Mecanismo de acción (general):
Los antimicóticos interfieren con componentes esenciales de la membrana o pared de los hongos.
Los azoles inhiben la síntesis de ergosterol al bloquear la enzima 14-alfa-desmetilasa.
Las equinocandinas inhiben la síntesis de glucano de la pared fúngica.
La anfotericina B se une al ergosterol, alterando la permeabilidad de la membrana.
La terbinafina bloquea la escualeno epoxidasa.
La griseofulvina interfiere con la mitosis fúngica.
Indicaciones terapéuticas:
Tratamiento de infecciones micóticas superficiales (tiñas, onicomicosis) y sistémicas (candidiasis, criptococosis, histoplasmosis, aspergilosis, etc.).
Contraindicaciones:
Hipersensibilidad, disfunción hepática grave, embarazo (algunos), interacción con múltiples fármacos (especialmente los azoles).
Efectos adversos:
Hepatotoxicidad, náuseas, vómito, erupciones cutáneas, trastornos gastrointestinales, prolongación del QT, nefrotoxicidad (anfotericina B), alteraciones hematológicas.
Fármacos:
Anfotericina B
Nistatina
Flucitosina
Fluconazol
Itraconazol
Terbinafina
Naftifina
Caspofungina
Micafungina