En cualquier dirección
que recorras el alma,
nunca tropezarás con sus límites.
Sócrates
Muchas veces usted se habrá preguntado: ¿Por qué algunas personas son felices y otras desgraciadas? ¿Por qué algunos logran el éxito en la vida y otros viven y mueren marginados?
Mire a su alrededor y verá personas que comenzaron como simples empleados y hoy están en la cima, y verá personas que nunca salieron de un mismo lugar; verá personas que se casaron y son felices, y verá personas cuyo casamiento se desintegró, sin quedar piedra sobre piedra. Continúe observando y verá personas que consiguieron curarse de enfermedades consideradas incurables, y personas que nada pudieron contra la enfermedad.
Tal vez usted forme parte de ese ejército incalculable de personas que sufren de insomnio y sólo concilian el sueño a la madrugada a fuerza de somníferos, cuando existen tantas otras personas que, basta que caigan en la cama, para que ya estén durmiendo en la dulce paz de un saludable sueño.
Usted ya se preguntó: ¿por qué existen personas alegres y despreocupadas, cuando millones de otras están deprimidas y atormentadas por neurosis y miedos?
Muchos ya dividieron el mundo en dos partes: las personas de suerte y las personas desdichadas.
¿Será que vivimos bajo el flujo y reflujo de lo imprevisible?
¿Será que tendremos que decir, como Shakespeare, que "hay más misterios en este mundo de los que nuestra vana filosofía puede imaginar"?
Escribí este libro para abrir su mente. Finalmente, aquí usted descubrirá su verdadero destino.
Ahora usted comienza a levantar el velo del misterio y de lo desconocido; ahora usted encontrará el camino de sus sueños.
No importa el estado actual en que usted se encuentra. No importa si usted es pobre o enfermo o fracasado.
Usted puede, desde ahora, comenzar a abrir las manos para recibir todas las dádivas de la vida.
Sería injusto suponer que sólo una pequeña clase de privilegiados pudiese tener acceso a los arcanos de la suerte y de las buenas cosas de la vida, en tanto el resto tendría que contentarse con las migajas.
Sería también ridículo admitir que las riquezas del universo sean limitadas, de tal suerte que, si unos tuvieran bastante, otros tendrían poco.
Usted siempre deseó tener una vida repleta de felicidad, de amor, de paz, de salud, de bienestar económico. Si no lo consiguió, algo debe estar equivocado en usted.
¿Qué es?
Sé que usted ya culpó a la falta de suerte, a la falta de oportunidades; sé que ya culpó a sus padres, al gobierno, a la vida, al mundo, al diablo, a las brujerías, y a tantas otras causas más.
Más, comience a pensar desde ahora: ¿será que la culpa está fuera de usted o dentro de usted?
SI LOS OTROS PUDIERON, USTED TAMBIÉN PUEDE
Recuerde que todo lo que puede ser pensado es realizable. Todo lo que una persona puede desear, lo puede conseguir. Inclusive usted. Si los otros pudieron, usted también puede, porque las leyes del universo, del cual usted forma parte, son justas, correctas, no discriminatorias e infalibles.
Aquellas personas que alcanzaron gran éxito en la vida, aquellas personas que realizaron maravillas, aquellas personas que obtuvieron verdaderos milagros, si hubieran usado la mente en forma errónea como usted la usó, no serían ahora más de lo que es usted.
Un día, un señor vino junto a mí a quejarse porque su vida estaba de lo peor. Todo le salía desacertado.
Yo le pregunté qué estaba haciendo para mejorar su vida y cuál era su meta deseada, así como dónde pretendía llegar.
El no supo decírmelo. No sabía lo que quería. Y se quejaba.
Si usted toma un taxi y no le dice al chofer adonde desea ir, él no podrá llevarlo a lugar alguno, ¿no es cierto?
Los otros pudieron porque sabían lo que querían.
Sepa usted lo que quiere y aquí aprenderá a usar los medios infalibles y fáciles para llegar allá.
Usted aprenderá a usar el poder infinito de su mente, poder éste que le proveerá de todo aquello que usted desea.
No importa si usted es culto o no, si es pobre o no, si es inteligente o no, si usted tiene dinero o no, si usted tiene salud o no.
Sea usted quien fuere, esté donde estuviere, existe dentro de usted una bomba atómica de fuerza irresistible. Cuando descubra el lugar de la mecha, ¡BUUUUUUMMMMMM!, conseguirá detonar su bomba y su vida se modificará de manera increíble.
EL PENSAMIENTO ES LA MECHA DEL SUBCONSCIENTE
Cuando le preguntaron, en un programa de televisión, al escritor Nelson Rodríguez lo que pensaba sobre la muerte, él citó alguien que había dicho que "la muerte es la cosa más triste", y agregó: "No, la muerte no es triste, triste es la vida". Esta es una más de las miles de definiciones que usted encontrará sobre la vida. En la mayoría, negativas. En realidad, cada persona tiene una definición propia para la vida. Y esta definición parte sólo de un punto de vista: el pensamiento de cada uno.
Si la vida se presenta a su pensamiento como algo agradable, llena de bellas sorpresas, usted dirá que la vida es buena. Si usted piensa que la vida, para ser buena, debe traerle cierto beneficio que usted no consiguió alcanzar, dirá que la vida es una frustración. Si usted sólo vislumbra, en la vida, a los otros subiendo y a usted descendiendo, afirmará que la vida es una injusticia cruel. Si usted despierta siempre dispuesto, saludable, confiado en su buena estrella, dirá que la vida es una irradiación de felicidad. Si usted vive un gran amor, dirá que la vida es amor. Si consigue llegar a donde desea, para usted la vida es un éxito permanente.
Vea usted, la vida es una proyección de su mente. Más que eso: su vida es el resultado de sus pensamientos.
Ralph Waldo Emerson, pensador y escritor norteamericano, dijo que el hombre es aquello que piensa el día entero.
Todo pensamiento cargado de emoción, reforzado por el sentimiento, se transforma en realidad física.
James Hallen afirmó, con toda razón: “Todo cuanto el hombre consigue y todo cuanto deja de conseguir es resultado directo de sus propios pensamientos".
LO SEMEJANTE ATRAE LO SEMEJANTE
Hay una ley mental que es enunciada así: lo semejante atrae lo semejante, o, en otras palabras, lo igual atrae lo igual. Esto quiere decir que el pensamiento atrae la realidad de su contenido. A partir de esta verdad, usted se estará dando cuenta de que los pensamientos de fracaso atraen el fracaso, pensamientos de éxito atraen el éxito, pensamientos de amor atraen el amor, pensamientos de celos atraen el contenido del celo, pensamientos de alegría atraen la alegría, pensamientos de tristeza atraen la tristeza, y así sucesivamente. El pensamiento es una realidad mental que atrae a la realidad física.
Hace ya miles de años el profeta David, padre del sabio Salomón, afirmaba: "abyssus abyssum invocat", o sea, el abismo atrae al abismo.
Sus pensamientos, por tanto, hacen su vida. Su vida es la materialización, o la expresión de sus pensamientos constantes. Y el futuro será la cosecha de los pensamientos sembrados hoy en la mente.
Usted, pues, está determinando ahora lo que será más tarde. Todo efecto tiene su causa, como enseñaba el gran sabio Jesucristo: "Todo árbol bueno da buenos frutos, todo árbol malo da malos frutos". Es la Ley de la naturaleza que coincide con la Ley de la mente: cada uno recoge lo que siembra.
No existe el acaso, la mala suerte ni el azar; es la suma de sus pensamientos diarios la que lo lleva a tales resultados.
El mejor equipo nunca pierde el campeonato. Puede sufrir algún revés, que solamente contribuirá a perfeccionar más aun la técnica, pero nadie le arrebatará de las manos el ansiado resultado final.
Un día vino a visitarme un señor, bastante desanimado. Me decía que, por más que deseaba progresar, no lo conseguía. Dos veces ya había fracasado y las cosas no marchaban acertadamente para él –Es algo que no entiendo –se quejaba él–. Tengo un sujeto cerca de mi casa que instaló una tiendecita cualquiera y ahora está en la cima. Es un astuto, un aprovechador. No se como es que él progresa y yo no. Ya estoy con miedo a fracasar, una vez más, en mi negocio.
– A usted la va mal por el poder de su mente– le dije yo
El hombre se desorientó, y a partir de ese momento ya no extendió nada más.
Es simple. ¿Cuáles eran los pensamientos dominantes en él? Pensamientos de fracaso, de miedo y de envidia hacia el vecino. Esos pensamientos, tan fuertemente emotivos y repetidos, estaban tornándose realidad.
Recuerde: pensamientos de fracaso atraen el fracaso, pensamientos de miedo atraen el resultado correspondiente, pensamientos de envidia perjudican al envidioso. Era el poder de la mente que actuaba en él a la perfección. Los pensamientos positivos que ese señor tenía estaban totalmente envueltos por la avalancha de pensamientos negativos. El resultado no podría ser diferente.
Shakespeare escribió en su tragedia Hamlet, acto II, escena 2, una frase tremendamente profunda: "El bien y el mal no existen, es el pensamiento el que los crea".
PIENSE EN GRANDE, SEA GRANDE
Ahora usted está comenzando a vislumbrar el camino del éxito. Quizás, hasta aquí, usted vivía buscando las razones del éxito y del fracaso fuera de usted. Tal vez usted hacía, hasta ahora, exactamente como tantos de sus amigos, conocidos y vecinos, que atribuyen los problemas a las difíciles contingencias de la vida, o a la falta de suerte, a la incompetencia del gobierno, o, aun, a la crisis mundial provocada por el petróleo. Pero, nunca olvide que, aun durante la última guerra mundial, muchos hombres continuaron enriqueciéndose; nunca olvide que, aun ahora, durante la crisis que usted piensa que está embarrando su éxito financiero, muchos continúan enriqueciéndose.
¡Vamos!, comience a pensar en grande. Salga fuera de ese enredo negativo, que lo amarra a estrechos límites.
Enganche su vagón a una estrella. Suba alto. Piense en grande. Crea que el éxito es su compañero inseparable. Mantenga sus pensamientos ardientes de entusiasmo y ligados a las buenas cosas de la vida.
Siga adelante, con la certeza de que, cada día, está progresando siempre más y más. No importa de dónde esté usted comenzando. Lo que importa es el modelo, la imagen que usted creó en su mente aquí y ahora.
Grandes hombres comenzaron como usted, pero se tornaron grandes porque alimentaron permanentemente grandes pensamientos, grandes metas. Alejandro Magno y Napoleón Bonaparte idealizaron grandes conquistas; las obras inmortales de Shakespeare son fruto de sus pensamientos; Benjamín Franklin imaginó la captura del rayo a través de la electricidad para probar que la electricidad y el rayo tienen la misma fuerza; fue el pensamiento persistente de Santos Dumont el que generó el invento del aeroplano, o sea, de una nave que, aun siendo más pesada que el aire, pudiese volar. Tomás Alba Edison descubrió la utilización de la electricidad e inventó la lámpara, el cine, el fonógrafo, el tren eléctrico y centenares de otros inventos. Puedo continuar citando a otros grandes hombres, como Cesar, Beethoven, Marconi, Padre Landel de Mora, Kennedy, Von Braun, Einstein, Tomás de Aquino, Descartes, Freud, Sócrates, Aristóteles, Juan XXIII y tantos otros. Puedo citar, además, a Nerón, Hitler, Stalin y otros que usaron negativamente su fuerza mental. Todos ellos, mediante el pensamiento persistente y fuerte, formaron un cuadro mental de lo que deseaban y, con el tiempo, lo que deseaban se convirtió en realidad.
Usted también tiene una bomba atómica en su mente. Podrá dejarla adormecida para siempre; podrá hacerla explotar, destruyendo y destruyéndose; o, también, podrá usarla como una propulsora de sus ideales y de sus deseos saludables.
YA ES HORA DE CONOCERSE A SÍ MISMO
Dicen los entendidos que el hombre de hoy no utiliza más del cinco por ciento de su capacidad mental.
Observe bien, no es un error, apenas el cinco por ciento, como máximo. Es como si tuviese un camión de diez toneladas y pasara la vida entera transportando apenas quinientos kilos de carga.
A pesar de existir desde hace millones de años, en lo que atañe al uso de la mente, el hombre está aun en la edad de piedra. Por eso es que vivimos en un "valle de lágrimas" y decimos que la vida es una lucha insana y dura.
Se dice que nuestro cerebro tiene acerca de quince billones de células electromagnéticas y que, por ahora, se sabe la función de apenas veinte por ciento de esas células, o sea, cerca de tres billones. ¿Qué sucederá cuando el hombre comience a usar lo restante, todavía adormecido, del cerebro? Hoy usted comenzará a aumentar su potencial mental. Alégrese, por tanto, ya que un nuevo día está despuntando para usted. ¡Ea! ¡Viva! Infelizmente, hasta ahora, apenas una minoría consigue alcanzar todo aquello que desea y, así, disfrutar de una vida plena de paz, de éxito, de felicidad y de salud física y mental. Parece hasta que, a medida que el progreso evoluciona, la humanidad pasa a enfrentar mayor número de problemas, lo cual es una paradoja. Esto significa que el hombre no descubrió, a través de los siglos, su propio camino. Él avanzó hacia las alturas infinitas de los cielos, descendió a las profundidades de la tierra, buscó el fondo de los océanos, exploró los extremos polares, siguió hacia el norte, hacia el sur, hacia el este y el oeste, inventó millones de objetos de gran utilidad, acortó distancias, pero él mismo, el HOMBRE, continúa sintiéndose insatisfecho, enfermo, alterado, inestable, frustrado. No es por nada que Sartre y la filosofía existencialista dicen que el hombre es un proyecto inacabado.
En un trabajo de filosofía para el segundo semestre de 1979, yo tomé la afirmación existencialista de que la vida es un hacerse imprevisible e incontrolable, y la discutí. La discutí porque, de ser verdad esa afirmación, llegaríamos a la conclusión de que la vida es un absurdo.
A cierta altura de mi trabajo, escribí: "Si la vida es imprevisible, si no puede ser determinada por mí, en este caso yo no soy mi vida; mi vida se va haciendo ajena a mí, ajena a las exigencias de mi ser, ajena a mi querer, o sea, totalmente sin control, como un barco a la deriva".
"Si la vida es incontrolable, la vida es injusta. Injusta porque a unos los hace ricos y a otros miserables; unos los hace inteligentes y a otros cortos de inteligencia; para unos es pródiga en beneficios, para otros es madrastra; a unos los bendice otros los maldice; a unos los colma de bienes, a otros les quita todo; a unos les ofrece un cuerpo sano, a otros toda especie de enfermedades; a unos les permite la cura de sus enfermedades, aunque sean gravísimas y humanamente irreversibles; a otros los abandona a la muerte; a unos los llena de zapatos, a otros les corta las piernas... "Si la vida es imprevisible, se torna una frustración. Frustración porque crea en las personas los deseos y no los satisface. "Si la vida es una irrealización humana, no pasa de una incompetencia total, puesto que genera aspiraciones en el individuo y no las puede cumplir".
"Pero la vida no es imprevisible, ni incontrolable, ni irrealizable, porque existe, esparcido por el mundo, todo lo que el ser humano desea para entrar en estado de felicidad y de plenitud". "Si nosotros pudiésemos reunir, en una sola persona, todas las cosas buenas que ocurren, por separado, en los individuos de todo el mundo, por cierto, la suma de todos esos atributos sería la satisfacción y plenitud de todos los deseos posibles al ser humano. Si reuniésemos en una persona la sabiduría de los sabios, la riqueza de los ricos, la felicidad de los felices, el amor de los que aman plenamente, la paz de los que están en paz, la armonía de los armoniosos, la salud de los saludables, la honestidad de los honestos, libertad de los libres, el poder de los poderosos, la comodidad de los que viven en habitaciones lujosas y confortables, la simplicidad de los simples, la confianza de los autoconfiados, la calma de los calmos, la energía de los llenos de energía, la certeza de los seguros de sí, la limpieza mental de los mentalmente limpios, el positivismo de los positivos, el optimismo de los optimistas, la clarividencia de los clarividentes, la fe de los confiados, la facilidad de ir y venir de los que pueden estar donde quieran, el placer perenne de los mejores momentos de placer, entonces, no sería exagerado decir que esa persona es feliz. Esa persona habría cerrado el abismo existente entre su realidad actual y sus ansias. Pues bien, si esos atributos existen esparcidos por el mundo, significa que puede existir en una sola persona, pues todo lo que un ser humano puede, todos los otros lo pueden."
DESCUBRA EL CAMINO DE SU FELICIDAD
No, no es una utopía. Existe un camino seguro por el cual usted puede llegar al paraíso perdido.
– En verdad te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso–.
Esas palabras del Maestro ya valen ahora para usted.
Existen en el interior de la criatura humana riquezas inmensas, más grandiosas que todas las riquezas del universo. En el mundo insondable del subconsciente está la mina inagotable que contiene la satisfacción de todo lo que el hombre sueña y desea para sí. Ya decía Sócrates, famoso filósofo griego, que vivió cuatrocientos años antes de Cristo: "En cualquier dirección que recorras el alma, nunca tropezarás con sus límites."
Felizmente, muchos científicos ya se arremangaron y estamos en la entrada de una nueva era. El hombre es el rey de la creación, por tanto, fue hecho para tener completo dominio sobre la naturaleza, sobre los animales, sobre las aguas, sobre la tierra, sobre las plantas.
Mucho se ha hablado, también, de que el hombre es imagen y semejanza de Dios y, consecuentemente, en su espíritu –que es parte del Espíritu Infinito, del cual procede– residen el poder infinito y la sabiduría infinita.
Paulo de Tarso, cuando llegó por primera vez a Atenas, en Grecia, fue a hablar al pueblo en la tribuna del areópago. En medio de su discurso, hecho sobre el Dios Desconocido, dijo: "Pues en Él vivimos, nos movemos y existimos. A propósito, dijeron también algunos de vuestros poetas: Somos de su estirpe".
Atienda bien, si somos de la estirpe de Dios, en nuestro interior existe una energía divina que, cuando es utilizada, nos eleva a un nivel de perfección física, mental, material, emocional y espiritual.
– Más, ¿Qué energía es ésta?– preguntará usted.
Un día preguntaron a Tomás Alba Edison, el inventor de la lámpara eléctrica, qué era la electricidad.
Edison respondió que la electricidad no se explica, se usa.
El Poder Infinito, que existe dentro de usted, no se explica; se usa. Úselo en su beneficio, en beneficio de los suyos y en beneficio de toda la humanidad. No interesa saber qué es el Poder Infinito, sino como usted puede usarlo. Cuando yo compré un auto, no me interesé en saber cómo era el motor, sino cómo yo podría usar y conducir el auto.
USTED ES EL RESULTADO DE SU MENTE
Usted es lo que es su mente. La mente obra, generando en sí misma un estado de paz o de agitación, de alegría o de tristeza, de amor o de odio, de riqueza o de pobreza, de éxito o de fracaso, y el cuerpo reacciona generando bienestar o enfermedades, de acuerdo con el contenido que la mente le envía.
El hombre es su mente. El cuerpo es la manifestación de la mente. La estructura humana es expresión de la mente.
Cuando la mente se deteriora, el cuerpo se deteriora; cuando la mente deja el cuerpo, la energía corpórea se transforma en otros tipos de energía.
El cuerpo, por tanto, es el resultado de la mente. Como la mente es controlable, la salud y la dolencia pueden ser controlables. La mente en estado de perfecto orden y armonía genera un cuerpo en perfecto orden y armonía, o sea, en estado de salud. Por otro lado, la mente es el agente de todos los estados intelectuales, emocionales, sensoriales, extrasensoriales y espirituales.
CÓMO FUNCIONA SU MENTE
La mente es una sola, mas tiene dos funciones o características: mente consciente y mente subconsciente
La mente consciente es la mente racional, objetiva; es la mente que piensa, analiza, razona, deduce, extrae conclusiones, selecciona, censura, da órdenes, determina, imagina; es la mente servida por los sentidos; es la mente en estado de vigilia y responsable por lo que usted es.
La mente subconsciente es la mente subjetiva, impersonal, no selectiva, cuyo papel es cumplir las órdenes que recibe de la mente consciente a través del pensamiento. Todo lo que la mente consciente acepta como verdadero, la mente subconsciente también lo acepta y realiza.
En las profundidades del subconsciente residen el poder infinito, la sabiduría infinita, la salud infinita, en fin, todos los atributos divinos.
La mente consciente actúa y la mente subconsciente reacciona en consecuencia.
William James, padre de la moderna psicología norteamericana, dice que el poder de mover el mundo está en el subconsciente.
Lo que usted graba en la mente subconsciente, ésta moverá cielo y tierra para tornarlo realidad física.
El subconsciente es, también el constructor del cuerpo y mantiene todas sus funciones vitales. Trabaja siempre, noche y día, procurando ayudarlo y buscando preservarlo de cualquier daño.
Puede decirse que la mente subconsciente es universal o cósmica, por eso usted abarca todo el universo dentro de usted.
Fue Sócrates quien dijo que cuando levantamos un dedo estamos afectando la estrella más distante.
La mente subconsciente puede tener muchos nombres, toda vez que ella sea íntima con el espíritu y el espíritu sea infinito.
Jesús decía: Yo y el Padre somos UNO. Había absoluta interacción entre su mente consciente y subconsciente, de ahí el Poder Infinito del Maestro, capaz de realizar milagros en cualquier momento.
Otras personas hablan del Yo Superior, de Mente Cósmica, de Presencia Infinita, de Poder Infinito, de Energía, Vida, y así sucesivamente. Cualquier nombre que usted le dé, será un nombre limitado, pues usted nunca abarcará toda la extensión de su mente, por cuanto llega a un punto en el cual ella se confunde con la propia divinidad. La mente subconsciente tiene una fuerza infinita, capaz de realizar todos sus deseos, mas nunca actúa por su cuenta; ella obra, de modo muy especial, determinada por el pensamiento. El pensamiento da la orden y el subconsciente la cumple. Por eso, usted es el resultado de sus pensamientos.
Ahora, usted ha debelado el misterio. Ahora, usted tiene las llaves del reino de los cielos. Como decía Jesucristo: "El reino de Dios está dentro de vosotros mismos".
HAGA QUE SUS SUEÑOS SE TORNEN REALIDAD
Cierta mañana de verano yo recorría las playas soleadas de Torres, en Río Grande do Sul, cuando, de repente, tropecé con esta frase escrita en la arena: "Si no pudieses hacer tu vida conforme a tus sueños, haz de tu vida un sueño".
En otras palabras, si no se puede hacer de los sueños una realidad, hay que hacer de la realidad un sueño.
Sin duda, una frase poética, bonita, filosófica. Pero no totalmente verdadera, porque quien conoce el poder de la mente, sabe que todo sueño puede tornarse realidad.
Todo lo que puede pensarse es realizable. Todo lo que es deseable es realizable. Inclusive sus sueños.
Usted mismo tuvo sueños, en otros tiempos, que le parecían inalcanzables, pero hoy son realidad en su vida.
Hace tiempo estuvo conversando conmigo un señor, que me contó lo siguiente: – Pocos años atrás yo estaba sentado en la plaza Saldanha Marinho, de Santa María, contemplando los edificios de apartamentos que estaban delante de mí. Entonces dije, convencido, para mí: "Un día yo tendré uno de esos apartamentos". Hoy tengo uno de aquellos apartamentos. En aquel tiempo me parecía un sueño casi imposible, porque mi situación financiera era escasa.
Hace pocos meses, una joven, amiga mía, me confesó que deseaba mucho tener un automóvil, pero no estaba en condiciones de comprarlo.
– Si usted quiere, puede adquirirlo. Mentalice su auto.
– Más, ¿Cómo voy a pagarlo?
–Lo que usted tiene que hacer es mentalizarlo con fe, con la certeza de que ya posee el auto. Véalo delante de su casa, siéntase conduciendo el auto. El resto déjelo a la sabiduría de su subconsciente. Él sabe cómo usted puede conseguir su auto.
La joven comenzó a mentalizar el auto de noche, de mañana y algunas veces por día.
Cerca de tres meses después, precisamente en el día de su cumpleaños, su padre le obsequió un automóvil, y yo mismo vi cuando el auto le fue entregado, poco antes de la comida que ella ofreció a sus amigos, en su casa. El padre dio el anticipo para la compra del auto y el pago de la mitad de las cuotas, y quedó para ella sólo una parte de las cuotas, que podía pagar tranquilamente.
Cuántos hombres, poseedores de verdaderos imperios, comenzaron en forma discreta y modesta, pero soñando alto. Hoy ellos contemplan con entusiasmo la materialización de sus sueños.
Yo tenía conmigo un volumen de la enciclopedia "El Tesoro de la Juventud". Era un libro viejo, que ni sé cómo vino a parar a mis manos. Yo lo guardé porque él demostraba, por una serie de argumentos considerados científicos, que era imposible que el hombre llegase a la luna. Cuando leí esa página, el hombre ya había puesto los pies en la luna. Todo lo que puede soñarse, es realizable.
Cierto día, Henry Ford imaginó su famoso motor V-8. Quería construir un motor de ocho cilindros en un solo bloque. Encargó a sus ingenieros que hicieran un proyecto de la nueva máquina. Los ingenieros fueron taxativos al decir que era imposible un motor de ocho cilindros en una sola pieza.
– Háganlo de cualquier manera– mandó Ford.
– Pero es imposible– replicaron los ingenieros.
– Continúen el trabajo y sigan adelante hasta conseguirlo, no importa cuánto tiempo les lleve.
El viejo ordenó y los ingenieros no tuvieron otra alternativa más que dedicarse al trabajo, aunque incrédulos y sin mucho entusiasmo.
Pasaron todo el año dedicados al proyecto y nada ocurrió. Todas las experiencias fallaron.
Pasado el año, Ford reunió a los ingenieros para ver los resultados, y nada positivo pudieron ofrecerle.
– Vayan adelante –insistió Ford– Lo quiero y lo obtendré.
Finalmente, después de algunas experiencias fallidas, casi por casualidad, el secreto fue descubierto y surgió el conocido Ford V-8.
Fue de la imaginación de personas visionarias y soñadoras de donde surgieron tantas invenciones como la lámpara eléctrica, la radio, el cine, el avión, las usinas atómicas, las cápsulas espaciales, las máquinas industriales.
Marconi soñó con un sistema que pudiese utilizar el éter. Su sueño se tornó realidad y está allí materializado en cada apartado de radio y televisión. Y es bueno recordar que, cuando Marconi anunció que había descubierto el principio por el cual podrían enviarse mensajes a través del aire, sin auxilio de hilos o cualquier otro medio físico de comunicación, algunos de sus "amigos "lo forzaron a internarse en un hospital psiquiátrico para que le efectuaran exámenes mentales.
Usted debe entender, sin embargo, que no es una simple ansia, vaga e imprecisa, la que va a tener fuerza capaz de tornarse realidad física.
Usted debe crear una fuerte convicción y no sólo alguna esperanza.
Si usted tiene convicción, su idea surgirá, a cada instante, electromagnetizada, y esa fuerza emocional sensibilizará el subconsciente, haciéndolo obrar para la concreción de ese deseo.
Sepa, mientras tanto, que no se exige mayor esfuerzo para un alto objetivo en la vida del que se exige para mantenerse en estado de miseria y pobreza.
El éxito llega para aquellos que tienen certeza del éxito y, consecuentemente, caminan en dirección a él.
Nunca diga que algo es imposible.
Todo deseo reforzado por la fe se vuelve realidad física.
SEPA CÓMO ALCANZAR LO QUE DESEA
Lo que más espanta a las personas es oír que ellas tienen el poder de alcanzar todo lo que deseen.
Cierto día, yo volvía de la universidad, en automóvil, y traía conmigo a algunas colegas del posgrado en Filosofía. Como yo les hablaba sobre la vida, diciendo que la vida es una fiesta, que la vida está ahí con los brazos abiertos para acogernos cariñosamente y ofrecernos todas las dádivas, una colega me interrumpió:
– Lauro, usted vive en el mundo de los sueños.
–Es verdad –le respondí de inmediato–, vivo en el mundo de los sueños porque sé que todo sueño se torna realidad. Todo sueño ya es una realidad mental que camina a largos pasos hacia la realidad física.
Ella sólo bajó la cabeza y quedó concentrada en sus propios pensamientos.
En otro libro que comencé a escribir sobre el poder de la mente, yo me refiero a aquella historia de Alí Babá y los Cuarenta Ladrones.
Había una caverna de tesoros en un lugar escondido y misterioso. Cuando Alí llegaba a la caverna, bastaba que dijera "Ábrete Sésamo" y el portal se abría dejando al joven mago delante de los tesoros más deslumbrantes del mundo. Era una fortuna incalculable e inagotable a su disposición, y él podía tomar la cantidad que quisiera, el valor que quisiese, cuando quisiese y como quisiera. La caverna misteriosa era la fuente inagotable de abastecimientos de Alí Babá. Nunca más pasó necesidades, porque sabía dónde proveerse y cómo hacerlo.
Más, por otro lado, el joven sabía que de nada le servía quedarse un año entero gritando delante de la caverna palabras sin sentido. La puerta no se abriría. Sabía, también, que no adelantaría nada con decir "Sésamo, Ábrete" y quedar a diez kilómetros de distancia de la caverna. Bastaba, por tanto, cumplir correctamente con el ritual y tendría en las manos todo cuanto desease.
Tampoco usted adelanta nada al soñar con el mundo entero y no utilizar los medios para alcanzar ese objetivo. Nada adelanta el querer una cosa con la boca, si la mente queda a diez kilómetros de distancia, ajena a esa expresión de deseo.
Nada adelanta al decir "yo quiero eso", pero piensa lo contrario, pues así el portón de su mente no se abrirá. Y es en las profundidades de su mente subconsciente donde se encuentran los tesoros de su vida.
Es fácil abrir las compuertas del poder mental, más es preciso que sepa como hacerlo.
Aprenda a decir el "Ábrete Sésamo" del subconsciente y, entonces, tendrá delante de sí todas las buenas cosas de la vida.
PENSAR ES PODER
Usted ya oyó decir muchas veces que querer es poder. Como es el pensamiento el que acciona el poder del subconsciente, en verdad pensar es poder.
Dígame como usted piensa y yo le diré quién es usted.
Sócrates afirmaba: Dime con quién andas y te diré quién eres.
Un día me buscó una señora totalmente perturbada. Comenzó a hablarme de sus problemas deshaciéndose en un llanto convulsivo. Habló de su soledad, de su nerviosismo, de sus tristezas; me dijo que, infelizmente, las personas son malintencionadas y sólo quieren aprovecharse de la gente. Estaba llena de resentimientos y disgustos.
Yo le expliqué que el mundo exterior, las personas, la vida, todo, era resultado de la manera de pensar de ella. Si ella hallaba que las personas no eran solícitas, en verdad para ella no serían solícitas. Si ella comenzaba a pensar que las personas son agradables, las personas serían agradables para ella. Le dije que la tristeza, los disgustos, los resentimientos, la soledad, el nerviosismo, no eran sino cuadros mentales que ella nutría en la mente.
Escribí para ella la siguiente oración científica y le pedí que la mentalizara algunas veces por día:
"Yo y Dios somos una sola unidad todopoderosa; por eso estoy en paz e irradio paz para todas las personas. Me perdono a mi misma de corazón e irradio perdón y buena voluntad para todas las personas. El Poder Infinito, que está en mí, me envuelve en su amor, y lo envuelve todo y a todos; por eso el mundo es bueno y transmite bondad, buena voluntad, armonía y fraternidad. Deseo todas las bendiciones para mi hija y para mi marido y ellos son protegidos por la Inteligencia Infinita. Eso es bueno. Estoy alegre y perfectamente bien, física y mentalmente. Cada mañana despierto radiante, contemplando en mí las bellezas de la vida. Cada día me siento mejor y mejor en todos los sentidos. Así es y así será. Todo se hará conforme a mi creencia. ¡Qué bueno! Muchas gracias."
Esto sucedió el 6 de abril de 1978. Ya el día 22 de mayo del mismo año yo recibía de esa señora el siguiente testimonio:
"Ahora todo cambió en mi vida. Estoy en paz y veo lo bella que es la vida. Encontré el medio de ser feliz y hacer felices a los otros. Esa técnica funciona realmente; en mí, hizo milagros. Estoy siendo bendecida espiritualmente. Ahora tengo la llave de este reino maravilloso. Puedo enfrentar la vida sin problemas que no tengan solución. Estoy fuerte y agradezco a Dios por haber conservado mi fe, la que antes yo no sabía como utilizar. Es otra cosa que la gente enfrente la vida conociendo el verdadero modo de vivir..."
Vea usted, esa señora cambió el modelo de sus pensamientos y su vida también cambió.
Normalmente las personas piensan que sólo consiguen realizar grandes cosas en la vida mediante trabajos arduos, sufridos, esforzados. No es el trabajo arduo el que fundamentalmente lleva al éxito. El mundo está lleno de gente que revienta trabajando y, al fin y al cabo, los resultados son precarios.
Tal vez nosotros podamos dividir la historia de la humanidad entre eras distintas: la primera fue la del trabajo manual; la segunda fue y es la del trabajo intelectual; ahora estamos llegando a la era mental. Y estamos descubriendo que la mente es la mayor fuerza, capaz de revolucionar la vida de cualquier persona y de cualquier nación.
El pensamiento positivo, que produce la acción y que acompaña a la acción, es la fuerza propulsora de las realizaciones.
Pensar es poder. El pensamiento es capaz de producir la salud, la paz, la riqueza, el amor, el casamiento, el éxito en la plantación y en la creación, en fin, todo.
LA FE ES LA LEY SUPREMA DEL PODER MENTAL
Mucho se habla sobre la fe. Todas las religiones gravitan entorno a la fe. La historia del pueblo elegido, desde los orígenes de la Biblia, está fundamentada en la fe. Todos los grandes personajes de la Biblia, como Noé, Abraham, Moisés, Josué, David, Salomón, Isaac, Jacob y tantos otros, extrajeron su fuerza de la fe.
Sólo existe un Poder Infinito y sólo existe una forma de accionar este Poder Divino: la fe.
Pero no se trata de fe en el sentido de un sentimiento vago sobre algo que no se puede definir, sobre algo que representa una esperanza imprecisa, sobre algo que escapa al control de la mente. Fe es la certeza de que su pensamiento es verdadero.
Creer, por lo tanto, es aceptar definitivamente una cosa como verdadera.
Usted, por ejemplo, cree que el agua moja y nunca le pasó por la cabeza cualquier especie de duda en cuanto a eso. El albañil cree que, haciendo una mezcla de arena, agua, cemento y piedras, el resultado será una masa fuerte de concreto. Su fe en ese resultado es tan definitiva que ni espera a ver si saldrá bien o no. La cocinera cree que, colocando un huevo al fuego, el huevo endurece, al paso que la manteca, en contacto con el fuego, se derrite. Este es un principio sobre el cual la cocinera no duda.
La mente también tiene sus leyes y sus principios que nunca fallan, cuando son usados correctamente; por ejemplo, el pensamiento crea, el deseo atrae y la fe realiza. Esto quiere decir que todo lo que usted piensa, desea y cree que va a suceder, sucede obligatoriamente.
El Maestro Jesús, que conocía todas las leyes universales, hace ya dos mil años enseñaba este principio, cuando decía: "Pedid y recibiréis".
Parece increíble que un principio tan simple y, al mismo tiempo, tan fabuloso, sea verdadero. Pero lo es. En todo pedido ya viene incluido el recibimiento. Cuando usted pide, automáticamente ya está atendido, así como, cuando usted bebe agua ya está saciada la sed. No puede existir un pedido que no pueda ser atendido.
Más, para que su pedido sea atendido, usted debe seguir el principio básico de la fe, crea que su pensamiento es verdadero crea, que su pedido ya está atendido por el hecho de pedir.
Si usted duda o no cree que va a recibir, ello significa que está mandando dos órdenes opuestas y conflictivas a su subconsciente.
Como su subconsciente es su empleado todopoderoso, que no discute órdenes, que no razona y que no selecciona, sucederá que él no encontrará condiciones para atenderlo a usted. Por ejemplo, si usted es una persona nerviosa y desea curarse del nerviosismo, por la ley del pedid y recibiréis, usted orará así, repetidamente: "Yo soy calmoso, yo soy calmoso, estoy tranquilo, yo soy calmoso".
Al poco tiempo se encuentra con una amiga que le pregunta como está usted, y usted ya comienza a decir que se siente muy nervioso; que no duerme bien, y cosas así. Evidentemente ha enviado dos órdenes opuestas a su subconsciente.
Primera orden: yo estoy tranquilo.
Segunda orden: yo estoy nervioso.
He ahí por que muchos pedidos y oraciones no son atendidos.
Y CUANDO USTED ES ATENDIDO EN SENTIDO CONTRARIO
Yo decía más arriba que cuando usted no es atendido, es porque está haciendo dos oraciones opuestas. Pues bien, para completar mejor la idea, le digo que usted siempre es atendido: positiva o negativamente. Porque, entre dos órdenes opuestas y contradictorias, en una usted cree mucho más que en la otra. Y, en estos casos, generalmente usted pone mucha más emoción, mucha más energía, en el pensamiento negativo.
Ocurre muchas veces, también, que usted mentaliza durante diez o quince minutos por día aquello que usted desea y pasa el resto de las veintitrés horas y cuarenta y cinco minutos mentalizando que "es inútil, eso no sucederá".
Un día, una señora me vino a buscar porque estaba afligida, ya que su marido había dejado de prisa la ciudad donde vivían y no le había dicho a donde iría a quedar, pues no quería que nadie supiese su paradero, por razones de negocios. Los días pasaban y el marido no telefoneaba. Ella no sabía dónde se encontraba ni que era de la vida de él.
Yo le dije: – Hable mentalmente con su marido y pídale que le telefoneé.
– Pero yo no sé dónde se encuentra –respondió ella.
– No importa –repliqué–. Hable en su pensamiento. Para el pensamiento no existe espacio, ni distancia, ni barrera. Vea a su marido delante de usted y dígale que le telefoneé. Él recibirá su recado a través del subconsciente y atenderá su deseo.
La mujer halló la idea un tanto estrafalaria, pero fue confiada para su casa.
Una semana después volvió y me dijo que nada había sucedido.
– ¿Pero usted está mentalizando como yo le dije?
– Sí –respondió ella–. Hasta voy a una iglesia y pido, pido mucho para que él me telefoneé.
– ¿No será que usted está dudando de que eso pueda suceder?
Ella reconoció que, en el fondo, no creía mucho en eso, aunque deseaba que aconteciese.
Insistí en que podía tener la absoluta certeza de que él le telefonearía.
Dos días después ella vino corriendo a contarme que su marido había llamado tres veces en aquel día para hablarle, pues las dos primeras veces no le había encontrado en casa.
Usted necesita creer. Deshágase de las barreras negativas. Su mente es cósmica, es universal, y usted puede entrar en contacto con todo el universo.
Cierta vez, estuvo conmigo una señora que sufría ataques. Le di una oración por la cual ella se consideraría curada, con su cerebro y su mente funcionando correctamente, en la justa y recta orden divina.
Tiempo después ella volvió bastante decepcionada. Cada vez que notaba que habían terminado los ataques, era entonces cuando volvían. Ahí estaba una oración adversa. Cuando los ataques cesaban, en la mente de ella surgían sentimientos de duda y desconfianza: ¿será que pararon realmente?, ¿será que hoy me dará de nuevo?
Esos sentimientos de miedo, de expectativa y de incertidumbre, estaban uniendo de nuevo la mente a la programación de los ataques y todo acontecía de acuerdo a ello.
Esto me recuerda una frase de Jesucristo: "Quien pone la mano en el arado y mira hacia atrás, no es digno de mí".
Al pedir, no se vuelva hacia las imágenes de la dolencia. Imagínese recuperado y perfecto. Fije en la mente sólo la imagen verdadera. Y su subconsciente reaccionará de acuerdo a ello.
Tener fe es creer que la imagen colocada en la mente se vuelve realidad física.
"Sea hecho conforme a lo crees", dijo Jesús.
EL OBJETO DE LA FE PUEDE SER VERDADERO O FALSO
Felipe Paracelsus, médico, alquimista y erudito suizo-alemán que vivió de 1490 a 1541, fue un innovador de la medicina de su tiempo e intentó descubrir el elixir de la larga vida. Es interesante esta afirmación suya: "Ya sea el objeto de su fe verdadero o falso, los efectos obtenidos serán los mismos. Así, si yo tuviera fe en la estatua de San Pedro, como debería tenerla en el propio San Pedro en persona, obtendré los mismos resultados que habría obtenido de San Pedro. Pero esto es superstición. La fe, con todo, produce milagros; y ya sea falsa o verdadera, producirá siempre las mismas maravillas".
No es, por tanto, el objeto, o la religión, o la imagen, lo que produce los resultados: es la fe que usted tiene de que ese objeto, o esa religión, o esa frase, o esa oración, o esa imagen, producen el resultado que hará que eso acontezca.
La fe es una fuerza irresistible inmanente en usted; en el fondo es la propia Fuerza Divina existente en usted. Esta fuerza obra, no movida por aparatos exteriores, sino por su pensamiento. Recuerde que creer es aceptar su pensamiento como verdadero, ya sea de hecho verdadero o no.
Cuando usted cree en alguna cosa, su pensamiento se dirige sólo en esa dirección y entonces acciona el Poder Infinito, que está dentro de usted, y el Poder Infinito cumple.
Cuando usted envía una idea, en la cual cree, a su subconsciente, éste trata de cumplir.
Si usted cree que es nervioso, queda nervioso; si usted cree que es tranquilo, permanece tranquilo.
Frecuentemente las personas me preguntan si los trabajos de brujerías se pegan.
– Hicieron un "trabajo" contra mí y desde entonces todo me está saliendo mal.
– Enterraron mi fotografía en el cementerio y siento miedo. Ya perdí el empleo. Estoy despavorido.
– Tiraron un embrujo en la puerta de mi casa. Comencé a estar enfermo.
– Él me dijo que, si yo no volvía, no sería feliz. Mire, perdí a mi novio.
Otras personas me cuentan:
– Un día me dijeron que, si yo no hacía un "trabajo", no obtendría empleo. No creí en eso y, en seguida, tuve la oportunidad de un empleo formidable. Estoy óptimo, mejor que nunca.
– Yo tenía una vecina muy envidiosa, que sólo me deseaba desgracias. Ella hizo ciertos "trabajos" para quitarme el novio. Hice como usted me dijo: comencé a mentalizar todos los días que ella era maravillosa, hija de Dios, perfecta, le desee todo lo bueno, y la imagine amiga mía, sincera. Poco tiempo después ella comenzó a saludarme y nos volvimos grandes amigas.
Yo podría continuar citando muchos casos. Para unos el "trabajo se le pegó"; para otros hasta fue la razón de mayor éxito. Esto quiere decir que no es el "trabajo" el que provoca ésta o aquella situación, sino el pensamiento que usted crea en su mente en relación a ese tipo de cosas.
Nadie puede perjudicarle a usted, a no ser usted mismo. Ese tipo de cosas se pegan si usted CREE que resultan, no se pegan si usted CREE que no se pegan. ¿Me explico? En últimos análisis, todo comienza y termina en su mente.
Algún tiempo atrás vino a conversar conmigo un señor de cierta edad. Él tenía en la cabeza la creencia de que todo lo que era mal hecho se debía atribuir al demonio. Creía férreamente en el demonio y decía que las personas generalmente estaban endemoniadas, porque no siempre hacían el bien. Yo le dije que esta historia de demonios era superstición y le expliqué el significado de la palabra. Días después, él apareció desalentado y, desde la escalera me inquirió severo:
– Entonces, ¿usted no cree en los demonios?
– Depende –le respondí–. Lo que puedo afirmarle es que ese tipo de demonios que vivirían aquí en la tierra para tentar a la gente, para inducirnos al mal, no existen, porque sería ridículo atribuir una obra de ésas al Creador, que es Amor y Bondad.
– Entonces –respondió él, vehementemente– voy a mandarle una banda de demonios y usted verá.
Yo sonreí complaciente y le dije:
– Puede mandarme todos los demonios de Santa María, de Río Grande do Sul, del Brasil y del mundo entero. Mándelos a todos para acá, así el resto del mundo queda limpio.
Claro, yo no me preocupé por lo que él me dijo. Otra persona tal vez habría quedado perturbada y cualquier cosa negativa que hubiera acontecido la habría llevado a concluir: Vio, ya está sucediendo.
Vuelvo a recordar aquí a Shakespeare: "El bien y el mal no existen, es el pensamiento el que los crea".
LA MUJER QUE MURÍÓ EN EL DÍA PREDICHO
En 1978, el programa de televisión "Fantástico", de la Cadena Globo, presentó el caso de aquella mujer que consultó a una cartomántica y ésta le dijo que había algo ruin en la vida de ella y no quiso revelar nada más. Como la consultante insistió mucho, la cartomántica reveló que ella moriría en la primera quincena de agosto de aquel año. La mujer quedó terriblemente impresionada con la comunicación. Claro, ella creía en el pronóstico, en caso contrario no habría ido a consultar a la cartomántica. Lo que sucedió con aquella mujer fue que, realmente, en agosto fue encontrada muerta junto al teléfono de su casa. Vea usted cómo la fuerza de la sugestión puede alcanzar cualquier objetivo, benéfico o perjudicial. La mujer quedó extremadamente impresionada con la revelación y esa idea ya no le abandonó la mente. Al recibir una orden de esas, tan fuerte y tan cargada de emoción, el subconsciente de la mujer trató de tornarla realidad.
La sugestión es una fuerza irresistible. Como escribió Emile Coué: "Recelar de una dolencia es ocasionarla". "Recelar de la muerte, es ocasionarla", ¿No es así?
En el caso de aquella mujer carioca, quien trazó ese destino fue la consultante y no la cartomántica, porque, aunque la precognición fuese verdadera en aquel momento en que tiraba las cartas, la verdad es que toda persona tiene el poder de conducir y cambiar su vida conforme lo desee.
La criatura humana, por el hecho de tener libertad y capacidad de nuevas opciones a cada instante, puede, consecuentemente, modificar cualquier precognición, por más verdadera que sea.
Esto significa que usted debe conducir su vida conforme a su determinación, y no ser llevado por la vida, como lo hacen muchas personas. Estas sí que quedan a merced de la suerte y de influencias extrañas.
No crea en un destino fatalista.
Usted puede modificar su destino en cualquier momento.
Crea que existe una Sabiduría Infinita dentro de usted e invóquela siempre para que ella lo conduzca por lo mejor y para lo mejor.
Ejerza usted mismo ese poder y entonces estará por encima de las influencias negativas.
HABÍAN PREDICHO MI MUERTE
En agosto de 1979 fui elegido por el Departamento de Filosofía de la Universidad Federal de Santa María para participar en un Congreso Nacional de Posgrado en Filosofía, a realizarse en Río de Janeiro.
Ya había comprado los pasajes de avión cuando una señora, cartomántica, se mostró muy preocupada por mi viaje y, hasta en una reunión, pidió a las personas amigas que hiciesen una "aseguración" para protegerme en ese viaje. Antes de viajar ella me invitó a un almuerzo y me dio a entender que había visto que ocurriría un accidente conmigo, en el viaje, y que yo moriría en él. Esa señora había previsto la muerte de su marido y recibió por telepatía la comunicación de la muerte de su hijo, que falleció en un accidente.
Pues bien, estaba preparado el escenario para que yo me llenará de pavor. Yo, sin embargo, pensé que soy dueño de mi vida y puedo cambiar, a cada instante, mi destino, y por eso, decidí que haría un viaje maravilloso: me imaginé llegando de vuelta sano, alegre y feliz. No es preciso decir que todo ocurrió a las mil maravillas.
Si usted ora, con convicción absoluta, esta plegaria afirmativa: "La Presencia Infinita, que está en mí y que lo sabe todo sobre todo y sobre todos, me guía y me protege", entonces nada malo puede acontecerle.
Usted será siempre conducido de tal forma que irá únicamente por caminos seguros y benéficos. La Presencia Infinita lo guiará de tal manera que todo accidente o tragedia sea evitado y lo protegerá para que no sufra ningún tipo de asalto o de mal.
Dios está en usted y actúa por usted. Déjese guiar divinamente y acabe con todos los miedos. "Nadie levantará la mano contra ti para hacerte mal" (Hechos 18:10).
NO DÉ PODER A NADIE
En el último verano, una joven me dijo que estaba enferma porque le habían hecho un mal.
Le expliqué que tenía un Poder Infinito dentro de sí, que la guiaba y la protegía, más si ella daba ese poder a otro, esa persona mandaría en ella.
– ¿Cómo puedo dar poder a otro? –preguntó, incrédula, la joven.
– Dejándose influenciar. Si usted se deja influenciar, está aceptando la orden dada por otra persona, y todo lo que su subconsciente acepta, se torna realidad física. Por tanto, nunca de poder a alguien que pueda perjudicarla.
Si usted asume el pensamiento de los otros, ocurrirá en usted lo que los otros quieren que acontezca.
Cuanto más cargado de emoción fuere el pensamiento, con más fuerza y rapidez ocurrirá el resultado.
Examínese ahora y verá que innumerables veces usted dio poder a otros; por ejemplo, cuando le dijeron que usted es fea y usted lo admitió y pasó a considerarse fea; cuando le dijeron que su cuerpo es desgarbado y usted pasó a aceptar eso; cuando le dijeron que no era inteligente y usted pasó a considerarse atrasada; cuando le dijeron que usted es un aguafiestas y usted pasó a considerarse una persona no bien vista; cuando le dijeron que usted no sabe decidirse y usted pasó a ser indecisa y medrosa; cuando le dijeron que las personas sólo quieren explotarlo a uno y usted comenzó a temer a las personas; cuando le dijeron que viajar es peligroso y usted dejó de viajar; cuando le dijeron que comer sandía y tomar vino hace mal y usted se dejó condicionar; cuando le dijeron que mojarse los pies en la lluvia provoca gripe y usted aceptó esa orden; y así sucesivamente, sucesivamente. Haga ahora una limpieza general en su mente. Asuma usted mismo el comando de su barco, pues nadie lo ama mejor a usted que usted mismo; por tanto, nadie buscará con más acierto su beneficio que usted mismo.
Edison, el genio de la electricidad, cuando entró a la escuela, ya en el tercer mes de clases el profesor lo consideró un perfecto idiota y lo mandó a casa, porque nunca aprendería nada. Si Edison hubiese aceptado esa orden negativa, dada por una autoridad en el asunto, no habría pasado de ser una persona marginada en la vida.
Leí, cierto día, que una de las mayores cantantes líricas de todos los tiempos, Madame Schumann-Alink, cuando joven, fue ante un profesor de canto a realizar una prueba de voz.
El profesor la escuchó durante algunos minutos, y, entonces, bruscamente la interrumpió para decirle: "Está bien. Vuelva a su máquina de coser. Usted podrá ser una excelente costurera. Cantante, jamás".
¿Qué hubiera acontecido si la cantante hubiese prestado oídos al profesor?
Oí hablar también de que el famoso compositor Joaquín Rossini, autor de la célebre ópera "El Barbero de Sevilla" y otras, cuando comenzó a estudiar música fue decididamente desaconsejado por su profesor, quien hallaba que él no tenía dones para la música.
Quiero que usted fije en su cabeza que nadie puede perjudicarlo a usted a no ser usted mismo. Si usted cree en una sugestión negativa dada por alguien, no es ese alguien quien, en verdad, le está perjudicando a usted, sino que es usted mismo quien se está perjudicando, por haber asumido la sugestión y haberla hecho suya.
Nunca se perturbe por nada y haga que la Sabiduría Infinita, que habita en su ser íntimo, lo oriente correctamente, en la dirección del amor, del éxito, de la felicidad y de la vida.
USE LA FUERZA DE LA SUGESTIÓN PARA VENCER
Existen dos corrientes en el mundo: la positiva y la negativa.
Las personas que, desde la infancia, se sumergen y son sumergidas en la corriente negativa, llevan una vida desagradable, llena de defectos y de infelicidades. Sienten necesidad de agua limpia pero viven hundidas en el lodo. Cualquier palabra que les sale de la boca viene compuesta de malos fluidos, como la amargura, la amenaza, la angustia, la frustración, el odio, la envidia, el celo. En los negocios procuran siempre pasar debajo de la puerta. Nunca levantan la cabeza, por vergüenza o por miedo. Para esas personas, todo es malo, es feo, es peligroso, es azaroso. Cuando se casan, ya entran en ese camino desconfiando que no dará resultado y miran con desconfianza a su pareja. Si esas personas tuvieron formación religiosa, se conformarán con la amargura diciendo que nacieron sólo para sufrir, a fin de pagar los pecados, aplacar la ira divina y, de esta forma, conseguir un lugarcito en el cielo, aunque sea en el último agujero. Si no tuvieron formación religiosa, maldecirán a la vida.
Es preciso, entretanto, saber que una reprogramación mental hace milagros.
Por otra parte, quien nació sumergido en la corriente positiva, o sea, en el envoltorio del amor, de la alegría, de la seguridad interior, en la certeza de que la vida reserva siempre lo mejor, enfrenta con entusiasmo cada paso y es un victorioso nato. Cree que la vida es un don maravilloso para ser usufructuado y, de hecho, la vida acaba ofreciéndole todo lo que desea. Descubrió que dentro de sí existe un Poder Infinito y que basta pedir socorro a este poder, con convicción y fe, para obtener lo que le es debido como ser humano creado a imagen de Dios. Él es envuelto por un aura positiva y todo en su entorno le trae satisfacciones. Todo lo que sale de su boca es, en la mayoría de las veces, mensaje de fe en la vida, en las personas, en el Creador, en sí mismo. Sus ojos brillan con la fuerza del vencedor, su cabeza se yergue airosa y su cuerpo marcha firme, sabiendo hacia dónde, cómo y porqué.
El mundo está dividido en dos tipos característicos de personas y, en el medio, los más o menos.
Emile Coué ya había escrito, hace mucho tiempo, que "el hombre es aquello que piensa".
Desde las primeras horas del día usted recibe innumerables mensajes, que accionarán su pensamiento. La radio, el diario, las personas, los carteles, las imágenes, los gestos, en fin, todo lo que entra por sus sentidos va a poblar su mente, que, a su vez, será impresionada por la fuerza de la sugestión de cada mensaje. Es por eso que se afirma que la sugestión ejerce una fuerza incalculable en la programación mental de cada persona.
Por la autosugestión positiva usted puede determinar que el subconsciente alcance lo que usted desea. En el subconsciente residen el Poder Infinito y la Sabiduría Infinita, que actúan de acuerdo a las impresiones recibidas en forma marcante y unívoca.
Cuando usted está con dolor de cabeza, puede sugestionar al subconsciente afirmándose a sí mismo que está con perfecta salud y que siente la cabeza liviana, descongestionada y sedada, y el subconsciente transformará esta orden en una realidad física.
Conocí a una pequeña que, acosada por un fuerte dolor de cabeza, se sentó en una poltrona, cerró los ojos y, calmadamente, comenzó a repetir con fe: "Está pasando, está pasando, está pasando". Continuó repitiéndolo durante algunos minutos y el dolor pasó completamente.
La sugestión, en verdad, es una fuerza poderosa, que debe ser utilizada en su beneficio. La sugestión presiona el botón del subconsciente y le hace abrir las compuertas del poder y de la sabiduría. La sugestión tiene más fuerza que la realidad y torna sumisa a la mente subconsciente.
Si usted hipnotiza a una persona y le sugiere que ella está con un calor terrible, ella sentirá inmenso calor y reaccionará como quien está en un verano insoportable, aunque el ambiente sea intensamente frío. El subconsciente no tomó conocimiento de la realidad y sólo tomó conocimiento de lo que le fue determinado por la sugestión.
Realice el experimento de acercarse a una persona y dígale: "¡Caramba, qué pálida está! ¡Santo Dios, usted está enferma!". Ella quedará impresionada y hasta se sentirá enferma. Es el poder de la sugestión.
Si usted le dice a una amiga: "¡Oh, qué bonita estás!", su amiga quedará radiante y se sentirá realmente linda.
La vida toda está hecha de sugestiones. Positivas y negativas.
La sugestión puede curar y puede enfermar a una persona.
Puede enriquecerla y puede empobrecerla. Puede elevarla y puede rebajarla.
Emile Coué, quien trabajó mucho en la cura por el proceso de la sugestión y la autosugestión, enseña un método muy simple, práctico y que da grandes resultados. Manda él que la persona repita veinte veces, a la noche y por la mañana, la siguiente frase: "Todos los días, desde todos los puntos de vista, voy yendo cada vez mejor y mejor en todos los sentidos". La afirmación debe ser hecha con los ojos cerrados, con sentimiento, y de tal forma que usted pueda oír sus propias palabras, como si fuese una letanía.
Los mejores momentos para ese ejercicio son a la noche, acostado, cuando usted ya está queriendo conciliar el sueño, y a la mañana, cuando acaba de despertarse y todavía está en estado de semi somnolencia.
La frase señalada por Coué es completa y encierra todo lo que usted desea. Esta sugestión, repetida en momentos estratégicos, le dará resultados maravillosos.
Emile Coué, quien pasó toda la vida trabajando en el mundo de la mente, después de innumerables experiencias, llegó a las siguientes conclusiones: "Cuando la voluntad y la imaginación están en conflicto, es siempre la imaginación la que vence, sin ninguna excepción. En la lucha entre la voluntad y la imaginación, la fuerza de la imaginación está en razón directa a lo encuadrado en la voluntad".
Y concluye Coué que, "cuando la voluntad y la imaginación están de acuerdo, se multiplican el poder y la fuerza tanto de la voluntad como de la imaginación".
He ahí un descubrimiento fantástico para usted: el uso de la imaginación para obtener lo que desea. La imaginación siempre vence a la voluntad. Le ocurre en la vida no tanto lo que usted quiere que acontezca, sino lo que usted IMAGINA que acontecerá.
La imaginación y la sugestión generan la realidad porque accionan el subconsciente en esa dirección.
Recuerdo una humorada, que puede ilustrar el hecho. Hacía apenas cinco minutos que la clase había comenzado, cuando un alumno levantó el brazo y pidió a la profesora:
– Profesora, ¿puedo ir a beber agua?
– No, ahora no. Debía haber bebido antes de la clase.
Cinco minutos después, el mismo alumno:
– Profesora, ¿puedo beber agua?
– No, no puede.
Ni bien pasaron otros cinco minutos, el alumno volvió pedir:
– Profesora, ¿puedo tomar agua? Estoy con una sed insoportable.
– Pues, piense que está con frío y la sed pasará.
Cinco minutos después:
– Profesora, ¿tiene una manta?
Es una anécdota. Más, podría haber sido verdad. La sugestión todo lo puede.
REPITA, REPITA, QUE SE GRABA
Toda orden que usted envía al subconsciente, con determinación, él trata de realizarla.
Muchas veces usted se queja de que no consigue las cosas que mentaliza, pero se olvida de que hay una dicotomía en sus pensamientos.
Doña Julieta era una señora muy nerviosa. Yo le redacté una oración que ella debería mentalizar por la noche, a la mañana y algunas veces más por día, principalmente cuando se sintiera agitada. Ella hacía la oración metódicamente. Y vino a quejarse de que no había progresado nada. En la oración se decía a sí misma que era tranquila, que era muy tranquila, pero en realidad muy pocas veces ocurría eso.
Intenté saber lo que ocurría en la mente de doña Julieta y observé que, al mismo tiempo que se programaba para ser tranquila, tenía la sensación de que era nerviosa, y hallaba que estaba mintiéndose a sí misma; por otra parte, cada vez que se encontraba con amigas y comadres, el tema recaía, invariablemente, sobre su nerviosismo. Así, eran dos fuerzas que luchaban dentro de ella, queriendo cada una imponerse al subconsciente.
Ella estaba realizando, en realidad, dos oraciones opuestas y contradictorias. Es eso lo que ocurre cuando la oración no es oída.
¿Qué hacer, entonces, para resolver la situación?
Buscar otro camino, un camino muy usado por las agencias de publicidad.
Usted conecta el televisor porque tiene interés en su programa, en su novela, en su película. Pero, en medio de su programa, usted tiene que aceptar la propaganda que es exhibida. Aparentemente, usted permanecerá indiferente a las propagandas, pues lo que usted quiere realmente es ver su programa. Mientras tanto, usted ve demostraciones sobre esa o aquella crema dental, el cigarrillo tal, de los coches de lujo el que aventaja a todos, esa bebida que conquista a las mujeres, esa financiera que rinde más, aquella tienda que vende eso y aquello, y así sucesivamente. Conscientemente está ligado sólo a su programa, pero la propaganda acaba por influenciarlo y usted adquirirá el producto. Su subconsciente aceptó el mensaje después de tanta repetición y usted acabó entrando en la compra.
La repetición es una forma de impresionar al subconsciente.
Cuando usted está nervioso, si repite y repite: "Yo soy tranquilo, yo soy muy tranquilo", y continúa repitiéndolo, quedará tranquilo.
No use la formulación negativa, porque la palabra crea la imagen negativa.
Por ejemplo, si usted dice "yo no estoy nervioso", la imagen que más se le grabará, por cierto, es la de la palabra "nervioso", y ésa es una imagen negativa. Simplemente afirme la imagen que usted desea: "Yo soy tranquilo".
No se preocupe si inicialmente nada ocurre.
Llamad y se os abrirá, ya lo decía el gran Maestro Jesús.
TODO LO QUE PIDIEREIS AL PADRE, EN ESTADO DE ORACIÓN, CREYENDO QUE HABRÉIS DE ALCANZAR, LO ALCANZARÉIS.
Fue Jesucristo quien dio una de las más perfectas definiciones del poder de la mente, cuando afirmó:
– Todo lo que pidiereis al Padre, en oración, creyendo que habréis de alcanzarlo, lo alcanzareis.
Vale la pena que hagamos un análisis de esa afirmación.
Primeramente, quiero atraer su atención hacia la palabra TODO. En verdad, el Poder Infinito, que reside en su intimidad, le concede todo, sin ninguna excepción. Si usted pudiera pedir alguna cosa que le fuera imposible alcanzar, o si pudiese pedir algo que no existiese, estaría frustrada la afirmación de Jesús. Pero la ley del "Pedid y Recibiréis" es una ley universal y, consecuentemente, infalible. Así como son infalibles las leyes universales de la física, la química, la mecánica, la electricidad, la astronomía, etc., así también son infalibles las leyes de la mente. Entonces, observe bien, todo puede pedirlo usted y todo lo puede conseguir.
Puede pedir, por ejemplo, amor, casamiento, salud, paz interior, sueño tranquilo, casa, automóvil, riquezas, felicidad, armonía, inteligencia, memoria, empleo, viaje, alegría, tranquilidad, seguridad interior, coraje, confianza en si mismo, sensibilidad, intrepidez, éxito, cosecha abundante, recibir lo que le es debido, y TODO lo demás que usted pueda imaginar de bueno.
Vamos a la siguiente palabra de la frase de Jesús: PIDIÉREIS.
Usted necesita pedir, esto es, precisa saber lo que desea. ¿Cómo quiere que el Poder Infinito le consiga algo si usted no definió lo que quiere, o peor aún, no sabe lo que quiere?
Sepa que Dios, quien está dentro de usted, solamente puede actuar en usted por usted. Dios no puede retorcerle el cuello para que usted pida sólo cosas buenas, así como no puede actuar por su cuenta dentro de usted. Si así ocurriese, imagine que confusión se crearía en su vida: usted deseando una cosa y Dios llevándolo hacia otra cosa. No, en verdad, Dios conoce lo que es mejor para usted, pero le dio la libertad.
Por la libertad usted tiene la dimensión de Dios y puede concordar con Él, discordar de Él, desconocerlo y hasta ir contra Él.
Dios siempre lo escucha y no puede dejar de hacerlo, porque usted es el propio Dios manifestado en el mundo.
Jesús enseñó cierta vez: "Pedid y recibiréis, llamad y se os abrirá, buscad y hallaréis". (Lc.11,9).
En otra ocasión, el Maestro dijo: "Cuando ores, entra a tu aposento, cierra la puerta y ora a tu Padre en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. No habléis mucho cuando oréis, como hacen los gentiles, que esperan ser atendidos por causa de su palabrería" (Mt.6,5-7).
Aquí podemos detenernos ya en la palabra PADRE. Jesús llama Padre a Dios. Dios tiene muchos nombres.
Unos lo llaman Poder Infinito, otros lo llaman Padre, otros aún lo llaman Ser Superior, Yo Superior, Gran Arquitecto, Mente Cósmica, Energía Eterna, Mente Universal, Señor, Vida, Presencia Infinita, Espíritu Santo, Gran Espíritu, Subconsciente, Fuerza Divina, Materia Eterna, y tantos otros nombres.
– Yo y el Padre somos uno –dijo Jesús.
Usted también es uno con el Padre. Es por eso que Jesús dijo que cuando "fueres a orar, ora a tu Padre, que está en lo secreto".
–Quien me ve a mí, ve al Padre –también dijo Jesús.
Quien lo ve a usted, ve al Padre, porque su espíritu emana del Espíritu de Dios; por eso usted es parte de Dios y uno con Dios. Ahí reside su fuerza, su poder, su sabiduría, su grandeza y divinidad.
Cuando usted fuere a orar, por tanto, entre dentro de sí mismo. Es eso que Jesús quería significar cuando dijo que usted debe pedir EN ESTADO DE ORACIÓN.
"Cuando orares, entra en lo secreto y, cerrando la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto..."
Esta es una invitación para que usted entre en estado de oración, en concentración mental, en nivel alfa, en estado de meditación; en fin, cuando usted va a orar o pedir algo, procure descender a las profundidades de su mente, pues ahí su oración llega más límpida, sin las dudas y obstáculos creados muchas veces por la mente consciente. Cuanto más profunda sea su concentración y más pasiva estuviere su mente consciente, con más fuerza usted grabará en el subconsciente su pensamiento.
Como en estado de profundidad mental disminuyen las reacciones contrarias de la mente consciente, con más facilidad y seguridad usted CREE QUE ALCANZARA LO QUE DESEA.
Este es un requisito más para ser escuchado: creer que, por el hecho de pedir, ya está alcanzado el pedido.
Creer es tener certeza. Cuando usted duda, envía dos órdenes contrarias al subconsciente: una es la orden de aquello que usted desea y pide y la otra es el sentimiento vacilante de que tal vez sea escuchado.
Jesús dijo, cierta vez, algo sencillamente asombroso: "Aquel que cree en mí, hará las cosas que yo hago, y las hará aun mayores" (Juan 14,12).
Cuando usted va a retirar dinero de un banco, basta que llene correctamente el cheque, tenga fondos, entregue su cheque al cajero y quede esperando el dinero con la tranquilidad y la certeza absoluta de que lo recibirá.
Hágalo así cuando pida algo. Cree el sentimiento de certeza de que, por el hecho de pedir, ya lo está obteniendo.
Así, libre de preocupaciones, de dudas, de miedos, de incertidumbres y de ansiedades, usted lo ALCANZARA.
Toda oración es infalible.
"Padre, yo te doy gracias por haberme oído. Bien sabía que me oyes siempre" (Juan 11,41-42).
AHORA PONGA EL MUNDO A SUS PIES
Usted ya leyó en la Biblia que es el rey de la creación y, consecuentemente, el dueño del mundo. Entonces, levántese y ponga el mundo a sus pies. Comience desde ahora a construir su mundo. Sea usted el ingeniero y el arquitecto de su vida.
Usted es uno con el Padre, por lo tanto, no diga que es un gusano rastrero, no diga que es un miserable, ni diga que está viviendo en un valle de lágrimas.
Usted tiene un Poder Infinito y una Sabiduría Infinita para escoger lo mejor y conseguir lo mejor.
Perciba que usted es poderoso y libre. Sus ansias de amor y de felicidad, sus deseos de vivir en la abundancia y en la salud perfecta son normales y justos. Anormales son la miseria, la enfermedad, el desamor, la infelicidad.
Levante la cabeza. Vamos. Levante la mente. Mire este mundo fantástico, lleno de bellezas y de riquezas, y entienda que él fue creado para usted. ¿Puede existir herencia más fabulosa?
Use la Fuerza Divina y tendrá el mundo a sus pies.
Use el Poder Infinito, que está dentro de usted, y será un triunfador.
Use la Sabiduría Infinita, que está en usted, y sabrá llegar a donde desea.
Sumérjase en la Presencia Infinita y nada malo podrá acontecerle.
Proclame con vigor, para sí mismo: yo soy un vencedor. Así es y así será.
HÁGASE TU VOLUNTAD ASÍ EN LA TIERRA COMO EL CIELO
Había gran expectativa cuando fue abierta la tumba de Hermes, pues se decía que allí dentro estaría el gran secreto de la humanidad.
Al abrir con el mayor entusiasmo la sepultura, fue encontrada en su interior la siguiente frase:
"Cómo es allá dentro, así es aquí fuera;
Cómo es allá arriba, así es aquí abajo".
Esta frase me llevó a otra de un autor mucho más famoso que Hermes:
"Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo."
Esta última afirmación es de Jesucristo.
Tanto una como la otra encierran una verdad de extrema profundidad.
La frase de Hermes puede significar que, así como es en su mente, así es en la realidad de afuera.
La frase de Jesús también contiene una verdad profunda y trascendental.
Un día yo estaba caminando por las arenas de las playas de Tramandaí, cuando repentinamente sentí el impulso de escribir el Padre Nuestro en poesía.
Al llegar a la afirmación: "Sea hecha tu voluntad así en la tierra como en el cielo", los versos me salieron así:
SEA HECHA TU VOLUNTAD...
Tu santa voluntad
Es darme la felicidad,
Es unirme sólo al Bien...
Y darme luego, enseguida,
Las buenas cosas de la vida
Que yo deseo también.
ASÍ EN LA TIERRA como en el cielo...
Dios está en la materia,
Que no contiene la miseria,
Porque Dios es perfección.
Si mi cuerpo está enfermo,
¡Me uno a Dios nuevamente
Y de nuevo quedo sano!
Así en la tierra COMO EN EL CIELO...
La mente es un cielo eterno,
O, quizás, el propio infierno
Que en lo íntimo se trae.
Pero, haciendo tu voluntad,
Tendré un cielo de verdad,
De armonía, amor y paz.
Es de notar, pues, que hacer la voluntad del Padre no es dejar que las cosas sucedan como sucedieren.
Un día, una señora enferma de cáncer me dijo: "Cuando tomé conciencia de que tenía cáncer, lo dejé todo en las manos de Dios".
Entonces, le pregunté que era lo que ella quería manifestar con aquella frase. Aquella expresión, muy repetida en los medios religiosos, puede poseer un contenido fatalista, como si la persona resolviese más o menos así: Mala suerte, ahora que sea lo que Dios quiera.
¡Vamos! Dios nunca puede querer la enfermedad, porque Dios es perfección y sólo tiene deseos de perfección.
Si usted quiere hacer la voluntad de Dios, tratará de entrar en estado de perfección, esto es, en estado de armonía mental y física, en perfecta interacción entre la mente y el cuerpo, entre la "tierra y el cielo". Por tanto, ha de unirse a la salud y no a la enfermedad.
Cuando usted esté enfermo, diga que "sea hecha la voluntad de Dios así en la tierra como en cielo", o sea, desee que su mente y su cuerpo entren nuevamente en estado de salud, de armonía, de perfección.
ASÍ EN EL CEREBRO COMO EN LA MENTE
Un día el científico inglés Grey Walter se puso a hacer el cálculo para determinar cuánto costaría la fabricación de un computador electrónico que realizará todas las operaciones que efectúa el cerebro humano. Y el resultado del costo fue una cifra que correspondería al número quince seguido de diecinueve ceros, cálculos hechos en 1974, según la revista Realidad. Serían necesarios millones de computadoras para igualar el trabajo del cerebro. Dice el artículo de aquella revista que la "capacidad del cerebro, creen los científicos, podrá ser en breve elevada al doble, lo que permitiría al hombre evolucionar, en las próximas décadas, tanto como lo hizo en los últimos diez mil años. Aunque pueda parecer una perspectiva portentosa, la humanidad ya hizo aun más: en los primeros cincuenta años de este siglo dobló el conocimiento científico adquirido en más de cien mil años".
El doctor John Eccles, premio Nobel de Medicina, dijo cierta vez: "Yo puedo definir mi cuerpo y mi cerebro como masas físicas. Pero existe algo, además. No puedo definir mi propia existencia. Tal vez esté ahí el límite que el hombre necesita descubrir".
Se sabe que, hoy en día, el hombre utiliza apenas una pequeña porción de su cerebro. Es cierto que, en el momento en que consigamos develar más los misterios de la sede de nuestra mente, obtendremos resultados que nos traerán una vida más feliz, más agradable y más productiva. La mente y el cerebro funcionan de común acuerdo, pero el alcance de la mente trasciende al infinito las dimensiones del cerebro.
Por ejemplo, el hombre tiene capacidad para predecir el futuro, para ver a distancia, hasta con los ojos cerrados (clarividencia); tiene capacidad, aun, hasta para transportarse mentalmente a un lugar distante del cuerpo y, consecuentemente, del cerebro; tiene capacidad para captar el pensamiento de otro (telepatía); en fin, la capacidad de la mente, que a su vez no puede prescindir del cerebro, es ilimitada.
Hablando sobre el cerebro, Haroldo Shermann dice lo siguiente: "Si usted presenta, por medio de uno o más de sus cinco sentidos físicos, informaciones o circunstancias que están ocurriendo en el momento, algún artículo que esté leyendo o alguna experiencia que gustaría repetir, su mente, procediendo como un computador, asimila esos datos, los convierte en ondas cerebrales o impulsos eléctricos guardándolos en su memoria para uso futuro. Usted sabe, naturalmente, que la ciencia es capaz de medir las ondas cerebrales y que la inteligencia puede ser guardada en un fluido químico por reacciones electroquímicas según las experiencias de la vida y condiciones del ambiente."
Frecuentemente converso con personas que sufren de disritmia cerebral y esas personas se afligen como si se tratase de algo irreversible. Usted puede reorganizar el ritmo de su cerebro, determinando que su mente actúe, en ese sentido, sobre el cerebro.
Así como los mecanismos del cerebro pueden ser perturbados por pensamientos y sentimientos conturbados, que son capaces de generar verdaderas tempestades electromagnéticas, de esas que ocurren de vez en cuando en la superficie del sol, de la misma forma, pensamientos de armonía, de control y de equilibrio pueden producir la organización y el recto orden en su cerebro. ¿Por qué no?
Hace más de veinte años me hice un electroencefalograma, en Porto Alegre, y éste se presentó bien patológico. Algunos años más tarde me hice otro, y también presentaba disritmia. Ni esa vez ni en la otra tomé los remedios indicados, por falta de interés, lo confieso. En 1975 entré al mundo del poder mental y hace dos años me hice otro electro que se presentó saludable y normal.
La mente, que creó las células perfectas, puede restablecer el orden cuando haya desarmonía. Quien hizo lo máximo, que es crear, puede hacer lo mínimo, que es reorganizar.
APRENDA A ENTRAR EN ALFA
Entrar en alfa es entrar en estado de profundidad mental, de concentración o, como decía Jesucristo, es entrar en estado de oración. Es por medio de la relajación, de la calma como se entra al nivel alfa.
De acuerdo con la teoría corriente, existen cuatro estados de conciencia: nivel beta, alfa, theta y delta.
El cerebro emite minúsculos impulsos electroquímicos y la mayor o menor frecuencia de esas pulsaciones, o ciclos, determina su estado actual de conciencia.
Cuanto más elevada sea su frecuencia cerebral, menor será su capacidad.
Cuanto más baja es la frecuencia cerebral, mayor es su capacidad.
El nivel BETA es el estado mental en que usted se encuentra ahora. Es el estado de vigilia, es el estado máximo de la mente consciente. El nivel BETA representa el más alto ciclaje cerebral correspondiente a una media de 21 ciclos por segundo. No obstante, esa pulsación cerebral puede ser elevada hasta 60 ciclos o más, y esto ocurre cuando usted está agitado, nervioso, con pánico, asustado, despavorido, tenso, ansioso. Observe que cuanto mayor es su frecuencia cerebral, menor es su capacidad mental, a tal punto que la frecuencia máxima puede generar un "blanco total" en la mente e incluso paralizarla.
Usted vio que, conforme a la situación emocional, a su nerviosismo y a su tensión, la frecuencia cerebral va acelerándose más y más, y eso hace disminuir proporcionalmente su lucidez mental. Es por eso que muchos estudiantes dan mal los exámenes, aunque hayan preparado bien la materia: entran al examen en estado de tensión y pánico y esto sólo hace bloquear la inteligencia. Después, cuando todo acabó, cuando ya nada se puede hacer, al volver a casa comienzan a recordar las respuestas que no se les habían ocurrido en la sala de examen. Es obvio, pues ya más relajados, la mente comienza a funcionar mejor.
Vea, por otra parte, qué ocurre cuando dos personas comienzan a discutir violentamente, a intercambiar ofensas y a gritar. Aunque permanezcan en ese estado durante cinco horas, al final de todo percibirán que nada de lo que dijeron es provechoso. Es que en ese ciclaje cerebral la mente no razona bien. Paren, pues, de discutir, que eso no conduce a nada. En la discusión, poco o nada se aprovecha. El diálogo sí es conveniente porque el tono del diálogo es un tono calmo y, en este caso, la pulsación cerebral se aproxima a los 21 ciclos, lo cual permite un razonamiento lógico, analítico y comprensible.
Pero, el mapa de la mina está en el nivel ALFA.
Entrar a nivel ALFA es descender a un estado de relajamiento profundo, manteniendo la mente y el cuerpo, mediante técnicas adecuadas, en paz, en calma, sin tensiones físicas ni emocionales.
Usted consigue descender al nivel alfa no sólo mediante una relajación profunda, sino también por la meditación, por la contemplación, por la oración. El ritmo cerebral se sitúa entre 7 y 14 ciclos por segundo, siendo la media de 10,5 por segundo.
En este nivel más profundo aumenta el campo de su inteligencia, de su memoria, de su creatividad, de su inspiración, de su percepción sensorial y extrasensorial y su intuición es más aguda.
Es en este nivel en el que usted puede practicar clarividencia, telepatía, precognición y usar los demás dones extrasensoriales y paranormales.
Toda programación mental que usted hiciere en nivel alfa sensibilizará de modo efectivo su subconsciente.
Usted sabe que, cuanto más profundamente grabe una determinación o deseo en el subconsciente, más fuerte y rápidamente él cumple. En nivel alfa, por tanto, es el nivel ideal para grabar profundamente.
CÓMO ENTRAR EN NIVEL ALFA
Ponga, si fuese posible, una música calma y colóquese en una posición bien confortable. Relájese, relájese, relájese. Respire profundamente algunas veces.
Concentre su atención en las diversas partes de su cuerpo y vaya relajándolas una por una. Usted se estará relajando si siente, en esa parte, una especie de hormigueo, o levedad, o como si no existiese esa parte del cuerpo...
Ejemplo: "Mi cuero cabelludo está bien relajado; mi cabeza está bien relajada; mis párpados están relajados; mi rostro está bien relajado; mi cuello está bien relajado; mi garganta está bien relajada; mis pulmones están bien relajados; mi corazón, está bien relajado; mi estómago, abdomen, intestinos y todos los órganos internos están bien relajados; mis caderas están bien relajadas; mis muslos están bien relajados; mis rodillas están bien relajadas; mis piernas están bien relajadas; mis pies, plantas de los pies y dedos de los pies están bien relajados; mis brazos están bien relajados; mis manos y dedos de las manos están bien relajados. Mi mente está ahora despejada, límpida, en paz y calma; mi corazón sede de mis afectos, está en paz, iluminado, feliz, lleno de buenas emociones positivas. Ahora hay una perfecta interacción entre mi mente, mi corazón y mi cuerpo. Estoy sintiéndome más liviano, más liviano, como flotando en un mundo maravilloso. Siento en mí la serenidad de un lago azulado..."
Relájese más y más.
Ahora usted está en condiciones de programarse, de enviar alguna orden a su subconsciente; está en condiciones de estudiar y de resolver problemas.
Si usted está embarazada, entre en alfa y hable con su bebé: dígale que lo ama, que lo espera con entusiasmo; manifieste su cariño por él; desee que se desarrolle sano, feliz e inteligente
Una persona en nivel alfa es mucho más receptiva. Si usted desea, por ejemplo, irradiar energías de salud para su hijito, mándele que diga cualquier oración –basta que una criatura rece y ya está en alfa- y en ese momento irradie hacia él lo que usted desea.
ESTUDIE EN NIVEL ALFA
Cuando usted va a estudiar, nada mejor que entrar en alfa, pues aprenderá con más facilidad y grabará mejor en la memoria. Para que usted aproveche al máximo su tiempo de estudio, procure observar los siguientes aspectos:
– Guste de la materia que va a estudiar. Si nunca le gustó, busque razones, argumentos, algo que haga que le guste. Así aprenderá más, gastando menos energías, pues evitó conflictos de intenciones.
– No se aflija porque tiene muchas cosas que estudiar: concentre su atención solamente en aquello que usted determinó que estudiaría ahora.
– Logre que el ambiente de estudio sea tranquilo y silencioso.
– Aparte de su mente los problemas, los enojos y enfados del enamorado, del miedo de no aprobar, de la presión de sus padres
Colóquese en una posición cómoda, relájese, invoque a la Sabiduría Infinita, que existe dentro de usted, y determine que entenderá todo con facilidad, lo guardará en la memoria y lo recordará con precisión, cuando lo desee.
Ahora, comience a estudiar, siempre calmo, descontraído, en alfa.
EL NIVEL THETA ES UN NIVEL MÁS PROFUNDO
El nivel Theta es el último nivel mental que usted alcanza en estado consciente. El ritmo cerebral baja entre 4 y 7 pulsaciones por segundo. Es como si usted estuviese en estado de somnolencia. Llega al límite del sueño. Pero está todavía consciente, aunque en baja frecuencia. Cuanto más baja es la frecuencia, en estado consciente, mayor es la energía mental. Dícese del famoso inventor Edison que, cuando no encontraba solución para completar un invento, se acostaba en un banco, en la fábrica y dormía una "siestita". Cuanto más disminuye la frontera entre la mente consciente y la mente subconsciente, más se aproxima usted a la Sabiduría Infinita, al Yo Superior, a la Mente Cósmica.
Aproveche, pues, la hora en que va a dormir y déjese adormecer con el pensamiento unido a aquello que usted desea solucionar. Obtendrá la respuesta del subconsciente y esta respuesta no puede ser nunca equivocada.
NIVEL DELTA ES EL SUEÑO
Cuando usted desciende a un ritmo cerebral por debajo de theta, entonces entra en DELTA, que es el sueño.
El ritmo cerebral de delta se sitúa entre 4 y 0,5 ciclos por segundo. Como en este estado su mente consciente no actúa, poco se está haciendo para aprovechar el nivel DELTA.
Usted puede, en tanto, programarse para soñar la solución de un problema, para obtener la respuesta a una pregunta, y así sucesivamente. Hubo inventores que obtuvieron respuesta a dificultades durante el sueño.
Despertaron con la respuesta exacta o soñaron la respuesta correcta para la solución del impasse. Grandes artistas, músicos, escritores, recibieron durante el sueño inspiraciones y revelaciones estupendas de la mente subconsciente.
Cuando usted va a dormir y tiene un problema que solucionar, haga así: relájese, cálmese, entre en alfa y diga: “Tengo este problema quiero la solución para este problema; voy a soñar la solución, interpretaré el sueño y lo recordaré". Y duérmase. Usted despertará durante la noche o por la mañana con la solución del problema. Experimente.
USE LOS SUEÑOS PARA RESOLVER SUS PROBLEMAS
Usted leyó, hace poco, que durante el sueño la mente consciente queda, por así decirlo, desactivada, y, entonces, el subconsciente, que todo lo sabe, queda liberado y puede ser conducido a suministrarle la respuesta correcta de aquello que lo preocupa. Y esto es tanto más probable cuanto más perfectamente use usted las técnicas que sensibilizan la mente subconsciente.
El subconsciente aprecia, sobremanera, manifestarse durante el sueño, en forma de simbolismo, imágenes, figuras y dramatizaciones. Los símbolos, las imágenes y las dramatizaciones están basados en sus experiencias personales, por eso cada persona debe interpretar sus propios sueños, de acuerdo con los arquetipos creados en el archivo de la mente. Soñar con víbora, por ejemplo, para mí puede significar una cosa, para usted puede significar otra cosa y para su amigo aún puede significar otra bien diferente.
Ya existen métodos para que usted controle sus sueños en su beneficio.
Inicialmente usted debe, por decirlo así, entrenar su subconsciente.
Hágalo así: propóngase recordar un sueño por noche durante una o dos semanas. Prográmese cada vez que vaya a dormir: "Yo quiero tener un sueño, yo tendré un sueño y lo recordaré". Y duerma.
Usted despertará durante la noche, o por la mañana, con el vívido recuerdo de un sueño. Inmediatamente escriba todo lo que recuerda del sueño en un cuaderno.
Pasadas dos semanas en que todo haya ocurrido normalmente, cambie la programación diciendo que recordará todos los sueños. Al despertar, escriba todos los sueños que recuerde. Eso durante quince días, o más. Terminada esa operación-sueño, usted estará en condiciones de conseguir la respuesta de su subconsciente para el problema que desea resolver. El subconsciente se acostumbró a obedecerlo, y continuará obedeciendo sus órdenes.
Cierto día, yo estaba conversando, en una cena, con la esposa de un médico y ella me contó que cuando sueña con su madre, ya fallecida, recibe un aviso. "Hace días –me contó– mi madre se me apareció en un sueño, y me dijo que mirara en la maleta de la empleada. Al día siguiente fui a ver y hallé la maleta de la empleada llena de ropas de cama, que ella había robado de mi casa".
Es de observarse que, en sueños precognoscitivos, no es raro que aparezca un familiar muy querido para dar la información. Aunque ciertos grupos defiendan la idea de que es realmente el familiar fallecido el que aparece, entiendo que ésa es sólo una forma muy inteligente de actuar por parte del subconsciente. Es que, si apareciera una persona muy querida y de entera confianza, como, por ejemplo, el padre o la madre o alguien de nuestra estima personal, la emocionalización del sueño se tornaría muy vigorosa y usted despertaría recordándolo todo. Además de eso, por ser dada la respuesta mediante una persona que usted ama mucho, eso hace que usted crea en el sueño y mantenga vívida la impresión en su mente. Si usted soñase con un personaje extraño y desconocido, que le dijese algo, inclusive muy importante, el efecto del mensaje no causaría impacto en su mente y usted acabaría por olvidarla información.
Otro día, asistiendo a un programa de televisión en que se contaba la vida del famoso cantor Carlos Gardel, muerto en un accidente de aviación, el locutor narraba que en la mañana en que Gardel debía viajar, una pequeña fue llorando a decirle que no viajase en avión porque había soñado la noche entera con pájaros que chocaban en el aire, golpeándose y que cayeron muertos al piso. Carlos Gardel no dio importancia a los sueños precognoscitivos de esa niñita, a quien ni siquiera conocía, y murió en aquel viaje cuando su avión chocó con otro al levantar vuelo.
No hace mucho, estuvo conmigo una joven para pedirme orientación porque estaba embarazada. Le pregunté como había percibido tan pronto su estado y ella me contó que soñó que había encontrado a una amiga en la calle y esa amiga estaba grávida. Al día siguiente realmente encontró a esa amiga en la calle, sólo que ella no estaba embarazada.
– Entendí de inmediato –dijo ella– que quien estaba embarazada era yo.
ELLA SOÑÓ QUE DEBÍA MORIR Y YA ESTABA ENFERMA
Hace tiempo estuve conversando con una señora cuyo padre había fallecido a comienzos del año.
Ella me contó que, cierta noche, vio en sueños, delante de sí, a su padre y un vecino, éste también fallecido. La presencia del padre era tan real que, en aquel momento, ella no imaginaba que se tratase de un sueño. Conversó con el padre normalmente, como si él estuviese vivo, en tanto que el vecino permanecía en silencio, al lado, y ella tenía la impresión clara de que éste sí estaba muerto.
En medio de la conversación, el padre dijo a su hija:
– Mira, yo vine a buscarte.
– Pero, padre –respondió ella–, yo estoy bien aquí, no tengo ningún interés en ir para allá.
– Pero yo te vine a buscar. Y tú tendrás la misma enfermedad que yo tuve.
Aquella señora, entonces, me contó que, al comienzo, quedó impresionada, pero, después, trató de olvidar el sueño. Algún tiempo después, ella sintió fuertes dolores repentinamente, al punto de desmayarse casi.
– Fue una cosa muy fea la que sentí –relató ella.
De ahí en más su salud fue empeorando y se vio obligada a someterse a un tratamiento médico. Aunque ella constató que el mayor problema provenía de los nervios, aún así se sentía lánguida y enferma.
Usted convendrá conmigo en que el subconsciente de aquella mujer comenzó a aceptar la idea enviada por la mente consciente de que la información recibida del padre iría a cumplirse. Ella dijo que lo había olvidado, pero, en el fondo, la idea quedó martillando. Para ella, el sueño tuvo la fuerza de la realidad, que se sumó a la fuerza del miedo que la asaltó. He ahí dos fuerzas poderosas que actuaban en aquella señora.
Y los resultados no se hicieron esperar.
Si yo le hubiera dicho que no diera importancia al sueño, que el sueño es sueño, pura boberías, ella me hubiese respondido que fue precisamente lo que trató de hacer.
Era preciso, por tanto, que ella asumiese una imagen más fuerte y más poderosa que el impacto que le causó su sueño. ¿Sería ello posible? Claro que sí.
Pasé a explicarle algunas verdades de fundamental importancia: que no existe el fatalismo, o mejor, que nada existe que no pueda ser modificado; que la persona que se refugia en los brazos de Dios y se envuelve en la protección del Altísimo, está segura y en paz; que ella debía liberarse del padre.
NO EXISTE EL FATALISMO
Toda orden, todo comunicado, todo aviso, toda precognición, toda profecía, pueden ser modificados por la persona. Sitúe eso en su cabeza.
Usted es una persona viva y la vida evoluciona, asume nuevos contornos, nuevas situaciones, que son determinados por las contingencias de cada día. Además, usted tiene dentro de sí un Poder Infinito, que puede usar para crear las nuevas situaciones y los nuevos rumbos que desea para sí.
Si usted cree que vivirá muchos años y que su vida estará siempre llena de éxitos y de realizaciones, como aquello en lo que usted piensa y cree se realiza, es lo que acontecerá. Pero si usted cree que está enferma y la enfermedad no tiene cura y que en breve morirá, ésta es la orden que está dando para que el Poder Infinito la cumpla. Tenga, pues, su mente siempre vuelta hacia la vida, porque la vida es bien, es perfección.
Hace años asistí al filme "La Guerra y la Paz", basado en la novela de León Tolstoi. El filme terminaba con una frase del escritor, frase que siempre quedaría grabada en mi mente: "La vida es Dios y amar la vida es amar a Dios."
En el momento en que usted cree que es uno con Dios, y es así mismo, por cuanto su espíritu procede del Espíritu de Dios, entonces ya nada podrá perturbarlo, pues en usted reside la Fuerza Universal contra la cual nada ni nadie puede.
Imagínese sumergido en la fuente de la Vida, siéntase envuelto por un manto de luz divina y protectora, y nunca será alcanzado por la desgracia.
LIBÉRESE DEL FALLECIDO
Hay personas que no liberan al ser querido fallecido y no se liberan de él. No me refiero a un amor suave ni a un recuerdo agradable. Me refiero a la persona que se aferra a la imagen del fallecido de manera obsesiva y torturante. Esto no le hace bien así ni al fallecido.
El fallecido ya está en otra dimensión, ya recorrió su camino. Desee toda la felicidad para él y libérese de él, dejando que siga siempre adelante, en dirección a Dios.
Usted debe, ahora, dedicarse a sus seres queridos que están en esta dimensión. Es a ellos a quienes usted debe volverse con toda su bondad, con todo su cariño, con todo su amor y buena voluntad.
Cierto día, fui a ver una señora que estaba en grave estado de depresión porque su hijo había muerto, en la flor de la edad, en un accidente de automóvil.
Ella no quería vivir más y pensaba que Dios era muy injusto, robándole la presencia de aquel hijo. Pero ella no percibía la injusticia que ella misma cometía, dejando en total abandono a su marido y a sus otros cinco hijos. Estaba triste, deprimida, enferma, con la fisonomía melancólica, solitaria, desanimada por causa de un hijo fallecido, cuando todos los otros esperaban de ella amor, cariño, alegría, sonrisas, bondad y, sobre todo, una presencia viva, vibrante, confortadora, animadora y única, como sólo una madre puede hacerlo. Ella prefería volverse hacia un hijo por el cual nada podía hacer y dejaba de lado a todos los otros por los cuales todo podía hacer.
Le aconsejé que abandonase todo sentimiento de rebeldía, de amargura, de queja contra Dios y contra el destino, porque no tenía datos para formular un juicio correcto del caso.
–La señora clama contra Dios –le dije–, ¿pero y si, por acaso, su hijo hubiese deseado morir?
Nunca podemos juzgar. Lo que importa es que usted está vivo y debe continuar alegre, feliz, sonriente, agradable, tratando de embellecer este mundo en el cual está inserto.
CUANDO USTED SE LEVANTA CON EL PIE IZQUIERDO
Según un dicho popular, hay dos maneras de comenzar el día: con el pie izquierdo o con el pie derecho.
No hace mucho, encontré a un viejo amigo a quien no veía hacía bastante tiempo. Estaba con la cara tan amargada que casi no me vio.
– ¿Qué te sucede? –le pregunté, después de saludarlo cordialmente.
– Sabes cómo es, hoy me levanté con el pie izquierdo.
Como ese amigo, usted también debe haberse levantado, muchas veces, sin darse cuenta, con el pie izquierdo. Graciosamente, oyendo esto, se puede llegar a la conclusión de que existe una programación diaria para cada individuo, trazada por alguna entidad del Más Allá.
Si este día suyo estuviere programado para ser alegre y traerle éxito, todo iría bien. Si el Destino, entre tanto, determinó malhumor, mala suerte, jaquecas, infortunios, allá va usted, contrariado, a cumplir la carga desagradable del día.
¿Será que la vida es así realmente? ¿Será que somos conducidos por la mano de un Destino incontrolable? ¿O somos nosotros los que programamos bien o mal nuestro día?
Es claro que el día será aquello que usted quisiera o hiciera de él.
Si se despierta malhumorado es porque su mente ya estaba cargada de pensamientos negativos, pesimistas, derrotistas.
Cuando usted se levanta con el pie izquierdo, es un ¡Dios nos asista! Comienza desde la hora de elegir la ropa que vestirá, se queja porque alguien ocupó el baño y dejó la toalla mojada, encuentra frío el café y viejo el pan. Su día comienza pesado y las personas son unas momias que ni miran hacia usted. (No percibe que la momia es usted que ni repara en las personas). Llega a su lugar de trabajo y los más sagaces ya están prevenidos: ¡Hoy él no está en su día! Como arrastrado por la corriente de la mala suerte, pasa el día haciéndolo todo equivocado y vuelve a casa, a la noche, descargando insultos.
Si eso sucede con usted, sepa que fue usted mismo quien se programó un mal día. Usted amaneció de malhumor, malhumor ya contraído inconscientemente en días anteriores, y no hizo nada para cambiar.
Pero usted quiere cambiar y cambiará. Usted anhela un lindo día, alegre, primaveral, encomiable. Y así será.
LEVÁNTESE CON EL PIE DERECHO Y TENGA UN ÓPTIMO DÍA
Todo lo que usted determina, con convicción, al subconsciente, él lo realiza. Ahí está su arma.
Ya a la noche, al entrar en estado de somnolencia, repita mentalmente, como si estuviese canturreando una canción de cuna, pronuncie hasta dormirse palabras como éstas: "Yo estoy en paz, estoy alegre, dormiré un sueño saludable y reparador; mañana despertaré bien dispuesto, feliz, tranquilo, en perfecta salud física y mental".
Está hecha la programación. Hágalo así todas las noches y su subconsciente aceptará la sugestión.
Por la mañana, cuando despierte, tome de inmediato las riendas de sus pensamientos. No deje que la mente quede girando a la deriva, porque podrían tomar posesión los pensamientos negativos que en esa hora siempre tuvieron libre acceso a su mente.
Asuma inmediatamente el comando de su mente, antes de que algún pensamiento aventurero quiera tomar cuenta de usted. Comience a imaginarse –la fuerza de la mente subconsciente es la imaginación– sonriente, alegre, calmo, de buen humor, victorioso, en óptimo estado de salud; agradezca la increíble aventura de estar vivo, vivo en este universo espectacular; véase mentalmente saludando a la esposa, al marido, a los hijos, a los padres, a los amigos en la calle, a los colegas de trabajo o de estudio; diga que éste será el mejor día de su vida y agradezca desde ahora el éxito; siéntase una persona leal, agradable, en paz con todos, admirada y querida por todos.
Ahora repita para sí mismo una decena de veces: buenos días, buenos días, buenos días.
Levántese en estado de vibración interior. Vaya hasta la ventana, respire el aire puro del amanecer y salude al día; no piense demasiado en las palabras; simplemente desborde su alegría, dando los buenos días al sol, a la lluvia, a los pájaros, a las plantas, a las flores y a las personas que ya están circulando en la calle.
Delante del espejo, sonríase a sí mismo. Sí, sonría con ganas y diga que se gusta mucho. Diga que usted es un sujeto genial, bueno, exitoso, simpático, bonito, inteligente. Y sonría, sonría, sonría. (Pero, cuidado, no vaya a cortarse el rostro al afeitarse).
No deje que decaiga su ánimo a la hora del baño; mantenga sus pensamientos en alto. Cante, piense cosas buenas, anímese, repita frases de impacto positivo, ponga una música alegre y que inspire paz de espíritu; haga, en fin, cualquier cosa para continuar bien dispuesto.
Antes del desayuno, o después, siéntese en un sofá y mentalice pensamientos que lo ayudarán a tener un día agradable, saludable y de éxito.
Tome su desayuno con tranquilidad, hablando sólo de cosas buenas.
Este, sin duda, será el mejor día de su vida y la suerte le sonreirá. Y todos comenzarán a decir que usted es una persona admirable y afortunada.
LA FUERZA IRRESISTIBLE DEL PENSAMIENTO NEGATIVO
Eran las ocho y cuarenta y tres minutos de aquel lunes seis de agosto de 1945. En aquel momento, la primera bomba atómica explotaba sobre Hiroshima, causando la desaparición instantánea de 30.000 personas. En los dos segundos siguientes morían 70.000 personas, pero se sabe que el total de japoneses muertos fue de 240.000. ¡El poder de la bomba atómica!
Antes de usar la fuerza atómica para crear usinas nucleares y aparatos útiles, el hombre la usó para destruir.
He ahí una fuerza inaudita que puede ser empleada para dos finalidades completamente opuestas.
Usted tiene una fuerza atómica dentro de sí, que puede usarla en su beneficio o contra sí mismo.
Recuerdo ahora aquella historia del rey y el sabio. El rey se sentía disminuido, porque las multitudes acudían al sabio a fin de oírlo y pedirle consejo. Pasaba las noches sin dormir, intentando hallar una forma de desacreditar al sabio ante el pueblo. Por fin, le surgió una idea luminosa y concibió un plan.
Cierto día, convocó a la corte y mandó llamar al sabio. Luego que el viejo llegó, el rey, con una sonrisa disfrazadamente irónica, le dijo:
¡Oh, el más sabio de los hombres, tengo escondido entre las manos al más pequeñito de los pájaros! Decidme, ¿él está vivo o muerto? Os ordeno que respondáis.
El sabio, cuya argucia era realmente admirable, se dio cuenta del ardid. Entendió que, si decía que el pájaro estaba vivo, el rey, en el mismo instante, aplastaría al ave entre las manos; y si decía que estaba muerto, el soberano abriría las manos y simplemente soltaría el pájaro. Ambas respuestas lo desacreditarían.
Mientras el sabio buscaba una solución, el rey le indagaba impaciente:
– Y bien, ¿está vivo o muerto?
La solución se encendió en la mente del sabio, quien respondió tranquilamente:
– Como queráis, Majestad; como queráis.
No es preciso explicarle lo que quiero decir con esta historia. La fuerza atómica, que existe dentro de usted, puede ser usada tanto positiva como destructivamente. Como usted quiera.
Conozco personas que se encuentran sumergidas en pensamientos negativos y entonces dicen que el poder de la mente no funciona.
Un día, una señora me dijo que ya había leído libros sobre el poder de la mente, pero de nada le servían.
Las dificultades continuaban. Vivía solitaria y desanimada. Por más que se esforzase, no conseguía liberarse de los pensamientos de resentimiento, de frustración y de injusticias sufridas.
– Ni siquiera Dios me presta su atención –decía amargamente–. Dios no puede estar preocupado por mí. Él tiene mucho que hacer. Ya me convencí de que esta vida es una ilusión.
Un señor, buen católico, me dijo cierta vez que la gente está en este mundo para sufrir y, después, recibirá la recompensa en el cielo. Y acentúo que Dios manda calamidades y enfermedades para purificar a la gente, para castigar a los malos, y que yo necesitaba recordar que la gente reza en el Salve Reina: “Clamamos y suspiramos, gimiendo y llorando en este valle de lágrimas".
De hecho, tenemos que reconocer que, desde tiempos remotos, la humanidad fue educada negativamente.
Ya en el inconsciente colectivo de muchas generaciones está grabado este patrón negativo de educación.
Trate de realizar un análisis de cómo usted fue educado y como está educando usted.
La educación negativa trae resultados negativos, la educación positiva trae resultados positivos.
Sólo por curiosidad, observe una lista de frases que usted ha oído muchas veces y, tal vez, ya las haya aceptado como realidades normales de la vida:
Vivir es sufrir.
El mal es más fuerte que el bien.
La carne es débil.
Somos permanentemente tentados por el mal.
Amar es sufrir.
El casamiento es una lotería.
La noche es el escondrijo de los bandidos y asaltantes.
No pienses que la vida es un mar de rosas.
No crea en las personas.
Lágrima de mujer es mentira.
Es preciso aceptar la enfermedad porque fue enviada por Dios.
Ser pobre es tener el reino de los cielos.
Bienaventurados los pobres. ¡Ay de los ricos!
Ya que no puede ser feliz, aprenda a convivir con la infelicidad.
Cuidado con las amistades.
No salga solo.
Quien no reza va al infierno.
A los malos Dios los castiga con el infierno.
No haga eso porque Dios lo castigará.
Abra los ojos con las personas; si no, usted será engañado.
Hoy nadie respeta a nadie.
La vida es una lucha.
Hay otras frases negativas, que encierran verdaderas filosofías desastrosas. Por favor, no retenga esas frases. Bórrelas definitivamente de su mente.
Existen ciertas actitudes negativas, también muy comunes, que se transmiten de padre o de madre a hijo.
Por ejemplo, los padres generalmente dicen NO a cualquier pedido del hijo, para después decir sí Otra actitud que usted asume frecuentemente es: cada vez que traza un plan de vida o una meta, piensa sólo en las dificultades.
Usted sabe que usted es aquello que piensa. Piense negativamente y su vida será completamente negativa.
En este caso estará usando su fuerza atómica para destruir sus sueños de amor, de felicidad, de éxito, de paz y de alegría.
Sin embargo, antes de continuar, limpie su mente. Transforme en afirmaciones positivas todas las frases negativas que leyó hace poco. Haga este ejercicio y desintoxique su mente.
LIBÉRESE DEL FANTASMA DE LOS MIEDOS
Si existe el demonio en el mundo, éste tiene el nombre de Miedo. Los miedos forman la pandilla de demonios que atormentan a la humanidad. Ellos están en todas partes, penetran furtivamente en todo, y consiguen, frecuentemente, anidarse dentro de la mente de las personas.
Todo pensamiento de miedo tiene una poderosa fuerza magnética, que atrae la realidad.
Existen muchos tipos de miedos, pero vamos a desenmascarar, para siempre, los más frecuentes:
MIEDO DE LA POBREZA: Difícilmente se encuentre a una persona que no tenga miedo de la pobreza. Ocurre que las personas luchan desesperadamente para amontonar bienes a fin de liberarse de la pobreza. Y, aunque se hagan ricos, continúan asustados. Esa lucha atormentada y persistente contra el miedo a la pobreza provoca el estrés, el agotamiento y, finalmente, el hombre acaba adquiriendo un innecesario infarto.
Usted no nació para la pobreza. Usted es hijo de Dios y tiene todo el universo a su disposición. Sumérjase en la riqueza infinita. Tanto la pobreza como la riqueza son tan solo estados de espíritu que generan la realidad correspondiente. No creo que la religión predique la pobreza como condición humana, aun cuando existan aquellos que optan por la vida pobre por profesar un ascetismo que los satisface interiormente. Jesús predicó la "pobreza de espíritu", lo cual es muy diferente a la "pobreza económica o física". Esa es una etapa transitoria que no debe irritar ni perturbar a la persona, sino constituir un peldaño más para alcanzar la prosperidad. Crea en la prosperidad y será próspero.
No tenga miedo a la pobreza ni guarde resentimientos contra los ricos, más bien canalice sus energías físicas y mentales, sus entusiasmos y creatividades, en el sentido de crecer siempre más económicamente.
Si sus pensamientos constantes fuesen de abundancia, atraerán inevitablemente abundancias.
MIEDO DE LA CRÍTICA: Este es uno de los temores más comunes. El miedo de la crítica, o sea, el miedo "de lo que los otros van a decir", es un demonio devastador. Sofoca talentos, arrasa personalidades, destruye felicidades, crea barreras inmensas y aniquila la libertad y la autoconfianza. Si usted quiere ser alguien en este mundo y quiere vivir la vida con la plenitud soñada, no se deje vencer por las críticas.
Si todos hubiesen dado oído a las críticas, muchos de los grandes hombres no existirían ni existiría el automóvil, el aeroplano, los viajes espaciales, ni aún el hombre habría pisado la luna.
Sea usted mismo. Déjese guiar por la Sabiduría Infinita, que está en su ser, y siga adelante con la cabeza erguida, sin asustarse por las críticas. Pase con la caravana y deje que los perros le ladren a la luna.
Ralph Waldo Emerson, escribió cierta vez, un mensaje muy importante, que lo invito a meditar:
"Creer en nuestro propio pensamiento, creer que aquello que es verdadero para nosotros, en el fondo de nuestro corazón, es verdadero para todos los hombres, esto es genio. Expresemos nuestra convicción latente y ella será el consenso universal; pues, lo más íntimo se torna, oportunamente, lo más exterior, y nuestro primer pensamiento nos es devuelto por los clarines del Juicio Final. Dada la familiaridad que cada cual tiene para con la voz de la mente, el mayor mérito que atribuimos a Moisés, Platón y Milton es que despreciaron libros y tradiciones y hablaron, no de lo que los hombres pensaban, sino de aquello que ellos pensaban. Todo ser humano debería aprender a captar y estar atento al fulgor de luz que brilla en su mente, proveniente de su esencia, más que del brillo de, un extraño dirá, con magistral buen sentido, precisamente lo que siempre pensamos y sentimos y seremos forzados a recibir de otro, avergonzados, nuestra propia opinión".
Hay una voz correcta dentro de usted, que gusta de usted, que quiere su éxito y felicidad: es esa voz la que usted debe oír. Y cuando tenga que oír lo que alguien dice, hágalo sólo con la inatención de confrontarlo con la palabra verdadera que brota de su interior.
Deje que los otros piensen como quieran y sean como quieran. Ni siquiera permita que ellos se hagan cargo de usted ni entren a decidir en el mundo que es sólo suyo.
MIEDO A LAS ENFERMEDADES: Ciertamente, usted conoce un gran número de personas que tienen la manía de las enfermedades. Tantas otras personas no tienen la manía de las enfermedades, pero viven hablando de enfermedad, de muertes y de remedios. Conozco, además, personas que tienen tanto miedo a la enfermedad, hasta el punto de pasar todo el tiempo hablando de la enfermedad.
Recuerde aquella ley de la mente: lo semejante atrae lo semejante. Pensamientos de enfermedad atraen la enfermedad.
Colóquese bajo la protección divina y cree la imagen permanente de la salud. Imagínese sano todos los días y la enfermedad no entrará en su cuerpo. Su imagen original y verdadera es siempre perfecta, por eso manténgase unido a esa imagen verdadera. No haga existir aquello que no existe. Expulse la enfermedad de su mente y ella desaparecerá de su vida.
MIEDO DE PERDER LA LIBERTAD: Conserve su mente límpida y tranquila. Su mundo es su mente y en su mente sólo usted puede mandar, por tanto, aun entre cuatro paredes, usted puede sentirse libre y feliz.
La libertad es un don interior que le pertenece. Úselo. Nadie puede robarle su libertad, a no ser usted mismo. Nunca olvide que usted es el dueño del universo, es el rey de la creación, por lo tanto puede estar en un lugar y en todos los lugares al mismo tiempo. Usted tiene dimensiones divinas.
Irradie pensamientos de buena voluntad, de armonía, de paz, de buen entendimiento y de fraternidad y esos pensamientos expulsarán toda y cualquier posibilidad de perder la libertad.
Siéntase siempre protegido divinamente y nadie levantará la mano contra usted.
"Nadie alzará la mano contra ti para hacerte mal" (Hechos 18:10).
MIEDO DE PERDER EL AMOR: Este miedo produce una serie de disturbios y quita la paz de espíritu. Si ustedes dos se aman, son como dos mitades que se juntan de manera tan unitaria que nadie puede separarlas, a no ser ustedes mismos. Cultiven, entonces, el amor, entréguense mutuamente, mantengan la vida de esa flor maravillosa y el amor continuará hasta el fin de los tiempos.
Es dando como se recibe; dé amor a manos llenas con toda la grandeza de su corazón y estará enriqueciendo y acercando cada vez más a su amor.
Usted nunca perderá el amor de su corazón. Si su enamorado se fue, si su novio se fue, sepa que usted puede perder el amor de una persona, pero jamás perderá el AMOR. Este siempre existe en usted, es inagotable y tiende, por su propia esencia, a encontrar su otra parte. No se encierre, pues, en la soledad ni viva bloqueado por el miedo a perder su amor. Dé vida a su amor, en lugar de sofocarlo. Es en la libertad, por increíble que parezca, donde el amor más se desenvuelve. Envuelva a su amor en un círculo de protección divina y descanse.
MIEDO A LA VEJEZ: La vejez es fruto de su pensamiento. Si usted mantiene su mente límpida, joven, abierta a las innovaciones de la vida, no entrará en la etapa de la vejez. Sea usted un joven de 80 años y todos lo adorarán. La vejez es la madrugada de la sabiduría, es el momento culminante de la grandeza interior. A medida que los años avanzan, usted pasará a contemplar el mundo desde un pedestal más alto, y en la proporción en que disminuyen sus espacios exteriores aumentan considerablemente los espacios interiores. Entonces, no hay por qué perturbarse. Sea feliz, joven, alegre, estimado, agradable, envolvente, atrayente, simpático y querido a cualquier edad. Usted está aprendiendo, es este libro, a beber el elixir de la eterna juventud.
MIEDO DE LA MUERTE: ¿Por qué tiene miedo de la muerte si la muerte no existe? Su vida no es su cuerpo; su vida es su espíritu y su espíritu es eterno, es perfecto, nunca muere. Su vida es. "AQUEL QUE CREE EN MI, VIVIRÁ ETERNAMENTE; ya lo afirmó Jesús.
Nada muere en usted, ni su espíritu ni su cuerpo. Su cuerpo es energía y se transformará en otro tipo de energía.
Además de eso, a través de innumerables testimonios de personas que habían muerto clínicamente y volvieron a revivir, se sabe que todos gustaron de la nueva experiencia y se sintieron maravillosamente bien en la "otra dimensión". No tenga miedo, pues. Esta será una experiencia fascinante, que no significa muerte, porque la muerte no existe.
MIEDO DE ASALTOS: Son incalculables las personas que tienen miedo de la oscuridad, de los asaltos, de los bandidos. Recuerde que el miedo es un pensamiento fuerte, cargado de emoción, que atrae la realidad. Colóquese todos los días bajo la guarda y protección divina y nunca más podrán acontecerle accidentes ni asaltos. Cuando usted afirme con fe y absoluta certeza interior: "Dios está dentro de mí, me GUÍA y me protege", usted estará siempre protegido, de tal forma que nada ni nadie podrá perjudicarlo; al mismo tiempo, usted estará siendo GUIADO divinamente, de tal suerte que Dios, que lo sabe todo sobre todo y sobre todos, y que sabe donde está el peligro, ha de guiarlo por donde sólo le acontezcan cosas buenas.
Deje atrás los miedos de saltos, envolviéndose bajo la guía y protección divina. Por la ley del PEDID y RECIBIRÉIS sólo le acontecerán cosas buenas en la vida, donde quiera que usted esté, donde quiera que vaya.
MIEDO DE VÍBORAS Y BICHOS: Recuerde que el hombre es el rey de la creación. Todos los animales fueron creados para obedecerle. Los animales han de ver en usted la imagen de Dios, que los creó, por eso no huya de los animales domésticos o salvajes; domínelos y ordéneles salir de su presencia y ellos obedecerán. Siéntase grande, dueño de la creación, pues usted es la propia Presencia Divina manifestada aquí en la tierra. Tenga la mente convencida y elevada. ¿San Francisco de Asís no convivía con las aves y los animales? ¿Daniel no estuvo en la cueva de los leones, los cuales nada malo le hicieron? Únase a Dios, confiadamente, y usted estará siempre protegido.
MIEDO DE SER ENGAÑADO: ¡Cómo es que ciertas personas tienen miedo, permanentemente, de ser engañadas en los negocios, en las transacciones, en los contratos! Póngase en la cabeza esta verdad: nadie puede perjudicarlo, a no ser usted mismo.
Emerson dijo, con razón: "Los hombres sufren a lo largo de toda su vida por causa de la superstición tonta de que pueden ser burlados. Pero es imposible que un hombre sea burlado por alguien que no sea él mismo, así como es imposible que una cosa sea y no sea al mismo tiempo. Existe en todas nuestras transacciones un tercer elemento comanditario. La naturaleza y el alma de todas las cosas se encarga de garantizar el cumplimiento de todos, de tal manera que un trabajo honesto no pueda ser desperdiciado. Si usted sirve a un ingrato, trabaje con redoblado ahínco. Haga de Dios un deudor suyo. Todas las actitudes serán recompensadas. Cuanto más tarde la paga, tanto mejor para usted, pues la tasa habitual de ese erario son intereses de los intereses".
MIEDO DE NO CASARSE: Hoy en día, debido a la liberación de la mujer y su independencia económica, este miedo ya está bastante limitado a un número cada vez menor de personas.
El miedo a no casarse era un desastre porque llevaba a la persona a escoger de prisa y a aceptar lo primero que le apareciese enfrente. Pero, vea bien, nosotros vivimos en un mundo de dualidad. Si alguien desea comprar una casa, por ejemplo, existe alguien que tiene una para vender; si alguien desea tener salud, existe una fuerza capaz de generar salud, y así sucesivamente. Esto significa que, si usted desea tener un amor en la vida, existe alguien que desea amar a una persona exactamente como usted. Usted es como una mitad que está atrayendo a la otra mitad, cuya unión y fusión forman una unidad perfecta. Lo único que usted necesita hacer es atraer su Amor hacia usted. Use la Sabiduría Infinita, que está en su interior y que lo sabe todo sobre todos, para atraer hacia usted al verdadero amor de su vida. Y así sucederá.
MIEDO DEL FRACASO: Este miedo generalmente está condicionado por una experiencia que no fue afortunada. Si un comerciante no tuvo éxito al abrir su primera tienda, cada vez que intenta abrir otra tienda se siente invadido por un infundado temor de fracasar. Él estudió bien el negocio, los datos presentaban óptimas perspectivas, la tienda está yendo bien, y él siempre asustado y presintiendo la inminencia de algún fracaso.
Cambie desde ahora esa mentalidad, si usted es una persona así.
Ligue su mente al éxito y tendrá éxito. El negocio que usted abrió ahora es OTRO negocio, nada tiene que ver con la situación anterior. Para que usted cree una imagen positiva más fuerte, fije su mente en los negocios que le han dado buenos resultados. Siga adelante con coraje, entusiasmo, dinamismo e inteligencia. Fije en su mente que fue hecho para el éxito y siéntase una persona afortunada. Usted es un victorioso. El pensamiento positivo atrae la realidad positiva.
Use sus energías para progresar y confíe en la Sabiduría Infinita, que habita en su inteligencia.
Hace un tiempo una joven me contaba que llevaba 15 días haciendo compras en Sao Paulo, para su tienda, pues estaba siempre asustada y temerosa de comprar productos de poca venta. Hoy ella aprendió a confiar en la Sabiduría Infinita de su ser, pide con toda su fe que Ella la guíe en las compras con acierto, y el resultado es que está comprando en menos de una semana y las ventas son exitosas.
CÓMO LIBRARSE DE LOS CHOQUES Y TRAUMAS DEL PASADO
Era una noche de tempestad. La lluvia caía torrencialmente, entrecortada por relámpagos y truenos. En una pequeña iglesia del interior las muchachas ensayaban canto, en el coro.
María (nombre ficticio) era una joven a quien le gustaba muchísimo cantar y, por ese motivo, se demoró un poco más en el coro, cuando ya las demás colegas habían descendido a fin de retornar a casa. En el momento en que María bajaba la vieja escalera de madera, en el interior de la torre de la iglesia, cayó un rayo y se apagaron todas las luces. Fue, para María, una situación de pánico, que quedó grabada profundamente en su subconsciente.
Hoy, cuarenta años después, ya olvidada de aquel hecho acontecido en su adolescencia, María me preguntaba por qué ella tenía tanto miedo a las tempestades, los truenos y rayos.
En ese episodio, que ella me contó durante la conversación sin darle mayor importancia, residía la explicación de su miedo.
Cuanto mayor es la fuerza emocional de un hecho pasado, tanto más fácilmente cualquier asociación relacionada con el acontecimiento produce una reacción desagradable.
Albertina (nombre ficticio) me contó que experimentaba inusitado miedo de quedar encerrada en el baño. Sentía una sensación tan desagradable que no sabía cómo explicarla. No existía aparentemente, ninguna razón para tal actitud, pero la verdad era que se sentía mal si dejaba el baño cerrado con llave cuando entraba en él. Y peleaba con las criaturas si ellas cerraban el baño por dentro.
En medio de la conversación surgió la explicación. Algunos años atrás, cuando Albertina estaba bañándose, explotó un aparato y salió una humareda tan grande de la ducha que ella no conseguía abrir la puerta para huir. Esta situación la impactó mucho, por eso se sentía inquieta cada vez que entraba en el baño.
Con el tiempo, se apagó en su mente consciente el hecho ocurrido, pero el subconsciente continuaba reaccionado a las impresiones recibidas y aún no desprogramadas.
Cuando usted siente miedos infundados, manías, aprensiones, procure buscar en el fondo de su mente alguna explicación. Sin duda, le ha ocurrido alguna experiencia de cuyo efecto negativo no consiguió liberarse.
Ciertamente, María y Albertina, citadas hace poco, por el hecho de descubrir la causa de sus fobias, ya no tendrán más temores a los truenos ni a los recintos cerrados. Descubierta la causa, se desvanece el problema. Pero, y esto es importante, tampoco es necesario descubrir la causa: basta que, de aquí en adelante, usted mentalice que puede estar en un cuarto cerrado, que a usted le agradan la lluvia, rayos y truenos, etc. Cree ese nuevo patrón de pensamiento y crea. Si usted cree... así es.
Vea usted lo que logra un impacto negativo: Albertina había entrado al baño miles de veces, echando llave a la puerta tranquilamente. Pero bastó que sucediera un hecho desagradable y, pronto a partir de ahí, se dejó dominar por el miedo. Era un hecho negativo contra cinco mil hechos positivos.
Limpie su mente, arroje afuera, definitivamente, todas esas experiencias negativas del pasado y, desde ahora, repítase con convicción: "Yo soy hijo de Dios perfecto, estoy en absoluta armonía con Dios, con el universo y conmigo mismo. Todos los acontecimientos pasados son escalones para mi ascenso hacia el progreso, hacia la felicidad, hacia el amor verdadero, hacia la salud completa y hacia la abundancia total. Soy guiado y protegido divinamente. Ahora vivo en paz y tranquilo y mi futuro será la cosecha abundante de todas esas cosas buenas que ahora estoy sembrando en la mente. De aquí en adelante sólo me sucederán cosas buenas, porque la Luz Divina ilumina todos mis caminos. Amen."
ACABE CON LOS PROBLEMAS Y VIVA TRANQUILO
Bonifacio se integró a la rueda y comenzó a hablar de los problemas de cada persona que allí se encontraba. Una tenía problema de enfermedad, otra tenía problema de casamiento, otra de negocios y así sucesivamente. Estaba, en el grupo, una bonita joven que permanecía callada. Entonces, Bonifacio se volvió hacia ella y le preguntó:
– Y usted, señorita, ¿Cuál es su problema?
– Yo no tengo ningún problema –respondió ella.
– Entonces venga conmigo –le dijo él maliciosamente–, voy a conseguirle un problema.
Es un chiste, pero usted probablemente lo ha transformado en un acontecimiento normal de su vida; o sea, que, cuando usted no tiene un problema, trata de conseguirse uno, pues no está acostumbrado a vivir sin problemas.
Conozco personas que son coleccionistas de problemas.
Un amigo me contó que su mujer no dejaba un día de desgranar un rosario de enfermedades. Era una de: me duele aquí, me duele allá, me duele más allá. Después de mucha paciencia, acabó diciéndole a su mujer: "Mira, vamos a hacerlo más fácil: me dices sólo dónde no te duele."
No es difícil percibir que el hombre de hoy vive ahogado en problemas. Esa anormalidad ya se tornó hasta normal para él. Muchos, inclusive, la aceptan como una situación que no puede ser modificada. Y cuando advierten que los problemas les están quitando la alegría de vivir, torturando el sueño y acarreándole enfermedades y tensiones perjudiciales, exclaman con fatalismo: "¡Qué se va a hacer, la vida es así!".
No. Mil veces no. La vida no es así.
Basta dar un vistazo a los problemas de tres meses atrás, y usted llegará a la conclusión de que todo, o casi todo, no pasó de una "tormenta en un vaso de agua". Usted echó fuera un enorme caudal de energías y desperdició, inútilmente, preciosos días que no volverán más y que podrían haber sido los mejores de su vida.
Acabe ahora mismo con los problemas. Tache esa palabra de su diccionario.
Cada día usted amanecerá en paz, alegre, confiado, determinado a ocuparse (no dije preocuparse) con entusiasmo y optimismo de sus quehaceres.
Por favor, lo pasado ya pasó, el agua pasada no mueve molino.
También es una equivocación preocuparse por el futuro. Yo dije preocuparse, nótelo bien. Usted se reiría si viese a alguien que tiembla de frío y camina en short por la calle, sólo porque de aquí a algunos meses será verano. Pero no se ría. Usted procede de la misma manera cuando sufre hoy por los posibles acontecimientos futuros.
Recuerde que la vida no es el pasado ni el futuro.
Entusiásmese desde ahora por aquello que está haciendo.
La vida es hoy. Es el presente. Ahora.
Usted es lo que es hoy.
Sería ridículo querer obligar al cuerpo a digerir alimentos que aún no fueron ingeridos. Pues esto es lo que usted hace cuando vive preocupado por lo que el futuro le puede traer de malo.
Aprenda a organizar su vida de tal forma que se sienta bien en el presente.
El método es simple. Usted debe haber notado, además, que todas las cosas esenciales son simples. Las grandes leyes que rigen el universo son simples. Nada hay de complicado en el mundo, excepto aquello que el hombre ha conseguido complicar.
CÓMO ASEGURAR UN FUTURO MARAVILLOSO
¿Quiere usted asegurar un futuro maravilloso?
Es simple: viva el presente de manera maravillosa. Muy cierto, porque aquello que usted siembra hoy, lo recogerá mañana. Nada hay de incierto en el futuro. Él es la respuesta a su presente.
No viva torturándose. Arremánguese y comience a sembrar las semillas positivas y constructivas que se convertirán en árboles gigantescos e indestructibles en su futuro. Entusiásmese desde ahora por aquello que está haciendo.
Plante, plante sin cesar, hoy. Pero escoja las simientes positivas. Plante éxito y cosechará éxito.
Si ahora usted está sufriendo alguna adversidad, cálmese, sonría, y repítase a sí mismo que todas las adversidades contienen en sí la simiente de un beneficio mayor.
Lo que le interesa a usted, por lo tanto, es el presente, porque el futuro es la respuesta al presente.
Viva el presente. Y vívalo intensamente. Con fe y confianza total.
Si a usted hoy le va bien, en el futuro le irá mejor.
Si hoy usted cree en sí, su futuro será un éxito.
Si hoy, y cada día, usted se programa para ser feliz, saludable, seguro, agradable, próspero, todo eso comienza a ocurrir ahora y usted lo cosechará en el futuro.
No cultive problemas. Apártelos de la mente y ellos desaparecerán. Olvídelos y ellos quedarán atrás.
Niéguelos y ellos se esfumarán.
Defina lo que usted quiere de la vida y siga por esa vía. Usted llegará allá con absoluta certeza. La mente subconsciente responde de forma infalible a lo que ha sido programado.
"No andéis, pues, preocupados por el día de mañana; el día de mañana cuidará de sí mismo; basta a cada día su propia lucha". (Mt. 6:34)
Dé crédito a esas palabras, pues fueron proferidas por el gran Maestro Jesús.
CREE LA EDAD QUE QUIERA Y VÍVALA
El mayor error de las personas es contar la edad por la suma de los aniversarios. Es como decir que una persona tiene mayor o menor salud de acuerdo con el número de comidas que toma.
Ralph Waldo Emerson, filósofo norteamericano, dijo que "nosotros no contamos los años de un hombre hasta que él no tenga nada más que contar".
Para comprobar que no tiene el menor fundamento esa manera empírica de contar la edad, basta que usted mire a su alrededor. Verá personas envejecidas y desilusionadas con 20 años de edad y verá personas brillantes, atrayentes con 70 años.
No acepte la propaganda constante que habla de vejez, esclerosis, jubilación, inutilidad. Eso es mentira.
La edad nada tiene que ver con eso. Usted tiene la edad de su espíritu. Usted solamente envejece cuando cree que está envejeciendo.
Los valores más fuertes de la vida, que mantienen a una persona vigorosa, sana, joven, productiva, no envejecen nunca. Son el amor, la alegría, la paz de espíritu, la bondad, la generosidad, la sabiduría, el poder mental, la felicidad, la lucidez, el ideal.
Y estos bienes no son patrimonio exclusivo de una fase de la existencia, pero se encuentran en todas las edades. Usted tiene la edad de sus pensamientos. En el momento en que pierde el interés por la vida, usted está envejeciendo. Cuando deja de soñar, está envejeciendo.
Cuando no procure extender más la visión de su futuro, registre en su cuaderno de apuntes que usted ha comenzado ha envejecer.
¿Usted quiere saber cuándo se está aproximando a la perfección? Precisamente en el momento en que se haga simple, leve, agradable, positivo y abierto como los niños. El gran Maestro dijo: "Si no os volviereis como niños no entraréis en el reino de los cielos".
Tenga, pues la edad espiritual del niño. Sea libre, confiado, alegre, simple, grato, amable, valeroso y fraterno como los niños.
Crea en la vida, como los niños. Confíe en los otros, como los niños. Viva el presente, como los niños.
Encare el futuro como los niños, sin miedos ni angustias anticipados.
Usted puede y debe mantenerse eternamente joven, o sea, exuberante, idealista, de buen humor y lleno de fe en la vida.
"Porque como imagina en su corazón, así él es". Esta frase consta en el libro de los Proverbios, en la Biblia.
De poco valdrán los ejercicios físicos y las dietas de belleza si usted mantiene envejecida la mente, reprimida, repleta de pensamientos negativos y pesimistas.
El envejecimiento comienza por la mente. Usted fija en la mente su edad y el subconsciente la va cumpliendo.
En materia de edad, yo pienso que las mujeres están en lo cierto; a ellas les agrada permanecer en los 20 ó 30 años, aunque la suma matemática de la edad vaya mucho más allá. Sí, ellas están en lo cierto, siempre que mantengan el espíritu ligado a la edad que desean para sí.
Si usted ya tuviera sumados los 40 años y dijera a los demás que tiene 25, trate de mantener su mente unida a los 25 años. Siéntase una persona de 25 años. Siéntase joven y sano como en sus 25 años.
Cultive pensamientos positivos e imagínese en el fulgor de sus 25 años. Entonces, usted estará diciendo la verdad cuando exprese que tiene 25 años.
La edad se cuenta por la mente y no por el calendario. La fecha del nacimiento sólo vale para que usted abra una botella de champaña y conmemore nuevamente sus 25 años.
Hágalo así y rejuvenecerá. Usted se sentirá cada vez más joven, como si un hada hubiese tocado su rostro con una varita mágica.
Claro que usted quiere mantenerse joven. ¿Quién no lo quiere? Pues, entonces, mantenga la mente joven y el milagro ocurrirá.
Joseph Murphy cuenta que, cierta vez, cuando fue a dictar una conferencia en Bombay, en la India, le presentaron a un hombre que tenía 110 años de edad. Y dijo Murphy: "Poseía el rostro más bello que yo haya visto en mi vida. Parecía transfigurado por la irradiación de una luz interior. Había una belleza extraordinaria en sus ojos, indicando que había envejecido con alegría y que las luces de su mente no se habían oscurecido".
Usted puede hacer lo mismo. Sea un eterno joven. Por el poder de la mente.
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