Primer día

A las 9 de la mañana del 6 de septiembre, todo el alumnado del colegio estaba esperando en la puerta de entrada al centro con los nervios del primer día de clase, magnificados en los grupos que cambiaban de profesorado (como era nuestro caso).

El profesorado tutor de 4.º aparecimos con un altavoz autoamplificado con ruedas y, ante la sorpresa de alumnado y familiares, llamamos a los chicos y chicas de nuestras clases, preguntándoles si querían entrar al aula o preferían irse fuera, al campo, por lo que nos fuimos a una explanada cercana, ante la atónita mirada del resto.

Hicimos un círculo en el suelo y nos presentamos: tarea fácil pues Idoia, que era su primer día de trabajo, ya había estado con el grupo durante las prácticas de Magisterio un par de años atrás y a Javier le conocían de sobra, tras 8 años de director del centro. Explicamos las líneas de trabajo para el curso, pero, sobre todo, que lo importante está afuera, nuestro entorno, el mundo, y por eso estábamos ahí aunque luego iríamos al aula como lugar que se ha establecido para aprender.