DESCRIPCIÓN DEL COLOSO DE RODAS

Representación de Helios

El Coloso era una representación del dios del Sol de la mitología griega, Helios. La figura estaba compuesta con placas de bronce colocadas sobre un armazón de hierro.

Los autores de la época relataron que el interior de la estatua estaba llena de ladrillos en su parte inferior, mientras que de la cintura hacía arriba estaba totalmente hueca. Ese espacio se podía recorrer con una escalera que llevaba hasta la cabeza, donde se encendía el fuego necesario para que cumpliera con la función de faro.

Aunque hay algunas divergencias en las cifras, la mayoría de los historiadores que hablaron sobre la estatua señalan que su altura era de 32 metros y su peso de 70 toneladas.

Filón de Bizancio aseguró que la base era de mármol blanco. Este historiador afirmó que para construir la estatua se gastaron quinientos talentos de bronce y trescientos de hierro.

POSICIÓN

A las dudas sobre la ubicación del Coloso se une el desconocimiento sobre su aspecto. Aunque existen muchas imágenes que lo representan en el puerto con las piernas abiertas, todas fueron realizadas posteriormente, cuando muchos artistas medievales del siglo XVI realizaron obras que mostraban la estatua de manera idealizada.

Más adelante, en la Edad Moderna, la imagen del Coloso en el puerto continuó siendo la habitual entre pintores o grabadores.

En realidad, la posición que adoptaba la figura es totalmente desconocida. No se sabe si tenía algún elemento en sus manos o si llevaba en la cabeza la típica corona solar propia del dios Helios. También se desconoce si fue representado desnudo o vestido.