Lunes, 23 de marzo de 2020
Gloria Fuertes dedicó estos versos a las flores, las protagonistas indiscutibles de la primavera:
En medio del prado
hay una escuela
adonde van las flores
y las abejas.
Amapolas y lirios,
margaritas pequeñas,
campanillas azules
que, con el aire, suenan;
rosas enanas, rosas.
Tulipanes de seda.
(Gloria Fuertes)
El gran Lope de Vega también escribió a la primavera. Este poema en concreto se centra en el mes de Mayo, mes de pleno esplendor de esta linda estación:
En las mañanicas
del mes de mayo,
cantan los ruiseñores,
se alegra el campo.
En las mañanicas
como son frescas,
cubren los ruiseñores
las alamedas.
Ríense las fuentes
tirando perlas
a las florecillas
que están más cerca,
Vístense las plantas
de varias sedas,
que sacar colores
poco les cuesta.
Los campos alegran
tapetes varios;
Cantan los ruiseñores
retumba el campo.
(Lope de Vega)
Tal vez esta sea la poesía más famosa que se haya escrito sobre la primavera, y la que más se utiliza en las escuelas para hablar con los niños de esta estación. Tal vez por su sencillez, la forma tan simple con la que se describe a la primavera: la primavera llega de repente, como las emociones, y llena todo de color, de flores y luz. Una poesía muy positiva sobre esta preciosa estación.
La Primavera ha venido
nadie sabe cómo ha sido.
Ha despertado la rama
y el almendro ha florecido
y en el campo se escuchaba
el gri gri del grillo.
La primavera ha venido
nadie sabe cómo ha sido.
(Antonio Machado)