Hablemos sobre Crianza Positiva: las mentiras en la niñez y adolescencia.
Por Mtra. Rebeca Isadora Terán Marín
Jefa operativa de la Secretaría Ejecutiva del SIPINNA Yucatán
Comencemos por plantear tres ideas que guían la crianza positiva:
El respeto a los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes. (Ley General de los Derechos de Niñas Niños y Adolescentes, 2014).
Recordar que “los vínculos, nos hacen quienes somos” (DiBártolo, 2019). Cuidar nuestra relación, nuestros vínculos afectivos con ellos y ellas.
Recordar que la forma en que tratamos a niñas y niños, está directamente relacionado con el desarrollo de sus funciones cerebrales y con el desarrollo de las sociedades que construimos, es decir que los buenos tratos ayudan a fortalecer el desarrollo cognoscitivo y a la persona en su conjunto, y eso construye mejores sociedades”.
Ahora ¿Cómo aplicamos estas premisas a situaciones específicas? Me gustaría aprovechar una pregunta que me llega constantemente en la atención a familias con niñas, niños y adolescentes: ¿Qué hacemos con el tema de las mentiras?
La mente en desarrollo ¡es muy interesante! Y creo esto porque muchas de estas conductas que vemos como problemas, realmente son esperadas, a excepción de que se volvieran un problema cotidiano o afectaran la vida de la niña, niño o adolescente o el funcionamiento de la familia. Si tienes dudas sobre este tema, te recomendamos siempre consultar con una persona profesional en el área.
Antes de adentrarnos a las etapas que nos pueden servir de referencia para entender las mentiras quisiera aclarar que las edades son solamente categorías generales, pero puede variar según la trayectoria de desarrollo de cada niña o niño o adolescente.
Mentiras en niñas y niños de 0 a 2 años
No mienten. Las niñas y niños de 0 a 2 años, si hablan, no dicen mentiras. Puede haber confusiones de lo que pasó realmente y se equivocarán en las expresiones como “sí”, “no”, “tuyo”, “mío”, también se confundirán en tiempos como pasado, presente y futuro. También pueden confundirse con preguntas adultas como ¿Estás seguro que…? O ¿por qué hiciste eso…? Entre otras. Esto pareciera obvio, pero es frecuente escuchar a personas adultas decir que su hijo o hija de esta edad está mintiendo y pues… no es así y no es tan obvio para todas las personas.
Mentiras en niñas y niños de 2 a 6 años
Nota importante, no olvidar: En muchos casos aplica lo mismo que en la etapa anterior ¡Recuerda! Tienen una mente en desarrollo. En este período, las niñas y niños todavía no desarrollan la maduración necesaria para planear las mentiras o para decir mentiras elaboradas.
Realmente, en muchas de las ocasiones las mentiras que dirán, solamente se referirán a temas como “no, yo no fui” o “sí hice lo que me pediste” pero de forma espontánea, sus caritas y miradas las y los delatarán porque no pueden ocultar lo que están pensando o sintiendo, de hecho esto ni siquiera se podría catalogar como una mentira propiamente.
Las niñas y niños también pueden tener algunas otras confusiones y pensar que algo es real cuando no lo es. Por ejemplo, cuando tiran algo, pueden decir que no lo hicieron, por varias razones: 1) porque no se dieron cuenta de que alguna parte de su cuerpo chocó o movió el objeto e hizo que se cayera, 2) porque no querían tirarlo, no era su intención y por lo tanto dicen “yo no lo tiré” aunque, por ejemplo, el objeto haya resbalado de sus manos, 3) porque tienen miedo al castigo.
En este mismo periodo, empiezan a detectar que algunas de sus conductas no son agradables para otras personas pero todavía no logran evitar la realización de ésas conductas, por ejemplo si todavía tienen accidentes de pipi y sienten que alguien va a regañarlos, puede que no le avisen a nadie que están mojados, también puede que digan que les cayó agua en la ropa. Este tipo de mentiras también pueden demostrar que el niño o niña tiene miedo de la persona que se encarga de la disciplina en su ambiente.
Niñas y niños de 6 a 12 años
Las mentiras empiezan a ser más elaboradas y suelen ser para conseguir cosas o evitar castigos. Por ejemplo, si se tiene un acuerdo de usar un videojuego por una hora al día, y papá, mamá o persona cuidadora pregunta ¿Cuánto tiempo llevas usando esto? El niño o niña, puede decir “llevo media hora” y esto es con la intención de seguir usando algo que le agrada, pero no está mintiendo con una mala intención, no se está riendo por dentro de ti, ni ha planeado mentirte desde que empezó a usar el videojuego. Algo que sucede en esta etapa, es hacer “pruebas”. Pueden ir probando qué pasa con las reacciones de las personas adultas, de otras niñas y niños, así como los beneficios que pueden obtener con sus estrategias. Finalmente, esto puede ser muy útil si se cuenta con la guía respetuosa de personas adultas.
Adolescentes de 12 a 17 años
No olvides que se trata de una trayectoria de desarrollo que va avanzando progresivamente, entonces no descartes nada de las etapas anteriores y considéralas. También puede haber razones como:
Miedo al fracaso, al rechazo, ridículo o burlas.
Imitación del ambiente.
Evitar castigos físicos o castigos en general.
Sensación de que no tiene todo el amor que desea o de que puede perder la confianza o el cariño de personas que le importan.
Observar un beneficio inmediato al inmediato al mentir, sin mirar las desventajas a largo plazo.
Sentir que su forma de ser verdadera no será valorada o reconocida como suficientemente buena en algún ambiente, como su casa o escuela.
Exceso de exigencia en algún área. Evitar que le llamen flojo, ignorante o torpe, aun cuando realmente exista alguna dificultad para las tareas.
Emociones no procesadas hacia personas importantes, especialmente de enojo.
Ausencia de una figura de confianza de forma consistente.
“Disciplina” con violencia.
Recomendaciones generales.
La más importante: ¿Recuerdas el dicho “piensa mal y acertarás”?… bueno, pues en el caso de niñas, niños y adolescentes (de preferencia en general) ¡olvídalo! Mejor aplica “Piensa bien y acertarás” siempre es más probable que el niño o niña no esté mintiendo con ninguna mala intención, no por burlarse de ti ni engañarte, es más probable que tenga miedo o desee algo en específico. Algunos llaman a esto hacer la hipótesis más benévola de su conducta y es un estilo de vida, sin duda, mucho más saludable para todas las relaciones que tenemos. Y por ningún, ningún motivo castigues de forma física. Nada justifica los golpes, castigos físicos o degradantes.
Otras recomendaciones:
No hacer preguntas trampa. En lugar de preguntar “¿hiciste tu tarea? Decir” “Veo que no hiciste la tarea”
No culpabilizar ni ridiculizar: Usa frases como “esto no me hace sentido”, “En esta familia tratamos de decir qué pasó y cómo nos sentimos”
Validar sus emociones con frases como “entiendo que estés molesto”, “sé que te gusta mucho el videojuego”
Organizar su experiencia: Algunas personas dicen mentiras cuando tienen miedo o preocupación por algo ¿qué te preocupa? ¿te puedo ayudar en algo?
Evitar reprender cuando diga la verdad después de mentir, reconocer que tuvo el valor de decir la verdad y pedirle que proponga alguna solución al respecto.
Recordarle que a pesar de que no aceptas la mentira, sí le sigues amando y así seguirá siendo siempre.
Sé un ejemplo.
Para más recomendaciones, consulta información confiable de profesionales especializados y actualizados en psicología de la niñez y adolescencia.
Recursos que puedes encontrar para obtener más información:
Disciplina Positiva en la Crianza Cotidiana (Tercera Edición) https://resourcecentre.savethechildren.net/pdf/positive_discipline_in_everyday_parenting_sp_hi-res_final_2017.pdf/
Herramientas sobre Crianza Positiva y Buen Trato (UNICEF). https://www.unicef.org/mexico/herramientas-para-la-crianza-positiva-y-el-buentrato
Materiales sobre crianza positiva para docentes. (UNICEF). https://www.unicef.org/mexico/informes/materiales-de-crianza-positiva-para-docentes
Bibliografía
El Apego. Cómo nuestros vínculos nos hacen quienes somos. Inés DiBártolo, 2019.
Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. Gobierno de México, 2014.