Fecha: 06-08-2012
Autor: Sobakero
Todo empezó con un viaje a Portugal, la comparecencia a un juicio nos acortó a la mitad el número disponible de días, así que después de pensar dimos con la solución, Andorra, un viaje corto, económico y bonito.
Para esta expedición nos juntamos Nacho con su Sporster 883 R, Mike con su Teneré (Terracing) y yo con la sufrida Chocho3 . Partimos el miércoles 8 de agosto, 860 km nos esperaban. Para algunos el despertador sonaba a las 5:00 de la mañana, para otros era el teléfono a las 5:20. Cogemos la autopista, salimos en la recta de la Esperanza y nos hacemos la carretera de Villaviciosa con la única compañía de los enanitos que ponen las carreteras por las mañanas, luego volvemos a la autopista y directos a Unquera a desayunar mientras va despertando el día, un momento que me encanta verlo subido en la moto.
Ya desayunados, seguimos por nacional hasta Cabezón de la Sal, donde ya cogemos la Autopista hasta Bilbao. Allí ya nos dan el primer hachazo, el peaje de la ronda costaba en Diciembre 0,50 €, ahora ya está a 1,03€, ya me podían subir a mí el sueldo a esa velocidad.
Seguimos rumbo a Vitoria por la Nacional, Pamplona, Jaca, Embalse de Yesa, Castejón de Sos, Sort…. y al fin Andorra. Son las 21:00 y ahora nos queda dar un par de vueltas, unas preguntas y soltar los bártulos en el hotel a las 21:30. Un viaje sin incidentes graves ya que pudieron a ver sido gracias a una amable señora que conducía con trazada de F1 y me hizo levantar la moto en plena curva, en la curva siguiente les tocó el mismo palto a Nacho y Mikel, o ese otro turista que conduce a 50 videocámara en mano obligando a un camión tener que adelantarle y yo cambiar de carril hacia el arcén.
Jueves. Decidimos tomar el día con calma, yo y mi costumbre de madrugar hace que me levante el 1º, así que cojo mi cámara y me doy una vuelta antes de desayunar. Una vez todos en marcha, lo primero que hicimos fue ir de visita al Concesionario HD, Nacho tuvo la brillante idea de ir de viaje sin rueda trasera, así que tocaba cambiarla, (un viaje sin una hd en el taller no ye un viaje). Mientras tanto visitas a tiendas de motos y cervecitas.
Por la tarde Mike prefiere quedarse de descanso y Nacho y yo nos damos una vuelta en moto. Fuimos hasta Canillo por una carretera digna de rodar. Allí visitamos el Museo de la Moto y después a buscar a Mikel y turisteo con cerveceo por Les Escaldes.
Viernes. Ya descansaos nos vamos Al Parque Natural Regional del Pyrénées Ariégeoises, una vuelta de 299 km por carreteras regionales, con unas vistas espectaculares. Nos lo tomamos con calma, parando aquí y allí, gracias a la pequeña nevera que llevaba Mikel nos daba un bonito margen económico y turístico ya que nos permitía tomarnos algo en los sitios más guapos donde no había nadie, la nevera fue la reina del viaje. A pesar de ser una ruta de pocos kilómetros, arrancamos a las 9:00 y llegaos a las 19:00. Lugo hicimos vida de lugareños.
Sábado. 08:00 mañana en pie. Hoy nos tocaba otra pequeña incursión por los Pirineos Franceses, esta vez le tocaba a la Reserva Nacional de Faune d´Orlu. Esta ruta era de 200 km. La hicimos en un tiempo más prudencial, las carreteras eran mejores y no escatimamos en las paradas, en una presa a tomar algo, visitar mercadillos, vueltecita por Pass de la Casa y visita al Museo del Automóvil. Todo nos llevo hasta las 17:00, hora justa para una ducha y turistear un poco.
Domingo. Decidimos tomarnos el día con calma, hay que descansar para el Lunes que sería otro día largo. Mikel decide relajarse en el Hotel y alrededores y Nacho y yo irnos de visita al Museo de Hidroeléctrica y rutear un poco hasta la hora de comer. A pesar de no ponernos hora para levantarse mi reloj biológico me tocó a las 07:30. Me preparo y me voy a tomar un café, al terminarlo baja Nacho que se toma el suyo y nos vamos a comprar un croissant. Volvemos al hotel a coger los trastos de la moto y de paso robarle una cerilla a Mikel para ponerla en el croissant, era su cumpleaños, así que le hicimos una “tarta sorpresa” digna de cualquier motorista estilo rata.
Nos vamos al museo, a pesar de estar a 5 minutos del Hotel y según las indicaciones recibidas dimos más vueltas que un pulpo en un garaje. Entretenido el museo, sobre todo la parte en que podías jugar con la electricidad y misteriosamente después de experimentar yo en uno dejó de funcionar, vámonos al corte que me lo he cargao tron. Del museo había que ir a una presa a dar un paseo explicativo del funcionamiento de ella y su historia en Andorra. Estuvo bien, aunque a mí me gustó más los 8km que nos separaban del Lago Engolasters. Con el museo se nos hizo la hora de comer, así que devuelta al hotel. Comer, una pequeña siesta y paseo por Les Escaldes, nos hubiera gustado dar otra vuelta en moto pero había que descansar. Luego cenamos en el Escalibur para celebrar el cumpleaños de Mikel.
Lunes. Hora de marchar 05:00. Preparamos los bártulos y nos vamos, un pelín acojonaos, ya que al ser tan temprano teníamos miedo que nos pararan en la frontera por estar los agentes aburridos, no es que lleváramos nada pero madrugar para que nos paren 30 minutos no hacía gracia.
La ruta fue la misma de la ida, nos hicimos unos buenos km por carretera de montaña y de noche, que buen momento volver ver amanecer en ruta. Poco a poco pasaron los Km y a las 19:30 en casa, algún contratiempo con algún coche pero todo sin problemas.
Fue un bonito viaje, muy relajado, barato y con una buena dosis de paelleras, nunca di tantas seguidas. De la manera que están los tiempos pronto me haré otra excursión por allí.
Una de Fotos