A la literatura por el cine
En muchas ocasiones, nuestras primeras noticias acerca de los clásicos de la literatura nos llegan a través de otros textos -una serie de televisión, una novela juvenil, una película-. En las últimas décadas no han sido pocos los cineastas que han contribuido a universalizar algunas obras literarias, en ocasiones casi desconocidas para el gran público, a partir de su adaptación cinematrográfica. Os proponemos hacer un recorrido por la literatura occidental de los siglos XVIII-XX a partir del visionado de seis películas. Podéis hacer el recorrido "del tirón", o hacerlo en momentos diferentes del curso.
En primer lugar, Las amistades peligrosas, película dirigida en 1998 por Stephen Frears, y basada en una novela epistolar del siglo XVIII. Juegos de seducción, intrigas y traiciones urden una trama tan cautivadora como desalmada.
En segundo lugar, habréis de escoger entre las respectivas adaptaciones de dos clasicazos de la primera mitad del siglo XIX, escritos ambos por mujeres, e inglesas las dos: Orgullo y prejuicio, de Jane Austen (1813) y Frankenstein o el moderno Prometeo (1818), de Mary Shelley. Temas como la libertad de las mujeres a la hora de tomar las riendas de su vida o las fronteras -los abismos- de la ciencia dan pie a hondas reflexiones que aún hoy están lejos de haberse cerrado.
En tercer lugar, Germinal, película de 1993 dirigida por Claude Berri y protagonizada por Gerard Depardieu. Se trata de la adaptación de la novela homónima de Emile Zola (1885), uno de los máximos exponentes de Realismo y Naturalismo francés. La literatura es en la segunda mitad del siglo XIX una forma también de crítica social y política: a partir de la descripción pormenorizada de la vida cotidiana de los grupos sociales más desfavorecidos el artista denuncia el abandono de que son objeto y la responsabilidad no solo de la clase política sino también de las clases dirigentes en esta explotación y deshumanización.
Y para terminar, dos magníficas adaptaciones de dos excelentes novelas del siglo XX: Matar un ruiseñor de Harper Lee (1960), dirigida en su versión cinematográfica por Robert Mulligan y protagonizada por Gregory Peck; y El lector, novela escrita por el alemán Peter Schlink (1995) y adaptada al cine por Stephen Daldry con Kate Winslet en el papel protagonista. Ambas miran de frente la barbarie de que es capaz el ser humano y nos invitan a reflexionar sobre ello.
En las páginas dedicadas a cada uno de los títulos encontraréis una breve presentación del libro y su adaptación cinematográfica y algunas cuestiones para el coloquio.
