La esquizofrenia es un trastorno mental que provoca delirios, alucinaciones, ideas delirantes, razonamiento desorganizado que afectan el funcionamiento diario y la percepción de la realidad. Genera un serio deterioro cognitivo que dificulta la capacidad de atención, el pensamiento abstracto y la resolución de problemas. Debido a que la esquizofrenia es consecuencia de daño cerebral, se la asocia al deterioro de tres circuitos neuronales los cuales se relacionan con tres síndromes: síndrome prefrontal dorsolateral el cual se relaciona con déficits cognitivos, síndrome orbitofrontal relacionado con alteraciones en la personalidad y síndrome cingulado anterior relacionado con la inhibición.
Louis William Wain (1860-1939) nacido en Londres, Inglaterra fue un artista muy reconocido. Se caracterizó por sus ilustraciones y más que nada por su obsesión con dibujar gatos. Wain fue muy importante para el estudio de cómo las enfermedades mentales alteran la percepción de las personas ya que alrededor de 1923 luego de un episodio de depresión mayor y comportamientos erráticos fue ingresado en un hospital y diagnosticado con esquizofrenia. Luego de su diagnóstico Wain continuó con sus ilustraciones, y a través de ellas se pudo observar y analizar cómo su deterioro cognitivo y neuronal (causa de la esquizofrenia) se plasmó en sus obras.
Sus cuadros post-diagnóstico muestran un claro patrón de un arte más figurativo donde los gatos tomaron un aspecto más abstracto, de combinaciones de líneas y colores, alejado mucho del realismo que los caracterizaba en los comienzos del artista. A su vez en sus últimas ilustraciones aparecen formas caleidoscópicas, motivos fractales y simétricos.
William Kurelek (1927-1977) fue un artista y escritor canadiense hijo de inmigrantes Ucranianos. A pesar de la desaprobación de sus padres, Kurelek desarrolló un profundo interés por el arte desde su niñez. Esta creciente pasión lo llevó a perseguir una carrera artística estudiando primero en una escuela en Ontario y luego en México hasta que en 1952 William abordó un barco hacia Londres. La razón de este repentino viaje fue la búsqueda de tratamiento psiquiátrico debido al agravamiento de los síntomas que padecía desde pequeño, tales como ansiedad social, depresión y despersonalización. Una vez llegado al London’s Maudsley Hospital, a sus 25 años, Kurelek fue diagnosticado con esquizofrenia y comenzó su tratamiento donde pintó una de sus obras más reconocidas llamada " El laberinto".
En esta obra se puede observar la cabeza recostada del autor, dentro de la cual se pueden ver representados como un laberinto, sus problemas psíquicos, pensamientos y escenas de su vida. El personaje central de "El laberinto" es la rata, sobre la cual Kurelek habló en una entrevista diciendo lo siguiente: "[…]. La rata blanca acurrucada en la cavidad central representa mi Espíritu (supongo). Está acurrucada por la frustración de haber rastreado el dédalo de esos pensamientos miserables sin esperanza de escapar de ellos. (Ha arañado las imágenes de cada cavidad: son incomestibles)". (1).
La complejidad de la mente, 2013, Old Kaos, https://archivo.kaosenlared.net/la-complejidad-de-la-mente/.
El Laberinto