P. Fr. Vicente Inglés Report from 1720[1]
As far as I know this remarkable report has not been fully translated and published. Few scholars seem to have worked with it, though there is a transcription in print published in 1983.[2] I present it here based on my handwritten transcription from the Biblioteca Nacional since its content and range merit a larger audience and more use by those studying the Philippine past.
The author was one of the more notable Philippine-based eighteenth-century Franciscans, significant then for his leadership and active work in administration of the Franciscans in the Islands. He is important now for the quality of his written work, entirely in manuscript form, of which this report on the friars’ efforts in the areas outside of Manila may be the most notable that has come down to us.
He arrived in the Philippines from Spain and Mexico in 1696 and was assigned a position as the priest at the Hospital of San Lazaro in 1702.[3] He seems to have been noticed early on for his administrative, intellectual, and religious qualities since his second position in the colony was as Secretary of the Franciscan Province, appointed to this position in 1703, 1705, and 1706. Following more administrative positions he was tasked with the duty of returning to Spain to recruit more Franciscans for the Philippines, returning in 1717. From Spain, in addition to his 1717 mission of Franciscan recruits, he brought back with him a copy of the City of Valencia’s revered de los Desamparados. This work of religious art and devotion, we are told, has since 1720 been revered in the Church of Santa Ana de Sapa, whose re-building Father Vicente supervised, also in 1720.[4] He was then parish priest of Santa Ana de Sapa, with appointments in 1718, 1720, 1721, 1723, 1724, and again in 1727 after a term as Comisario Visitador for the Province in 1726.[5] After serving two terms (1729 and 1730) as the head of the Philippine Province, Father Vicente returned to Santa Ana with assignments in 1732, 1733, 1736, and 1738. He died on the 8th day of September 1739, in the parish of Santa Ana de Sapa.
This report seems to be based on extensive first-hand knowledge of the groups and terrain and problems in what today are the provinces of Tayabas and Aurora. He gathered this information during his time as Secretario, Comisario Provincial, and Provincial, all posts which would have entailed traveling to the parishes then staffed by Franciscans. He notes as well the other inspection trips he made for the purpose of this report.
Some of his judgments are harsh. He was both a Spaniard and a cleric, and Filipinos who did not live a “settled” life in congregated settlements “under the bells” receive strong criticism in this report. I found these sections to be a bit unsettling but understandable. More important and engaging, though, are his descriptions of the various settlements, numbers registered as tribute payers, number of houses, and the remarkable variety of named, Filipino groups in and around these pueblos. Scholars may be interested in his references to some of the groups he mentions, perhaps most notably the Balugas, Yzalines, and Dumagas. There is also excellent information on disease, travel difficulties, missionary work, and so forth.
22 May 2015 Bruce Cruikshank
Omaha, Nebraska, USA
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Yllmo. y Rmo. Sor
Fr. Vizente Yngles, Predicador Diffinidor actual de esta Santa Provincia de San Gregorio de Religiosos Descalzos de N.P.S. Francisco en estas yslas y presidente incapite de este Convento de N.S. de los Angeles de la Ciudad de Manila: Obedeciendo á el ruego, y encargo, que de orden de V.SS. Yllmo se me hizo notorio el dia catorze del mes de Junio, de este presente año de settos y veinte; para que como Comiso Visitador, que fui de los de los Convtos que mi Provincia tiene en la Contra costa de estas Yslas, Jurisdicion de la Provincia de Tayabas; informe, en ordena las Misiones que se fundaron este año proximo pasado de Settos y diez y nuebe, sobre los progresos de ellas; para dar quenta a su Magestad (q. D. ge) de las Conquistas y augmentos espirituales de estas Yslas, digo:
Que siendo tan proprio de la obligacion de esta mi Sta Provincia el atender, no solo a la Conservacion y permanencia de la Santa feé, y buenas Costumbres de los Naturales, ya Conquistados, y reducidos a el gremio de Nuestra Sta Madre Yglesia, sino es tambien a el mayor augmento de nuebas conquistas, y Conversiones, en las partes y personas, a quienes no ha llegado aun la luz del Sto Evango cuya administracion y pasto Espiritual esta encomendado a esta mi Sta Provincia, para la mayor honra, y gloria de Ds nuestro Sr y servicio de la Magestad Catholica (que Ds gue). Por tanto, hallandose a el cuydado de dha mi Provincia la administracion de los Pueblos, que zitan en la Contra Costa de estas Yslas (es asaver) Binangonan, Polo, Valer, y Casiguran Jurisdicion de la Provincia de Tayabas; Dicalayo, Dibinbinan, Comunmente llamados Paranas Jurisdicion de la Provincia de Cagayan. Y teniendo noticia que los montes, playas, y Rios se hallaban avistadas de mucha gente asi Ynfieles como Simarrones, y Apostatas; y [f. 614v] que por la suma inopia de Religos que esta mi Provincia ha padecido no pudo dar providencia para estas misiones luego que se le encargaron por el año de Settos y quatro. Y haviendo llegado socorro de Mision, que aportó a estas Yslas el año de settecientos y diez y siete en el Galeon Santo Christo de Burgos, haviendose enterado los Religiosos con suma aplicacion del Ydioma de los Naturales con Religioso Zelo pusieron en practica las ordenes de sus Superiores, y Santos deseos, que los sacaron de sus nativas Provincias.
Destinó la Obba seis Religiosos para dha Contracosta, tres para las Doctrinas y administraciones antiguas, y tres para plantar de nuebo en los montes, playas, y Rios, Parajes, y Sitios mas convenientes tres misiones para Convertir los Ynfieles y Simarrones, reducir los Apostatas al suave yugo de nra. Santa feé, y Predicacion Evangelica. Y siendo (Yllmo Señor) impracticable el poder los PPes Provinciales de esta mi Sta Provincia visitar personalmente aquellos dhos Conventos de la Contracosta por lo dilatado de ellos, brabeza de los mares, y esto en determinado Tiempos navegables, y otros inconvenientes; El Pe Provincial, que lo era actual de esta mi Sta Provincia Fr. Matheo de Sn Joseph, por descargar la obligacion de su oficio, y dar cumplimto a la Real Voluntad en repetidas Zedulas, hecho mano de mi insuficiencia, mandandome pasaje a la Visita de dhos Convtos y registrar los parajes, y sitios mas acomodados para las Misiones. Sugeteme gustoso a el precepto de la Obba, pasando a dha Contracosta por el mes de Mayo del año de setecientos y diez y ocho, donde estube hasta el mes de Septiembre de dho año en que bolvi a esta Ciudad a dar quenta de mi Visita, y de mas ordenes a mi Superior.
Y por lo que toca a los Sitios, y Parajes en que avian de asistir los tres Misioneros, para el exercicio Apostolico de las reducciones, fueron los que me parecieron mas comodos, y proporcionados a el intento, como se representó al M. Illustre Sr Mariscal de Campo Dn Ferndo [sic] Bustillo, Bustamante y Rueda (que Ds goze) Governador y Capn General que fue de estas Yslas en el informe, que se le presento por el Procurador General de esta mi Provincia por el mes de Abril del año pasado de Setecientos [f. 615] y diez y nuebe. Como asi mesmo los Religiosos que estaban por la Obba asignados para dho fin, paraque se les mandase dar el subsidio temporal, pa su manutencion, Como lo tiene dispuesto su Magestad (que Ds guarde) y a todo dio providencia dho M. Yllo Sr de que Constará en ese Superior Govierno.
Obtenido el Socorro para dhos Religos me mando segunda vez la Obba pasar a la Visita de dha Contracosta, a que me sugeté, asi por ordenarmelo la Obba a que estoy obligado, como gustoso, por ser en beneficio de las Almas, tan del agrado de la Magestad Divina, en quien puse toda mi confianza, en medio del dictamen practico de lo trabajoso, y mui penoso de la empresa en lo dilatado de los Caminos, como en lo peligroso de las muchas navegaciones, Como asi mismo por ser tan propio de mi profesion y estado, aunque siempre rezeloso por tener ante todo mi insuficiencia, e inutilidad. Y antes de pasar ha expresar los frutos, que an cogido los tres Religos que los Superiores tienen destinados, y ocupados el dia de oy en la Conversion, y reduccion de los Infieles, y Apostatas de dha Contracosta; me a parecido poner en la alta comprehencion a V.SS.Yllna le asiste a los Indios, infiera el summo trabajo de los Religos aviuado con el gran dolor, que les penetra lo imtimo del Corazon de veér, y experimentar en los que se convierten, despues del summo trabajo, venir mas movidos del interes de las niñerias con que los Religos procuran atraerlos, que motivados de los verdades Catholicas en que se les instruye, y el deseo de el aprovechamto de sus Almas, y logro de sus Conciencias; por cuya causa estan los Religos con la Continua sosobra de no ser subsistente el fruto de su trabajo por lo viciado de los fines, que en ellos conoçen.
El primer Pueblo, mas inmediato a los Convtos que esta mi Provincia tiene en la Laguna de Bay. de la Contracosta, es llamado Vinangonan [spelled Binangonan by Father Vicente hereafter], que dista de dha laguna dos dias, y medio de camino, bien solitario, y aspero, pues se atraviesan los montes de los Pueblos de Pangil, y Siniloan; el qual Consta de ochenta tributes mas., o menos, segun el Padron de Confesiones, Los Indios nativos dc este Pueblo son mui pocos, que no llegaron a veintc casas, o familias, y lo restante son adbenedisos de las Provincias de estas Yslas: y puedo asegurar a V.SSa.Illma que es un agregado dc fugitives, que por delitos. que han cometido en sus propios Pueblos, unos capitales, y de deudas, y otros por huir [f. 615v] la Sugecion y asistencia a lo que por Christianos, y vasallos de su Magestad (que Ds gue) estan obligados, se retiran a aquel, con el seguro de que a aquellos Pueblos, nunca pasa, ni a pasado Alce mor dc la Provincia dc Tayabas a cuya Jurisdicion toca; sino es que todos los años embia un Teninete suya, para el efecto de visitar, y cobrar el Rl haver, y para las elecciones, que en mañas, y costumbres es de un mismo jaez que los que las havitan, por ser de ordino, y lo mas comun moreno o criollo, o Yndio, ya este se le pasa el Tiempo en sus abatayos. y borracheras, y de authorizarselas, paraque con mas livertad, y descaro las executen: Causando a el mismo Tiempo, fiado en la authoridad, que lleba, muchas extorciones, y tiranias, partos Legitimes de su misma prosapias; por cuyo motivo se hallan muy atrasadas, y aun anichiladas todas las Christiandades de toda la Contracosta,[6] por mas remedios. que buscan los Ministros para atajar cstos exsesos tan perniciosos, siempre irremediables, asi por los pobres havitadores, Como por los parajes, y distancia en el recurso a la fuente de este Superior Govierno.
Tres parajes se hallan en la cercania de este Pueblo de Binangonan, en donde se halla gente por reducir: el primero, es el Puerto de Lampon en donde havitan algunos Dumagas, esta es gente que su havitacion es en la mar, y no tienen, ni usar en la tierra de Casa, mas que una Chosa, que forman de Ojas a el pie de los Arboles, y en sintiendo gente, se retiran a sus embarcaciones, y huyen: es gente docil, y el que se reduze a nra Sta feé, acude con puntualidad a las Obligaciones de Christiano; pero irreducibles a vivir en Pueblos, y Casas, y por mas medios, que han tomado, y diligencias que han hecho los Religiosos Ministros, todos son, y han sido frustraneos, y de ningun provecho.[7]
El Segundo Sitio se llama Tangohin y el Rio de Daraetan, este dista del Pueblo de Binangonan como tres Leguas de distancia; en este paraje, y Riveras del Rio se halla havitado de Indios Simarrones, Apostatas, Aetas, y Balugas llamanse asi, por que son hijos de Simaron Indio, y Aeta: Aqui se hallan reducidas mas de setenta Almas, y se a fundado una Hermita, dedicada a el Señor San Pedro de Alcantara; paraque quando baya Religioso tenga donde dezir Misa, y administrarles los Sacramentos, como paraque los convertidos y reducidos tenga donde rezar.
El tercer Sitio se llama Humirei, dista de dho. Pueblo de Binangonan un dia de navegacion por la mar, aqui se halla fundada [f. 616] una Hermita, dedicada a Nra Sra de la Candelaria. En este sitio se hallan como unas nuebe Familias, pero muchos simarrones asi de los demas Pueblos de dha Contracosta, como de Aetas, y Dumagas; pero irreducibles a vivir en Pueblo, ni menos acudir a las obligaciones de Christianos, ni por el Cariño, y dadinas de los Religiosos Misioneros, ni mucho menos comminandoles con amenazas, y temor de la Justicia, en las Playas del mar se veen y registren muchas chozas avitadas de Dumagas, y Aetas: pero zitas, por su malicia, en tales parajes, y sitios, que en manera alguna se puede allegar embarcacion por
los muchos arrecipes, que manifiestan evidentemente el peligro, que ellos escogen para su mayor seguridad, y livertad de conciencia. sin que Minro, ni otra persona alguna sea capaz de
comerciarlos.[8]
Estos parajes fueron de los que se represento, y dio noticia a el Superior Goviemo por el Procurador General de esta mi Santa Proa por el mes de Abril. Por entonzes parecio a los Prelados ser el Sitio acomodado, y al proposito, paraque se pusiera Religiosos de asistencia: Pero haviendo reconocido en esta segundo visita el poco, o ningun fruto que se espera, a mas de no ser la gente mucha, y con pocas esperanzas de su reduccion: haziendolo mas imposible la falta de gente por haver se los mas retirado, a causa de la multitud que de ellos perecia, y moria, por la peste que prendió en el Pueblo de Binangonan, que penetro hasta la interior de los montes por los años de setecientos, y diez y ocho, y diez y nuebe: Por lo qual quedan los Convertidos pocos, y reducidos que han quedado al cuidado, y zelo del Religioso Ministro, que asiste en el Pueblo de Binangonan;[9] paraque aunque sea con el trabajo, que se deja a la alta comprehencion de V.SS. Yll,ma les asiste enseñando, y cathequizando, administrandoles los sacramentos, hasta que mi Sta Proa, y los Prelados dispongan otra cosa, para estas reducciones, y conversiones.
En distancia de dos dias, y medio de navegacion por mar del Pueblo de Binangonan, esta Valer, que se compone de Cinquenta Tributos, o familias de Christianos antiguos en este pais: los quales lo pasan con gran miseria, y trabajo, por la esclavitud, y sugecion con que se hallana ia multitud de gente Infiel de que se hallan sercados, y no son dueños mas que de un corto sitio para sus sementeras, el qual gozan con grandes trabajos, y sustos por lo atroz, y velicoso de la gente: aunque aora respiran algun tanto (dando gracias [f. 616v] a el Señor) por hallarse con pazes hechas, asi con los Yzalines. que havitan en los montes, y son llamados asi por los parajes, y con los Aetas que havitan en los montes, y Playas, parajes distintos de los Yzalines e Ylongotes con quienes se hallan siempre en guerras, con tal Odio, y rencor brutal, que ni el Ysalin e Ylongotes da quartela al Aeta, ni menos este a aquellos, y cada dia suceden muertes de unos, y otros, y al que matan. cortan la Cabeza asi unos, como otros, y Juntandose los que vencieron, hazen su festin o abatayo en presencia de las Cabezas de los Vencidos, y despues de mui embriajados los arrosan; y lo proprio hazen en venciendo los Contraries. Entrando en estas Diabolicas tiranias asi Ynfieles como Christianos. sin que el cuidado, y zelo de los Ministros Religiosos a pasido bastante para retraerlos de semejantes concursos, ni menos el afearles eficazmente semejante inhumanidad, sin aprovechar los medios, que varias vezes an discurrido para reconciliarlos entre si, paraque cesen semejantes atrocidades, a que se sigue no poco desconsuelo en los Religiosos en experimentar la altivez, y sobervia de los Yzalines, e Ylongotes. Junta con la barbaridad de los Aetas. y no hallarse en estos sitios recurso a quien los Comprima, y sugete con Armas, por la imposibilidad que se toca de la aspereza, y montuosidad impenetrable de los montes, que havitan una, y otra nacion, y solo se queda su Conquista a la mano poderosa del Altisimo, quando fuere su Santisima voluntad, porque son de ningun efecto fuerzas humanas.
Hallase este Pueblo de Valer en una situacion acomodada para su defenza pues por una parte tiene el mar, y por otra va Rio caudaloso, que se escopio, para si sucediera el caso de romper las pazes, asi con los Yzalines, e Ylongotes, como con los Aetas, desde cuyo Sitio se defendieron en lo antiguo de estas naciones, aunque pereciendo mucha gente, lograron con su barbaridad intrepida quemar la Iglesia, y Convento, de que aun se reconozen los vestigios librando los mismos pobres Christianos con el peligro manifiesto de sus vidas, la del Religioso, que alli les asistia. Y aunque al presente con el cuidado. y zelo del Religioso Ministro por medio del agazaso, y cariño con que los trata, asi quando vienen a el Pueblo de Valer, como quando pasan a sus rancherias a visitarlos, se hallan con mucha paz, y union los Christianos antiguos con dhas naciones; pero siempre con el rezelo, y desconfianza por la experiencia que tienen de su altivez summa, y falacia en quanto hazen, dizen, y tratan: y esta summa altivez se les augmenta, reconociendo que por parte de los Christianos no ay fuerzas para resistirles, y hallarse ellos señoreados de todos los [f. 617] montes, y Rios sin contradicion, ni rezelo de ella.
Pudiera reterir algunos casos, que me sucedieron para confirmacion de lo dho., y paraque con la alta comprehencion de V.SS.Yllma forme dictamen de la tiranica opresion, y estado lamentable con que tienen estas barbaras gentes aquellos pobres Christianos, y por no ser molesto solo apuntare el que me sucedio el dia de N.P.S. Francisco y fue: que estando este dia por la tarde platicando con los Religiosos que alli asisten, me dieron aviso estar toda la Casa, y el Pueblo sercada de los enemigos, Ysalines, e Ylongotes, que traian las divisas, y señales de guerras sangrienta que ellos usan en sus batallas: asomamonos a las bentanas de la Casa, y vimos ser Verdad lo que los Christianos referian, pues havia multitud grande de lo enemigo con lanzas, y demas armas ofensivas, que ello usan; procure a quietar los Christianos del Pueblo, porque no se trabasen, y llamando al Cavecilla de los enemigos, por medio del Ynterprete inquiri la causa, prometiendoles dar corte a su gusto para Zosegarlos: fue (Yll.mo Señor) el principio de esta material extrepito el dezir, que los del Pueblo de Valer. havian hurtado a su Maestro de Campo (que asi nombran a su Cabeza) una ganta de Arroz, y una atarraya de pescar, y que venian a castigar este atrevimiento dando muerte a el Ladron, y los comprehendidos: hize averiguacion de la Verdad entre los mismos Christianos, y hallando no ser ellos; aunque los enemigos no se satisfacian, ni menos querian desistir de sus intentos en la venganza, tome por partido, y convenio el que el Sindico se lo satisfaciera, y aun con todo esto no se davan por contentos, si que dezian: que no era Justo que el Padre pagase lo que no havia cometido, que ellos tomarian satisfacion a su gusto de los de Valer: Convensilos a que admitiesen mi Oferta, temeroso de que no usasen de sus brutales tiranias con aquellos pobres, a que por ultimo admitieron, y se zosegaron, retirandose otra vez, a sus incultas rnalezas de lo interior de los montes. De estos justos, y sobresaltos estan reciviendo cada instante, haziendo mil insultos, y atrocidades, sinque estos miserables puedan poner coto a tanta desmesura, por su ninguna resistencia.
Antes de emprender mi viaje, para registrar estos Pueblos, me fue preciso el valerme de los Indios practices de Valer, y de aquellos, que tenian mas comercio, y amistad con esta nazion, paraque avisasen a los Yzalines. y sus Cabesillas, pues entre ellos no ay mas economia de Govierno, que obedezer a el mas valiente a el qual se sugetan. Asi avisados vinieron ocho Yzalines a Valer, a los quales por medio de interprete, les noticie de mi determinacion, que era subir a veer sus Pueblos, y asi mismo [f. 617v] como queria dejarles PPes Ministros, que los cuidasen, y enseñasen la Doctrina Christiana, y de mas obligaciones de Christianos; pues aunque avia algunos que se denominaban tales, poco les servia, si atendian mui poco a sus Obligaciones, y no bolvian a rezar, y veer a sus Ministros, para ser de ellos enseñados.
Fueron a dar esta notica a los demas Cabecillas de los montes; y alcabo de tres dias bolvieron, y me dixeron podia subir con seguridad, y que se havian alegrado mucho todos de mi llegada, y mas de que les havia de dexar Religioso, que cuidase de ellos y de sus Hijos. Tube noticia (Yllmo Señor) de que me aseguré por los Libros de Baptismos, que por los años de Settecientos y uno, y Sdettecientos y dos, estando a cargo de los Pes Recoletos de San Agustin de esta Proa de San Nicolas, se havian Baptizado muchos en dhos Sitios, asi de los Yzalines, como de los Ylongotes. y que solo recivieron las aguas del Baptismo movidos del interes de la ropa, que los Padres les davan; y no motivados de salir del estado miserable de la Infidelidad, en que ciegos los tenia el Demonio.
Passe, pues (Yllmo Señor) a registrar, y veer personalmente lo interior de los montes, donde havitan los Yzalines: en alguna manera tienen formados Pueblos, con mui buenas casas,
proporcionados ta-bobos donde guardan su arroz, labran grandes sementeras de que cojer mui
buenas cosechas. Visite sus Pueblos, llevando interpretes, gente practica, y armada; por que no me permitieron salir de otra fuerte los Christianos antiguos: me embargue en el Rio de Valer, cuyo origen es en la Pampanga de un Pueblo que llaman Bongabon. y por Juntarsele otros muchos, se haze muy caudaloso: se sube este Rio parte embarcado, y parte por tierra: en sus Riveras, algo ya en lo interior del monte, se hallan poblaciones en distancia de un dia de camino, las quales se llarnan: Damag. Lauang. Tambaquen y Bongob, todas de la nacion de los Yzalines.
En dhos Pueblos encontre muchos Christianos, pero zerrados todos los caminos para reducirlos a el cumplimiento de sus obligaciones. Hize listas, como pude, de ellos, en que saque
mas de quinientas personas, que havian recivido el Baptismo, y se hallaban exparcidos en estos parajes. Propuseles que si dexandoles Padres, que los Doctrinasen, y asistiesen se recogerian? Dixeronme, que si, y aun la experiencia de algunos que bajaron me lo Confirma, aun que siempre perdidas las esperanzas de su perseverancia, por su natural belicidad, y mirar tan por encima, y hazerles tan poca impresion lo que pertenece a el aprovechamiento, y logro a [f. 618] sus Almas, y Justo Cumplimicnto de las obligaciones de Christianos.
En lo playa de este dho Pueblo de Valer, en distancia de quatro horas de Camino por tierra todo arenas, se halla una poblacion de Ylongotes, llamado Dipaculao o Sabden, y siguiendo la misma playa a otra tanta distancia, se halla otra de la misma nacion llamado Dilate. Registre a Dipaculao. y aunque havia bastantes Casas. las mas sin gente. dando por motivo el averse buelto a el monte, por no haver havido Padre Ministro en el Pueblo de Valer; pero que luego que tubiese noticia de que le havia, bolverian a su Pueblo, y le havitaria.
Ynformada mi Santa Provincia de la abundancia de mies, y que solo un Religioso no podia dar pasto espiritual a tanta gente, asi por haver de trabajar en reducir los Baptizados fugitivos, como en Cathequizar e instruir los nuebos que se convirtiesen, asigno dos Religiosos Misioneros: el uno, para que cuide de los Yzalines, y el otro de los Ylongotes. Cuios frutos apuntare despues a V.SS.Yll.ma En las poblaciones llamadas Damag, y Lavag, que solo distan la atravecia del Rio, se ha fundado una Yglesia, que se dedico a la Purisima Conception de Maria SS. Señora nuestra: y en las otras dos poblaciones de Bangob, y Tambaguen se fundo otra, que se dedicó a el Ynnesable misterio de la Trinidad Santisima. Dhas dos Yglesias estan a el cuidado de un Religioso Misionero, paraque administre los Santos Sacramentos a unos, segun el tpo y la occasion lo pidiese, y enseñe, y cathequize a los otros, que pidieren el Baptismo en este Rio, y montes de Valer, en cuyo paraje se halla Desde el año proxime pasado de Settecientos, y diez y nuebe por el mes de Agosto, hasta el presente de Settecientos y veinte, se han reducido en estas quatro poblaciones ciento, y diez Almas, y se han Baptizados de nuebo ocho Parvulos, y doze adultos.
Siguiendo la misma Costa en distancia de dos dias de navegacion con Tpo bonancible, se halla el Pueblo de Casiguran. cuya ensenada, y Puerto es, sino el mejor, a lo menos tanto, y de los mas resguardados, y mas seguro de las Yslas. Este Pueblo se compone de sesenta Tributes, o familias todos nativos del. Los havitadores de sus montes, no tienen correspondencia, si solo con los Aetas. A la entrada de su Puerto a orillas del mar, se halla una poblacion de Ylongotes, llamada Comblan: entre a verla, y tienen su Pueblo formado de Como hasta unas Quinze Casas: luego que divisaron Religiosos salieron todos a la playa, y preguntando Yo si havia algunos Christianos? Respondieronme: que si, y que llegarian como hasta unos veinte, que los demas estaban en lo interior del monte. Dentro de la encenada, [f. 618v] la qual tendra como tres horas de navegacion en la latitud, de una, y otra parte, se ven muchas rancherias, y chozas de Aetas. Los que estan sites en la punta de Sn Yldefonso, que mira a el norte, tienen amistad con los Indios del Pueblo de Casiguran, y comercian entre si: los otros que havitan, y tienen sus rancherias a la parte que mira a el sur, son Aetas de mala raza, mui carnizeros, y enemigos capitales de los del Pueblo de Casiguran, y de ninguna manera pueden estos navegar por aquella parte; por que si pueden los Aetas Cogerlos los matan, ni aun en sus sementeras estan seguros. Han procurado los Religiosos, por todos los modos que caven en lo humano, hazerlos amigos de los de Casiguran, y no se ha podido conseguir por ninguno de ellos. Este mismo rencor, y teson tienen con los Ylongotes de Comblan. y unos a otras no se dan quartel, y rara es la semana que no aya de una, y otra parte muertes.
Con la noticia (Illmo Señor) que adquiri, quando passe por Comblan de que se hallaban algunos Ylongotes Bautizados, con otros de los Aetas, que viven en la punta de Sn Yldefonso. procure inquirir con eficacia la verdad, y considerando que yo no podia detenerme mas por la precision de la Visita, que tenia que hazer del Pueblo de Palanan. dexelo encargado a un Religioso, paraque viese los parajes, e hiziese listas de todos los Bautizados, y asimismo los reduxese, si fuese posible, a salir de los montes, para, de buelta de mi visita de Palanan, segun su informe, reconocerlo si pudiese y, dandome lugar el Tpo, Yo mismo visitarlo.
Prosegui, con esto, mi viage por la misma costa del mar, hasta llegar a los Pueblos de Dicalayo, y Dibinbinan, llamados comunmente Paranan, distan dhos Pueblos, con tpo favorable, del de Casiguran ocho dias de navegacion, en el qual viage se monta la punta de Sn Yldefonso, que solo por el motivo, y sin del bien de las Almas, puede dar alientos, y valor al que la passa una Vez, bolver segunda, por ser indesibles los peligros, y solo creibles a el que los experim,ta o navega mares de tanta brabeza. Llegue a la barra del rio de Dicalayo. o Palanan el dia doze del mes de Agosto del ano proximo pasado, haviendo salido de Casiguran el dia primero de dho mes: es este Rio (Illmo Sr) mui caudaloso, y para subir en donde sita el Pueblo, ay medio dia de embarcacion; componese dho Pueblo de una Casa de Comunidad, dos Casas pequeftas, y otra bien corta, e indecente para un Religioso. y para dezir Misa un Camarin. Ay en este Sitio bastante gente, y los mas Simarrones, por cuya causa por mas vigilante, y zeloso que han de el Minro, no los puede atraher, ni [f. 618bis] con cariño, ni menos con rigor, a racional Compañia, y Sociabilidad tan apetecida de todo viviente; si que luego les tira la vida miserable, y brutal de los montes, pareze no ay en ellos de hombres mas, que la exterior apariencia, siendo por esto impracticable en ellos, aun con la continua enseñanza, y Predic,n el asistir a Misa los dias de oblig,n y menos el Confesarse por la quaresma, si que todo esto lo hazen quando quieren, y como quieren, y esto mui raro. Quanto sea el desconsuelo con que el piadoso corazon de un Minro se halla oprimido, se dexa al discurso, y Christiana piedad de V.SS, Yllmo, pues es tal en ellos la dureza. y obstinacion, que no prende la menor sentella de la Luz Evangelica, con que continuamente se les esta Iluminando, con infatigable zelo en tan empedernidos Corazones; y solo apetecen la livertad, conque gozan de su irracional modo de vida, en que tienen puesto su ultimo fin: y por la misma razon no puede haver Coactiva para que cumplan con sus obligaciones, y oyendo la palabra de Dios veer si, a repetidos golpez de tanta Luz, curan de tan nociva zeguedad en que el Demonio los tiene oprimidos.
Reconoci el sitio donde se halla fundado este Pueblo de Dicalayo. que dista del mar medio dia: y el de Dibinbinan que dista de aquel por tierra un quarto de Legua, y por el Rio tres horas de navegacion: el temple de estos dos sitios es mui enfermo, pues todos los Religiosos que la obediencia a puesto, en ellos luego han enfermado, y muchos con perdida de la vida; por cuya causa se esta buscando otro sitio de temple mas benigno, en donde, con mas commodidad puedan asistirlos los Religiosos y fundar Yglesia, si quiera paraque, en medio de sus trabajos, y mucha soledad, tengan el corto alivio de gozar paraje menos adverse a su salud.
Ynforme me, si las faldas de los montes, y en los Rios havia parajes en donde havitasen Infieles, Simarrones, o Apostatas, y halle estar todos reducidos, (como se informo a el Supr Govierno el año proxime pasado) por el Appco zelo del Religioso que allie tenia puesto mi Sta Proa, que llegaron a numero de ciento, y Catorze Almas, Y los de mas, que allie asisten asi en las faldas de los montes, y sus Rios, como en las playas son Aetas; pero de tan estraño modo de vida, que no tienen sitio, ni lugar fixo, para su havitacion: su vivienda la ponen en los parajes en que hallan los Arboles, que dan la fruta, que es su usual, y continuo alimiento; la Casa es una media Choza, en que se resguardan de los Temporales: la Cama un hoyo cabado en la misma arena, sepultandose para dormir, por colcha, o sabana unas ojas mui grandes de un genero de palma, que ellos llama Anahao: su empleo, y ocupacion entre dia es la monteria de Habalies, y Benados, cuya carne secan al sol para sus Comercios: su vestido una Cascara de un arbol, que apuro golpe de [f. 618-bis-v] piedra ponen muy suave, y queda despues como si fuera texido, del qual usan quasi todos, los que viven en esta contracosta por su summa pobreza, a el qual llaman Talogtog. Sus Comercios son de estos generos los quales bajan a los Pueblos, y sementeros de Christianos, y los Commutan, y dan por los generos, que ellos estiman, que es Arroz, y Tabaco, y se buelven a el monte mui ricos, y gustosos: y en acabandose la fruta de los arboles alli, se mudan a otra parte a buscar la dha fruta, y no les es molesto para estas mutaciones el ajuar de sus Casas, por que todo ello se reduze a una olla, el que la tiene para coser su fruta, porque los mas aderezan la comida en bonbones, o canutos de caha, o en ojas de los mismos arboles; su arco, flechas, broquel, y lanza, y en esto es su mayor esmero, y cuidado.
Certifiqueme de vista (Ylmo Señor) ser este su porte, y modo de vida en esta brutal gente, quando iva para Palanan, pues haviendonos hecho arrivar a una encenada el mal tpo el dia del Sr Sn Lorenzo del año proxime pasado luego que nos vieron, y que ivamos a tomar alli Puerto; salio mucha gente todas Aetas; mande arrimar, salte en tierra, y luego se asercaron muchos de ellos, y reconociendo ser Padre el de la embarcacion, sin hablar cosa alguna se bolvieron a sus chozas, estrañe este modo, y me dixeron los practices, que el bolverse no era por que huian. sino es que ivan por algun regalo de sus frutas, que ofrecerme, y que no bolverian sin traer algo, a fin de que se les diese Arroz, o Tabaco: asi sucedio, pues luego vinieron, y me trajeron un sexto de dha fruta, que cosida con agua, y sal, tiene el sabor a Castaña; mandeles dar un poco de tabaco, y Arroz, y me acompañaron gustosos todo un dia que alli estube detenido, y antes de salir, en agradecimiento de lo que executé con ellos, mi avisaron, que no llegasemos a otras dos rancherias de Aetas, que estaban en el puerto immediato; por que estaban de Luto, por haverles muerto dos de los suyos, y corria peligro matasen algunos de los Indios de mi embarcacion. Parece, Sr fue particular providencia del Altisimo el darnos este aviso, que de no, ivamos derechos a aquel Puerto, y nos ubieramos visto en algun conflicto, por, ser su costumbre vengar dhas muertes en los primeros que se les ponen delante. Muviome la curiosidad, estimulada de la Compasion, o preguntar, que si entre ellos havia algunos Christianos, y entre mas de cien Almas, que alli havia, solo me señalaron a un Viejo, que al parezer pasaria de ochenta años de edad, el qual preguntado si era Christiano? Dixo: que si; pero no supo dar razon de quien, ni a donde se avia Bautizado, y lo que mas es, ni aun como se llamaba. Y todo esto es, por ser solo Christianos, [f. 619] toda esta Costa de Aetas, por los fines Diabolicos expresados arriba, los quales conseguidos no cuidan mas, que si tal no fuesen, pues el reducirlos a otra cosa, que desdiga de esta brutalidad, y miseria, todo es violento a su natural propencion de vivir silvestres, y asi lo desprecian, como me sucedio con este Aeta Christiano, pues luego, que por medio del Interprete empese a exortarle, que mirase por su Alma, y que se reduse a Pueblo de Christianos, paraque asistiendo a las obliges de tal, no se perdiese, ya que tan arrastrada pasava su vida: solo esto fue motivo (Illmo Señor) paraque quando mas descuidado estava, escapase, y se fuese sin bolverle a veer mas, en lo que alli estube. De aqui puede (V.SS. Illma) inferir, sucediendo esto a cada paso a los pobres Religiosos, el desconsuelo grande, y pena interior, que les causara, veer por tantos caminos malogradas tantas Almas, con desprecio de las misericordias Divinas, pues dandoles Pastores, y aun concediendoles, en medio de sus demeritos, las aguas saludables del Baptismo, asi lo desprecian, y abandonan todo, serrando las puertas a todos los medios, que puede idear, y executar un zeloso Pastor, por lo indomito de sus naturalezas, y protervidad de sus entendimtos Dios nro Señor por su Infinita Piedad los remedie con su poderoso brazo, pues en lo humano no ay recurso.
Este Rio de Dicalayo, o Palanan es mui caudaloso, y siendo asi, que desde su barra, hasta donde se halla fundada la Yglesia no ay mas que medio dia de subida, se prosigue hasta el pie del monte en donde tiene su Origen, y en ello se gasta dos dias, y medio de navegacion: y en sus riveras algo apartados, y donde ay espesuras, tienen los Indios sus Casas, y Sementeras, y con la misma facilidad que los demas, las desamparan, mudando sitio; y por esto la Casa mas sercana a la del Religo e Yglesia dista un dia de Camino. Y teniendo sitio bastante Junto a la Yglesia para formar Pueblo, y vivir todos Juntas, y asi mismo tierras serca para labrar sus sementeras, no se han querido sujetar a esto, ni menos se les puede hazer fuerca, por que se perdera todo.
Lo interior de estos montes llamados de Palanan, que son mui eminentes, y fragosos, se hallan havitado de la nazion, que llaman Yrrayas, toman esta denominn de los sitios en que havitan: esta gente en mi sentir es de la misma casta que los que llaman Yzalines. e Ylongotes, y solo tienen de diferencia, que estos si quiera (aunque por fines torcidos) oyen la palabra Evangelica, y se Bautizan, aunque que dan Christianos solo en el nombre; pero aquellos, que se llaman Yrrayas quando baxan a sus Comercios a los Pueblos de Dicalayo, y Dibinbinan por los meses de Abril, y Mayo, trayendo zera, que commutan por sal, la qual ni tienen, ni hazer la saven, todo lo que es tratarles de que se buelvan Christianos, ni lo admiten, ni aun de palabras oyr lo quieren, ni menos recivir dadiva, ni [f. 619v] veer a el Minro, y se enfurezen, e irritan mucho en tratandoles esta materia.
Tube noticia, que en el Pueblo de Dibimbinan havia algunos Indios, que solian subir a los Pueblos de estos Yrrayas. mande llamarlos, para Informarme de la distancia de dhos Pueblos, aspereza de los caminos, y si havia alguna seguiridad para visitarlos; a que me respondieron, que la distancia era tal, que yendo un hombre cargado, era necesarios nuebe dias, y sin carga seis hasta el primer Pueblo, por ser los caminos asperos, montuosos y mui peligrosos, pues los que subian, era necesario buscar siempre compañia de Aetas, y todos con Armas: por todo lo dho., y por ser tambien Informado de los Indios Christianos havia de sacar ningun fruto en quanta a reducirlos, no me determine a pasar, y aunque algunos de los Religiosos que alli se hallan me pidieron Licencia para subir, no me parecio conveniente concederla, por la misma razon.
Dieronme noticia asi los Religiosos como los Indios, de como en los Rios, y montes siguiendo la costa del mar asi a la Proa de Cagayan, se hallava mucha gente de todas castas, como son, Aetas, Simarrones, Apostatas, Indios nativos de aquellos parajes, y otros muchos fugitivos de los demas Pueblos de estas Yslas, los quales todos tienen sus Viviendas en los rios, que llaman Dibilacalan, Dicatuyan, Dicararayan, Dimaconacon, Dizimanu, Canaguyan, y Garrongot que todos son mui caudaloso, y abundantes de pescados. Los insultos que estos hazen son grandes, y henorme, pues van a los demas Pueblos, y rancherias, y hurtanlas mugeres de qualquier estado que sea, y se mantienen con ellas, con el seguro de que por lo aspero, y montuoso de los sitios el Pe Mnro los inquiete, y menos el Alcalde los Comprima, y castigue (supongo el que en ningun Tpo han pagado ni pagaran el Rl Tribute) con que viven en pacifica pocesion de su desastrada vida. Yrreducibles mas que los demas son dhas gentes, pues es grande el desprecio con que miran a los Mnros Evangelicos, y de consiguiente abominan de la palabra Divina, y por mas diligencias, que hay executado los Religos para sacar a algunos de los Christianos de tan pernicioso estado, a mas de no sacarse fruto, como a mostrado la experiencia, se exponen a peligro de perder violentamte las vidas; como sucedio a el P. Fr. Pablo Ximenes, que se hallava Misionero en estos parajes, estando Yo en la visita, y tengo por cierto que el considerar dho Pe el miserable estado de esta brutal gente y violentado de veer, que no hallava materia en que prendiese su Appco Zelo, ayudado del Sentimto de veer malogrado la sangre de N. Redemptor Jesus, fue la causa de su azelerada muerte, acabando la vida en el exercicio Appco por el mes de Febrero del presente año.
Fue el caso, que por unos Aetas tube noticia, como los Simarrones [f. 620] acompañado de unos Apostatas querian quitarle la vida, estando Yo visitando el Pueblo de Casiguran, y que si llevado de su Appco Zelo avia salido a el monte, en aquella hora, en que me lo referian, estaria ya asaeteado: sali con esta noticia para Dicalaya, sin saver motivos, aunque si seguros de que de su parte ubiese dado occasion, por ser notoria, y conocida de todos su Religiosidad, el mucho amor, y Cariño conque a todos tratava, y que solo por maldad de ellos de podia fraguar semejante tropelia, y atrocidad. Llegue a dho Pueblo con el cuidado, y halle a el Religioso sin novedad alguna, haviendose publicado el Caso por todas los contornos; di la noticia del motivo de mi ida, y las noticias infaustas, que me aviandado, el qual solo lo atribuyo, a lo que le havia pasado, y fue: que haviendo tenido noticia, que en el Rio de Garrongot cinco dias de navegacion distante, entre otros muchos Indios perdidos que havia, se hallava uno, natural del Pueblo de Dibimbinan, que doze años avia, que estava ausente, llevandose una muger casada en dho Pueblo, cuyo marido aun vivia. Que movido de compacion, y lastima de aquellas Almas, buscando medios, y trazas, para atraherlos, le parecio medio conveniente, y suave el hablar a algunos Indios, y en particular a los Padres de el, y sus Hermanos paraque estos les buscasen, y hablasen, a segurandoles, que por parte del Religioso no tenia que temer, pues le reciviria con amor, y cariño, y que solo buscava, y queria que reconocidos de su culpa se mejorase; con estas razones se movieron los Padres del mozo a salir en busca suya, al qual traxeron en breve tpo en Compañia de la muger hurtada. Teniendo noticia de como ya estavan en el Pueblo, mandolos traer en su presencia, reciviendolos con afavilidad, y mucho cariño, ponderoles la culpa, lo atroz de su delito, y que solo les pedia la emmienda, que se arrepintiesen, y pidiesen a Dios perdon, y que para esto se dispusiera para Confesar entrambos. A la muger la deposito, y a el Indio lo entrego a sus Padres, para que lo instruyesen en la Doctrina, y oraciones, que ya se le avian olvidado.[10]
Paso luego a el ajuste de que la muger hurtado con su legitimo marido, que sin resistencia de el para recivirla, y de ella para sugetarse a las Leyes del matrimonio, quedaron ambos gustosos, y hacian ya maridable, y gustosa vida, Ofreciosele a el Padre salir del Pueblo, y en la corte de mora que hizo quando bolvio, le dieron notica como entrambos se avian buelto a el monte, y que a mas de lo dho havia cargado con otra muger hurtada: llamó luego dho Padre a unos Indios paraque le siguiesen, y que estos en el camino encontraron a unos Simarrones, y preguntandoles estos a aquellos que a donde ivan? Respondieron, que en busca de Fran.co, que asi se [f. 620v] llamaba el dho Indio fugitivo, dixeron los Simarrones, que no pasaran adelante, sino querian les sucediese alguna desgracia, por que ellos havian visto a dho. Franco que llebava gente armada en su resguardo, con la prevencion, de que el que saliese en su seguimto fuese muerto, y que este mismo encargo havia hecho a los Simarrones, Aetas, y demas gente de los montes, paraque hiziesen con el Padre lo mismo, en caso de salir, y asi encargaronles los Simarrones a los Indios le diesen parte, paraque no saliera del Pueblo. Bolvieron dhos Indios, y le hizieron relation, de que hizo poco caso, sintiendo solo la perdida irrecuperable de sus Almas. Esto es lo que sucede (Illmo Señor) de ordinario, quando mas descuidado este el Minro lo dexan burlado: esto es peste General de toda esta Contracosta, aunque con mas especialidad en los que havitan en los Rios arriba expresadosm zelebrando con grande algazaras, quando los Pes Mntros por atraherlos, les dan alguna ropa, o otras niñerias, el dexarlos burlados, no conociendo estos miserables ser ellos los que sacan la peor parte, y ser ellos los que mas pierden.[11] De todo lo qual podra inferir V.SS.Yllma lo arriba expreo, y que no ay mas fuerza y cohactina para la reduccion, y conservon de los Indios, en las Christianas costumbres, que la fuerza misma de la Evangelica palabra, y de Dios sus infinitas piedades.
Teniendo yo tan presentes de los Yndios la dureza e inconstancia, y que mi Proa deseava, el tener noticia cierta de todos los sitios que para las providencias necesarias al Pasto Espiritual de las Almas, le era necesario, sin perder de vista mi crecida obligon de atender a tantos: haviendome dado aviso los Religiosos que asistian en Dicalayo, como los Yndios que havitavan en el Rio mas immediato, llamado Dibilacan, que dista medio dia de navegacion siguiendo la costa del mar, havian pedido Religioso paraque Bautizase a unos, y a otros, que ya eran Christianos, Cohayubase para vivir a reglados a sus Obligaciones; y noticiado tambien, de que en este sitio havia un Indio Christiano de buena indole, y ya de madura edad. el qual servia de Cathequista a los Relig,os el qual Indio tiene fabricado un Camarin, que serviese de Yglesia, por orden de los Padres, paraque quando estos llegasen Bautizasen a los ya instruidos, y que por estar el Padre enfermo quando llego esta noticia, no havia pasado a administrarle los Sacramentos. Determine, informado de todo lo dho, hazer por mi mismo esta diliga: tome por mi Compañero a el P. Fr. Pablo Ximenes, y llegue a el dho Rio de Dibilican el dia diez, y ocho de Agosto del año pasado. Es este Rio mui caudaloso, y de mucha pesca, subimos embarcados como tres horas de camino hasta llegar a una llanura, en donde havia una hermita, y una [f. 621] casa sola para el Religioso, asi que llegamos salieron a recivirnos como hasta unas sesenta Almas, y de alli a poco tpo acudieron otros muchos. Vino el Cathequista a avisar, que se hallavan treze adultos capazes en la Doctrina para poder Bautizarse, y que aunque havia otros, que lo deseavan, no estavan capazes, por ser de mucha edad, que era la causa de costarle summo trabajo el aprender dha Doctrina: llamelos a todos a mi presencia, y los examine en todo lo eseneial, que se requiere en los adultos, para recivir las saludables aguas del Bautismo, y halle Capazes los doze, de los quales el menor era de quinze años de edad, y el mayor pasava de los Cinquenta, y algunos con enferme dades tales, que les corria peligro manifiesto de la vida.
Reconocido el sitio, y asi mismo viendo, con alegria de mi Corazon de que dava a Dios las devidas gracias, el buen principio en que esto se fundava, determine dejar un Misionero de asiento, para reducir, y convertir aquellas Almas, y que los fugivos [sic] viendo Padre se agregarian a los demas. El dia veinte de Agosto del alio pasado se dixo la primera Misa en la Yglesia que se dedico a N.S. de los desamparados, se Bautizaron en el mismo dia doze adultos, y un parvulo. El P. Fr. Pablo Ximenes, que fue el Misionero que señalé en este paraje, en breve tpo reduxo treinta familias de Simarrones Apostatas, y Conviertió a nra Santa fee Catholica Cinquenta y dos adultos, y Bautizo treinta parvulos, como consta de Certificaciones, y de los Libros de Bautismos.
Hasta aqui llegan los terms que a mi Santa Proa se le encargaron,y desde este Rio de Dibilacan hasta el primer Ministerio o Doctrina de los Pes Dominicos, llamado Bugey, Proa de Cagayan, son necesarios doze dias de navegacion, en cuya distancia, segun me he informado de los Cobradores del Rl Tributo, que vienen a los Pueblos de Dicalayo, y Dibimbinan, se hallan los Rios y montes mui poblados de todas las naciones arriba mencionadas; sin que les falta nada de lo necesario a ellos con el comercio que tienen de continuo con dhos Cobradores. cuias ganancias son grandes en lo Temporal; y en lo Espiritual, lo dejo solo a Dios y a su tremendo Tribunal, por ser materia odiosa, y sin esperanza de remedio.
Mes y medio me detube en estos Sitios de Palanan, del qual Pueblo Sali quasi huyendo de la peste, que en el havia ensendido, llevando en mi Compañia en la Corta Capacidad de dos embarcaciones doze enfermos, y de este riesgo Yo quasi milagrosam;te y aseguraron me ser esto lo que ordinariamente sucede en aquellos [f. 621 v] parajes. Llegue a el Pueblo de Casiguran, para inquirir el exito de lo que havia dexado encargado a el Religioso, sobre la reduccion de los Ylongotes del Pueblo de Comblan, y los Aetas de la punta de Sn Yldefonso: entregome dho Religioso las Listas de los reducidos, y Bautizados; y de ellas Consta ser los Ylongotes quarenta y tres; y aunque estos estan casados a su usansa, que es hombre Christiano con muger Ynfiel, y hombre Ynfiel con muger Christiana, se tenia esperanza de que reducidos se casarian segun lo dispuesto por el Santo Concilio de Trento. De los Aetas de la punta de Sn Yldefonso se redujeron treinta y ocho almas, y se Bautizaron Cinco adultos, quedandose de todos estos Como diez y seis personas a vivir en el Pueblo de Casiguran, los quales si permanezen se logra en parte el trabajo; pero se teme con bastante fundamento, por estar tan sercano los Infieles de la misma punta, con quienes tienen comercio, el que los parientes mismos los perviertan y reduzcan al monte otra vez, como a mi me ha sucedido con un muchacho, estando en el Rio de Dibihcan, y fue como se sigue.
Haviendo acabado de Bautizar los que arriba dixe, llegose a mi un Simaron anciano, que traia un muchacho, que dezia ser hijo suyo, de hasta unos diez y ocho años de de edad mui bien dispuesto en sus facciones de rostro y cuerpo. Dixome: lo traia paraque me sirviese, que le enseñase la Doctrina Christiana y lo Bautizase: admitilo con gusto, y se vino en mi Compa hasta Dibimbinan, donde estubo mas de un mes, Cathequizandole Yo continuamente con las ancias de Bautizarlo, y cuidarlo como Cosa que por mano de Dios se vino a las mias. Salimos de dho. Pueblo, y el muchacho siempre a mi lado: aquella noche inmediata valiendose de la occasion de estar Yo tomando algun reposo salto a tierra fingiendo precision con la gente de mi Compa; luego que disperte llamele a rezar, como lo tenia de Costumbre; pero no parecio, avisaronme de lo sucedido, y yo con las ansias de que no se perdiese aquella Alma, embie a buscarle, y se averigue, que su mesmo[sic] Padre, y un Hermano suyo, que estavan escondidos en una embarcacion, se lo havian llevado, y que asi no se cansasen en buscarlo, porque era en vano qualquiera diliga.
Esto es (Yllmo Y Rmo Sr) lo que vi, y experimente en las dos Visitas, que por los años de settecientos y diez y ocho, y diez y nuebe hize de las Doctrinas y Misiones, que mi Sta Proa tiene [f. 622] a su cargo en la Contracosta de estas Yslas: y el fruto, que con el summo trabajo que se deja a la alta Comprehencion de V.SS.Yllma han logrado los hijos de ella Y aun con lo expresado en este informe, y el desconsuelo grande que causa el vea el mejor tpo malogrado sus sudores y afanes, por la poca perseverancia, y mucha veleidad de sus moradores; se ofrecen gustosos, y se sacrifican resignados en las Aras del padecer por la mayor honra, y gloria de Dios, y dilatacion de nra Sta feé Catholica: pues con sola una Alma que de tantas, y entre tantas logren sus deseos, se dan, y da esta mi Santa Proa por dhosa, y tiene por digna recompensa de tantas y tan Appcas tareas: exponiendo sus vidas a todo riesgo, como se experimta, y a experimentado en la muerte de quatro Religiosos, que han fallecido dhosamente en este trabajo, en menos de un año, con otros, que por enfermos han quedado imposibilitados: lo qual no deja de causar bastante sentimto a esta mi Proa, pues viniendo la Religos de España, y no haviendo otro recurso, teme el que continuandose tanta perdida, por ser las Climas y temperamtos tan contraries a nosotros se vea precisada a no poder dar el cumplimto de vida a su obligation, y a su Appco zelo; aunque siempre con firme esperanza en la Infinita misericordia de Dios nro Señor de que medara lugar, Corriendo tan de su poderosa mano, como siempre se ha experimentado la conservacion de estas remotas Yslas, a que aquellas Almas, que remedio a costa de su Sacratisima Pasion, por falta de obreros y Minros Appcos, se malogren y pierdan.
Y finalmente (Yllmo Sr) reduzco a esta breve summa o compendio los frutos que mi Santa Proa por medio de los tres Religiosos que en aquellas partes de la Contracosta de estas yslas fueron puestas, con Real estipendio segun decreto del Sr Mariscal de Campo Don Fernando Manuel Bustillo Bustamante y Rueda Governor que fue de estas Yslas, ha conseguido. Y son come se siguen:
En Tongohin, Jurisdicion de Binangonan, se han reducido a el gremio de la Yglesia, desde el año proxime pasado de Settos y diez y nuebe hasta el presente de Settos y veinte, sesenta Almas; y queda Campo abierto para innumerables.
En Humirei, Jurisdicion asi mismo de Binangonan se han convertido, y reducido cinquenta Simarrones Apostatas, con el principal Cabeza de esta paraje, con cuyo exemplar [f. 622v] muchos adultos piden con instancia ser Christianos, los quales estan Cathequizando para darles en tpo oportuno las saludables aguas del Bautismo.
En la poblacion de Comblan Jurisdicion del Pueblo de Casiguran, nazion Ylongotes, quarenta y tres Almas: Y en la punta de Sn Yldefonso se han reducido de los Aetas treinta y ocho Almas; unos y otros Apostatas de la Iglesia: y se han Bautizado cinco adultos. Estas reducciones y las de Tongohin. y Humirey Jurisdicion del Pueblo de Binangonan quedan a el cuidado de los Religiosos mas immediatos; hasta que mi Sta Proa pueda socorrer aquellos parajes con Obreros Evangelicos destinados a dhos sitios, lo qual oy no puede, por la inopia de Religiosos.
En las quatro poblaciones de Ysalines, Jurisdicion del Pueblo de Baler, que son Damag, Layang. Tambaguen. Bongobob, desde el año de Settos y diez y nuebe por el mes de Septiembre, hasta el mes de Henero de este presente año de Settos y veinte se reduxeron ciento y diez Apostatas: se Bautizaron ocho parvulos, y doze adultos: Cuios progresos quedan a el Cuidado del P. Fr. Zebastian de la Madre de Dios.
En las dos poblaciones de Dipaculao. y Ditalc nacion de Ylongotes, se han reducido cinquenta Apostatas, Bautiza diez parvulos, y diez y seis adultos: queda en estos parajes el P. Fr. Santiago de Jhs. Maria.
En el Rio de Dibilacan, Jurisdicion de los Pueblos de Dicalayo, y Dibimbinan, desde el mes de Agosto del año proxime pasado de settos y diez y nuebe hasta el mes de Octubre de dho año, se reduxeron treinta familias de Simarrones Apostatas, y se Bautizaron Cinquenta y dos adultos, y asimismo treinta parvulos: este sitio quedo al cuidado del P. Fr. Pablo Ximenes, el qual murió en este Appco exercicio por el mes de Febrero del presente año de Settos y veinte.
Y respecto (Sr. Yllmo) de que en tan breve tpo han sido los frutos, arriba expresados, tan copiosos, por lo liveral de las Divinas piedades, y por la aplicacion cuidadosa de esta mi Sta Proa por medio de sus Hijos, no obstante la falta que experimentamos, podemos esperar sean en lo venidero mas copiosos, si ayudan las fuerzas por copia de Obreros Evangelicos que esperamos, [f. 623] a los crecidos fervores, y verdaderas ansias con que dha mi Sta Proa atiende a aquellas Christiandades; en cuya empresa no duda tenera a Dios mui propicio, y a V.SS. Yllma, Como tan interzado en esto y del bien de las Almas tan Zeloso, favorables. Dios nro Señor conserve, y prospere por dilatados años la vida de V.SS. Yllma, con asistencia de sus Divinos influixos, para el mayor augmento de estas Islas, y sus dilatadas Christiandades, utilidad publica y de ambas Magestades gloria y honra. De este Convento de Nra Señora de los Angeles de Religos Descalzos de N.P.S. Francisco de esta Ciudad de Manila, y Julio 6 de 1720 as.
[Unsigned]
[1] P. Fr. Vicente Inglés, O.F.M., Informe sobre el progreso de la conversión de los indios de la provincia de Tayabas. Biblioteca Nacional (Madrid), Ms. 11,104, Papeles sobre las misiones en Filipinas s. XVII-XVIII, 700 hojas; here, ff. 614-623. Dated 6 July 1720. A copy. I am somewhat inconsistent with the exact copying of the text’s abbreviations; spelling I have left as I found it, as with punctuation. I have added indications of folio or verso of folio in the text from which I worked.
[2] Antolín Abad Pérez, O.F.M., “Fr. Vicente Ingles, Un Restaurador de las Misiones en el Siglo XVIII.” Missionalia Hispanica, 40:117 (January-June 1983), 131-59. The transcription is on pp. 139-151, with five letters following by or to Father Vicente regarding forced labor for timber cutting and conversion of the Chinese. I have not compared Father Antolín’s transcription with my own. Even though the transcription has been published by Father Antolín, I proceeded with my own for the web since the journal might be difficult to access for some scholars.
[3] Eusebio Gómez Platero, O.F.M., Catálogo biográfico de los Religiosos Franciscanos de la Provincia de San Gregorio Magno de Filipinas desde 1577 en que llegaron los primeros a Manila hasta los de nuestros días (Manila: Colegio de Santo Tomás, 1880), 351-352.
[4] Félix de Huerta, O.F.M., Estado geográfico, topográfico, estadístico, histórico-religioso de la santa y apostólica Provincia de San Gregorio Magno, de religiosos Menores Descalzos de la Regular y más estrecha Observancia de n. s. p. s. Francisco en las islas Filipinas; comprende el número de religiosos, conventos, pueblos, situación de estos, años de su fundación, tributos, almas, producciones, industrias, casos especiales de su administración spiritual, en el archipiélago Filipino, desde su fundación en el año de 1577 hasta el de 1865 (2nd ed., Binondo: M. Sánchez, 1865), 51.
[5] The dates refer to the assignments decided on in the Chapter (Capítulo) meetings, held about every eighteen months.
[6] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1, 186: “I can assure you, your eminence, that [Binangonan] is an aggregate of fugitives, who have fled here because of crimes they have committed in their own pueblos. Some of these crimes were capital, others owing to debt … The Alcalde mayor of Tayabas … always sends a lieutenant [to represent him] in the official visit to collect the taxes and conduct the municipal elections. Usually … the ones elected … then use that authority to carry out extortionate and tyrannical acts, which exhaust and retard the Christianized population in all of the Contracosta….”
[7] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1, 187: “… In the vicinity of this pueblo Binangonan one finds people yet to congregate. The first of these is in the port of Lampon where one finds some Dumagas, people who have their lodging on the sea and do not use the land for a house except at most for a hut made from leaves at the foot of a tree. If they perceive people [approaching], they retire to their boats and flee. This is a docile folk. When they convert to our Holy Faith they thereafter attend scrupulously to the obligations of a Christian. Nonetheless, it is impossible to make them live in pueblos and in houses. All attempts to make them live [in this manner] have been frustrated and without result, no matter what means were used on whatever pressures were made by the missionary priests.”
[8] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1,187: “The second sitio is called Tangohin, is on the Daraetan river and is about three leguas away from the pueblo of Binangonan. In this place along the tributaries of the river live cimarrones, apostates, Aetas, and Balugas. These are so called since they are the offspring of a cimarron Yndio and an Aeta. Here there are congregated about seventy almas, and there has been a hermitage [Hermita] founded here dedicated to San Pedro de Alcántara. When a missionary priest comes here to say Mass and administer the sacraments, they have a place to congregate and pray.
“The third sitio is called Humirei and is about a day’s navigation by sea from that pueblo of Binangonan. Here there has been founded a hermitage dedicated to Nuestra Señora de la Candelaria. In this sitio one finds about nine families, but many cimarrones from other pueblos of this contracosta as well as Aetas and Dumagas [are nearby]. These cannot be made to live in the pueblo nor attend to the obligations of being a Christian … Along the beaches of the sea one can see and inspect many huts of the Dumagas and of the Aetas. These however … somehow can always tell when boats are approaching, and apparently sensing danger they choose [to flee] toward greater security and freedom of conscience without missionary priests or any other person being able to have commerce with them.”
[9] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1,187-188: “ In fact, ‘most of the residents had’ gone to the hills; or died ‘because of … the pestilence [peste] that took hold in the pueblo of Binangonan and then penetrated the interior [ranges] of the mountains in 1718 and 1719. It is for this reason that there are so few converted and congregated people under the care of the zealous missionary priest stationed in the pueblo of Binangonan.’”
[10] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1, 211: “Father Vicente tells the story of how he had heard from ‘some Aetas that they had heard that some remontados and apostates wanted to kill me. I was then making my inspection trip to the pueblo of Casiguran [and was told] that … if I went into the mountains I would be assassinated. With this information in mind, but knowing that except for a few bad people the Franciscans were well recognized for their love-filled and careful work among the [highlanders], I [continued] on to Dicalaya…’ Nothing happened and he arrived safely and there he learned that in the riverbed of the river Garrongot, ‘five days of navigation away, among the other lost Indios there there was a native of the pueblo of Dibimbinan with them. This individual twelve years earlier had absented himself [from Dibimbinan], taking with him a married woman whose husband was still alive. Moved by compassion and pity for their souls, I sought to find ways and means to bring them back. It appeared to me that the easiest and most suitable way to achieve this would be to speak to some of the Indios, particularly the parents and brothers of the man so that they would seek him out and tell him that he had nothing to fear from the priest. I would receive him with love and care and only wanted that he reognize his sin so that he could reform himself. These reasons led the parents of the young man to go out to seek him themselves, and in short order they returned with him along with the woman he had made off with. When I heard they were already in the pueblo, I ordered them brought to me. I received them graciously and with great tenderness, made them reflect on their offence and the heinous nature of their transgression. I told them … that all I requested was that they repent and beg God’s forgiveness and I would then be willing to give them both Confession. The woman agreed to this and since she had forgotten the Doctrina Christiana and the prayers I sent her with an Indio to her parents so that she could learn them again.’”
[11] Translated in part in Spanish Franciscans in the Colonial Philippines, 1578-1898. Catalogs and Analysis for a History of Filipinos in Franciscan Parishes (Hastings, NE: Cornhusker Press, 2003), 5v.; here, v. 1, 212: “This is the general corruption of all of this area, but particularly for those who live in the rivers [and mountains]. The missionaries take clothing and other trifles in order to attract them, and when the missionaries come they are greeted with great shouts. Now we are left as figures of fun without those miserables knowing that they are left with the worst part, that they have lost the most.”