El desafío de liderar en tiempos de disrupción: transparencia, eficiencia y sostenibilidad


#ReflexiónCGR N.° 16

18 de mayo de 2020

  • La transparencia en la gestión pública es esencial, pues permite un mayor acercamiento de los actores sociales al accionar de la institucionalidad pública.

  • En el marco de la nueva realidad se requiere de decisiones oportunas, innovadoras y basadas en riesgos por parte del Sector Público.

  • Las acciones para enfrentar la sostenibilidad fiscal y financiera del país conllevan considerar el análisis de escenarios económicos sin dejar de lado el epidemiológico, que incorpore una visión de acciones en el mediano y largo plazo.

Relevancia

La coyuntura actual exige a la institucionalidad pública responder ágil y oportunamente, de forma que siga aportando valor ante los nuevos desafíos. En este contexto, la Contraloría General ha generado el presente site “Transparencia en la gestión pública” con el propósito de generar insumos útiles, oportunos y relevantes para la toma de decisiones de los diferentes actores que inciden en la gestión pública y rendición de cuentas. En estos dos meses, las reflexiones han planteado algunos elementos importantes a ser considerados para enfrentar el desafío de liderar en tiempos de disrupción: la necesidad de transparentar las acciones institucionales; la búsqueda de soluciones expeditas y eficientes; y el enfoque en la sostenibilidad fiscal y económica a futuro.

Necesidad de transparentar las acciones institucionales


Tres asuntos esenciales se asocian con la transparencia por parte de los actores públicos en el contexto actual: ¿cuáles elementos es necesario transparentar?, ¿cuál es la mejor manera de transparentar la información? y ¿qué propósito tiene la transparencia de estos temas? En la siguiente figura se atiende a tales interrogantes, en un resumen de los principales aspectos identificados.

Figura N.° 1

Interrogantes a considerar alrededor de la transparencia en el sector público

Fuente: Elaboración CGR con base en las reflexiones emitidas al 14 de mayo, 2020.

Para la Contraloría General es de capital importancia incrementar la transparencia en la gestión pública porque, al ser una herramienta para mejorar la eficiencia y prevenir la corrupción, permite a los actores sociales monitorear el funcionamiento del sector público [1]. Por lo tanto, toda acción que emprenda la institucionalidad pública para mejorar el acceso a la información, rendir cuentas y promover la participación ciudadana, cobra mayor preponderancia en épocas disruptivas para mitigar el riesgo asociado a un nivel de discrecionalidad mayor que pueda darse en estados de emergencia.

Decisiones oportunas, innovadoras y basadas en riesgos


La CGR ha reiterado al sector público costarricense la necesidad de un cambio de paradigma en la gestión pública que involucre nuevas formas de trabajo, con herramientas y/o procesos novedosos, que posibiliten una toma de decisiones ágil, oportuna y eficiente, que garantice la continuidad y adaptación de los servicios públicos que se brinda a la ciudadanía, en el marco de esta nueva realidad.

Lo indicado demanda un cambio estructural en la forma y la velocidad de hacer las cosas, con esquemas de organización y coordinación integrados, un máximo aprovechamiento de los recursos públicos escasos, y que además considere el análisis de riesgos y las tecnologías de información como herramientas esenciales para la adaptación y continuidad del servicio.

Figura N.° 2

Cambio de Paradigma

Fuente: Elaboración CGR con base en las reflexiones emitidas al 14 de mayo, 2020.

Esta nueva forma de operar debe estar presente en cualquier nivel de la estructura de las entidades públicas, así los Órganos de Dirección que desempeñan un papel crítico en el cumplimiento de los fines institucionales deben tomar, implementar y comunicar las decisiones de forma rápida en un contexto volátil, complejo y de alta incertidumbre, que posibilite avanzar durante y después de una crisis. También, el rol de la auditoría interna es clave para el asesoramiento y acompañamiento estratégico que necesita la administración, enfocando sus esfuerzos en las actividades y temas críticos de la Institución.

Sostenibilidad fiscal y financiera de mediano y largo plazo


La sostenibilidad fiscal y financiera del país, viene representando un reto durante los últimos años debido a la acumulación de déficits cerrando para el año 2019 con un déficit fiscal del 6,9% del PIB, para este año 2020 se incorpora la atención de la crisis ocasionada por la pandemia del Covid-19, aspecto que exige el análisis de escenarios económicos sin dejar de lado el epidemiológico, que a su vez conlleva una visión de las acciones por realizar en el mediano y largo plazo.

El país en busca de esa sostenibilidad ha apostado por un instrumento esencial para sanear las finanzas públicas como lo es la regla fiscal que le permite controlar el crecimiento del gasto corriente del Sector Público No Financiero. No obstante, en el contexto que nos encontramos, no es suficiente la aplicación la regla, por lo que la CGR ha indicado que es imprescindible la priorización, reorientación y racionalización de los gastos presupuestados, como una opción para financiar la atención de la emergencia; así como convertir el presupuesto en una herramienta dinámica para la gestión de los recursos, sin obviar los procesos de planificación efectivos que permitan fortalecer la capacidad de respuesta. Asimismo, aproximó el cálculo del espacio fiscal presupuestario y efectivo disponible en el Sector Público, ante la implementación de medidas de distanciamiento físico y teletrabajo, para orientar sobre las áreas donde se pueden presentar ahorros.

En relación con los ingresos del presupuesto nacional y su dependencia de los impuestos, y dada la incertidumbre que genera la crisis en su recaudación, evidencia que los recursos tributarios percibidos son insuficientes para cubrir las necesidades de la emergencia, así como las ordinarias del Estado, por lo que la CGR ha señalado el reto de la Administración Tributaria de modelar los distintos escenarios a los que nos enfrentamos y lograr la transformación digital pendiente que permita continuar y mejorar su operación, para poder financiar la mayor cantidad de gastos necesarios, en el marco de la sostenibilidad fiscal.

También la CGR ha reiterado la pertinencia, sostenibilidad y eficiencia de la inversión social como elementos fundamentales para incidir en la calidad de vida de la ciudadanía. De ahí la necesidad de una revisión y mejora en los programas y servicios de salud, educación y protección social, lo que implica esfuerzos para articular acciones entre las instituciones y realizar ajustes en nuestro cuerpo normativo, con el fin de que se visualice el valor público que exige la ciudadanía.

Figura N.° 3

Elementos de la sostenibilidad

Fuente: Elaboración CGR, mayo 2020.

Conclusión



La coyuntura actual emerge como un desafío sin precedentes para el país, y el compromiso por parte de las autoridades gubernamentales es fundamental para afrontarlo con éxito. Las necesidades del presente demandan inmediatez en la búsqueda de soluciones efectivas, pero sin olvidar la integralidad y sostenibilidad de las medidas a futuro. El ahorro, la priorización de gastos y búsqueda de alternativas de financiamiento, así como acciones innovadoras, bajo un esquema de transparencia de las decisiones adoptadas y el valor público de los resultados, merecen una rendición de cuentas continua. Las decisiones adoptadas hoy deben incorporar necesariamente el principio de eficiencia, una visión de largo de plazo y una gestión de riesgos efectiva, con el fin de asegurar la continuidad en la prestación de los servicios y su viabilidad financiera en el futuro.

Notas al pie:

[1] Memoria Anual 2018. Primera parte: Opiniones y Sugestiones.