«Hola desconocido, seamos breves: a nosotros no nos gusta ponerle las cosas fáciles a nadie. De hecho a la gente que escucha lo que NO debe escuchar se lo ponemos imposible. Tú eres un buen ejemplo, queremos que vagues por el desierto; pero tampoco nos gustan las cosas aburridas, así que te irás encontrando con "obstáculos". Total, ¿qué más te da?, si vas a morir igualmente. En cuanto a tu cabra, no ha muerto, está aquí con nosotros. ¿Que dónde? Pues en todos lados, que no te asuste nuestra omnipresencia, también te controlamos en todo momento. Bueno, te informamos de que en tu travesía te irás encontrando con pruebas de ingenio, y a veces… con pruebas no tan… mentales, digamos. Te deseo una muerte lenta y dolorosa que refleje mi furia, atentamente (nunca mejor dicho)»