Esta habilidad nos propone aprender el mundo interno de las emociones y los sentimientos, para una relación con nuestro interior y con las demás personas. Saber leer y comprender lo que comunican las emociones propias y las ajenas.

En nuestro cuerpo las emociones se expresan por medio de reacciones distintas, podemos experimentar incluso síntomas físicos cuando estamos ante emociones intensas, es decir, las emociones y sentimientos nos envían señales constantes.

Hay varios tipos de emociones que, seguramente, vas experimentando cada día. Algunas te resultarán placenteras como el amor, la satisfacción o la felicidad. Al sentir dichas emociones seguramente te motiva a ver el mundo con mejores ojos, ya que parece que las cosas pueden ir mejor.

Existen otras emociones que provocan malestar y llevan a ver la vida como algo desagradable y difícil de sobrellevar. Sin embargo, cada emoción es necesaria y no debemos de opacar u ocultar ninguna sea placentera o no.

A veces de una pequeña molestia pasajera podríamos conllevar una serie de situaciones que nos afectarán negativamente por no haber controlado las emociones negativas en el momento oportuno. Por ello, la importancia de ser consciente de lo que sentimos y aún más importante reconocer que somos responsables de nuestras emociones y sentimientos.

Algunas recomendaciones para mejorar tu habilidad de manejo de emociones son:

« Al despertar, enfoca tus pensamientos de forma positiva de los propósitos de cada día, recuerda ese propósito cuando tu mente se enfoque en algo negativo que pase en tu interior o exterior.

« Aprende a identificar tu respuesta emocional ante las situaciones sin juzgarlas como buenas o malas, es decir, solo reconociendo lo que sentimos y pensamos e identificar si es o no el pensamiento que deseamos tener, si no lo es, enfócate en el sentimiento correcto que desean en esta situación.

« ¡Cuídate! Mantén con limpieza y orden tu vida y tu entorno, esto te ayudará a sentirte bien y demostrar afecto y consideración hacia ti mismo y hacia los demás.

« Toma tiempo para disfrutar movimientos que disfrutes, ya sea una caminata, practicar algún deporte y una actividad que te relaje, eso permite que nuestras emociones se enfoquen en nuestro bienestar y no el entorno.

« Expresa todas las emociones, si algo no te resulta correcto puedes buscar la forma y momento para expresarlas correctamente, no intentes reprimir lo que se sientes, esto en vez de mejorar te puede generar un dolor físico y emocional.

« Realiza ejercicios de respiración y relajación. Al tener la mente en calma es más fácil identificar lo que estás sintiendo.