Plan de contingencia.

Entendemos como contingencias la no prevención de posibles accidentes y eventuales contratiempos que son emergentes en el desarrollo de todo negocio.

Se plantea como respuesta la contratación de pólizas que nos ayuden a mitigar los daños y perjuicios en casos de incendio, terremoto o inundación en la nave del cliente.

La incorporación de un sistema de tráiler que permita la locación temporal del equipamiento en las inmediaciones del cliente, y de esta manera minimizará los efectos provocados por terceros. Puesto que, con el paso del tiempo y, al contar con más de un tráiler equipado, podremos continuar trabajando normalmente.

Aun así, lo que escapa de nuestras manos son temáticas ligadas a legislación y restricciones en la industria de tapones. Para ello procuramos la obtención de certificados propios requeridos en la industria de insumos secos para vitivinicultura. Y así superar las eventuales barreras normativas.

Logística y distribución

Siguen en manos del Cliente ‘B’, y no representan un costo para nosotros. La cadena de valor nos permite intervenir y entregar en el mismo día.

Regulaciones de esta industria.

Los entes reguladores del sector son el INTI, INPI, INTA y el INV.

Y el responsable de certificar ante cada uno de ellos, es el Cliente ‘B’.