El cohete Vega

El futuro del cohete Vega a estudio

Todavía bajo el hechizo del exitoso primer lanzamiento del pequeño cohete Vega, también denominado el “cohete de la ciencia“, las agencias espaciales de Italia y Alemania se reunieron para reflexionar sobre la posible cooperación en el reemplazo de las partes no europeas del lanzador.

De hecho, para los europeos, una de las prioridades consiste en reemplazar la etapa ucraniana Avum y su motor RD 868. Este módulo superior, que funciona con ergoles almacenables es utilizado para el control de altitud y órbita, la separación de los satélites y la desorbitación. En la actualidad, Italia es el principal contribuyente a su financiación (58%) y se ve con buenos ojos la llegada de Alemania, el gran ausente en este programa. Según Enrico Saggese, presidente de la Agencia Espacial Italiana, Johann-Dietrich Wörner, Presidente del Comité Ejecutivo Centro Aeroespacial Alemán (DLR), cree que “Alemania está dispuesta a participar en el programa Vega“.

Después de haber realizado un primer vuelo con éxito y haber conseguido la firma de los primeros contratos comerciales (Vega lanzará los satélites Sentinel), la mesa de Arianespace, inicialmente, propone dos vuelos al año. © ESA / CNES / Arianespace

Una evolución mucho más probable que un informe sobre el futuro de la política espacial europea en el lanzador, entregado al Primer Ministro de Francia en mayo de 2009 se recomienda trabajar para el período 2020-2025 en un sucesor de la Soyuz ST, la versión utilizada en el lanzador ruso desde la Guayana Francesa.

Vega va a evolucionar

Dicho esto, ya sea en Francia o Italia, no han perdido tiempo para el primer lanzamiento del cohete Vega para trabajar en su desarrollo futuro. Los primeros estudios exploratorios llevados a cabo en el marco del programa Vega Plus dan una idea de lo que podría ser Vega 2. Además de sustituir el Avum, está previsto que la primera etapa sea empujada por un P100 en lugar del actual P80. En el estudio también se menciona la posible sustitución de las etapas segunda y tercera (Z9 y Z23). Podría hacerse una etapa más eficiente sobre la base del Aestus (el motor de la etapa EPS utilizado en varias versiones del Ariane 5, incluidos los que se utiliza para lanzar el ATV) o bien por una etapa criogénica basada en Vinci en desarrollo para el Ariane 5 ME (ex Ariane 5 BCE).

Por otra parte, Vega participa en una bonita carrera comercial que debería traducirse entre dos y cuatro vuelos al año. Este lanzador tiene la vista puesta en el lanzamiento de pequeños satélites, actualmente dominado por los antiguos misiles rusos convertidos en vehículos de lanzamiento. Vega tiene un precio de 32 millones de euros. Un costo más alto que los misiles rusos, pero que se justifica por una mayor capacidad para realizar lanzamientos superiores a una media del 20% en comparación con sus competidores y el know-how en la preparación del vehículo de lanzamiento Arianespace. Como destaca Francesco De Pasquale, director general de ELV SpA, empresa italiana encargada de Vega, “el Centro Espacial de Guayana y sus instalaciones son fortalezas indiscutibles en este mercado tan competitivo“.

Si con Vega Arianespace completa su gama de cohetes, la evolución futura, este cohete podría eliminar al cohete Soyuz en la Guayana Francesa. Dicho esto, la primera prioridad es la europeización de las etapas del cohete que no son europeas. © ESA / S. Corvaja