LOS JARDINES COLGANTES DE BABILONIA

Los Jardines Colgantes de Babilonia eran los afamados jardines que adornaban la capital del Imperio neobabilónico, construido por el más grande de sus reyes, Nabucodonosor II (r. 605-562 AEC). Una de las siete Maravillas del mundo antiguo, los jardines son la única maravilla cuya existencia se sigue disputando entre los historiadores. Algunos expertos afirman que los jardines estaban realmente en Nínive, la capital del imperio asirio; otros respaldan a los escritores de la antigüedad y esperan que la arqueología arroje pruebas positivas, y también hay quienes creen que no eran sino producto de la imaginación de los antiguos. La arqueología en la propia Babilonia y los antiguos textos babilónicos guardan silencio sobre el asunto, pero los escritores de la antigüedad describen los jardines como si estuvieran en la capital de Nabucodonosor y como si todavía existieran en la época helenística. La naturaleza exótica de los jardines en comparación con los elementos griegos más familiares de la lista y el misterio en torno a su ubicación y desaparición han hecho de los jardines colgantes de Babilonia la más cautivadora de las siete Maravillas.