Flor de Alcala

Hace unas semanas comentamos la necesaria atención que debía prestarse al fondo cuando intentamos realizar fotografía de aproximación. Un despiste en la valoración de los elementos que componen el fondo - desenfocado - pueden dar al traste con nuestras mejores intenciones. En este caso nos encontramos con el reverso de la moneda. Aquí la falta de atención a los elementos más nítidos es lo que arruina la fotografía. Contemplándola, nuestra atención se dirige inmediatamente a la flor seca que aparece en la parte lateral derecha. ¿Si hubiéramos recordado cortarla antes de tomar la fotografía?. El problema reside en que por el visor no se contempla en absoluto la imagen que estamos observando sino otra con todos los elementos perfectamente nítidos. Y nuestra atención se reparte por toda la imagen. Así, aún cuando sabemos que gran parte de ésta aparecerá muy desenfocada, nos distraemos de la necesidad de valorar adecuadamente cuáles son los elementos que van a aparecer razonablemente nítidos. Nuestra atención se concentra exclusivamente en la flor roja de la parte superior derecha y cometemos el error. Que, por supuesto, ya no tiene solución.