Mecanismo de acción (general):
Actúan interfiriendo con funciones vitales de la célula bacteriana, como la síntesis de la pared celular, proteínas, o ADN. Se dividen en función de su sitio de acción:
Inhibidores de la pared celular (betalactámicos, glucopéptidos)
Inhibidores de la síntesis proteica (30S y 50S)
Inhibidores del ADN bacteriano (quinolonas)
Indicaciones terapéuticas:
Infecciones bacterianas de origen respiratorio, urinario, gastrointestinal, piel y tejidos blandos, sistémicas, entre otras.
Contraindicaciones:
Hipersensibilidad, insuficiencia renal o hepática (según fármaco), embarazo y lactancia, uso en menores (según tipo), historial de arritmias (quinolonas).
Efectos adversos:
Gastrointestinales (náusea, diarrea), alergias, nefro y ototoxicidad, mielosupresión, alteraciones neurológicas (mareo, convulsiones), fotosensibilidad, colitis pseudomembranosa.
Fármacos:
Penicilina G (Benzilpenicilina)
Penicilina V (Fenoximetilpenicilina)
Amoxicilina
Ampicilina
Cloxacilina
Cefaclor (2° generación)
Ceftriaxona (3° generación)
Cefepima (4° generación)
Ceftarolina (5° generación)
Imipenem/cilastatina
Aztreonam
Glucopéptidos y lipoglucopéptidos
Vancomicina
Teicoplanina
Dalbavancina
Telavancina
Inhibidores de la síntesis proteica (subunidad 30S)
Amikacina
Gentamicina
Tobramicina
Doxiciclina
Inhibidores de la síntesis proteica (subunidad 50S)
Azitromicina
Claritromicina
Clindamicina
Linezolid
Inhibidores de la síntesis de ADN
Ciprofloxacino
Levofloxacino
Moxifloxacino
Ácido nalidíxico