Eres un pirao del golf cuando.....

Cuando vas conduciendo por esas carreteras de Dios, ves un prado verde y piensas: "jodé que campo se podía montar aquí"....
Cuando vas andando por la calle y te da por pensar si a la esquina siguiente se llega con un h9 o un PW....
Cuando pienso: cuanto pegaría en la castellana con el drive...
O cuando andando por el campo (no el de golf) pasas al lado de un arbusto y te asomas al interior a ver si ves una bola.
O cuando estás en una calle al lado de la M40 y te preguntas: "¿Qué palo haría falta para atravesarla? Seguro que me pongo, doy un rabazo, le pego a un coche y monto un pollo de cuidado.
O cuando tienes más callos en la mano izquierda de los que tenías en la derecha de adolescente.
O cuando estás en casa, la oficina o andando por la calle, y cuando no te ve nadie (o eso crees) prácticas un swing, un aproach o un put.
O cuando las distancias en la vida normal, en vez de medirlas en metros, las mides en hierros, Hierro9, Hierro7, etc.
Cuando desde el abono del Bernabeu, allá en las alturas, piensas que de portería a portería no hay más de un wedge sin apretarlo
O cuando pasas por delante de un espejo y empiezas a hacer swings.
O cuando estas con amigos en el putting green, tienes un putt largo y dices: Putt para ganar el masters. Si lo metes sacas el puño y si no, dices: tendré otra oportunidad en el play off.
O cuando haces un gasto importante al hacer un regalo a tu señora y lo evalúas en la cantidad de Pro-V nuevas que podrías haber tenido en tu bolsa.
O cuando estas mirando en Internet todo el día palos que ni vas a probar...
O bajas a la playa con un sandwedge... o lo que es peor, bajas a las 9 de la noche con un amigo y un drive, un saquito de bolas malas y las tiras al mar...
O miras palos de niños antes de tan siquiera haberte casado.
O eres amigo de todos los dependientes de golf de Madrid.
O organizas tu viaje de novios para dar una clase con Butch Harmon y como al final no puede ser, cambias medio viaje para acabar en el resort DORAL y jugar el Blue Monster.... y además te planteas mandar por UPS tus palos al resort para no tener que jugar con alquilados...
O cuando piensas que los zapatos de golf de dos colores YA no son feos...
O cuando tienes la espalda más doblada que el jorobado de Notre Dame y te dice el médico que te tiene que hacer una operación muy complicada de 6 horas para fijarte 4 vértebras y lo único que le preguntas es: ¿pero podré jugar al golf?
O cuando empiezas a buscar el Hcp de personajes famosos: Clemente, Alex Corretja, Esperanza Aguirre, Enrique Ponce
O cuando descubres a un tío en el comedor de la empresa con un polo de callaway y quieres enterarte si es de tu departamento....
O cuando llevas siempre los palos y los zapatos en el maletero
O cuando lo primero que harías si te toca la loto sería comprar una acción en un campazo para estar todo el día jugando.
O cuando te bajas del emule todos los videos de David Leadbetter, y dices joder que fácil lo hace el capullo.
Cuando para dormir, en vez de contar ovejas como todo el mundo, repasas uno a uno los golpes de tu último recorrido
O cuando te cabreas con el perro por que te pisa la línea de putt del putting green artificial.
O cuando desde la ventanilla del avión vas buscando campos de golf, especialmente si vuelas por una zona que conoces.
O comprar coche en función de la anchura del maletero, de modo que te quepa la bolsa con todos los palos dentro.
Cuando tienes en la mesita de noche libros de Harvey Pennick, Dave Pelz, Stan Utley y Jack Nicklaus.
O cuando intentas convencer un día si, y otro también a tu señora, de que tiene que empezar a jugar al golf, porque es estupendo.
O cuando la noche antes de un partido importante, justo antes de ir a dormir, se te ocurre coger un palo en pijama para ver si subes el palo por el sitio correcto.
O cuando en el control de acceso del aeropuerto te obligan a abrir la maleta de mano, porque llevas un objeto punzante, y resulta que es el arregla piques tan chulo que te regalaron, y para explicarle lo que es, al de seguridad le enseñas las tres revistas de golf que llevas y le das una clase teórica de para qué sirve y cómo se usa.
O cuando tu mujer ya no se atreve a decir: “estoy harta, elije el golf o yo?”.
O cuando vas por una autovía y leo un cartel "salida 7 a 500 metros" y pienso, joer un par 5 difícil (largo y dogleg a la derecha).
O cuando entras en un ascensor con espejo, y no paras de hacer swings, hasta que llegas a tu piso.
O cuando tienes siempre cerca en el salón un hierro 6 y un putter, por si te da el calentón, o para blandirlos viendo golf por tu ordenador, en un recuadro de 7x8cm, durante horas, en un programa chino que has encontrado,....
O cuando ves billar por televisión e intentas buscar las caídas que tiene el tapete.
O cuando te levantas a las 6:30 a diario, a las 7 te estás calentando un café en el micro, y durante ese minuto haces swings con ese pedazo palo imaginario que todos tenemos y te preguntas ¿sería capaz de colarla por la ventana del vecino?
Estás pirado cuando te compras ropa y piensas, que es un pantalón válido tanto para vestir como para jugar.
Estás pirado cuando ves césped en un jardín y te imaginas aprochando.
Estás pirado cuando vas por la calle y ves a alguien con una gorra X o con un polo X y le dices a tu SS, "mira, ese es jugador de golf", y te contesta, pues vale.
Cuando sientes envidia de otro jugador, pero no por su swing ni por su hándicap, sino por .................................... su estado civil. Y piensas, joder que envidia, soltero, puede jugar o entrenar cada vez que la salga de la minga sin tener que dar explicaciones, y puede prolongar el hoyo 19 lo que le dé la gana.

Si te has visto reflejado es al menos el 70% de estos casos de acción o pensamiento, chaval estás completamente pirao y deberías visitar a un médico.