4.2. ... Y un par de juegos

2.1. Los tres mosqueteros

Francia, 1625. El joven gascón D´Artagnan se dirige a París con una carta de presentación para el señor de Treville, jefe de los mosqueteros de Su Majestad. Apenas celebrada la audiencia, D´Artagnan tropieza sucesivamente con Athos, Porthos y Aramis y a cada uno de ellos ofende de una forma. Athos lo emplaza a batirse en duelo con él a las 12 junto al convento de los Carmelitas. D´Artagnan fijará sus otros dos desafíos en el mismo lugar y con una hora de intervalo entre uno y otro. A mediodía Athos se presenta ante D´Artagnan acompañado de sus dos padrinos, que resultan ser Porthos y Aramis. ¿Qué pasa luego?

a.- D´ Artagnan es herido de gravedad en el hombro por Athos, por lo que ha de aplazar sus otros dos desafíos para el mes siguiente.

b.- El duelo no se celebra porque aparece la guardia del Cardenal Richelieu y D´Artgnan hace causa común con los tres mosqueteros frente a esta.

c.- D´Artagnan mata sucesivamente a Athos, Porthos y Aramis, y en el futuro se hará a pasar por uno u otro en función de las circunstancias.

d.- Aparece Constanza Bonaciuex, una guapísima joven, y D´Artagnan deja plantados a los tres para marcharse con la muchacha.

2.3. Perseo y la cabeza de Medusa

Un adivino le había dicho a Acrisio, rey de Argos, que un nieto suyo acabaría con su vida. Para evitar el cumplimiento de este augurio Acrisio encerró a su única hija, Dánae, en una torre, a fin de que no mantuviera relaciones con ningún hombre. Pero el dios Zeus, encaprichado de Dánae, se las ingenió para fecundarla en forma de lluvia de oro.

Fruto de esta peculiar unión nació Perseo, que fue arrojado junto con su madre al mar por Acrisio en la creencia de que nada podría librarlos de una muerte segura. Pero no fue así. Llegaron a la isla de Sérifos. Allí, al cabo de los años, el rey Polidectes quiso casarse con Dánae, y ante la oposición de esta y de Perseo decidió librarse del muchacho. Le encargó una misión imposible. Había de regresar con la cabeza de la Gorgona Medusa, que tenía por cabellos serpientes venenosas, y que convertía en piedra a quien la miraba de frente.

Sin embargo, Perseo habría de contar con la ayuda inesperada de la diosa Atenea y del dios Hermes, quienes le facilitaron una hoz de acero y un escudo tan reluciente que parecía un espejo. Más adelante, las Ninfas le ofrecieron otros tres objetos imprescindibles para su empresa: unas sandalias voladoras, un casco que hacía invisible a quien lo llevaba y... ¿Cuál fue el tercero?

a.- Un zurrón para guardar la cabeza de la Medusa

b.- Un filtro de amor

c.- Una poción mágica

d.- Un pájaro hablador

2.5. El libro de la selva

Todos nos hemos familiarizado desde pequeños con Mowgli y sus amigos: Bagheera, Shere-Khan, ... Ahora bien, no olvidemos que quien inventó sus peripecias no fue el señor Walt Disney sino un inglés que residió durante muchos años en la India y que recibió en 1907 el Premio Nobel de Literatura. ¿Cuál era su nombre?

a.- Rudyard Kipling

b.- Rabindranath Tagore

c.- Gandhi

d.- Huckleberry Finn

2.7. La historia interminable

Michel Ende nos cuenta en este precioso libro la historia de Bastian, un muchacho que se sintió tan atrapado por la historia que leía, que cruzó la frontera de su mundo real para aparecer más allá del papel en el reino de fantasía. Su acción va a ser decisiva para que este reino no desaparezca y la Emperatriz Infantil pueda salvarse del grave mal que padece... El libro alterna la tinta de dos colores: rosa cuando la narración se centra en el mundo real de Bastian; verde cuando se refiere al libro de tapas color cobre que Bastian lee apasionadamente. ¿Dónde lee Bastian este libro?

a.- En el desván de su colegio

b.- En una gruta en medio del bosque

c.- En su habitación, de madrugada

d.- En la trastienda de una librería

2.9. El corsario negro

El corsario negro, Los misterios de la jungla negra, El rey del mar, La venganza de Sandokán, La reina de los Caribes, En las fronteras del Far West...son títulos que evocan la presencia de piratas y balleneros, cazadores y cow boys que en escenarios exóticos mantienen una lucha noble y generosa con sus enemigos y con la naturaleza misma. Lo curioso del autor de todos estos estos relatos es que nació en Verona (Italia) y apenas si se alejó unas decenas de kilómetros de su lugar de nacimiento. “Los únicos piratas que he visto –confesó alguna vez- son los editores”. ¿Serías capaz de decirnos su nombre?

a.- Rafael Sabatini

b.- Gianni Rodari

c.- Marcello Mastroianni

d.- Emilio Salgari