Al principio es bastante complicado coordinar el cambio de acordes, puede ser realmente difícil para muchas personas. Sin embargo el único truco que existe para cambiar de un acorde a otro es realizarlo muchas veces.

Hay que memorizar el cambio interpretando repeticiones sucesivas de dos acordes hasta que su ejecución sea más o menos mecánica. Posteriormente iremos ampliando el numero de acordes que podemos memorizar.

Vamos a utilizar para estos ejercicios  un cifrado absoluto de los acordes, representando  exactamente el acorde independientemente de la tonalidad en la que nos encontremos.