LAS RELIGIONES
LAS RELIGIONES
Las religiones son un conjunto de creencias religiosas, de normas de comportamiento y de ceremonias de oración o sacrificio que son propias de un determinado grupo humano y con las que el hombre reconoce una relación con la divinidad (un dios o varios dioses).
Es un conjunto de experiencias, significados, convicciones, creencias y expresiones de un grupo, a través de las cuales sus participantes responden a sus dialécticas de autotrascendencia y relación con la divinidad.4
Se entiende por religión a un conjunto de creencias, comportamientos y valores culturales, éticos y sociales, a través de los cuales un colectivo humano comparte una visión del mundo y de la existencia, y se vincula con una idea de lo sagrado, lo trascendente, es decir, le dan sentido y valor a la experiencia de vivir.
En conclusión se puede decir que cada religión es identificada , por su organización, sus reglas , normas y convicciones en torno a una creencia .
Siempre he creído que si alguien decide ser miembro de alguna religión, deberá seguir las reglas de dicha organización porque es lógico que tu no puedes entrar a un grupo religioso para cambiarlo , más bien si te agregas es porque eres afín a ese sistema.
EN MEXICO EXISTE LA LIBERTAD RELIGIOSA
7 RELIGIONES.
Las Religiones más importantes:
BUDISMO
Aquí te presentamos la descripción de cada una de manera general , pero si gustas conocer cada religión de manera más amplia , accede a la pagina de Wikipedia mediante un vinculo de acceso que aquí te señalamos.
Es la religión de los seguidores de la doctrina de Jesucristo, expuesta en Los Evangelios. Se ha diseminado por todo el mundo
Durante su historia, se han sucedido herejías (desviaciones de la doctrina oficial), algunas de las cuales tuvieron importante influencia en la historia occidental como los arrianos y los nestorianos.
En el transcurso de los años el cristianismo se ha dividido, y cada organización tiene sus reglas y re adoctrinamiento existiendo actualmente las siguientes ramas:
Se creó en el concilio de Nicea del año 325 bajo Constantino el Grande.
Dirigida por el Papa desde Roma.
Se ha extendido por todo el mundo. Los fieles de esta religión se estiman en 1.050 millones.
(se pronuncia “ortodoja”):
Producto del cisma del cristianismo del año 1054. Dirigida por los Patriarcas.
Hay varios en las capitales de los países del Oriente, el más importante es de Rusia.
Predomina en Eurasia pero existen comunidades ortodoxas en todo el mundo.
Los fieles de esta religión se estiman en 220 millones.
Surgió por la negativa del Papa de conceder el divorcio al Rey Enrique VIII de Inglaterra de su esposa Catalina de Aragón en el año 1530.
Está dirigida por el monarca de Inglaterra.
Es la religión oficial de Inglaterra y del mundo anglosajón.
Los fieles a esta religión se estiman en 65 millones. De ésta iglesia se derivaron varias corrientes como el Puritanismo, el Episcopal y el Metodista.
Su inicio fue influenciado por el pensamiento del sacerdote alemán Martín Lutero, iniciador del protestantismo, por lo que a esta religión también se la considera protestante.
Son las religiones que surgieron por la Reforma de la Iglesia Católica del año 1517.
Su nombre proviene del movimiento de protesta que inició el sacerdote alemán Martín Lutero en contra del Papado por la forma incorrecta de administrar los sacramentos y las indulgencias.
(se vendían). Las más numerosas son:
Luterana, Calvinista y Anabaptista. Entre las tres tienen 250 millones de fieles.
Las corrientes protestantes suelen agruparse según su modalidad.
Por ejemplo:
Los Evangelistas o el Movimiento Evangélico
Agrupa a los protestantes que se guían en su doctrina exclusivamente por los Evangelios.
Agrupan a las iglesias protestantes que tienen una forma de gobierno interno similar.
Estos son: los luteranos, los anabaptistas, los anglicanos y los presbiterianos reformados.
Agrupan a los protestantes que tienen un énfasis especial en la doctrina de la inminente segunda venida de Cristo.
También se les llama Milenaristas por creer que Cristo volverá a la tierra 1000 años antes del Juicio Final, según el Apocalipsis del Evangelio de San Juan.
La mayoría de las religiones protestantes no tienen sacerdotes. En algunas de ellas sus dirigentes se llaman Pastores. El total de protestantes en el mundo es de 350 millones.
fundado en EE.UU. en 1830 por Joseph Smith, cuya denominación oficial es “Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”
Surgió con el propósito de restaurar el verdadero mensaje evangélico cristiano.
Inicialmente permitía la poligamia, la que fue abolida en 1890.
Se ha mantenido fuera de los movimientos protestantes.
Se han esparcido por México, Sud América, Gran Bretaña y algunos países en Europa y Asia.
El total de mormones es de 12 millones.
Comunidad religiosa creada por C. T. Russell en EE.UU. en 1870.
Reconoce un solo Dios, al que identifica con el Jehová bíblico.
Su doctrina emana exclusivamente de la Biblia, del Antiguo y Nuevo Testamento.
Son anti militaristas y fuertemente milenaristas
(Cristo retornará a la tierra 1000 años antes del Juicio Final).
Hacen mucha propaganda a su movimiento, se han diseminado prácticamente por todo el mundo, se destacan porque no permiten transfusiones de sangre y no se enrolan en las fuerzas armadas.
Cuentan con 15 millones de adeptos.
La totalidad de los fieles cristianos en el mundo se estima en 2.100 Millones
Es una de las religiones más antiguas de la historia.
Es la cultura religiosa de los Judíos, Hebreos o Israelitas como también se les llama.
Provienen del antiguo pueblo hebreo que habitó 1.250 años antes de Cristo la actual Palestina.
Hebreo es también el idioma que hablan los judíos.
El origen del Judaísmo estuvo en Palestina, donde se encuentra el actual estado Judío: Israel.
El Judaísmo es además de una religión, una forma de vida, de moral y de costumbres, como la circuncisión y la alimentación (no comen cerdo ni peces sin escamas).
Es una conducta diaria, una forma de estructura social y un comportamiento como nación, por encima de todo otro orden.
Su doctrina proviene del Antiguo Testamento de la Biblia y no aceptan a Jesús como el Mesías anunciado en el Antiguo Testamento.
Los libros más antiguos de la Biblia datan de 1000 años antes de Cristo.
El Éxodo de los Hebreos desde Egipto se inició en el 1250 AC.
El calendario Judío cuenta los años desde la Creación del Universo, que según la Biblia ocurrió 3760 años antes de cristo, por lo que nuestro año 2015 es el año 5775 del calendario Judío.
Esto significa que, según la interpretación literal de la Biblia, el universo tiene una existencia de 5775 años.
El Judaísmo se ha diseminado por todo el mundo. Hay 15 millones de judíos en el mundo.
Es la religión de los seguidores de la doctrina de Mahoma, expuesta en su libro sagrado el Corán.
Mahoma vivió entre los años 570 y 632 después de Cristo.
Creen en un solo Dios: Alá. Mahoma es su profeta.
Se inició en Arabia en el año 622, tomó partes del Judaísmo, del Cristianismo y de otras religiones antiguas ya desaparecidas.
Los seguidores del islamismo se llaman musulmanes.
El término “mahometano” (seguidores de Mahoma) es incorrecto y ofensivo para los musulmanes, porque denota un culto a Mahoma, lo que sería idolatría, prohibida por el Corán, su libro sagrado que fue revelado por Alá a Mahoma.
Igual que el Judaísmo, el Islamismo es además de una religión, una forma de vida y de costumbres.
Es también una forma de estructura política y social y un comportamiento como nación.
Características de los Musulmanes:
Tienen prohibido comer cerdo y tomar bebidas alcohólicas,
La solidaridad y el amor entre los fieles son mandatorios, ricos y pobres son igualmente musulmanes
Se exige la caridad, las limosnas a los pobres son obligatorias.
Está permitida la poligamia, hasta cuatro esposas y concubinas sin límite, pero siempre que el esposo las pueda mantener.
La mujer musulmana no puede casarse con un hombre no-musulmán. Pero el hombre musulmán sí puede casarse con una mujer no-musulmana. El hombre no comete adulterio, sólo la mujer casada.
Uso del Burka:
El Corán no obliga a la mujer a usar un velo que impida a los hombres verla y ser tentados, solo las obliga a vestirse y actuar en forma recadada, lo que incluye la tradición del
Ropa que cubre los brazos, el torso y las piernas, o más frecuentemente con pañuelos en la cabeza. La tradición obliga en algunas culturas, a usar el velo, desde el más extremo:
El burka que cubre todo el cuerpo incluso la cara, hasta solo el pañuelo en la cabeza que cubre el cabello.
El burka era usado en la cultura beduina por los adolescentes de ambos sexos y por las mujeres, jóvenes y viejas, para ocultar a las mujeres jóvenes y aptas para procrear, en los asaltos a las caravanas.
Es obligatorio respetar el ayuno durante el mes del Ramadán, noveno mes del calendario lunar islámico: durante 30 días no se puede fumar, beber, comer y tener relaciones sexuales hasta la puesta de Sol.
También es obligatorio el peregrinaje a la Meca:
una vez en la vida, todo musulmán (varón) debe ir a la Meca.
No hay sacerdocio, pero el Corán regula minuciosamente la vida religiosa y la política. Sus dirigentes religiosos son hombres sabios, estudiosos del Corán, reconocidos y respetados por los fieles.
Los principales se llaman Imán función que se confunde con el cargo de Califa, que es un dirigente político. Para ser Califa se debería ser un Imán o comportarse como tal. Sus funciones varían en las distintas sectas del islamismo.
La oración, obligatoria tanto para hombres como mujeres consiste en cinco oraciones diarias que deben llevarse a cabo: al alba, al mediodía, por la tarde, al atardecer y por la noche.
Deben realizarse: individualmente, en árabe, en estado puro (las mujeres no deben orar si tienen la menstruación), descalzos sobre una alfombra y orientados a la Meca.
Es obligatorio para un musulmán, tomar parte en lo que se denomina “guerra santa” (yihad en árabe) principalmente para la protección del islamismo.
Esta guerra santa es decretada por los líderes religiosos y designa la lucha religiosa por el objetivo islámico que puede englobar el uso de la violencia y la utilización de ejércitos si fuera necesario.
En cualquier caso, se trata de un concepto mal asimilado fuera del mundo musulmán. La finalidad prescrita por la yihad no es la expansión territorial ni la conversión forzosa de los pueblos al islam, sino la toma del poder político para aplicar los principios islámicos a través de las instituciones públicas de la comunidad.
El ala más ortodoxa de los musulmanes, interpreta las enseñanzas del Corán para aplicar un política de guerra contra los herejes y ha provocado sangrientas guerras a través de la historio.
Es la religión principal de la India. Su doctrina está expuesta en el libro sagrado de los Vedas. Es una de las religiones más importantes y más antiguas, comenzó 1500 antes de Cristo.
Ha ejercido influencia en muchas otras religiones durante su larga historia.
Es Politeísta (muchos dioses), los principales son Brama, Shiva y Visnú, se basa en la reencarnación de las almas, que renacen en el cuerpo de otra ser humano, animal, vegetal o mineral.
La reencarnación depende del mérito o la falta de méritos (karma) que haya acumulado cada persona como resultado de su actuar o de lo que haya realizado en su vida o vidas pasadas.
Viviendo santamente, siguiendo los preceptos vedas, se termina con el ciclo de las reencarnaciones y el alma purificada pasa a ser parte del Espíritu Universal o Brama.
Sólo llegan a la inmortalidad los que practican la abstinencia, la continencia y la contemplación.
Otra característica del Hinduismo es el sistema de castas, donde la casta superior los Brahmanes (equivalente a los sacerdotes en otras religiones), que son los más sabios y santos deben ser reverenciados.
Son vegetarianos por lo que reverencian algunos animales y respetan estrictamente el sistema de castas, por ejemplo no pueden casarse con miembros de otra casta.
Hay Hindúes que para evitar la reencarnación, renuncian a la vida cotidiana normal y se dedican a la meditación o contemplación y purificación de su alma utilizando la doctrina del Yoga.
El Hinduismo se ha extendido por casi todo el mundo, tiene 700 millones de fieles. Además de la India, hay en China, África, Asia y Europa.
Hay grupos menores en EE.UU. y en Sudamérica (Surinam).Los Hare Krishna son una secta del Hinduismo.
Es la religión de los seguidores de la doctrina de Siddhartha Gautama o Buda, que vivió entre los años 563 y 486 a.C. en la India.
El Budismo es una derivación del Hinduismo y no tiene un dios. Sus enseñanzas fueron predicadas en forma oral por Buda.
No tiene un libro sagrado como la Biblia, el Corán o los Vedas. Los escritos de sus enseñanzas, llamados Sutra, fueron recopilados por sus discípulos varios siglos después de su muerte.
Buda rechazó el sistema de castas y no les da importancia a los dioses, porque ellos también buscan la perfección.
La base del budismo son las Cuatro Nobles Verdades:
1. La vida incluye sufrimiento, insatisfacción y descontento.
2. El origen del sufrimiento es el anhelo, deseo, sed por tener o conseguir algo.
3. El sufrimiento puede extinguirse cuando se extingue su causa: el ansia de placeres sensuales y la pasión.
Es el método para extinguir al sufrimiento
El origen del sufrimiento y del dolor, es el apego a las cosas materiales de la vida y a los deseos sensuales.
La liberación del dolor es posible mediante la extinción del deseo y al apego a las cosas terrenales.
Ello se logra trabajando con la propia mente y siguiendo el Noble Camino Óctuple con sus tres categorías básicas:
Sabiduría, Conducta Ética y Entrenamiento de la Mente (o Meditación).
La visión o comprensión correcta (Sammā ditthi): aceptar y entender las enseñanzas del Buda.
(Atención:
El Buda nunca tuvo la intención de que sus seguidores crean sus enseñanzas a ciegas, más bien siempre promovió que las practiquen y juzguen como crean mejor).
El pensamiento o determinación correcta (Sammā san̄kappa): estar dispuesto a cultivar las actitudes correctas.
El hablar correctamente (Sammā vācā): hablar con honestidad, evitar toda difamación, rumor o discurso abusivo.
El actuar correcto (Sammā kammanta): comportarse de modo pacífico y armoniosamente (nada de robar, matar o indulgencia excesiva en el placer sexual).
El medio de vida correcto (Sammā ājīva): evitar un modo de vida que genere daños, como aprovecharse de otras personas o matar animales, involucrarse en negocios de substancias intoxicantes o armas, etc.
El esfuerzo correcto (Sammā vāyāma): cultivar un estado de la mente positivo, liberarte o alejarte de la mala energía, de la maldad y de cosas moralmente malsanas. Evitar que vuelvan a surgir en el futuro.
El estar consciente del momento (Sammā sati): percatarse del cuerpo, de las sensaciones, de los sentimientos y de los estados de la mente.
La concentración o meditación correcta (Sammā samādhi): desarrollar la concentración mental necesaria para esta consciencia mencionada.
Estos 8 principios, dice el Buda, te ayudan a alcanzar la iluminación espiritual. Una vez alcanzada ya no los deberías necesitar.
Lo que también hacen es ayudarte entender cosas que quizás nunca antes te cuestionaste, ni sabías que te sucedían y te afectaban en cierto grado, lograr evitarlas o mejorar, para así mejorar como ser humano, como amigo/a, compañero/a de trabajo, jefe/a, esposo/a, novio/a, familiar, etc.
Por lo que vimos, el budismo tiene la particularidad de poder ser aplicado como simple modo de vida, sin la necesidad de practicarlo como religión.
El Noble Camino Óctuple es un método con el que se intenta evitar los extremos de una búsqueda excesiva por un lado y de una mortificación innecesaria por el otro.
Este camino comprende la sabiduría, la conducta ética y el entrenamiento o cultivo de la mente por medio de la meditación y la atención y la plena consciencia del presente, de manera continua.
La perfección es lograr el Nirvana, que se obtiene mediante la meditación.
El Nirvana es un concepto difícil de describir.
Es el estado de la cesación o la extinción del sufrimiento, todas las deudas kármicas son saldadas y se libera del ciclo de renacimientos (reencarnación) a los que todos los seres están sujetos.
La doctrina del Karma (acumulación de acciones buenas o malas) es la que explica la reencarnación.
El Nirvana también se ha descrito como la unión con el Espíritu Universal, equivalente al Brama del Hinduismo.
Los que logran el Nirvana también se les llama Buda.
Sus seguidores veneran a Buda (significa el iluminado o el que despertó).
Buda no es un dios, es un hombre iluminado, sabio.
En el budismo no existe una jerarquía eclesiástica (sacerdotes).
Los monjes y monjas budistas, tienen exigencias voluntarias más estrictas, renuncian a la vida cotidiana normal y se dedican exclusivamente a la meditación o contemplación y purificación de su alma en monasterios.
Los monjes budistas visten de naranja y se rapan el pelo.
El budismo se expandió fuera de la India y se practica en China, Vietnam, Japón, Corea, Sri Lanka, Tailandia, Camboya, Birmania, Laos, Indochina, Tibet, Taiwán, Mongolia.. Hay también grupos menores en África y en Occidente.
Se estima que hay 400 millones de fieles en todo el mundo, pero esta cifra no es confiable porque no hay estadísticas de las religiones chinas.
Los budistas no hacen proselitismo ni intentan ‘convertir’ a nadie.
Si invitan a sus templos a meditar.
Mantienen que cualquiera, independiente de la religión que practique, puede usar, con gran beneficio para su mente, los métodos de perfeccionamiento espiritual del budismo.
Cualquiera puede conseguir el Nirvana.
El budismo ha tenido una influencia determinante en el arte y el pensamiento de todo el Oriente.
En China se ha mezclado con las enseñanzas éticas de Confucio y en Japón hay una ‘simbiosis’ con el Sintoísmo.
(Japón):
Principal religión que se practica en Japón surgida entre los años 300 A.C. y 300 D.C. Es politeísta, siendo el dios principal la diosa del Sol llamada Amaterasu.
Tiene múltiples dioses o espíritus de la naturaleza llamados “Kami” categoría a la que pueden optar los mortales.
De hecho la familia Imperial japonesa pertenece a esta categoría. Es una religión muy simple, no tiene una teología compleja, está orientada principalmente al actuar en esta vida con reglas de conducta, sociales y de veneración de los antepasados.
Convive en una simbiosis amistosa con el Budismo. Se ha extendido a los países vecinos, como Corea.
Japón tiene 127 millones de habitantes, la mayoría de ellos son Sintoístas o Budistas, el 4% son cristianos.
TAOÍSMO:
Es la religión de los seguidores de la doctrina del filósofo Lao Tsé (570 - 490 A.C.). Su nombre viene de la palabra Tao que tiene dos significados el camino y el Universo.
El Tao es por una parte, el camino que deben seguir los fieles para lograr la perfección, la inmortalidad y la unión con el Tao (Universo).
Se preocupa más en la protección de la vida, que en un más allá, por lo que dio origen a la medicina china (acupuntura y otros métodos). Utilizan la doctrina de las fuerzas o principios opuestos (el yin y el yang) y la forma como lograr su equilibrio. (el bien y el mal, lo femenino y lo masculino , la sombra y la luz, etc.)
Tienen sacerdotes, monjes y templos y actualmente está mezclada con el Budismo y el Confucionismo. Una de las doctrinas más importantes es la veneración de los antepasados.
Mientras que el Movimiento de la Nueva Era no es una religión organizada, quienes se identifican con éste a menudo mantienen una colección de creencias similares—y en algunas ocasiones eclécticas.
Los practicantes de la Nueva Era están unidos en su rechazo del monoteísmo tradicional (creencia en un Dios Todopoderoso).9 En su lugar acogen el monismo—la creencia de que todo es uno—y el panteísmo—la creencia de que Dios está en todo.
De hecho, cuando se trata de Dios, estos practicantes creen que el yo es el asiento de la divinidad.
Es decir, hay un aspecto de Dios dentro de cada uno de nosotros—una pequeña astilla de Dios en cada persona.
Además, todo el mundo tiene la responsabilidad de desarrollar su propio aspecto de Dios. Los grupos de la Nueva Era fomentan la evolución humana individual para aumentar la conciencia de esta naturaleza divina.
Esto no se refiere a la evolución biológica, sino más bien a una evolución espiritual—una conciencia progresiva de uno mismo como divino.
Esta necesidad y posibilidad de una transformación espiritual personal es una parte fundamental de la NAM.
Otras creencias frecuentemente sostenidas incluyen la idea de que el reino espiritual es responsable en gran parte de lo que vemos y experimentamos en el mundo físico, así como la noción de que el desarrollo de la propia divinidad innata conducirá a la transformación global y armonía del mundo.
La creencia en la reencarnación, la capacidad de acceder al reino espiritual y las explicaciones espirituales para sufrimientos físicos también son comunes.10
Puesto que no existe alguna organización formal y la mayoría de los rituales religiosos ocurren en privado, las costumbres de la Nueva Era pueden dividirse en dos categorías:
Prácticas ocultistas y prácticas humanistas.
Las prácticas ocultistas implican ponerse en contacto con el mundo espiritual y acceder a la dimensión espiritual, a menudo mediante la alteración de la conciencia.
Esto incluye canalización, trabajo de cristal, lectura de las cartas del tarot, astrología y diversas formas de curación espiritual.11
Las prácticas humanistas son aquellas enfocadas en la autosuficiencia, auto superación y el desarrollo del elemento de Dios dentro de uno mismo.
Algunos ejemplos son yoga, estrategias de meditación, estudio de textos de la Nueva Era, el crear un ambiente positivo y en comunión con la naturaleza.12
Muchos grupos de la Nueva Era creen en sistemas alternativos científicos y prácticas curativas naturales o espirituales.
Prácticas médicas alternativas como acupuntura, ajuste quiropráctico, alimentos naturales y remedios herbales son comunes.13
En las últimas décadas, se han adoptado algunas ideas de la Nueva Era por la cultura dominante.
Mientras que el yoga y la meditación no son prácticas exclusivamente de la Nueva Era, su popularidad y su prevalencia se correlacionan con la influencia de la Nueva Era.
“Una Nueva Tierra: Un Despertar al Proposito de su Vida” (A New Earth: Awakening to Your Life’s Purpose) de Eckhart Tolle, promovido por Oprah Winfrey, se ha convertido en un best seller, y el uso de la medicina alternativa ha aumentado dramáticamente en las últimas décadas.14
Todo esto parece indicar que, aunque el despliegue publicitario del
pudo haber caído a través los años, algunas ideas y prácticas de la Nueva Era están aquí para quedarse.
DESCRIPCION DE LA NUEVA ERA.
QUE ES LA NUEVA ERA?
Difícil dar una definición de ella, porque su identidad profunda aparece mimetizada tras múltiples rostros variables y confusos.
Entre esos rostros, o si se prefiere, fachadas, están las religiosos paganas del extremo oriente, como el hinduismo, el budismo, el taoísmo, el trantismo ; pero también se hallan algunas religiones primitivas de los paganos, como las de los druidas ,los celtas, los arios y las de los incas; los aztecas y hasta chibchas.
La lista de rostros parece interminable:
Metafísica, yoga, Control Mental Silva, autosuperación, meditación trascendental, zen, control mental “rebirthing”, gnoticismo, teosofía, esoterismo, ocultismo, masonería, canalización o espiritismo, dianètica, cientologìa, psicología traspersonal, ciertas formas de bioenergesis, reiki, etc.
Tampoco faltas las fachadas más groseras, como la astrología, la magia , el horóscopo, el tarot , los inciensos, las velas de colores, los cristales de cuarzo, la tabla uija, las cruces y anillos, “magnéticos”, los aromas, los inciensos la quiromancia, el voodoo, el chamanismo, et.,etc.
Como podrá verse de las numerosas y heterogéneas expresiones de la Nueva Era acabadas de mencionar, no es ella una religión en particular, pero ofrece una amplia gama de ofertas pseudoreligiosas, de credos y doctrinas a veces contradictorios entre sí.
No es tampoco una filosofía, pero la implica y es de corte panteísta, monista e irracionalista. No es una secta, pero muchas han surgido bajo su cobijo.
No es una sola comunidad como una organización visible, sino una “Red” o “Mega-Red” de grupos o tendencias.
Es una hidra de mil cabezas que pretende llenar el vacío espiritual del hombre de nuestra época.
LO POSITIVO DE LA NUEVA ERA
La Nueva Era critica, con justa razón, el materialismo sofocante de nuestro tiempo, así como el eclipse de los valores espirituales y la falta de fraternidad entre los hombres.
Protesta contra las guerras, la explotación inmisericorde de la naturaleza, el machismo y otras lacras que ensombrecen la vida actual y el futuro de la humanidad.
Predica la paz, la unión entre seres humanos, la tolerancia, el respeto por los derechos del hombre y con gusto milita en las causas del pacifismo, del feminismo y de la ecología.
Elogia la meditación, ensalza la autoestima y subraya el pensar “positivo”.
Y lo más importante de todo, hasta de la necesidad de una nueva espiritualidad. Todo esto, sin duda, forma parte amable de la Nueva Era.
LO NEGATIVO
La Nueva Era afirma que la espiritualidad que ella preconiza es compatible con todas las religiones y que a todas respeta, pero en realidad se propone eliminarlas, porque su meta es reemplazarlas por una sola a nivel mundial.
R. Cedeño, en su “Catecismos del yo soy”, escribe:
“10. ¿Cuál es la religión del futuro?
La Nueva Religión Mundial”. “
11. ¿Qué es la Nueva Religión Mundial?
La Religión de la Nueva Era” (Op.Cit.p.20).
Así se diseña para el porvenir una falsa tolerancia, una tolerancia intolerante frente a todas las religiones.
En efecto, lo que busca esta espiritualidad emergente es la creación de una nueva cultura, en sustitución de las existentes.
Nueva cultura global con una sola economía, un solo Estado, y naturalmente, una sola religión que abarque el planeta entero y que preconiza la venida de un Cristo (“Maitreya”), que no es el Cristo de verdad.
La religión que se postula no es la relación de la criatura con su Creador, sino la del hombre consigo mismo (autoidolatrìa).
Esto hace que la nueva espiritualidad sea aparente y no real, puesto que finalmente, no es sino lo religioso vaciado de trascendencia, es decir, una religión sin Dios, Algo, así como un suculento sancocho de gallina…
La Nueva Era predica lo contrario de las grandes religiones monoteístas, y en especial del cristianismo, al afirmar:
- El panteísmo, en lugar de un Dios personal.
- Los hombres autoendiosados , en lugar de Dios único e irrepetible.
- La reencarnación, en lugar de la resurrección - La inexistencia del bien y del mal, en lugar de la Moral.
- La omnipotencia de la mente humana, en lugar de la omnipotencia de Dios.
- La sumisión a los astros y a los poderes mágicos, en lugar del libre albedrío y la sumisión a la Providencia Divina.
- La negación del pecado, en lugar de la redención por obra de Jesucristo.
- La meditación egocéntrica, en lugar de la oración que abre el corazón del hombre a Dios.
- El amor del hombre por el hombre mismo y no por amor a Dios.
- Los “milagros” obrados por cuenta propia, en lugar de los causados por el poder de Dios.
- El endiosamiento de la naturaleza y de la tierra (“Gaia”), en lugar del respeto por la ecología.
- En fin, la Nueva Era de paz y felicidad como construcción meramente humana y no como regalo de Dios a los hombres que lo aman y libremente le obedecen.
- Finalmente, sacaremos como conclusión de todo lo que vamos a examinar, que la Nueva Era de “nueva”, no tiene en realidad nada.
Es la vieja farsa, mezcla de paganismo precristiano con fachadas cristianas, Que repite el antiguo y primer pecado de Adán y Eva en el paraíso, el cual, a su vez, era repetición del mismísimo pecado de Lucifer y sus ángeles rebeldes, que quisieron ser dioses contra Dios.
¿QUE TODO ES DIOS?
“Todos somos parte de Dios, y Dios es parte de nosotros. No puede haber nada entre nosotros y Dios.
Somos una misma cosa” (“Dentro de Mí”, Plaza y Janes Editores, Barcelona, 3ª. Edición, 1992, p.69)
La afirmación de que todo es Dios y Dios es todas las cosas, es doctrina conocida con el nombre de panteísmo (de “pan”, todo y “Theos”, Dios) y enseñada desde hace mucho tiempo por las religiones paganas del oriente, especialmente en la India y China.
Pretenden ellas que todas las cosas del universo: astros, rocas, aguas, vegetales, animales, e incluso el hombre, son Dios o partes de un ser que se compone de todos los seres que existen.
Uno de los representantes más caracterizados de la Nueva Era. Benjamín Creme, llega a afirmar que hasta las cosas malas son parte de Dios. ¿Las fuerzas del Mal son parte de Dios? “Sí, por supuesto.
Las Fuerzas del Mal son parte de Dios. No están separadas de Dios. Todo es Dios” (“La reaparición del Cristo y los Maestros de la Sabiduría”. Editorial Índigo.
Barcelona, 2ª. Edición 1994, p. 100). Y todavía más, hasta el Anticristo, según Creme, también es parte de Dios!! (op.cit. p.99). ¿Qué decir de ésta filosofía panteísta? Ante todo, se impone una distinción.
Ciertamente, Dios está en todas las cosas, pero las cosas no son Dios ni él es el universo de lo existente, visible e invisible.
Para entender mejor la diferencia entre ser y estar, basta un sencillo ejemplo:
Cuando pienso en la cuchara que tengo en la mano, es verdad que está en mi pensamiento, pero ni ella es mi pensamiento ni es parte de mi ser
II ¿QUE TODO LO QUE EXISTE ES UNO?
La Nueva Era
Afirma no sólo que todo es Dios (error que atrás se refutó), sino también que “todo es uno”, es decir, que la realidad no se compone de una formidable multiplicidad de seres diferentes, sino de uno solo y único.
Este segundo error se llama monismo y elimina las diferencias reales y profundas entre la persona que conoce y las cosas conocidas, entre el “yo” de cada uno y el universo que está ante él, entre el alma y el cuerpo, entre el espíritu y la materia, entre lo uno y lo múltiple.
También elimina la diferencia entre personas (V.gr. yo no soy tú, yo no soy ustedes, etc.)
Hay, sin embargo, algo más grave: En el terreno ético el monismo elimina la diferencia entre el bien y el mal, la virtud y el vicio, la verdad y la mentira, la luz y la oscuridad, etc.
Todo esto equivale a abolir la moral y dejar sin piso los mandamientos del Decálogo.
Para arribar a semejantes afirmaciones absurdas, los partidarios del a Nueva Era aducen que la experiencia de los estados de conciencia llamada ”alterada” o “expandida” (que se logran mediante la meditación e incluso por el uso de drogas psicodélicas), se llega a conocer la identidad de la mente con el mundo que nos rodea y de ser uno con él.
Veamos algunos ejemplos: La actriz Shierley Maclaine, relata en que en alguna ocasión en que se dio un baño de vapor, llego a creer que: “… poco a poco, me convertí en agua… Sentí la conexión íntima de mi respiración con el pulso de la energía a mí alrededor.
De hecho, yo era el aire, el agua la oscuridad, las paredes, la espuma, la vela, las rocas mojadas bajo el agua y aún el sonido del río que corría afuera”. (“Aut on a Limb”, Bantam, New Cork, 1983, p.268).
También el físico Fritjof Capra, de quien se debería esperar pruebas objetivas y racionales para demostrar sus doctrinas monistas y panteístas, se basa en un acontecimiento subjetivo y similar al relatado por el artista MacLaine, como se puede leer en el prólogo de su libro “El Tao de la Física”, (Edit. Humanistas, Barcelona. 3ª edición, 1992, p. 111).
Estas son sus palabras:
“Hace cinco años tuve una hermosa experiencia que me puso en el camino que me ha llevado a la escritura de este libro.
Estaba yo sentado junto al océano una tarde de verano cuando el sol ya caía, observando las olas arrollarse y sintiendo el ritmo de mi respiración, cuando de pronto me hice consciente de todo lo que me rodeaba como si estuviese envuelto en una gigantesca danza cósmica.
Siendo físico, sabía que la arena, las rocas, el agua, el aire a mi alrededor estaban hechas de moléculas y átomos vibrantes, y que éstos se componían de partículas que se interrelacionaban unas con otras creando y destruyendo otras partículas.
También sabía que la atmósfera de la tierra era bombardeada continuamente por lluvias de “rayos cósmicos”, partículas de alta energía que sufrían múltiples colisiones a medida que penetraban el aire.
Todo esto me era familiar por mi investigación en la Física de alta energía, pero hasta ese momento sólo había experimentado esto a través de gráficos. Diagramas y teorías matemáticas.
Cuando me senté en aquella playa, mis primeras experiencias tomaron vida; yo “vi” cascadas de energía bajando del espacio exterior, en las que las partículas eran creadas y destruidas con un pulso rítmico; “vi” los átomos de los elementos y los de mi cuerpo participando de esta danza cósmica de energía;
sentí su ritmo y “oí” su sonido y en 8 ese momento supe que ésta era la Danza de Shiva, el Señor de los Bailarines adorado por los hindúes”.
Hay que reiterar que el relato de Capra pertenece al género de lo indemostrable científica y racionalmente, dado su alto contenido de subjetividad y, por tanto de darse en una zona psicológica propensa a los fenómenos de alucinación.
III ¿QUE DIOS ES UNA ENERGÌA?
La nueva Era, en consonancia, con su filosofía panteísta, afirma que Dios es una energía o fuerza.
Así, por ejemplo, lo sostiene Conny Méndez, sacerdotisa de la llamada “metafísica”, quien declara: “Dios es la energía en acción”. (“El Nuevo Pensamiento”, Caracas, 1981, p. 44.).
Si Dios estuviera limitado, no sería Dios, porque lo que lo limita sería superior a El.
Por eso es omnipotente. Pero Él ha establecido, por su propia voluntad, una sola limitación de su poder:
La libertad del hombre, a quien hizo libre y quiere libre. Dios se detiene ante la libertad del hombre, incluso cuando éste peca, no por impotencia del Creador, sino por respeto a la dignidad del ser autónomo que creó.
Ahora bien, dentro del contexto panteísta de la Nueva Era, la afirmación de que Dios es una energía, lo rebaja a la condición de materia y de fuerza cósmica subordinada.
No sería un ser puramente espiritual, sino materia sin espíritu, algo así como una especie de fuerte electricidad, o desbastadora potencia nuclear.
Esto automáticamente privaría a Dios de su condición de persona y lo colocaría inclusiva más bajo que los ángeles, y que los mismos hombres. Dios es persona y personas son también los ángeles y los seres humanos.
Cada persona es un “otro” y un “tu”.
Por eso puede haber diálogo y comunicación entre ellas. La persona es un ser inteligente y libre, capaz de pensar, querer, amar y ser santa, misericordiosa y justa.
Dios hizo al hombre a su “imagen y semejanza” (Gen. 1,26). Cada persona, ángel u hombre, es un ser único, especial, irrepetible y dotado de una dignidad eminente.
Si Dios fuera una fuerza cósmica, poco o nada tendría que ver con la vida y la historia de los hombres. Pero, precisamente, porque es persona, se comunica en la creación.
Se auto comunicó al pueblo de Israel y, en la plenitud de los tiempos, en su hijo Unigénito, que se encarnó y se entregó en Jesucristo para salvarnos.
Ahora bien, que todos los seres del universo sean dependientes unos de otros y todos ellos de Dios, es una verdad comprobable.
Pero el hecho de que todo esté relacionado (holismo), no puede confundirse con que todo sea uno.
La tijera de la modista guarda relación con la tela que corta, pero ni la tijera es la tela ni la modista es aquélla o ésta.
Cada uno tiene un ser diferente y querer hacer de todos ellos uno solo, es error monumental y craso
¿Y cómo qué Cristo no afirmó ser Dios? Si por decir “Yo y el Padre somos uno”, según refiere San Juan en el capítulo 10 de su evangelio, los judíos se escandalizaron y tomaron piedras para castigar su “blasfemia”.
Y que, ciertamente, con esa declaración Jesús afirmaba ser Dios con su Padre, lo entendieron bien sus enemigos al manifestar el motivo por el cual querían lapidarlo:
“Mo queremos apedrearte por ninguna obra buena, sino por una blasfemia y porque tú siendo hombre, te haces a tí mismo Dios”. (Jn. 10,33).
Ahora bien: la verdad fundamental de Jesús de Nazaret no es que fuera un santo y un profeta a la misma altura de otros fundadores de religiones, o siquiera el más grande de los santos y los profetas.
La verdad mayor sobre Él está en que es verdadero hombre y a la vez, verdadero Dios y salvador de los hombres. Y ese hombre-Dios ha muerto para redimirnos de nuestras maldades, pero resucitó y ascendió a la gloria de su Padre y desde allí habrá de venir con gran poder y majestad a juzgar a todos.
Y ¿cómo sabemos que Cristo resucitó? Por el testimonio de cerca de quinientos apóstoles y discípulos. Ellos lo vieron y trataron después de su resurrección.
Por afirmar esto, fueron amenazados, perseguidos con saña y muchos de ellos sometidos a crueles tormentos y hasta la muerte.
Si ellos hubieran inventado la resurrección de su maestro, no es creíble que se hubieran sometido a estos terribles males por sostener una mentira.
La resurrección de Cristo, pues, está 12 rubricada por la sangre de numerosos mártires.
La resurrección de Cristo, sin duda, comprueba su irrepetible y singular divinidad, carácter de que carecen los demás maestros morales o fundadores de religiones, con los que quiere compararlo la Nueva Era.
Desde el punto de vista de la fe cristiana, la resurrección y no la reencarnación, es de lo que habla la Biblia.
Así, San Pablo en la epístola a los Hebreos (9,27, declara que morimos una sola vez y después viene para nosotros el juicio de Dios.
Y a pecadores notables, como el llamado “buen ladrón”, no le dijo Cristo que viviera otras vidas para pagar sus culpas, sino que le prometió: “Hoy estarás conmigo en el paraíso”(Lc. 23,43).
La parábola de las vírgenes prudentes y necias (C t r. MT. 25,13), corrobora la existencia de una sola vida. Calumnian, pues, a Jesús, los que pretenden que Él era re encarnacionista.
La doctrina de la reencarnación niega muchos dogmas y verdades del cristianismo, como el pecado original, la promesa de redención, las profecías mesiánicas y el sacrificio redentor de Cristo, la salvación por la gracia de Dios, la existencia del cielo, del purgatorio y del infierno, etc. Lo peor de la doctrina reencarnacionista no es sólo fomentar la inmoralidad.
Esto so pretexto de contar con varias vidas para rectificar yerros, sino exaltar el orgullo del hombre al hacer a éste, y no a Cristo, el artífice de la redención.
El hombre se autopurifica y se autoredime sin necesidad de la gracia y las ayudas de Dios. Se cree autosuficiente y, por eso, rechaza la salvación que Jesucristo nos mereció con su sacrificio en la cruz.
Como triste final de toda esta supuesta cadena de vidas sucesivas, el esfuerzo del hombre por purificarse no tiene como desemboque la eterna felicidad de la gloria con Dios, sino la desaparición del yo, ya por la disolución de la persona en el inmenso todo del cosmos, ya por retorno a la nada (nirvana).
El destino sombrío que la reencarnación le promete al hombre, hace inútiles su libertad, sus esfuerzos sus luchas y sus sacrificios por mejorar y perfeccionarse.
Si en definitiva, todo es para la nada y no para la felicidad eterna en compañía de nuestro Creador y Redentor, la reencarnación no es una bendición, sino la más cruel y lúgubre de las frustraciones.
Finalmente, una consideración estadística formulada por Rafael Arango Rodríguez, echa por tierra la reencarnación:
En épocas anteriores, había menos gente sobre el planeta. Así, por ejemplo, el tiempo de Cristo hace 20 siglos, el mundo de entonces apenas si contaba con unos cien millones de personas.
Pero ya por ejemplo, a fines de la Edad Media, en el siglo XIV, los habitantes del globo se acercaban a mil millones. Hoy aun poco más de siete mil millones. Antes de estos hechos cabe preguntar entonces:
¿De dónde salieron más almas para ocupar los nuevos cuerpos multiplicados de las personas? ¿De dónde por ejemplo, salieron los novecientos millones de diferencia entre los cien millones del siglo I, y los mil del siglo XIV ¿Ya existían las nuevas almas, o no? ¿Salieron de la nada, o alguien las creó? ¿Quién?
El poder será instrumento de nuestros deseos para conseguir lo que queremos: Dinero, salud, belleza, fama, admiración, sabiduría, etc.
LA CONCIENCIA EXPANDIDA O ALTERADA
Ahora bien, ¿cómo acceder a este poder, supuestamente infinito, que el hombre cree tener oculto en su interior y más en concreto, en su mente o en su conciencia?
Por medio de la meditación o iluminación y de la visión del núcleo más profundo de nuestro propio ser (conciencia de la conciencia, atención de la atención).
LAS PSICOTÉCNICAS
Para conseguir este propósito llamado de la “conciencia alterada”, o “expandida”, “ampliada”, etc., hay variadas técnicas y métodos: concentración, aislamiento sensorial, hipnosis, ejercicios respiratorios, “biofeedback”, relajación, asanas, abluciones especiales, control mental, y hasta uso de drogas alucinógenas y contactos con espíritus de “maestros ascendidos”, “guías evolucionados” y “extraterrestres” que han finalizado el ciclo de las reencarnaciones y se han liberado del “Karma”.
Todas estas psicotécnicas y procedimientos nos conducirán a experiencias placenteras gratificantes, que nos permitirán llegar a niveles nuevos de conciencia 20 y a saberes o conocimientos distintos de la fe tradicional.
En una palabra, nos permitirán realizar un cambio de mentalidad, y junto con él, a la disponibilidad de poderes para actuar sobre nosotros mismos, sobre los demás y sobre la naturaleza.
VIAJE EGOCÉNTRICO
Destaquemos que a lo largo de todas las experiencias, el hombre vuelve su mirada hacia su interior, y a lo sumo hacia el Todo cósmico indiferenciado, del cual él se considera un fragmento, pero no hacia Dios.
Es, por tanto, un viaje egocéntrico que encierra el hombre dentro de sí mismo y le impide abrirse hacia “el trascendente”, es decir, a la persona que nos supera y es “absolutamente otro”.
Además, es estas experiencias se trata de “poner la mente en blanco”, es decir, algo así como “el vacío”, aunque la Nueva Era las llama “espirituales” o “místicas”, no tienen nada de lo uno ni de lo otro.
Ellas permanecen en un plano humano sin rozar siquiera lo divino. En efecto, la “meditación” que practican los de la “Nueva Era”, pertenece al campo de la, psicología, pero no al de la religión.
Es un fenómeno de relación del hombre consigo mismo,(de yo con yo) o con fuerzas no divinas, pero no de relación con Dios, que es lo que constituye el ámbito de lo propiamente “espiritual y místico”.
MAESTROS ASCENDIDOS Y EXTRATERRESTRES
Ahora bien, en las experiencias del hombre consigo mismo, o de relación con “extraterrestres”, lo que efectivamente sucede con más frecuencia es la comunicación con espíritus de seres que no son de Dios ni vienen de parte de Él, aunque aparenten tal cosa.
En realidad lo que acontece entonces es el contacto con espíritus malignos, demonios, que para tal efecto, como bien advierte San Pablo, se disfrazan de “ángeles de luz” (2 Cor. 11,14) con el objeto de engañar a los que se exponen imprudentemente a ser engañados.
Las personas se exponen a éstos fiascos cuando en lugar de tener la mente puesta en Dios, la dejan “en blanco” o “vacía”.
Ya el Señor nos advertía del peligro de dejar la casa “vacía” cuando se expulsa a un demonio, porque tal circunstancia es fácilmente aprovechada por otros peores para invadirla y ocuparla (Cfr. Luc. 11,23-26).
Cuando permitimos que los espíritus malignos ocupen nuestra “casa” con la supuesta meditación de la Nueva Era, ¿adquirimos poderes?
Hay que responder que, generalmente, sucede que recibimos poderes pero no de Dios, sino del demonio y de sus ángeles perversos.
EL DEMONIO ES UN SER PODEROSO
Dios creó a todos los ángeles buenos e inteligentes y los dotó de variados poderes. Los sometió a una prueba.
Un tercio de ellos o se mostraron fieles y de apartaron del amor y amistad de Dios y se vieron arrojados a las tinieblas, donde no pueden gozar de la felicidad eterna que da la visión de Dios.
Pero este castigo no les alteró su naturaleza espiritual y, por tanto, tampoco les quitó su formidable inteligencia ni sus no menos formidables poderes.
LOS "MILAGROS" DE LA NUEVA ERA
Ahora bien, ante estos hechos, caben dos interpretaciones: Primera:
Para consumar el engaño de los incautos y apartados de Dios, los astutos demonios convencen a los hombres de que son éstos quienes tienen tales poderes extraordinarios (que normalmente exceden a los de la propia mente) y al efecto les permiten obrar como si los tuvieran.
De ahí, por ejemplo, las sanaciones propias y de extraños, las levitaciones, el movimiento de objetos a distancia, la comunicación telepática, la operación de cambios en el clima y en la naturaleza, el obligar a otros a tomar ciertas decisiones, el enterarse de cosas secretas, etc.
De ahí, en general, los portentos y maravillas que obran los que practican el control mental, la metafísica, la meditación trascendental, el Tao, el yoga, el Zen, etc... Pero no sólo les permiten usar esos poderes a los que utilizan las distintas psicotécnicas de meditación.
También a los que sin necesidad de tales psicotécnicas y de tales meditaciones, recurren a medios más groseros y menos refinados, como los cristales de cuarzo, la bola de cristal, las velas de colores, las esencias y aromas, el incienso, el horóscopo, el tarot, la macumba, el voodoo, la santería, el espiritismo, la tabla uija, etc. Segunda:
Dios al crear a Adán y a Eva dotó sus mentes de poderes extraordinarios, que usados en el estado de gracia original, no hubieran tenido peligro.
Sin embargo, utilizados fuera de aquel estado, por la debilitación sufrida en sus potencias por el hombre caído en el pecado, fácilmente pueden prestarse a manipulaciones demoniacas y a tentaciones de hechicería, egocentrismo y autoidolatría.
CURSOS PARA HACER MILAGROS
Retengamos bien las palabras "cosas maravillosas y prodigios" esto es, milagros sensacionalistas.
Tal es lo que hoy vemos por doquier, cuando los de la Nueva Era ofrecen a buen precio, claro está, hasta "cursos de imposición de manos", para hacer milagros por cuenta propia.
De este modo se da lugar a una parodia simiesca que busca competir, por vía demoniaca, con los dones y carismas del propio Espíritu Santo, especialmente los de curación o sanación (1Cor. 12,9).
Y competir también con Jesucristo, quien prometió que entre las señales que acompañarían a los que creyeran en Él, estarían las de imponer en su nombre las manos sobre los enfermos y sanarlos" (Mr. 16,18).
Y toda esta blasfemia se hace, además, con groseros fines de mercantilismo y lucro personal, agregando así al pecado de satanismo, el de Simón el Mago, quien ofreció dinero a los apóstoles para compararles ese poder, como refiere el libro de los Hechos de los apóstoles. (8,9- 23).
En el fondo de toda esta orgía de poderes que fomenta el orgullo y el egoísmo de los humanos, se esconde el viejo pecado del propio Lucifer, de ser Dios contra Dios, pero ahora, al proponérselo a la capacidad más limitada de pecar de los hombres, les sugiere que, al menos, pueden ser dioses sin Dios.
Es también el mismo pecado de autoidolatría ("Seréis como dioses") con el que hizo caer en el paraíso terrenal a nuestros primeros padres, Adán y Eva.
El demonio, pues, a lo largo de la historia, no ha hecho más que repetir el mismo planteamiento. Sólo que ahora lo presenta con más dosis de orgullo, pero también con más disfraces, incluso "cristianos", porque en países como el nuestro de tradición católica, lo adoba con abundantes citas de la Sagrada Biblia y hasta mencionando a Cristo, a la Santísima Virgen y a los santos.
Pero obsérvese que también los hechiceros y las brujas usan de la misma estratagema de mezclar lo esotérico y oculto con oraciones y frases cristianas.
Bien saben ellos que es más fácil hacer tragar un veneno endulzado con miel, que sin ésta.
Se pregunta, entonces, ¿qué valor tienen los pronósticos astrológicos?
Ante todo, no hay que confundir la astronomía, ciencia respetable, con la astrología, superchería esotérica y adivinatoria, que ha sido reciclada por la Nueva Era, al afirmar que estamos pasando de la era de Piscis a la de Acuario.
Tal era será una época de paz y armonía en que desaparecerán las viejas religiones reveladas y teístas, como el cristianismo, el judaísmo y el islamismo, para dar paso a una especie de religión universal, la del hombre que se hace divino por sí mismo.
Bajo el supuesto de que todo lo que sucede arriba en el cosmos sucede también en la tierra y de que, por tanto, el "microcosmos" se corresponde con el "macrocosmos", se pretende que los astros son los que rigen la historia y la vida de los hombres.
Es cierto que los astros, por ejemplo el sol y la luna, ejercen ciertos efectos sobre mares, animales y plantas y que si bien influyen sobre los hombres, no los determinan, es decir, dejan intactos su libre albedrío y su facultad de autodeterminación.
En efecto, mientras la Nueva Era sostiene que el hombre es Dios por virtud de su propio ser, esto es Dios por naturaleza; el cristianismo nos dice que el hombre tiene naturaleza de criatura y, por tanto, de ser contingente y finito, lo que establece una sustancial diferencia con el ser increado, necesario e infinito, que es Dios.
Una comparación nos permite aclarar mejor esto: Dios es luz. Y Dios, como el sol, tiene luz propia (e increada). Los hombres, como los planetas, aparecen iluminados sólo en la medida en que reciben la luz del astro rey.
Dios, en efecto, es increado y eterno y se autodefinió muy bien diciendo de sí mismo, en el libro del Éxodo: "Soy el que Soy" (Ex. 3,14). Esto significa que Él existe por sí mismo, sin necesidad de ningún otro.
El hombre, en cambio, es el que ha sido hecho, lo que quiere decir, que necesitó de Otro para existir y que no tiene en sí mismo la razón suficiente de su existencia. Es un ser "contingente", no "necesario".
Por eso, la posibilidad de divinización del hombre no puede estar en su propio ser o naturaleza, sino en su participación en la naturaleza de ese otro ser superior y anterior a él (Cfr. 2 Pedo 1,4).
En la Nueva Era hay, pues, un inaceptable reemplazo del teocentrismo por el antropocentrismo, de la religión de Dios que se ha hecho hombre por la religión del hombre ensoberbecido que pretende por sí mismo hacerse Dios.
Es la repetición del intento de la criatura humana de usurpar el lugar del Creador.
De este modo, la antigua serpiente, que en la actualidad se ha magnificado como poderoso Dragón (Ap. 12,3), susurra al oído de la humanidad incauta la misma y archiconocida tentación de antes.
Ella es presentada ahora a los cristianos con palabras melosas y frases bíblicas, pero eso sí, tergiversadas, o citadas fuera de contexto.
A los paganos la propuesta auto idolátrica se les hace con visos de ciencia, sicología transpersonal, o filosofía profunda.
X. ¿QUE NO HAY DIFERENCIA ENTRE EL BIEN Y EL MAL?
Los partidarios de la Nueva Era sostienen que no existen el bien y el mal, o que no hay diferencia entre ellos.
Niegan también la existencia del pecado, o lo explican como un error de conocimiento, una simple debilidad psicológica, o una imperfección, todo lo cual sería subsanable por el propio hombre sin necesidad de la gracia y el perdón de Dios.
Escuchemos lo que nos dice, por ejemplo, Shirley Mac Laine, sobre este tema: "No existe nada parecido al bien y al mal:
Únicamente hay conciencias iluminadas o ignorancia... Hasta que la humanidad se dé cuenta de que en realidad no existe el bien y que, en verdad no existe el mal, no habrá paz". ("Bailando en la Luz". Edit. Plaza y Janes, Barcelona, 38 Edición 1992,pp. 360, 374).
Para Conny Méndez, quien ignora lo que realmente es la confesión para los católicos, el pecado es un simple error: "... El hecho preciso de reconocer la falta en nosotros equivale a la confesión católica y por lo tanto el error (que los católicos llaman "pecado") ya está perdonado.
("Un Tesoro más para Ti", Bienes Lacónicos, C.A. Miami, 1986, p.14). Más audaz se muestra aún Conny Méndez, en otra de sus obras, al hacer alarde voluntarista de su propia divinidad para negar la culpa y el pecado:
"Cada vez que la mente (tu conciencia terrena) te acuse de algún defecto, ¡protesta!" "No le permitan a ella ni a nadie más que le tilden de cosa alguna que no sea perfecta".
"Tal como estás leyendo:¡Protesta!" "Di: Imposible.
No acepto. Yo no soy así. YO SOY PERFECTO". ("El Nuevo Pensamiento", Caracas. 1981, p.23).
Los seguidores de la Nueva Era tienen variadas respuestas, pero todas coinciden en el fondo en la idea de que el hombre se perdona a sí mismo y no en que Dios otorga el perdón.
Así, por ejemplo, lo dice Shirley Mac Laine: "He descubierto que primero tengo que admitir que tengo miedo, o que estoy enfadada, o que me siento rechazada o indigna.
Luego puedo perdonarme por haberme permitido esa desarmonía.
Cuando me perdono, la curación comienza" ("Dentro de Mí". Edit. Plaza y Janes, Barcelona. 38 Edición, 1992. p. 87). Conny Méndez, con una oración henchida de soberbia, como la que relata el Evangelio de San Lucas (18, 9-14), del fariseo orgulloso frente al humilde publicano, también hace del auto-perdón el remedio para las culpas de nuestras faltas:
"Yo soy la resurrección y la vida del decreto constructivo que hice respecto a esta situación. Me perdono esta recaída. Yo soy la ley del perdón y la llama transmutadora de todos los errores cometidos por mí y por toda la humanidad.
Gracias Padre que me has oído"
("Te Regalo lo que se te Antoje", en Metafísica 4 en 1, Venediciones, Caracas, p. 77).
DE LA MODERNIDAD A LA POSMODERNIDAD
"Dios sí, religión no", es sin duda la divisa que, en asuntos de fe, mejor caracteriza a la modernidad racionalista durante el siglo XVIII.
Se trataba de un vago deísmo, que debilitaba a Dios al negar su providencia y, por tanto, su capacidad de gobernar el universo e intervenir positivamente en la vida y la historia de los hombres.
También la modernidad se manifestaba hostil contra toda forma de revelación, de dogmas de fe, de organización eclesiástica, de sacerdocio, etc.
El Dios del deísmo, como observó agudamente el genial pensador español Donoso Cortés, poco difería de los monarcas constitucionales que "reinan pero no gobiernan". Los dardos mayores de los racionalistas del siglo XVIII se dirigían contra las grandes religiones monoteístas:
El judaísmo, el islamismo y, en especial, el cristianismo católico- romano. Religiones monoteístas que se caracterizan por estar fundadas en un “libro revelado”.
Durante el siglo XIX y buena parte del XX, la modernidad se apartará paulatinamente del "Dios constitucional", haciendo que el deísmo termine diluyéndose en una especie de ateísmo, no siempre doctrinario, pero al menos sí, de tipo práctico.
Se entraba, así, en una fase propiamente secularista, donde ya no importa si Dios existe o no existe, porque el hombre tiene la pretensión de poder realizarse y ser feliz sin necesidad de Él.
No se cuestiona, pues, la existencia de Dios, sino su utilidad. Él dejó de ser relevante para el hombre. Este estaba convencido de que con la ciencia y la tecnología, frutos de su inteligencia, podía hacer los milagros y maravillas que antes, en su ignorancia o en su impotencia operativa, imploraba de la Divinidad.
En otras palabras, el hombre dejó de sentir estupor ante el misterio de Dios.
En efecto, se pretende llenar el vacío religioso dejado por el secularismo en el corazón humano, a como de lugar y de cualquier modo.
Esto ha conducido a los ansiosos buscadores a beber en las fuentes dudosas de la paganidad precristiana o de las religiones panteístas del extremo oriente, que suprimen la dualidad Creador - criaturas, y, por tanto, la trascendencia de Dios como el absoluto "Otro".
Pero también beben en las fuentes, ciertamente envenenadas, del esoterismo, el ocultismo, la gnosis y hasta el abierto y crudo satanismo. Todo lo anterior muestra que estamos ante un curioso fenómeno de espiritualidad sin Dios y de "religiosidad" sin religión.
Es la pseudoreligión "light", por la que el hombre vacío de la posmodernidad vuelve su mirada a su propio interior, pero no a Dios y de esta manera permanece en la inmanencia y en la egolatría.
Con esto la Nueva Era confunde la concentración, fenómeno simplemente psicológico con la que el hombre hace introspección, con la contemplación mística, acontecimiento producido por la gracia divina en el espíritu del hombre.
Es esa gracia la que hace experimentar la unión amorosa con Dios y, en cierto modo, la divinización humana por obra y causa gratuita del mismo Dios.
Pero en la contemplación mística, por la que Dios diviniza al hombre, Dios permanece como el absolutamente Otro.
Por contraste, en la concentración autoidolátrica, producida por lo que los gurús llaman conciencia "expandida" o "alterada", la mirada, el que mira y lo mirado, se confunden con la misma persona.
De ese modo, aquí no hay trascendencia ni alteridad alguna, sino simplemente una operación egocéntrica.
DIOS SOY YO
La antigua divisa del racionalismo "Dios sí, religión no", sufre ahora una variante sutil en los dos miembros que la componen:
No se niega a Dios, pero se le despoja de su carácter único, para afirmar que todos, por naturaleza, somos dioses, o que con la práctica de algunas psicotécnicas, destinadas a "expandir" o "alterar" la conciencia, todos podemos llegar a la condición divina.
Si nos preguntamos por los motivos de esta diversidad, podemos individuar, entre otros, dos que resultan muy decisivos:
1. La persona humana desde sus orígenes, como atestigua la historia, se ha preguntado por el sentido profundo de su propia existencia. La respuesta no se encuentra en lo inmediato, sino en un más allá, en algo que trasciende, que remite de un modo u otro a algo divino, infinito; en el fondo, de modo más o menos explícito, a Dios.
Pero Dios es infinito y la razón humana es finita y limitada, de manera que no puede comprender totalmente a Dios. Esto hace que personas diversas perciban a Dios de modo diverso.
Por ello, han surgido diversas religiones o tradiciones religiosas con concepciones de la divinidad muy distantes entre sí.
2. Los límites del conocimiento humano no implican solo la imposibilidad de entender completamente a Dios, sino también la posibilidad de error, por lo que cabe llegar a hacerse una idea de Dios básicamente falsa, aunque dentro de esa visión errónea puede haber algún aspecto verdadero.
Detrás de esas percepciones diversas de Dios podemos constatar los dos aspectos: la imposibilidad de tener una visión perfecta sobre Dios (cualquier punto de vista que se adopte es parcial) y el hecho de que nos podemos equivocar.
Así, por ejemplo, la percepción panteísta sobre Dios en cierto modo tiene una base real, pues Dios está en todas partes, pero yerra al identificar el mundo con Dios; por otro lado, el deísmo capta en cierta manera la trascendencia de Dios (tal como la define el Diccionario de la Real Academia Española:
«aquello que está más allá de los límites naturales y desligado de ellos»), pero a un Dios así no se le puede adorar ni rezar ya que está despreocupado de la realidad que ha creado.
¿Dios es el mismo en todas las religiones? judaísmo y el islam. En el cristianismo además se concilia el carácter trascendente con la consideración de que Dios está en todas partes y, de modo particular, en lo más profundo de cada persona, quien recibe el don de la filiación divina, que le capacita para tener un diálogo de tú a tú con Dios.
Esto último en el judaísmo se da solo en parte y en el islam no se concibe, por los acentos que pone en la trascendencia de Dios, que no ve compatible con esa cercanía.
El cristianismo además ha recibido de Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre, la revelación de que en Dios hay tres personas.
Todas estas diferencias en la noción o percepción de Dios, es decir, el hecho de que no todos entiendan lo mismo por «Dios», no excluyen que, en el ámbito de un idioma específico, se le designe con una misma palabra.
Por ejemplo, los cristianos árabes, al hablar de Dios o dirigirse a Él en su lengua, dicen «Alá»; y los musulmanes, si hablan en castellano, utilizan habitualmente la palabra «Dios». Como sucede como con tantos otros conceptos, la noción de Dios puede entenderse de manera diferente según la tradición cultural o religiosa en la que se vive.
Video Comparativo del Cristianismo con el Budismo.
LA ESPIRITUALIDAD
Lo que dota de realidad y sentido esencial a la vida religiosa del creyente es la espiritualidad. Sin espiritualidad, la vida religiosa es sólo apariencia, máscara, vacío de lo divino. Espiritualidad: es la propia acción del Espíritu en el ser humano.
La religión es para aquellos que necesitan que alguien les diga qué hacer y quieren ser guiados.
La espiritualidad es para aquellos que prestan atención a su voz interior. * La religión tiene un conjunto de reglas dogmáticas. La espiritualidad invita a razonar sobre todo, a cuestionar todo.
"Soy espiritual pero no religioso”. Es una frase común que la gente usa para describir su creencia, que no necesariamente implica participar en los ritos de una religión organizada para vivir una vida de fe. Pero para el sacerdote jesuita, James Martin, la frase indica algo más: egoísmo.
Lo que dota de realidad y sentido esencial a la vida religiosa del creyente es la espiritualidad. Sin espiritualidad, la vida religiosa es sólo apariencia, máscara, vacío de lo divino. Espiritualidad: es la propia acción del Espíritu en el ser humano. Es el desarrollo de las capacidades del espíritu en cada persona.
El humanismo cristiano es un término que se refiere a los cristianos que siguen los principios del humanismo.1 Según los proponentes del término, la palabra engloba principios como la dignidad humana universal y la libertad individual, junto con la primacía de la felicidad humana como algo esencial y acorde con los principios de las enseñanzas de Jesús.
A veces se denomina Humanismo (con mayúscula y sin adjetivo). ... El humanismo es una filosofía de la vida democrática y ética, que afirma que los seres humanos tienen el derecho y la responsabilidad de dar sentido y forma a sus propias vidas.
ESPIRITUALIDAD.
Doctrina filosófica que defiende que la sustancia última de lo que existe es de carácter espiritual.
"algunos de los principales representantes del espiritualismo son Leibnitz (1646-1716), Maine de Biran (1766-1824) y Herbart (1776-1841)"
El humanismo, en el sentido amplio, significa valorar al ser humano y la condición humana. En este sentido, está relacionado con la generosidad, la compasión y la preocupación por la valoración de los atributos y las relaciones humanas.
Reconocer la existencia de dios no se opone al reconocimiento de la dignidad humana.
Dios mismo se hace hombre, Jesús se encarna, se
humaniza, para mostrarnos cómo vivir en plenitud
EL HUMANISMO.
El Humanismo se centra en el hombre mismo y lo concierte en norma, camino y meta de su propia existencia.
A continuación expondremos tres interpretaciones del humanismo: el humanismo espiritualista, el humanismo materialista del marxismo y el humanismo del existencialismo sartriano.
El humanismo como una actitud consciente del espíritu surgió en el Renacimiento durante la Edad Media. En tiempos presentes aparece como una reacción del predominio de la ciencia sobre la vida del hombre que presenta el Naturalismo.
El humanismo lo podemos encontrar en escritos como la Biblia, en Platón, Homero, Cervantes, Goethe y Shakespeare.
El humanismo es espiritualista, siendo el hombre valores espirituales e ideales, a partir de los cuales desarrolla la razón, que es el coeficiente humano característico.
El pueblo griego es considerado representante del humanismo, lo mismo que el romano aunque en menor medida; las grandes culturas de naciones europeas como Italia, Bélgica, Francia y España tienen características humanísticas genuinas.
El humanismo cristianos es más intenso, digno y afectuosos que el clásico.
El humanismo tiene así pues, su firme base en el hecho de que el hombre es un ser racional, y de que ha apaciguado su ferocidad al suplirla con la razón, mediante un proceso de esfuerzo, estudio, disciplina y anhelo de obtener un ideal.
CONCLUSION :
El espiritualismo es centro de las religiones , pero las religiones no son el centro del espiritualismo .
El humanismo es un fruto de la espiritualidad , pero la espiritualidad no es obligación del humanismo .
El humanismo por si mismo no es espiritual.
¡¡Mucho ojo !!
La religión forma parte intrínseca de la humanidad y su historia en temas de sociedad, relaciones de poder y bienestar colectivo. No obstante, esto no reniega al hecho de que este conocimiento tiene aristas, ventajas y desventajas. Por ejemplo:
Ventajas:
Te convierte en una persona con mayor conocimiento de la humanidad.
Entiendes mejor a la sociedad en la que se basa cada religión.
Abres tu mente a la posibilidad de entender filosóficamente a la vida y el universo desde otros puntos de vista.
Creer te impulsa a dirigirte por un determinado camino, independientemente de las adversidades. Una creencia trae consigo mismo un camino trazado, una manera de hacer las cosas, de ver las cosas, una manera de ser. Cuando crees en ti mismo, sabrás conducirte por el camino del Éxito, buscarás día tras día el desarrollo de todo tu potencial, sabrás inherentemente superar cualquier contratiempo que quiera interponerse y finalmente confiarás en que esto te hace Feliz.
Tienes la posibilidad de ser aceptado por un grupo social. Tus creencias son compartidas por otras personas. Hay comunidades que rigen sus vidas por determinadas creencias, lo cual quiere decir que hay un conjunto de individuos que creen lo mismo, lo cual también quiere decir que cada uno de esos individuos es aceptado por los demás. Precisamente esto, puede convertirse en una fuerte motivación para vivir conforme a lo que piensas.
Hay en ti una convicción que te impulsa a la cima. Según lo que tú creas, podrás llegar a donde quieras llegar y vivir como quieras vivir. Si crees que es posible lograr lo que te propones, entonces sabrás actuar en consecuencia a tus sueños y efectivamente Conquistar tu Éxito.
«La Iglesia afirma la supervivencia y la subsistencia, después de la muerte, de un elemento espiritual que está dotado de conciencia y de voluntad, de manera que subsiste el mismo "yo" humano.
La Iglesia afirma, junto con la espiritualidad del alma humana, su inmortalidad: cuando el hombre muere, el alma espiritual continúa su existencia.
la espiritualidad, es lo más característico del hombre: lo que le hace persona, capaz de amar y de ser feliz, partícipe de la naturaleza divina, sujeto irrepetible e insustituible que es objeto directo del amor divino.
Desventajas:
Puedes caer adoctrinado bajo creencias falsas o fanatismo.
El apoyo a las religiones pueden perjudicar a otros grupos.
La creencia de una verdad absoluta no es correcta.
Multitud de Creencias Negativas.
El creer nos puede llevar por caminos errados. Muchas veces aceptamos creencias que limitan nuestra capacidad de ser felices y de cumplir nuestros sueños, creencias que alimentan en nosotros una mentalidad de temor y negativismo… Un claro ejemplo de esto es el pensar «No hay felicidad completa», ya que esta Creencia, te limita a buscar tu Plenitud y el crecimiento en todas tus áreas, en pro de tu Bienestar.
Posibilidad de una Mentalidad Cerrada.
Hay personas que implantan en su mente un tipo de creencias que produce la negación absoluta de creencias diferentes. Es decir, hay maneras de pensar que no aceptan ideas diferentes a las que ellos mismos creen, que a veces ni tienen argumentos sólidos para verificar la veracidad de lo que piensan pero ni escuchan a quienes pueden comprobar planteamientos contrarios.
Muchas de las personas que se definen como espirituales pero que no practican realmente una religión (que no hacen sadhana) se mantienen en una zona de lugares comunes: sienten que todo es uno, que todos están conectados, que existe algo más allá, que todo es energía, que el amor es la fuerza universal, etc. Todas estas cosas son difíciles de refutar y ciertamente son creencias positivas, pero parecen ser vagas aproximaciones, clichés, conocimientos prestados o atisbos paroxísticos fruto de experiencias psicodélicas irreproducibles (sin los efectos de la sustancia). Una de las cosas que tiene una religión o una longeva tradición espiritual es que cuenta con un lenguaje especializado muy preciso y con una serie de etapas puntuales y de mecanismos para evaluar los logros de los practicantes. Una persona puede creer que ha alcanzado la iluminación después de un fin de semana en un taller de sexo tántrico o fumando veneno de sapo psicodélico, pero su experiencia no tiene ningún soporte.
Existen dos corrientes dentro de los musulmanes: chiitas y sunitas, que han estado en constante rivalidad y han causado conflictos importantes en el mundo musulmán.
Existen entre 1.300 millones de musulmanes en el mundo, están extendidos por todos los continentes, especialmente en Arabia, Asia, Europa y África.
Hay también comunidades musulmanas en EE.UU., Rusia, Sudamérica (Surinam) y muchos otros países.
No debe confundirse a los árabes con los musulmanes.
Los árabes son una etnia, un pueblo, que habita países en la península Arábiga, en África y Asia.
No todos los árabes son musulmanes.
Hay árabes que profesan otras religiones.
Los musulmanes son los que siguen las enseñanzas de Mahoma.
CONFUCIONISMO:
No es una religión propiamente tal, por cuanto Confucio (551-479 a.C.), que era un filósofo chino, que impartió enseñanzas de la práctica del bien, la sabiduría, la moral y las relaciones sociales. Sus enseñanzas se incorporaron al Taoísmo y convive con el Budismo.
El confucionismo se extendió a Corea, Japón y Vietnam y a otras partes del Occidente.
Antes de la revolución comunista en China, casi la totalidad de los cerca de 1.300 millones de habitantes de China era adeptos a una de estas religiones. La revolución comunista, que rechaza las religiones, no ha podido extirpar el sentimiento religioso en China y lentamente ha empezado a surgir nuevamente ante el cambio más tolerante de los nuevos dirigentes. No hay estadísticas confiables de las religiones en china.
Lo divino está fuera del alcance de la comprensión de los seres humanos.
LA FE Y LOS DOGMAS
Todas las religiones se basan en la fe. La fe se define como la creencia y aceptación de los dogmas y de las revelaciones divinas de el o los dioses de cada religión, estampadas a menudo en libros sagrados, sin necesidad de que estas revelaciones sean comprobadas o verificadas por la razón. Los dogmas de aceptan sin discutirlos y sin ponerlos en duda.
La fe es un don innato que te permite creer, sin pedir o buscar explicaciones de los dogmas de la religión que profesas.
Sin fe, no hay religión. Sin aceptar que la fe existe, aunque no todos la tengan, no se puede entender ninguna religión.
ATEOS Y AGNÓSTICOS
El ateo niega la existencia de Dios, cualquier dios o dioses.
El ateo, en filosofía es de pensamiento escéptico.
El pensamiento agnóstico:
No niegan la existencia de Dios, como hacen los ateos, sino que dicen que no se puede demostrar su existencia.
No se puede demostrar la existencia ni la inexistencia de Dios.