The way in which the kids interact with the Internet is complex and depends on many variables. For example, the psychological aspect, a child immersed in a emotional conflict will tend to increase the risks. Or the social factor, where the example of parents and teachers, or the context in which they carry on their friends, you will influence the perception of risks.
In this sense, the responsibility of the digital education of minors should not fall exclusively on the parents. One of the main players that influence the development of the child is the school, where the essential aspects for the safe and responsible use of the network should be strengthened within the framework of the school activity. In this respect, the school is moving forward so that these skills are included in school curriculums.
In the same way, the Internet industry itself has the opportunity to work together to address this issue. The protection and education of the child must be present in the development of applications and services of intensive use by minors. And from the government and civil society must promote initiatives to help parents identify providers of services, content and applications that care about our boys and girls.
Having said this, we must not forget that the education of children is a fundamental responsibility of parents. The supervision, monitoring and guidance of their parents is essential to promote the safe and responsible use of the Internet.
La forma en que los chavales interactúan con Internet es compleja y depende de muchas variables. Por ejemplo, el aspecto psicológico, un menor inmerso en un conflicto emocional tenderá a aumentar los riesgos. O el factor social, donde el ejemplo de sus padres y profesores, o el contexto en él que se desenvuelvan sus amigos, le influirá sobre la percepción de los riesgos.
En este sentido, la responsabilidad de la educación digital de los menores no debe recaer exclusivamente sobre los padres. Uno de los principales agentes que influyen en el desarrollo del menor es la escuela, donde los aspectos esenciales para el uso seguro y responsable de la red se deben reforzar en el marco de la actividad escolar. En este sentido, la escuela está avanzando para que estas competencias se incluyan en los currículums escolares.
Del mismo modo, la propia industria de Internet tiene la oportunidad de colaborar para abordar esta cuestión. La protección y educación del menor deben estar presentes en el desarrollo de las aplicaciones y servicios de uso intensivo por parte de los menores. Y desde el gobierno y la sociedad civil se deben impulsar iniciativas que ayuden a los padres a identificar a los proveedores de servicios, contenidos y aplicaciones que se preocupan de nuestros niños y niñas.
Dicho esto, no se debe olvidar que la educación de los menores es una responsabilidad fundamental de los padres. La supervisión, acompañamiento y orientación de sus progenitores es esencial para promover entre los menores el uso seguro y responsable de Internet.