Jan 02
Si ha notado algún problema de salud (dolor de cabeza, insomnio, cansancio...) y sospecha que pueda estar causado por una antena de telefonía móvil cercana, llámenos. Le haremos un estudio de los niveles de emisiones presentes en su vivienda,local, oficina o parcela.
Transformadores, líneas de alta tensión, radiactividad, geopatías,
aparatos domésticos, electricidad estática, repetidores de radio, redes WIFI, radar, etc.
Los campos electromagnéticos artificiales interfieren en el funcionamiento de nuestro organismo y de todos los seres vivos. Numerosos estudios cientificos lo demuestran. No existe ninguna conclusión oficial al respecto, pero se sospecha que pueden ser causantes de enfermedades como el cáncer asi como provocar trastornos neurologicos.
MÁS INFORMACIÓN 91.688.75.81Preguntas más frecuentes (y respuestas):
¿Qué incluye el estudio?
¿Por qué debería hacer un análisis de las radiaciones en mi entorno?
Porque es mejor prevenir que curar.
Tratamos de proporcionarle información útil sobre la calidad de su entorno con el fin de que reduzca al máximo su exposición en los lugares donde las lecturas de los aparatos sean más elevadas o adoptando las distancias prudenciales. Conocer los niveles de contaminación electromagnética presentes en su hogar, comunidad de vecinos, centro de trabajo, etc. debería facilitarle la toma de decisiones tanto para prevenir como para evitar más daños en su salud, o bien descartar que estos se deban a las radiaciones.
¿Cómo puedo saber a qué riesgos me estoy exponiendo?
Si vivimos cerca de una antena de telefonía es probable que la dosis que reciba nuestra vivienda sea mayor que la que aconseja el principio de precaución. Todo dependerá del tipo de antena, la altura a la que se encuentre con respecto a nuestra vivienda, así como su orientación y obstáculos intermedios.A veces, comprobamos que los teléfonos inalámbricos digitales o los routers WiFi que tenemos en nuestra casa, están irradiándonos con una potencia mayor de lo que lo hacen las antenas de telefonía móvil externas, por encontrarse mucho más cerca de nosotros. En tal caso sería bueno sustituirlos por modelos análogos que se conecten mediante cable.
Otras veces, no somos conscientes de los elevados campos electricos que puede generar un simple interruptor o cable eléctrico que pase
justo a la altura del cabecero de nuestra cama. En ese caso, es fácil que nuestra cabeza esté soportando todas las noches una radiación "extra" de 200 Voltios por metro (lo aconsejable sería no más de 10 V/m). Solucionar esto último, es relativamente sencillo y consiste en alejar el cabecero como mínimo 1 metro del origen o bien, si no se puede mover, cambiar la orientación del colchón para proteger nuestros organos vitales, de este tipo de radiaciones.
¿Ha pensado como se sentirá cuando duerma por fin en un entorno libre de radiaciones?
¿Por qué no debería comprarme un aparato y hacerlo yo mismo?
Los aparatos fiables son mucho más caros que el precio que tiene una prospección. Por otra parte, localizar el foco exacto de radiación puede ser el otro gran problema, puesto que unos pocos centímetros pueden hacer variar el resultado significativamente. Sin la ayuda o contacto de un profesional experimentado, se pueden provocar falsas medidas que den lugar a conclusiones erróneas y/o peligrosas.
¿Y si me paso todo el dia dentro de una oficina?
Casi todos pasamos gran parte del día en espacios cerrados. Muchas oficinas están llenas de aparatos eléctricos y electrónicos, fotocopiadoras, aires acondicionados, tubos fluorescentes, etc. Los teléfonos inalámbricos y alarmas antirrobo suelen usar microondas. No es de extrañar, por tanto, que si el ambiente del lugar de trabajo es insalubre, acabemos enfermando.
La lipoatrofia semicircular es una enfermedad relaccionada con el exceso de contaminación electromagnética. Se identifica mediante una pérdida del tejido graso subcutaneo en la zona de los muslos, aunque también puede darse en los brazos y/o el abdomen afectando más a mujeres que a hombres.
El síndrome del edificio enfermo puede ser la causa de cefaleas persistentes, irritaciones en las vías respiratorias, alteraciones en la piel, infecciones frecuentes, etc. La Organización Mundial de la Salud estima que un 30% de los edificios modernos podrían ser la causa directa de los diversos trastornos y molestias que sufren sus ocupantes.
¿Cómo me protejo?
La mejor solución, como hemos visto antes, es con la distancia al foco emisor de radiaciones. Para ello hay que identificar (y sustituir en la medida de lo posible) los aparatos y equipos electricos con campos electromagnéticos elevados procedentes de dentro y fuera de nuestro entorno habitual.Por otra parte, si los niveles de radiación que afectan a su vivienda son altos, puede presentar un informe en su ayuntamiento para que adopten las acciones pertinentes, aunque los límites oficiales en nuestro país, son muy altos (los máximos permitidos en Europa) y raras veces se sobrepasan.
Conviene saber que existen diversos materiales para protegerse de los campos electromagnéticos, que se colocan sobre la cama, paredes o ventanas asi como el ordenador, televisor, etc. aunque su coste puede resultar un tanto elevado y su eficacia depende basicamente de su buena ubicación.
Una opción muy aconsejable consiste en acudir a la medicina alternativa en busca de un medico que esté preparado para afrontar estos problemas (medicina bioresonante: moraterapia, quantum-SCIO, etc.) para que le haga una limpieza de toda la radiación electromagnética que su cuerpo haya acumulado.
¿Por qué se dedican a esto?
En 1999 comencé a padecer los síntomas de la electrosensibilidad (insomnio, cansancio, dolor de cabeza...) después de vivir a 150 metros de una antena de telefonía móvil durante más de 7 años, y de una subestación eléctrica (35 años funcionando) ubicada en el mismo terreno de la antena. Pero ahora sé, tras adiestrarme en el uso de los aparatos para discriminar, que lo que más me estaba afectando era un aparentemente inofensivo enchufe situado a sólo 10 centímetros del cabecero de mi cama, cuya radiación soporté durante al menos 18 años. Por otra parte, el uso intensivo deordenadores con pantallas de tubo terminó por cronificar mis síntomas.
A contracorriente he transformado el sufrimiento en una fuerza creativa que me permitió, tras un largo periodo de investigación y desarrollo, mejorar progresiva y notablemente mi sintomatología mediante procedimientos nutricionales, bioelectricos y detoxificativos.
SI DESEA ASESORAMIENTO PERSONALIZADO, PEDIR PRESUPUESTO O PREGUNTAR SOBRE ALGUNA CUESTIÓN QUE NO ESTÉ YA PLANTEADA, PUEDE LOCALIZARNOS EN EL SIGUIENTE NUMERO DE TELÉFONO: 91 688 75 81.
FUENTE: http://www.electrosensibilidad.es/medicionradiaciones.html