Escribimos el Quijote con pluma de ave y tinta, tal y como Cervantes lo hizo hace más de 400 años y lo recordamos creando un marcapáginas.
Cuido las emociones para enseñar mejor. Conozco para querer saber más. Me adapto a eventos y efemérides. Valoro más lo que más conozco. Cambio para mejorar y adaptar.