los proyectos de nuestros alumnos y alumnas.
Sesión extra de formación con el taller de listening por la tarde, cortesía de la escuela de acogida .Después, el grupo visita Phoenix Park. Ya sea en bicicleta o a pie, nos perdimos por sus rincones durante horas. Sin duda, interactuar de tan de cerca con los ciervos fue una experiencia única, como quedó documentado en otro de los proyectos de nuestros alumnos. Para cerrar la tarde, una sesión de compras para hacerse con souvenirs y recuerdos antes de volver con las familias de acogida.
Tras despedirse de sus profesores y compañeros en Apollo Language Centre, nuestro alumnado disfruta de tiempo libre para visitar por su cuenta museos y tiendas hasta que llega el momento de ir todos juntos a la actividad que cierra la semana: la visita a la casa de Ann. Allí, preparamos nuestra propia cena irlandesa siguiendo las instruccione sde nuestra anfitriona. Una experiencia increíble en todos los sentidos que sin duda dejó un recuerdo precioso en la memoria de todos y todas. Salimos con el estómago y el corazón llenos.
Para cerrar la experiencia empapándonos de la cultura irlandesa, qué mejor manera que visitar la fábrica de la cerveza más famosa. El edificio Guinness ofrece
un recorrido completo a lo largo de sus 5 plantas (y media), combinando historia, espectáculo y sabor. A partir de ahí, solo quedaba disfrutar las últimas horas allí
explorando los innumerables rincones de Dublín y alrededores. Los alumnos decidieron visitar Howth en busca de las famosas focas que se dejan ver en su
puerto y luego despedimos la noche dublinesa disfrutando por última vez de sus luces, canciones y bailes.
La experiencia llega a su fin. Nos despedimos de esta ciudad y este país para volver a casa. Justo una semana después, el domingo consiste en una constante de medios de transporte hasta el regreso al punto de partida. Ya en casa, como si no hubiera pasado toda una semana. Pero vaya si pasó… y con nosotros se queda.