1. Para empezar ¿nos podrías hacer una pequeña introducción sobre ti, a qué te dedicas más o menos…?
- Principalmente soy profesora universitaria dentro de la escuela de ingeniería técnica superior, de ingeniería informática. Doy clases en segundo de carrera de ingeniería informática, centrado en sistemas operativos, creo que ese es el foco de mi profesión. Lo que pasa es que debido a varias cosas, pues, me interesé por la gestión universitaria y he estado durante 10 años en diferentes cargos de gestión, pues de subdirectora de calidad, luego de calidad y docencia, y finalmente pues en 2017 di el paso y me presenté como directora de la escuela, y pues, actualmente soy la directora de la escuela.
2. ¿Estás relacionada sólo a la ingeniería?
- En este campus lo bueno que tenemos es la facultad de Bellas Artes, con lo cual, a pesar de que la mayoría son ingenierías, a nivel de trato entre escuelas hay relación de hacer proyectos conjuntos, entonces, es ingeniería pero también tocamos otras cosas porque la informática lo toca todo. Actualmente la informática puede hacer cualquier cosa, con informática relacionamos cualquier campo. Esa es la potencia que tiene la informática.
3. ¿Dónde estudiaste?
- En la UPV. De hecho, acabé mi proyecto final de carrera en julio y en septiembre ya era profesora de aquí, fue una cosa un poco rápida.
4. ¿Nos puedes contar un poco de esa experiencia… de pasar de alumna a profesora?
- Un shock, porque encima me metí en una asignatura de las más difíciles para dar prácticas.
5. Empezaste muy joven ¿no?
- Sí, con 24. La carrera antes eran 5 años, tres de diplomatura y dos de licenciatura, luego el proyecto final de carrera, era un poco más largo que ahora, que los trabajos de fin de grado y me tuvieron un año. Luego, el 15 de septiembre ya estaba yo de profesora. Muy chulo pero mucho miedo, porque claro, acabas de dejar los libros y ya estás encima de la tarima, pero se lleva. Los buenos compañeros que tienes alrededor de los que aprendes tanto pues te ayudan a ese paso.
6. ¿Por qué decidiste estudiar una carrera relacionada a los campos STEM?
- Buena pregunta. Supongo que porque cuando sopesé que me gustaban más si las asignaturas de letras o las de ciencias, pues me gustaban mucho más las de ciencias. Las de letras las llevaba bien pero no era una cosa a la que me dedicaría… entonces, dentro de la universidad informática no se conocía mucho. La verdad es que informática no tenía, por ejemplo, dibujo técnico que a lo mejor sí que me daba un poco de susto, pues al final elegí informática.
7. ¿Te has sentido discriminada en tu ámbito laboral por ser mujer?
- Pues, alguna vez, sí. Daros cuenta que aquí el 90% de los alumnos son chicos, entonces yo sí que he notado que una profesora se suba encima de la tarima e imparta una clase, no es lo mismo que si lo hace un hombre. No te toman igual. Al final consigues con tablas llevártelos a tu terreno pero la primera impresión muchas veces es decir “A ver esta qué nos va contar” “Esta qué va a saber de esto”.
8. ¿Y a nivel de alumna?
- Fíjate, yo estudié una especialidad que es sistemas físicos donde había muy pocas chicas, éramos a lo mejor, 7 en una clase de 90 o de 100. Tienes que aguantar bromas, eso es así. Tenía que ver partidos de fútbol el fin de semana anterior para tener tema de conversación, es decir, se nota. A veces es sutil, otras veces no es tan sutil. Y sobretodo, el tema de que a veces había compañeros que no querían hacer prácticas conmigo por ser mujer.
9. ¿Ese tipo de discriminación la has notado por parte de compañeros de trabajo que están a tu mismo nivel?
- Sí, también se nota. Porque en mi departamento que también somos pocas mujeres respecto a los hombres, al final es el ambiente que se crea el que hace que por el hecho de que haya una mujer como que cortas el rollo, no acabas de cuadrar bien con ellos. Tienes que oír los típicos chistes machistas constantemente, las bromitas, etc. Creo que eso es ya en todos los ámbitos, no creo que se haya eliminado en absoluto. De hecho, ahora hay problemas porque como supongo que tendréis vosotros, grupos de WhatsApp de clase, pues las chicas normalmente se quejan porque tienen que aguantar bromas muy pesadas por parte de sus compañeros, a lo mejor no son todos, pero hay. Yo creo que en esta carrera donde hay muchos más chicos que chicas se nota más. Hay que verlo, hay que asumirlo y hay que luchar contra ello y ya está, no pasa nada. No por ello debes dejar de hacer carreras que te gustan, te encuentras mucha gente que es muy maja.
10. Pero, influye bastante. Una persona que quiere dedicarse a eso, a lo mejor no lo tiene del todo claro pero lo está probando y sientes el rechazo... influye bastante.
- Pero no os debería influir eso. Pues al final ese ambiente, el hecho de que no haya tantas mujeres, hace que ese ambiente se mantenga. Mientras que si hay más mujeres, pues se cortan más.
11. ¿Qué opinas del techo de cristal? ¿Te has visto afectada o involucrada a él?
- Sí, el techo de cristal existe, aunque yo lo rompí un poco ¿no? Al presentarme como directora… pero justo cuando me lo propusieron, o sea, un compañero mío me dijo: “Ay pues podrías presentarte” y yo lo primero que pensé fue “Uy no… madre mía” No lo hice aquí pero bueno, yo tengo una situación en casa complicada, porque tengo 3 hijas y estoy divorciada entonces eso hace que hay muchas cosas que tengo que llevar yo adelante y entonces me planteé si verdaderamente iba a poder, porque tengo responsabilidades aquí y en casa… pero luego me hice la pregunta de: Si yo fuera un hombre ¿me estaría preguntando esto?
12. En otras entrevistas que hemos hecho, ha sido interesante el tema del techo de cristal relacionado a la maternidad, que no afecta de la misma manera a un hombre que a una mujer.
- No, en absoluto. Me hice la pregunta y me dije: ¿Qué ejemplo le estoy dando a mis hijas, si yo, por culpa de que creo que me tengo que dedicar mucho a ellas? Sin preguntárselo a ellas siquiera, entonces lo que hice fue hablar con ellas y dije “mira, si me presento a directora pues tendréis que echarme un cable en casa, habrá veces que tenga que trabajar por la tarde sin poder estar con vosotras, ¿estáis dispuestas? Y me dijeron “Por supuesto que sí, mamá, es tu carrera” Pero es cierto que en muchas situaciones, yo tengo suerte porque mis hijas ya son mayores, tengo una de 17, una de 15 y otra de 10, pero con niños pequeños eso no te lo puedes plantear, porque quieras o no, aunque el padre forme parte de la educación, la que está ahí siempre sacando las cosas afuera es la madre. Hoy he visto una gráfica de los empleos y los sueldos de hombres y mujeres en función de si hay niños en casa o no. Entonces cuando no hay niños en casa, los sueldos son muy parecidos pero en el caso contrario, como te tienes que dedicar a más horas en casa los sueldos bajan porque tienes menos horas de trabajo, ya sea a tiempo parcial u otro tipo de trabajo, entonces, a la hora de compatibilizar el trabajo con el cuidado de los hijos la mujer siempre sale perdiendo. Eso es una cosa que también que tenéis que cambiar vosotras, no renunciar a tener hijos, que es una cosa que yo recomiendo, es decir, es una experiencia que podemos tener solo nosotras y es muy especial pero es el poder de poder compatibilizar una cosa y no renunciar a la vida profesional por el hecho de tener hijos.
13. ¿A lo largo de tu carrera alguna vez has participado en algún proyecto destacable que te haya marcado?
- Pues yo creo que, la vinculación que tengo con la escuela, el crear nuevos títulos, es una cosa que está constantemente viva y es una de las cosas que más me gustan. Sobre todo lo que me gusta es escuchar a los estudiantes, hacer actividades en la que los estudiantes cuenten las cosas y lo que les gusta de esto y cómo mejorarlo.
14.¿Has recibido algún premio o reconocimiento por tu trabajo?
- Recibí uno que me hizo muchísima ilusión hace tres años en la graduación de final de curso, entonces los alumnos eligen un padrino o una madrina de todo el profesorado y yo fui la primera mujer que eligieron como madrina, como un reconocimiento del trabajo que haces, que es realmente el que mola, subirte a la tarima y contar cosas.