La atmósfera truena

el agua moja nuestros campos

los cereales, crecen

las aves vuelan

todo nace y muere

crecer y cambiar

madurar y envejecer

sufrir y soñar…

Grandes interrogantes

que las mentes primitivas

llenan con Zeus tonante

Atenea, Ares o Afrodita.

Son tiempos míticos

de respuestas imaginativas

pero sin espíritu crítico.

Pronto el ocio y las pocas ganas de trabajar

alumbraron a los primeros que se propusieron pensar

A nadie se le escapaba:

Ni Zeus ni Poseidón

ni Hefesto ni Diana

fueron vistos o entrevistos

por ninguna mente sana.

¿Cuál será de todo el origen?

Desde luego no fueron Cronos

ni Afrodita ni Atenea virgen.

Pronto surgieron los monistas.

Afirman el arché, origen de todo lo que existe,

-El agua es -dijo Tales, comienzo de esta lista.

-¡Que no! que fue el aire, condensación y rarefacción

dijo Anaxímenes de Mileto, que tenía mucha vista.

Y no faltó otro que en el fuego el inicio fundó:

Heráclito de Efeso. Pero no tengáis prisa

que también el cambio, a esto añadió.

Porque vio que nada permanecía.

Lo que antes nació

pronto desaparecería.

Pero más extraño fue Pitágoras de Samos.

Dijo que la base de todo los números serían.

Esperad, aún hubo de Mileto otro pensador:

con Anaximandro otra idea nos formamos

ni agua, ni aire, ni fuego, fue algo escapista.

El sugerir el ápeiron parece algo comodón.

Indefinido, inmaterial y abstracto dio como pista.

Pero aquí acabo este grupo no sin hacer mención

a Parménides, que hace trampa con una diosa,

pues le cuenta cómo fue el origen mediante una revelación.

Ahora vendrán los pluralistas

que unen varios elementos

tierra, aire, fuego y agua

fue la aportación de Empédocles de Agrigento.

Anaxágoras introduce un cambio y nos habla de semillas

organizadas por un Nous que penetra el Universo.

Cierra esta nómina de filósofos materialistas

Demócrito, con su átomo indivisible,

dos milenios y dos siglos verificaron lo plausible

intuiciones que verificaron unas mentes cientifistas.

Conclusión

Pasar del mito al Logos era lo importante

la humanidad hasta entonces no se vio en ese trance.

Muchas tesis, ideas y especulaciones a veces delirantes

y todavía nos preguntamos el por qué de este Ser desconcertante.

Poema apócrifo de Tales de Mileto

La sequedad es muerte

un desierto calcinado

blanca caliza al alire

polvo seco en luz sustentado

rasgos secos del natrón

en los cuerpos momificados

arena somera batida por las ruedas

cenizas, rastrojos aplastados

huérfanos de humedad,

¿Dónde fue el agua que antes os dio vida?

Anaximandro y lo indeterminado

Dices que es el agua y yo digo:

ápeiron

Dices que es el aire

no, ápeiron

Dices que es el fuego

es el ápeiron

Dices que es la Tierra

pero es el ápeiron

Muchas veces lo repito

muchas más me aparto

de conocer tu principio

Ápeiron me contestas

quizás ya esté harto,

quizás esté cansado

de buscar el principio

y tras levantar y mover

solo pienso en lo indeterminado

El principio que puede ser

el principio desconocido

nombre no puede tener

llamésmolo ápeiron

y quizás nos podamos entender.

El aire de Anaxímenes

Busco respuestas

no vuestras respuestas

mis respuestas

¿Atlas sujetando el mundo?

¿Cronos controla el tiempo

y Poseidón el mar profundo?

Bellas historias pero ¿qué hay de cierto

Creo que hay algo que sentir.

La respuesta está en el viento.

Él trae las fragancias no Leto

Él calienta o enfría

crea las nubes y el fuego

nos abraza, nos cuida y acaricia.

La Tierra lo respira y a los seres da el aliento.

Poema encontrado grabado en unas piedras encontradas en el mar Mediterráneo, sumergidas en lo que otrora fue una Alejandría soleada. Se lo atribuyo a Heráclito.

“Todo fluye nada permanece”

“No te puedes bañar en el mismo río”

Todo es cambio

el Sol por el horizonte amanece

y el agua por su cauce sombrío

nos arrulla con su murmullo y él mismo parece

pero el Sol y el agua no son los mismos

la luz y las gotas no permanecen.

Como mi yo de ayer hoy no es el mío

ni mi pelo ni mi carne ni piel

ni mis ojos ni mi sueño de niño

solo el ansia de saber es fiel

igual que el fin al que me dirijo.

Parménides y su revelación

-¡Mírame mortal!

Cierra tu boca y no temas

que cuál fue el origen te voy a relatar.

Me has caído en gracia, por eso nada más.

El saber te transmitiré en un poema.

Eres hermoso y listo.

Limpia tus oídos, abre tu entendimiento

y muestra a todos lo que la diosa te ha dicho:

“el ser es, es decir, tiene existencia;

el no ser no es, es decir, que no existe”

Esto en griego su filosofía fundó

así que nada se mueve, es pura apariencia

por eso no hay que buscar el origen

lo que ves es pura opinión

es la vía de la verdad el inicio de la ciencia.

no te confundas mortal con la falsa ilusión

no hallarás nada cierto y vivirás entre creencias.

Anaxágoras nos presenta el nous, gran éxito entre sus seguidores.

Este filósofo de Clazomene

fue un gran pluralista

pensaba que el origen es una papilla

el nous hace que todo gire y se separe

(la órbita de astros así explica)

este intelecto o mente hace que nada pare.

Él es lo único íntegro, todo lo demás: semillas

De ahí salen los cuatro elementos

que forman cuanto el universo expande.

La aportación de Empédocles de Agrigento

Viendo a sus antecesores

que con una cosa se afanaban

decidió ser pluralista

recogiendo a sus antecesores

escogió lo que más le gustaba

de una reducida lista

con las opciones mejores

el fuego, el agua, el aire y la tierra

componen lo inerte y la vida.

Del universo no hay albores

la existencia es eterna

por el amor y la discordia movida

las dos producen uniones y desuniones.

Leucipo y Demócrito, los atomistas.

Ambos nacen en el quinto y mueren en el cuarto

antes de nuestra era, no te equivoques

los dos defienden lo indivisible y luego: el vacío

“Por convención son amargo y lo dulce

por convención lo caliente y lo frío,

por convención es el color,

solo existen átomos y vacío”

Sócrates

Aún llegará criticó Antifón:

siempre la misma túnica

desarrapado como un pobretón

Feo como un lagarto

tu mente brillaba como el Sol

Nunca escribiste nada

como Buda o Jesús

¿fue eso un error?

Ahora nos fiamos de tu discípulo

Platón.

Tu madre la matrona

muchos nacimientos asistió

atenienses o griegos de Cretona

a nacer sus ideas ninguno resistió

Con tu ayuda alumbrabas la verdad

“Una vida sin examen no tiene explicación”

“Solo sé que no sé nada” solías afirmar.

Porfiaste con Protágoras, Gorgias o Eutifón

sofistas enredados por tan hábil orador

siempre preguntas y preguntas

nunca directa su solución

discusiones tremebundas

para que solitos saliesen de su error.

¡cuántas envidias!

¡cuánta cerrazón!

Un buen día denunciado

ante los jueces compareció

dudaba de los dioses

los jóvenes lo habían escuchado

corrompía su moral con sus razones.

En la verdad confiado

muchos argumentos les dio

Pero el afán rastrero y taimado

su condena a muerte falló.

Amigos su huida procuraron

pero mejor sufrir la injusticia

que ser su causador.

Una bebida con cicuta prepararon

la coherencia de una vida entregó

Al maestro sus amigos acompañaron

allí a su lado estaba Platón.

Él nos contaría en su apología

su ejemplo, su sabiduría y su valor.

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Diálogos apócrifos

Diálogo 1

Tú que eres tan sabio,

no como yo que no sé nada,

-dijo Sócrates a un sofista atrabiliario

-¿Cuál será la razón de articular tanta palabra?

Una vida con silencio es algo extraordinario

pero ¿tanto callar qué proclama?

-Si tanto amas el silencio no articules el vocabulario,

disfruta del aire en las ramas su sonido o el croar de las ranas.

¡Ay! cuánta razón tienes ateniense

pero una vida con verdad tiene un precio

a buscarla me dedico de noche y de día

y por ello tengo que hablar con sabios y con necios.

Diálogo 2

Un sofista el olivar cruza

sin a Sócrates percibir

sonríe este y su encuentro calcula

¡Buenos días! Gorgias!. Desde lejos te vi venir

¡Buenos días Sócrates! (sus nervios disimula).

Hoy el Sol se hará sentir

Sí, un día de verano sin duda

Adiós Gorgias

Adiós Sócrates

Parece que el sofista escapa sin discutir

El sabio pensativo se aleja

¿qué le pasa? ¿estará buscando otra presa?

Platón

Aristocles en Atenas nació, Platón fue su sobrenombre

hace ya dos mil cuatrocientos cuarenta y siete años

Tras las Guerras Médicas y Guerra del Peloponeso,

siglo de Pericles, esplendor cultural y un gran desengaño:

matando a tu maestro gran injusticia hicieron.

Tu inclinación a la política sufrió por eso gran daño.

Saliste de Atenas y los pitagóricos te acogieron.

Un gobierno de filósofos fue tu gran ilusión

en Siracusa lo intentaste y como esclavo te vendieron

volviste a intentarlo hasta la muerte de tu amigo Dión.

Escribiste la República pero tus ilusiones se disolvieron.

Solo la filosofía te quedaba y fundaste la Academia

escribir, discutir e ir formando discípulos

luchar contra los sofistas para salvar la convivencia

como Sócrates, se preocupaba por esa gente sin escrúpulos.

El sí escribió y mucho

el pensamiento de su maestro recogió

y su vida ejemplar en diálogos expuso

mas su pensamiento evolucionó

y la justicia como objetivo principal repuso.

Solo decir que Whitehead una frase nos regaló:

“La filosofía occidental son notas, comentarios incluso,

a pie de página de la Filosofía de Platón”.

Minutos después (sin Sócrates)

Ayer el mundo era otro

es cierto que la chicharra canta hoy también

el Sol calienta el aire del mismo modo

y los olivos siguen esperando

Sin viento el paisaje sordo

delata el vacío de tu presencia.

hoy tu alma nos dejó solos

Atenas nos parece menos bella

la polis es un turbio fondo

caliente por la rabia de la injusticia

frío como la muerte del lodo

Espero que fuera de esta caverna

puedas debatir con Febo Apolo

y con Sísifo y con Prometeo

seguro que allí no te sentirás solo

Nos queda hacer, a los que aquí quedamos,

un mundo más justo, el mundo del logos.

Aristóteles

En la península calcídica en la ciudad de Estagira

nacería el sabio por excelencia

y aunque todo lo que escribió se perdería

durante toda la edad media sería su referencia

gracias a los apuntes que sus alumnos tomarían.

Fue llamado a la corte de Macedonia

como preceptor de Alejandro Magno

allí al adolescente le enseñó su filosofía.

Conquistó toda Grecia, Egipto y el imperio Parto.

Muerto su maestro Platón su camino seguiría

y fundó el Liceo competencia de la Academia

No le gustaba la tendencia pitagórica de esta

Su enseñanza fue llamada Peripatética

por enseñar mientras paseaban

física, lógica, y también la ética

y otra no menos importante: la poética.

Cuando murió Alejandro con buen ojo no veían

que el maestro del Magno, que a Atenas sometió,

siguiese tan feliz enseñando su filosofía

le acusaron de impiedad

la muerte no eludiría

sin huir de la ciudad

Se exilió el estagirita en la isla de Eubea

De donde su madre provenía

mas la muerte un año más tarde le espera.

Cínicos

Los cínicos ven la felicidad

como un retorno a lo natural

todo lo artificial, lo creado por el hombre,

abandonan decididos por causar infelicidad.

Viven como vagabundos cosmopolitas

Antístenes y Diógenes al que “el Perro” le decían

por vivir como los cánidos, en la calle,

comiendo lo que por el campo recogía.

Fiel a sus ideas hasta la muerte

cumplieron su voluntad de ser alimento de otros animales

y no ser enterrado ni tener un funeral decente.

Influirían a los escépticos con su vida ejemplarizante.

Estóicos

Con Zenón de Citio personificamos la filosofía estoica

disminuye sus necesidades y también sus pasiones

con la apatía y la ataraxia rechaza la vida espasmódica

razón y materia son Dios (siguiendo a Heráclito en sus intuiciones)

Todo fluye de forma cíclica y la confluencia en el destino la tónica.

¡Ah la imperturbabilidad! anhelo de la la ataraxia estoica.

Zenon de Citio (332-262 BP)

yo pienso

mi pensamiento más fuerte que tu espada

mi determinación más poderosa que el dolor

y más potente que las lágrimas derramadas

Todo se pierde y todo se perderá

pero más turbia y enfangada

que la arena del tiempo desmemoriada

en toda la vida habrá.

Epicureismo

Filosofía que suena simpática al oído y palabra bien conocida

pero habéis de saber que como muchas cosas, malentendida.

Es verdad que el placer busca en gran medida

pero es un placer que no daña y que al hombre no esclaviza

Es un placer puro, sin dolor ni desagrado, permanece y es estable

y con su concurso el ser humano es libre e imperturbable

con esto se eliminan los placeres sensuales

y dan paso a aquellos que son más espirituales

La amistad y su práctica evitan que el epicúreo se altere

regido por la templanza tiene en el buen trato los placeres.

Epicuro

Ayer vino y se llevo a mi perro

mañana aunque vuelva no estaré allí

hoy vendrá y con ella me iré

no se ha visto dos veces morir

Una vez ido nada sufriré

no pienso en ella si no está

siendo, hoy no sufro el no ser

y cuando te llegue, al punto te irás

para nunca más pensar.