El 25 de noviembre se celebra el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, una de las violencias más extendidas en el mundo y con la que hay que terminar definitivamente.
El 25 de noviembre se celebra el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, una de las violencias más extendidas en el mundo y con la que hay que terminar definitivamente.
Nicole Kidman, embajadora de buena voluntad de ONU Mujeres, sensibiliza sobre la necesidad de poner fin a la violencia contra las mujeres.
Cada 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional contra la Violencia de Género, un movimiento iniciado en 1981 en Latinoamérica en honor a Minerva, Patria y María Teresa Mirabal, tres hermanas dominicanas que fueron asesinadas el 25 de noviembre de 1960 por orden del dictador Rafael Leónidas Trujillo, del que eran opositoras.
Los asesinatos de estas hermanas se convirtieron en un símbolo de la lucha contra la violencia de género. En 1981 se celebró en Bogotá el Primer Encuentro Feminista de Latinoamérica y el Caribe, donde se decidió asignar el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en memoria de las tres hermanas.
Dos años antes, en 1979, Naciones Unidas había aprobado la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer. Sin embargo, lejos de ser erradicada, la violencia contra mujeres y niñas continuó, convirtiéndose en un grave problema a nivel mundial, por lo que era necesario contar con una normativa concreta en este aspecto.
Por este motivo, la ONU también emitió en 1993 una resolución que incluía la emblemática «Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer«, a la que definió como “todo acto de violencia basado en el género que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psicológico, incluidas las amenazas, la coerción o la prohibición arbitraria de la libertad, ya sea que ocurra en la vida pública o en la vida privada”. De esta manera, sentaba las bases para un futuro libre de violencia de género ya que, hasta entonces, la mayoría de los gobiernos consideraba a la violencia contra las mujeres como un asunto privado y no como un problema generalizado en la sociedad que amenaza gravemente los derechos humanos, y que requiere la intervención de los Estados en materia de prevención, control, detección y sanción de toda forma de violencia cometida por razones de género.
El 17 de diciembre de 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer en honor a las hermanas Mirabal, e invitó a gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones no gubernamentales a organizar actividades dirigidas a sensibilizar al público respecto a este problema problema en este día como una celebración internacional.
La violencia contra las mujeres, cuyo problema es estructural, tiene su origen en la falta de equidad en las relaciones entre hombres y mujeres en diferentes ámbitos y persiste tanto en el ámbito público como en el privado.
Entre las claves para luchar contra este tipo de violencia avanzar en la prevención, está la educación y una legislación adecuada que evite la impunidad.
La violencia contra las mujeres y niñas se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye básicamente los siguientes supuestos:
Violencia por un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, feminicidio)
Violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético)
Trata de seres humanos (esclavitud, explotación sexual).
Mutilación genital.
Matrimonio infantil.