La Guía de Gante. 17. EXTRA. Gante de noche
LA GUÍA DE GANTE. 17
EXTRA. Gante de noche
0. La Guía de Gante 1. ACTO I Se levanta el telón y aparece una ciudad medieval en todo su esplendor 2. Graslei y Korenlei. Historias de un mundo que nace 3. El mercado del grano... y el propio San Nicolás 4. ACTO II El orgullo en los triunfos... y en las derrotas 5. El Belfort. Libertades, campanas y dragones de fuego 6. Orgullo y pasión. La Lonja de los Paños, el Ayuntamiento... y Carlos V 7. ACTO III Paz interior... y una misteriosa atracción 8. La Catedral que nunca pensó en serlo 9. Atracción fatal: La Adoración del Cordero Místico 10. ACTO IV Las pequeñas (y grandes) cosas de la vida 11. La carne, los Viernes y Margarita la Rabiosa 12. Los obreros, el pescado y el poste de las ejecuciones 13. ACTO V Un final que bien puede ser un principio 14. Un castillo que vino de las Cruzadas 15. Felipe de Alsacia, el rey Arturo y la búsqueda del Santo Grial 16. EPÍLOGO El espectáculo ha finalizado... ¿...o no? 17. EXTRA. Gante de noche 18. EXTRA. OJO a los 10 días de Gante
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Gante es otra ciudad de noche. Como es habitual en el norte de Europa, la gente desaparece de las calles y el silencio se apodera de todo.
Aprovecha y vive la ciudad, porque es como si fuera sólo para ti.
En verano los días parecen eternos y parece que nunca va a llegar a anochecer. Pero en invierno a las cinco de la tarde ya es de noche y en un abrir y cerrar de ojos la vida desaparece de la ciudad. A veces a las siete de la tarde parecen las cuatro de la madrugada. Al principio resulta una experiencia extraña... hasta que descubres la noche.
Tal vez te ocurra lo mismo que en Brujas. Aquí la noche es tal como era antes, sin ruidos, con ecos... pero con luz, con una iluminación que hace que la ciudad se vuelva mágica.
Ahora aquellos mismos escenarios que recorriste durante el día te ofrecen una cara asombrosa. Vas a descubrir detalles que no viste de día. Pero además, te mostrarán la otra parte de su alma.
De repente es como si todas esas historias que los hacen vivir hubieran desaparecido... y entonces es cuando se sienten las ausencias. Porque si Gante de día es el reino de las historias, de noche es el reino de las ausencias.
Y, despojada de las historias que la hacen vivir, de noche la ciudad se muestra desnuda, casi vulnerable. Y entonces es cuando se vuelve mágica.
Aprende a pasear a la luz de las farolas y siente la paz de la noche... aunque aún sea media tarde...