Hoi An - Ho Chi Minh
Miercoles 27 de Junio de 2007
Nos levantamos antes de las 5 pues tenemos que salir estar preparados a las 6 con los equipajes. Como es muy temprano no podemos desayunar pero nos dan un picnic. Llegamos al aeropuerto de Danang ante de las 7. El guía que es el padre de Queen, nos ayuda con la facturación y pasamos a la zona de embarque donde nos tomamos el desayuno, no entero porque era mucho; pedimos un café en la escueta cafetería que está malísimo.
Tras una hora de vuelo llegamos al aeropuerto de Tan Son Nhat en Saigón, hoy Ho Chi Minh. Allí nos está esperando Anita, la nueva guía.
Cargamos todos los equipajes en un autobús y sin pasar por el hotel nos lleva a visitar la Pagoda de Quan Am consagrada por los chinos a la diosa de la Misericordia.
Es del s.XIX y tiene una magnífica decoración a base de lacado y pan de oro. En el tejado hay incrustaciones de cerámica que representan leyendas tradicionales chinas.
En todos los templos y pagodas que hemos visitado hay siempre ofrendas incluso de dinero, generalmente falso, y además se está quemando incienso que sale de una especie de cucuruchos helicoidales que cuelgan del techo.
Aunque sigue haciendo mucho calor no es como en el norte, a lo mejor es que nos vamos acostumbrado.
Cambiamos de actividad y vamos a conocer el mercado del barrio de Cholón que se llama mercado de Binh Tay, el más importante de la zona. Su arquitectura es china. Nos ha dejado un rato libre por si queríamos comprar. La gente ha comprado sobre todo maletas de cabina y bolsos pero nosotros no.
No son ni las 12 y la guía pretende llevarnos a comer pero nos negamos y nos lleva al hotel. Es el Hotel Caravelle una maravilla de 5 estrellas.
Al llegar nos encontramos con el contratiempo de que el hotel no había realizado las reservas que la agencia le había hecho. Perdemos un poco de tiempo hasta que se soluciona así que tomamos posesión de nuestras habitaciones que son fenomenales, nos lavamos un poco y corriendo para abajo que hemos quedado a la 1 con Anita para ir a comer.
Nos ha llevado a comer al Restaurante Dong Du, muy cerca del hotel. Hemos comido un menú menos largo que los días anteriores, solo 7 platos. La calidad, media.
Al salir llovía a mares pues están en época de lluvias; de la puerta del restaurante al autocar que estaba frente a la puerta nos hemos empapado. Nos llevan a una fábrica de lacados donde compramos algunos recuerdos.
Como ya ha escampado vamos al Museo de la Guerra. En él se supone que hay testimonios de otras guerras pero el protagonismo es para el enfrentamiento con los Estados Unidos.
En un gran patio están expuestos aviones, carros de combate, piezas de artillería y algunas armas experimentadas por primera vez en Vietnam.
En el interior hay salas con documentos gráficos de torturas y crímenes cruentos, de los efectos de napalm y el agente naranja sobre la población civil, llevados a cabo por las tropas norteamericanas. Las fotos están hechas por corresponsales de guerra o por los mismos soldados americanos. No hemos visto todas las salas así que no sé si sólo tienen el testimonio de las atrocidades cometidas por una parte o es que no nos han enseñado las muestras de lo que hicieron los del Vietcong. Los guías que hemos tenido vivieron el conflicto directamente, Ly y Anita, o heredaron la devastación y la ruina como Queen, son muy conscientes de lo que les ha pasado pero hablan de ello sin resentimiento pues ahora dedican todos sus esfuerzos a levantar su país. Y lo van a conseguir. Eso creo y eso espero.
A continuación nos han dejado en un mercado llamado Ben Thanh en la zona centro, bastante cerca del hotel. Allí nos hemos vuelto locos comprando imitaciones de marcas como camisas de Polo Raph Laurent de vestir o de sport a 6$ o polos de la misma marca a 5$. También hemos comprado pantalones tipo dockers y camisetas de distintas marcas muy baratas.
Nos reunimos en la puerta a las seis menos Chus y Berta que ya se habían ido antes. Aunque no estamos lejos del hotel tenemos que coger un taxi pues vuelve a diluviar.
Enrique y yo cuando escampa decidimos ir a unos almacenes que están muy cerca para ver si encontramos algo para su madre pero al final me he comprado una pulsera de plata y rubíes y una gargantilla de plata y turquesas para Mari Pili. También me he comprado tres polos de imtación.
Volvemos directamente al hall del hotel donde habíamos quedado a las 8,30. Creíamos que llegábamos tarde pero Chus y Berta aun no han bajado.Vamos a cenar al Restaurante Pacharán, de comida española. Está bien pero las raciones son un poco escasas. Ha venido el dueño a saludarnos.
De nuevo en el hotel organizamos las compras en las maletas para que vayan todas en la misma y a las 10,30 nos acostamos.
Otro día fructífero y agotador.
Hasta mañana.