Después de ver el vídeo, os vais a agrupar en parejas y deberéis narrar por escrito la historia de lo que sucede teniendo en cuenta los diferentes elementos de la narración ya trabajados en clase: narrador, personajes, acción, tiempo y espacio. Os dejo la presentación que hicimos en el aula: LA NARRACIÓN, MAPA CONCEPTUAL.
Como habéis podido comprobar, las narraciones se nos presentan a diario de múltiples formas (oral o escrita, realidad o ficción, autores o lectores). Ahora, vamos a intentar comprender y comentar las siguientes palabras de Daniel Pennac:
“Sin embargo, no ha ocurrido nada milagroso. El mérito del profesor es prácticamente nulo en esta historia. El placer de leer estaba muy cercano, secuestrado en esos graneros adolescentes por un miedo secreto: el miedo (muy, muy antiguo) a no entender.
Habían olvidado pura y simplemente lo que era un libro, lo que tenía que ofrecer. Habían olvidado, por ejemplo, que una novela cuenta fundamentalmente una historia. No sabían que una novela debe ser leída como una novela: aplacar fundamentalmente nuestra sed de narración.
Para satisfacer esta gazuza, se habían entregado desde hacía mucho tiempo a la tele, que trabajaba en cadena, empalmando dibujos animados, series, culebrones y thrillers en un rosario sin fin de esteriotipos intercambiables: nuestra ración de ficción. Algo que llena la cabeza de la misma manera que hincha la barriga, sacia, pero no aprovecha al cuerpo. Digestión inmediata. Uno se siente tan solo después como antes.” (Daniel Pennac: Como una novela)
Algo más: escucharemos esta antigua canción de un grupo español muy de moda allá por los años 90: Celtas Cortos y su canción Cuéntame un cuento. Ya su título es significativo, ¿no crees? A continuación, tenéis una ficha para rellenar los huecos mientras escucháis la canción.
Finalmente, vais a rellenar este formulario para extraer conclusiones tanto de las palabras de Pennac como de las de Celtas Cortos que, si os habéis fijado bien, tienen mucho en común: LA NECESIDAD DE CONTAR O DE QUE NOS CUENTEN DIFERENTES HISTORIAS EN NUESTRAS VIDAS (para dormir, para disfrutar y desconectar de la realidad, para...). ¡Y YA DESDE LA PREHISTORIA!