Mente consciente y mente subconsciente

Los procesos mentales se pueden dividir en conscientes e inconscientes (subconscientes). Haciendo la comparación con una casa, lo consciente es todo aquello que aceptamos mostrar a los demás, como los muebles y la decoración; es lo que podemos razonar y juzgar. Lo inconsciente es lo que escondemos en el cuarto de rebujo, y que muchas veces olvidamos que allí está, pero que puede llegar a causar enfermedades por su deterioro o descomposición. En el inconsciente se guardan miedos, tristezas, complejos y traumas.

Se llama vigilia a la acción de estar despierto. De allí se derivan las palabras vigilante y vigía. Se denomina sueño al acto de dormir. En el común de los casos, en el estado hipnótico el sujeto está como en un sueño caracterizado por una gran sugestionabilidad, en el que puede aceptar como reales las sugestiones que le sugiere el hipnotizador. Esto sucede porque en su actividad mental consciente e inconsciente se produce una disociación (separación o desconexión) que hace que disminuya notablemente la capacidad de raciocinio.Así como en el sueño natural se puede hablar de ligero, superficial o profundo, en el sueño inducido hipnóticamente también se presentan diferentes niveles o estados de trance. Ello sucede progresivamente, pasando de un trance ligero o superficial, en el que el sujeto relaja la musculatura de su cuerpo, a otro estado en el que puede llegar a una rigidez total de su cuerpo, al punto que lo podemos colocar entre dos sillas como si éste fuese una tabla. Otro estado profundo, es el llamado sonambúlico, en el que el individuo es capaz de abrir los ojos sin salir del sueño hipnótico, y acepta las sugestiones que le sugiera el hipnotizador. Poderes de la mente. En estado hipnótico es relativamente fácil producir fenómenos que se salen de lo que pudiéramos llamar normal, tal como telepatía, es decir, captar lo que está pensando una persona concreta, independientemente de que se encuentre cerca o a miles de kilómetros. También es fácil que el hipnotizado establezca el estado de salud o enfermedad de su propio organismo o el de otra persona, cual si tuviese el don de una visión interior. Y muy inexplicables son también, desde el punto de vista de la psicología tradicional, los casos de memoria extra cerebral, en los que el hipnotizado puede recordar supuestas vidas pasadas, e incluso hablar en idiomas que se supone no conoce; a este fenómeno se le denomina xenoglosia. ¿Por qué sucede esto? Probablemente porque en estado de hipnosis nuestra mente actúa bajo unos parámetros diferentes de los que comúnmente entendemos como espacio / tiempo.

El cambio de rol con otra persona ausente (pensar, responder y actuar como el otro) es sorprendente en hipnosis. Hemos recibido testimonios de algunos casos en los que se hizo terapia de perdón por este medio, y como resultado del supuesto diálogo entre el paciente y la persona ausente, hubo modificación positiva de conductas en los sujetos relacionados.