CIUDAD DE split

COSAS QUE VER EN split

La historia de Split dura ya 17 siglos, desde que el emperador romano Diocleciano decidió construir su palacio en el que pasaría el resto de su vida en paz en la península cerca de la ciudad romana Salona. Durante esos 1700 años el palacio estaba deviniendo y devino una ciudad que hoy en día atrae con su rica tradición, magnifica historia, belleza natural y patrimonial.

El palacio de Diocleciano y todo el núcleo histórico de Split está en la lista del patrimonio mundial del UNESCO desde 1979, y eso no solamente porque el palacio esté muy bien preservado, sino porque el palacio y su ciudad (o la ciudad y su palacio, como quiera) continua de vivir plenamente. Las capas históricas del tiempo de la antigua Roma hasta la edad media son visibles y vivos todavía en esa estructura. Andando por la antigua ciudad es posible viajar en el tiempo, observar ejemplos maravillosos de la arquitectura antigua/clásica como Peristilo, iglesias medievales románica y palacios góticos, los portales renacentistas de las casas de los nobles, fachadas barrocas la arquitectura moderna bien incorporada en el rico patrimonio.

Split es mucho más que su bastidor arquitectónico magnifico. Es una ciudad donde uno puede gozar de una gastronomía superior y de vinos de calidad; encontrar muchos eventos culturales como espectáculos cinematográficos y teatrales, exposiciones, conciertos y museos maravillosos; es una ciudad que ofrece entretenimiento como clubs, bares, eventos callejeros, y festivales como Ultra Europe que es visitado anualmente por más de 100 mil de jóvenes de más de 100 países

Estos son los lugares más destacables...¡No te los pierdas!

Marjan

La colina Marjan es el primer símbolo de la ciudad de Split. La naturaleza ha tejido sus laderas septentrionales en su mayor parte de piedra caliza, mientras que las meridionales son de piedra, capas de margas y una costa rocosa.

Los ciudadanos de Split, con afecto comenzaron la forestación de la colina en 1852, plantando los primeros pinos en 1903, fundaron la Asociación Marjan que desde entonces custodia esta colina maravillosa.

Gracias a los ciudadanos del siglo XIX, Split está orgullosa de su "pulmón verde" porque a los amantes del paseo, de todas las generaciones, ofrece paz y tranquilidad, recreación y ocio, junto con un gran número de iglesias y ermitas, senderos naturales y para correr. Un modesto jardín zoológico es el deleite de los niños.


El Palacio de Diocleciano


Es uno de los monumentos de arquitectura romana mejor conservados del mundo. El Palacio del Emperador fue construido como una combinación de una villa de lujo: una casa de verano y un campamento militar romano (castrum), dividido en cuatro partes por dos calles principales.


La parte sur del Palacio fue el Palacio de Diocleciano, es uno de los monumentos de arquitectura romana mejor conservados del mundo. El Palacio del Emperador fue construido como una combinación de una villa de lujo

A lo largo de los siglos, los habitantes del palacio, y luego los ciudadanos de Split, adaptaron estos espacios a sus necesidades, de modo que los edificios interiores y los muros exteriores con torres cambiaron enormemente su apariencia original, pero los contornos del palacio imperial son todavía muy visible.


La catedral de San Domnius (San Duje)

Entre las catedrales europeas la de Split tiene como sede el edificio más antiguo, el mausoleo del emperador romano Diocleciano. En ella, a finales del segundo milenio, la historia une la herencia antigua pagana, la medieval cristiana y la moderna. El mausoleo del emperador, perseguidor de los cristianos, se convirtió en la catedral a mediados del siglo VII. En ella tienen un lugar privilegiado los altares con las reliquias de San Domnius y San Anastasio, mártires ejecutados en el cercano Solin.


La catedral es hoy, sobre todo, un lugar litúrgico cuya milenaria continuidad se refleja muy bien en la Santa Misa celebrada todos los domingos y con renovado esplendor en el día de la procesión del patrón de Split, San Domnius (Duje).


La parte más famosa de la Catedral es la puerta de nogal, que en 1214 fue tallada por Andrija Buvina, artista de Split, en cuyas hojas hay talladas en sus catorce casetones escenas de los Evangelios, desde la Anunciación de san Gabriel a la Resurrección de Cristo.

Riva (Paseo Marítimo)

La Riva de Split comenzó a tener su aspecto actual hace dos siglos, en los tiempos de la ocupación napoleónica, cuando el mariscal Marmont gobernó Dalmacia.

Hoy, el paseo marítimo se ha convertido en el "salón de Split“, el espacio público más conocido y el más importante de la ciudad. Entretanto, se ha ampliado y reconstruido varias veces, pero siempre fue marcado por el espectacular paisaje que ofrece la fachada meridional del Palacio de Diocleciano con la entrada a los sótanos y, más tarde, con los edificios que se construyeron al oeste del Palacio, el monasterio franciscano y la iglesia de San Francisco, el Palacio Bajamonti Deškovic y el edificio de la Capitanía del Puerto hacia el este.


Hoy Riva es una zona peatonal adornada con una fila de bares y restaurantes, un lugar ideal para disfrutar de un café matutino y por la tarde, o para divertirse con los amigos hasta altas horas de la noche.

Siempre ha sido el escenario de la vida de la ciudad donde se ubican diversos eventos culturales, festivales de la ciudad y celebraciones deportivas. Aquí la ciudad acoge a los grandes deportistas después de sus innumerables éxitos como el tenista Goran Ivanisevic, los jugadores del club de fútbol Hajduk, ganadores de medallas olímpicas...


La Riva también es un foro político que, a través de las reuniones masivas durante décadas, refleja la situación política en la ciudad. Riva tiene su mejor momento con Sudamja, solemnidad dedicada a San Domnius, santo patrón de la ciudad de Split.