Silvina Ocampo
Las invitadas
«Lo cotidiano desenmascarado como manifestación de lo maravilloso; la tersura de lo habitual como apertura hacia la exaltación de lo absoluto; el humorismo como vehículo del horror. Tales son las operaciones, mágicas y sagaces, mediante las cuales Silvina Ocampo nos lleva a los órdenes autónomos que componen su mundo, en cuyo hermoso, terrible esplendor reconocemos la opacidad de nuestros días.»
Enrique Pezzoni
Textos
[ Tales eran sus rostros ]
[ La hija del toro ]
[ Éxodo ]
[ Carta bajo la cama ]
[ La revelación ]
[ Amelia Cicuta ]
[ El almacén negro ]
[ La escalera ]
[ La boda ]
[ El progreso de la ciencia ]
[ Visiones ]
[ El lecho ]
[ Anillo de humo ]
[ Fuera de las jaulas ]
[ Isis ]
[ La venganza ]
[ El novio de Sibila ]
[ El Moro ]
[ El siniestro del Ecuador ]
[ El médico encantador ]
[ El incesto ]
[ La cara en la palma ]
[ Los amantes ]
[ Las termas de Tirte ]
[ La vida clandestina ]
[ La peluca ]
[ La expiación ]
[ El fantasma ]
[ La gallina de membrillo ]
[ Celestina ]
[ Icera ]
[ El crimen perfecto ]
[ El lazo ]
[ Amor ]
[ El pecado mortal ]
[ Rhadamanthos ]
[ El hórreo ]
[ El árbol grabado ]
[ Carta de despedida ]
[ La pluma mágica ]
[ El diario de Porfiria Bernal ]
[ Las invitadas ]
[ La piedra ]
[ Los mastines del templo de Adrano ]
Silvina Ocampo Las invitadas [1961]