Aprender y enseñar son conceptos recíprocos, que se dan como emisores y receptores en la educación. Esto no solamente se trata de obtener nuevos conocimientos ni transmitir… es ser parte de ese proceso de aprendizaje, motivación y amor de ir creando el camino al crecimiento y desarrollo de nuestros niños. Nosotros como educadores nos convertimos en esos cuidadores o sembradores de nuestras semillas; que son nuestros estudiantes y con los elementos de agua, luz solar y amor es que ellos van engrandeciendo todas sus potencialidades y capacidades. Sin embargo, para que esto se dé debe enriquecerse todas estas experiencias de diversas formas.
Como sabemos, cada uno de nuestros estudiantes son únicos y diferentes. Venimos de distintos contextos sociales como lo son con las religiones, las culturas, etnias, razas, clases sociales, diversidades funcionales, género, edades, entre otros… reconociendo que existe una diversidad de seres humanos. Cada uno de nosotros tiene su propio estilo de aprendizaje como podemos ver con el ejemplo del modelo PNL (Programación Neurolingüística) de Richard Bandler y John Grinder con los tres sistemas establecidos: visuales, auditivos y kinestésicos; que se puede ver discutido en unas de mis competencias de este portafolio. Por tanto, cada uno va aprender a su propio ritmo y de la manera que se les sea más viable. Evidentemente, se puede ver mucho en la área que estudio de la educación especial ya que para estos estudiantes es necesaria conocer como ellos aprenden, cuales son sus necesidades y condiciones para brindarles el apoyo y las modificaciones necesarias para que el estudiante obtenga ese aprendizaje. Cuando nosotros maestros/as realizamos planificaciones o incluso en Plan Educativo Individualizado (PEI) tenemos que tener en cuenta el diagnóstico del estudiante, sus fortalezas, necesidades, intereses, objetivos, metas, actividades requeridas para desarrollar ciertas áreas, materiales asistivos, ambientación, prácticas educativas, estrategias, métodos, planes de trabajo, etc. Vemos que con todas esta información estamos considerando las diversas formas que aprenden nuestros estudiantes de forma tanto colectiva como individual. De la misma manera, puede pasar con un estudiante que viene de otra cultura o país y se le hace un poco difícil adaptarse a nuestro ambiente. Para que se dé un aprendizaje significativo debemos buscar otras alternativas para facilitar el mismo y que el material sea uno entendible, dinámico y al nivel de ellos. Cuando educamos tenemos que tomar en consideración ese contexto social-cultural. Por eso es muy importante conocer a nuestra población estudiantil.
Otro aspecto fundamental, es la integración de otras disciplinas e interconectarse con lo que enseñamos. En mi caso, mis especialidades son en el área de educación especial (discapacidad intelectual y autismo) y la niñez temprana. Por tanto, como maestra no tengo una materia en específico a enseñar y esto me da una ventaja; en el sentido de que puedo unir conceptos de una forma que se vea motivadora para el aprendizaje de mis estudiantes. Un ejemplo que puedo dar es con la niñez temprana cuando leemos un cuento de los animales de la granja; aquí a simple vista vemos la integración del área lingüística y cognoscitiva o por decirlo así español con ciencias. Claro esta, de esta forma los niños acogen mejor ese aprendizaje y no se vuelve algo monótono, rígido y establecido. Se puede utilizar el juego, teatro y las artes como ejemplos de herramientas dinámicas para llegar a ellos. Es muy importante saber; que nunca lo olvido de uno de mis cursos, nos comenta la profesora que para poder enseñar algún concepto se debe enseñar “del todo a las partes y no las partes al todo” (como conceptos totalmente individuales). Tu no vas a explicar las partes de la plata o las partes de un carro sin conocer el todo; que en sí es la planta o el carro.
Por último, es precios señalar que dentro de nuestros salones de clases, nuestro jardín de edén, debemos fomentar ambientes motivadores e inclusivos en donde se vean reflejados distintas estrategias, métodos y materiales para enseñar a los estudiantes. La ambientación es uno de los elementos que juega un papel esencial en la motivación de los estudiantes y esta dependerá grandemente si aprenden. Se debe fomentar el pensamiento crítico, la exploración, la práctica concreta y el uso de las tecnologías emergentes. Hoy en día, es algo que muchos educadores utilizan desde juegos virtuales, “softwares” para el desarrollo de destrezas de comunicación o de vida independiente, realidad aumentada, códigos de barra, pictogramas y entre muchos otros ísimos más.
Como vemos, el aprendizaje es la base de nuestra vida. Constantemente estamos aprendiendo y de ese aprendizaje enseñamos a los demás. Por medio de ese proceso aprendemos a comunicarnos, a pensar y a conocer más el mundo que nos rodea. Como futuros maestros y maestras encuentro que es necesario enseñar a nuestros estudiantes a aprender y a crear ambientes comunicativos, inclusivos y de interacción entre los estudiantes y los maestros. Necesitamos que exista ese intercambio de opiniones y de diálogos para enriquecernos y poder conocer las distintas maneras en que podemos enseñarles y aprender. Todos aprendimos uno de los otros. Nadie sabe más que nadie. Durante este proceso tanto el maestro como el estudiante amplian sus conocimientos y se autoevalúan permitiéndonos mejorar en lo que hacemos. En fin, sigamos todos enseñando, aprendiendo y creciendo como seres curiosos y especiales.