Positivo 4

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El desmoronamiento del estado depresivo:

Positivo Nº 4

Uno de los primeros indicios que señala que la depresión está comenzando a ser superada es cuando la persona depresiva puede mirarse al espejo cada día varias veces y logra reconocerse en un rostro grato y amigable, sobre todo querible y, a su vez, cuando comienza a reconocer que en esa persona que se aprecia existen ciertas virtudes que deben ser consideradas tanto como la atención que ha sido brindada a la depresión, sabiendo que tales virtudes son suficientes para hacer algo extraordinario por otras personas para hacerlas sentir muy bien, lo que hará que la depresión y la angustia cedan a partir de las pulsaciones milagrosas del amor.

Quererse a sí mismo es la primera medida para sanar y le sigue inmediatamente el querer a los demás.

Ayudar a otros es vencer la batalla contra la propia depresión, al dejar a un costado los conflictos internos que se subsanan con el apoyo y beneficio brindado al prójimo.

Servir es amar, y amar es sanar.

Hacer algo por los demás, es hacer algo por uno mismo.

Brindar afecto a una amistad, dar cariño a un ser querido, proteger a un animalito, cuidar a las plantas del jardín… son todas acciones preciosas que ennoblecen el alma y desintegran la depresión.

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