Por dónde empezar

Consideraciones iniciales para la enseñanza

"La situación ideal es contar con una planificación detallada y todos los materiales necesarios listos antes de comenzar el dictado de la materia. Todo lo que se pueda anticipar será tiempo ganado para dedicar a mejorar la calidad de la cursada. "

"Un aspecto central a la hora de planificar es la reflexión en torno a nuestras propias prácticas. Esto puede ser muy útil para aprender y adaptarnos a los nuevos contextos que aparezcan. Por eso, te proponemos pensar qué estrategias de tus cursos pasados vale la pena repetir y cuáles no funcionaron tan bien. De tal manera, se podrá repensar el curso e innovar, implementando nuevas estrategias para mejorarlo."

Guía para la Continuidad Académica | CIP 2021

Paso a paso para planificar la enseñanza

  1. Organización del equipo docente

Antes de actuar, es fundamental parar y tomarse un tiempo para organizarse al interior del equipo docente. Les recomendamos:

  • Conversar al interior de cada equipo docente. Es importante poder alinear expectativas y objetivos para la enseñanza. Al mismo tiempo que permite conocer los recursos y conocimientos con los que cuenta el grupo. Reconocer si alguno puede tener más idea y experiencia en el uso de las herramientas digitales y asistir al equipo desde adentro para la incorporación de la tecnología como aliada de la enseñanza . También recomendamos explorar Nuestras Prácticas UdeSA.

  • Pensar cómo será la articulación y distribución de tareas entre magistrales y tutoriales. Una división clara de tareas y responsabilidades puede ayudar a evitar inconvenientes en el desarrollo del curso.

  • Establecer canales de comunicación más fluidos. Es de suma importancia mantener una buena comunicación al interior del equipo especialmente para evitar el solapamiento de comunicados con sus estudiantes.


2. Determinar y comunicar los objetivos del curso

Es muy importante determinar cuáles son los propósitos y objetivos del curso. Esto influirá en las decisiones que tomes acerca de qué recursos, estrategias y tecnologías usar y cómo estructurar el curso. Para esto puede ser útil que te pongas en el lugar de tus alumnos ¿a quienes está dirigido el curso? ¿Qué condiciones de acceso y necesidades tienen?

Cuando pensamos en la totalidad del curso es necesario determinar prioridades y considerar qué parte de nuestros propósitos para la materia son realizables según las condiciones de enseñanza que se presenten. ¿Qué de todos los contenidos posible se priorizará? ¿Qué del curso anterior puedo mantener? ¿Hay que invertir el orden de algún módulo/actividad? ¿Qué se puede agregar?

Por último, es vital poder comunicar a los y las estudiantes los objetivos del curso de manera clara. De esta manera, no solo se moderan las expectativas al interior del grupo docente (como considera el punto 1) si no que nuestros estudiantes sabrán que se espera de ellos/as.

3. Definir la organización de tus clases

  • Consultar el calendario para adelantarse a los feriados o eventos que interrumpen las clases. Tener en claro la cantidad de clases y semanas con las que se cuentan, es fundamental para planificar y organizar tus clases.

  • Revisar tu caja de herramientas y recursos junto con el ecosistema de plataformas de aprendizaje que la universidad pone a disposición.

  • Planificar y definir en qué medida se utilizarán instancias asincrónicas y sincrónicas (presenciales o remotas) a lo largo del curso y cuáles serán. Un curso puede estar estructurado de diversas maneras, combinando momentos sincrónicos con asincrónicos. Y tener esto bien en claro permite planificar en mayor detalle cada momento con antelación.

  • Plantear actividades o formatos de clase que favorezcan la interacción con los estudiantes, manteniéndolos en un lugar activo tanto en las sesiones sincrónicas como en las actividades asincrónicas. Compartimos una guía de ideas para promover la interacción en las clases y otra para crear, modelar y evaluar foros de debate en línea. El uso de los foros puede ser una buena estrategia para mantener la interacción con los estudiantes por medio del Campus Virtual.

  • Crear una lista de aquello que necesitás producir y estima cuánto tiempo te llevará. Tener en cuenta estos detalles para ir creando los materiales con antelación.

  • Crear y organizar los materiales asincrónicos con antelación. Las herramientas tecnológicas permiten simplificar procesos en la elaboración y distribución de los contenidos de las clases y en el uso del campus virtual y en algunos casos en la organización de la comunicación con tus estudiantes. Un ejemplo puede ser la creación de videos (micro-clases) que los estudiantes deberán visualizar antes de forma asincrónica antes del encuentro sincrónico. Recomendamos explorar la herramienta Panopto para la creación y el alojamiento de los videos/audios. Esto se puede prever en un momento previo al dictado del curso. Aunque requiera más trabajo de planificación en una instancia preactiva, permitirá contar con más tiempo para desarrollar un vínculo personalizado con los estudiantes y generar momentos de interacción, debate y resolución de dudas en los momentos sincrónicos

4. Planificar la forma en la que se va a evaluar

Es fundamental que no solo se planifiquen los instrumentos de evaluación con anticipación, sino que también sean explicitados para los estudiantes. Idealmente, los estudiantes podrían tener al comienzo del curso, la información acerca de cómo serán evaluados y en qué consistirá la aprobación del curso (criterios, requisitos, etc.).

Además de las instancias formales de evaluación, muchas veces resulta útil complementar con otras instancias de evaluación informales que permitan la obtención de información acerca del aprendizaje de los estudiantes. Por eso es importante promover instancias que te permitan recolectar y observar los avances en el desempeño de los y las estudiantes.

Por ultimo, invitamos a que puedan pensar instancias en las que los y las estudiantes compartan su experiencia en al cursada. De esta forma, podrás identificar cuáles de tus propuestas de trabajo están siendo útiles e interesantes para su aprendizaje y cuáles no, o incluso recibir sugerencias de parte de tus estudiantes para futuras clases.

5. Ordenar y organizar el Campus Virtual

La situación que nos tocó vivir en los últimos años puso en evidencia la importancia y las posibilidades que nos da la virtualidad para seguir en contacto con nuestros estudiantes y garantizar la educación. Así tomo aún más relevancia contar con un aula virtual ordenada y dispuesta de tal manera que pueda favorecer el aprendizaje de los estudiantes.

Un curso no será llamativo e interesante para los alumnos si se presentan largos párrafos con mucho texto. Para alcanzar los objetivos del curso y promover un aprendizaje profundo, resulta conveniente encontrar la forma de transmitir la información de manera interactiva y atractiva.

Algunas recomendaciones para ordenar el aula virtual

6. Definir pautas de trabajo

Es importante consensuar con los estudiantes qué se espera de su modo de accionar en las actividades y clases. Podés compartir con ellos tus expectativas, inquietudes y emociones, como forma de acercarte a los estudiantes.

En los encuentros podes compartir la hoja de ruta o cronograma de la clase con los objetivos. De esta manera, establecer las formas de trabajo desde el inicio y generar un espacio donde tantos estudiantes como docente conocen las reglas de juego.

Además de mantener un curso ordenado y orientado al aprendizaje de los estudiantes, es importante tomarse un tiempo al comienzo del curso para indicarle a los estudiantes qué esperar de la materia; qué cosas encontrarán en el Campus Virtual, con qué frecuencia conviene ingresar, cómo ayudarán los materiales a disposición en el campus y cuáles son las actividades/materiales obligatorios y optativos/complementarios.

Cuanto más explícitas se hacen las expectativas, menos margen de error y malentendidos hay.

Estrategias y recomendaciones para el primer día (virtual)

7. Definir canales y pautas de comunicación

En un escenario caracterizado por la saturación y la sobre información resulta sumamente importante definir canales precisos y establecer pautas de comunicación claras con los estudiantes. En otras palabras, toda orientación es clave, por lo que definir qué medio/s o canales se utilizarán para resolver las distintas cuestiones y con qué frecuencia podría ser de mucha utilidad.

Más orientaciones para la comunicación con los estudiantes