Siguiendo los modelos
Siguiendo los modelos
¿Nunca te has preguntado cuál es el origen de aquello que conocemos tanto? Aquello que es tan habitual en nuestras vidas, como podría ser la lluvia ¿Cómo se habrá originado?
En esta sección, se demuestra la imaginación y creatividad de los alumnos dándoles la oportunidad de crear su propio mito, que explique por ejemplo: ¿Por qué existirán los momentos efímeros? ¿Cómo se originaron los eclipses? ¿Qué hay de los sueños?
¡Desliza para leer el que más te llame la atención!
EL MITO DE PROFETEO
Profeteo es el hijo más pequeño de Zeus el cual nació de una joven intelectual que vivía entre los mortales.
Profeteo, semidiós, fue abandonado por su madre, asustada por lo que iban a pensar los vecinos si tenía un bebé sin tener esposo.
Lo dejó en el portal de un viejo matemático que se encargó de él y le enseñó todo lo que él sabía.
A los 20 años el viejo murió y Profeteo abandonó la casa para buscar a su madre.
Encontró a su madre y esta le contó toda la verdad sobre su padre. Profeteo subió a los cielos para hablar con Zeus y este le dijo que lo creó para enseñar a todos los humanos. Con todos sus conocimientos creó escuelas en todo el mundo y enseñó a todos los niños del planeta los conocimientos básicos de las asignaturas más importantes.
De estas escuelas algunos niños muy cualificados acabaron siendo profesores de distintas asignaturas, lo que hizo que Profeteo pudiese descansar hasta el resto de la eternidad.
Odegi
¿CÓMO SE ORIGINÓ LA LLUVIA?
Un día, Zapro y Neis, dioses que vivían en el cielo, se enteraron de que iban a tener un bebé e hicieron una fiesta para saber cual sería el sexo del bebé a la que invitaron a todos sus amigos y familiares. Asistió muchísima gente pero se olvidaron de una persona, la hermana melliza de Neis, Siana. Esta vivía en el infierno ya que era una diosa demasiado peligrosa. Los padres de ella decidieron enviarla al infierno para no poner en peligro la vida de nadie. Estaban todos felices en la fiesta. Todos cantaban, bailaban, reían y se lo pasaban genial hasta que las nubes pasaron de ser blancas a grises. Todos sabían que algo malo pasaría cuando de repente vieron como algo se iba acercando a Neis. Era como una mancha negra y poco a poco estaba volviendo a su forma normal. Definitivamente apareció Siana, con una sonrisa diabólica y riéndose al ver la cara de su melliza. En su cara se apreciaba terror y todos se quedaron callados. Zapro fue muy enfurecido a hablar con Siana pero Neis le frenó. Sabía que si le gritaban todo iría a peor y ella tenía miedo de que a su bebé le pasase algo. A Siana se le borró la sonrisa y le recriminó a Neis que no ha sido avisada para asistir a la fiesta. Neis dijo que no pudo invitarle y Siana parecía que lo había comprendido. Se acercó poco a poco a la barriga de su hermana y la acarició suavemente cuando de pronto soltó una maldición. Dijo que cada vez que su hijo llore, esas lágrimas caerán sobre los humanos y provocará que se mojen. Cuando todos se enteraron, se quedaron impactados pero Zapro fue a atacarle y, lamentablemente, escapó. Neis estaba destrozada, no podía imaginar que su bebé molestase a los humanos y se replanteó tenerlo. Zapro no se podía creer que su mujer dudase sobre su hija y le hizo creer a Neis que todo lo que le ha dicho su hermana es mentira, que no va a pasar de verdad. Pasaron 4 meses y era cuando este famoso bebé iba a nacer. Neis tenía miedo ya que aparte de ser su primera hija, tenía miedo de que al salir, llore y moje los humanos. Y efectivamente, el bebé lloró y cayó una enorme lluvia sobre los humanos. Neis y Zapro estaban asustados, sin saber qué hacer. Llevan muchísimos años intentando mantener a su hijo feliz, sin que suelte lágrimas pero no todo puede ser siempre bonito por lo que cada vez que llueve, sabemos que Lluvia, la hija, está triste.
Nebero
MITO DEL ECLIPSE SOLAR
Todo empezó al comienzo de la historia, el dios Solero y el dios Lunero, llevaban eternamente siendo rivales en la lucha por conseguir el control del Sistema Solar o Planetario, pero el destino hizo que el dios Solero tuviera un hijo al que llamó Sol y el dios Lunero tuvo una hija a la que llamó Luna. El destino caprichoso, hizo que se enamoraran, lo cual, lejos de apaciguar las disputas de familias, provocó más enfrentamientos entre ellas.
Ellos, el Sol y la Luna, conscientes de la situación, sabían que no podían vivir un amor normal, ni exponerse públicamente, por eso, utilizaban a una amiga que tenían en común, la Tierra, para que los ayudara a poder pasar tiempo juntos. Cuando Solero y Lunero, se enteraron de esto, estallaron en cólera y fue entonces y por primera y última vez, cuando accedieron a tomar una decisión juntos.
Esta decisión afectaba a los tres amigos, el Sol, la Luna y la Tierra. El Sol realizaría dos movimientos: el de rotación que cumple sobre su mismo eje y el de traslación que realiza en torno a la galaxia. La Tierra, también tendrá dos movimientos, rotación, que gira sobre sí misma y traslación, que gira alrededor del sol. Y a la Luna le otorgaron los mismos movimientos, rotación, gira sobre su propio eje y traslación, gira alrededor de la Tierra.
De esta manera, los dioses pensaron que sus hijos nunca más se volverían a ver, pero no contaron con la lógica de las matemáticas, y es que, debido a su posición en el Sistema Solar y velocidad de cada uno, haría que cada año y medio aproximadamente, la Luna y el Sol volvieran a estar uno en frente del otro y así pudieran volver a verse. A esto se le llama eclipse solar, es cuando la Luna se interpone entre el Sol y la Tierra.
Fridrik
Efímera danzaba sobre las serenas aguas del mar Egeo, junto a su mejor amiga Oikia (οίκια - casa) protagonista de lo que sería el resto de la eternidad allí juntas, donde el tiempo no existía.
Se encontraban en el crepúsculo del sol poniente, donde reían hasta dolerles el estómago, descansaban con el sereno sonido del océano en el oído, merendaban la fruta creciente en aquel lugar, les resultaba deliciosa siendo esta la que más les satisfacía, y corrían descalzas bailando sobre la arena, sintiendo la tranquila euforia que una le proporcionaba a la otra, siendo libres al fin; Aquel lugar no significaría nada si en su lugar, la otra no existiese.
Transcurrido el "tiempo": minutos? horas? días? meses? tal vez, años? y puede que...siglos? derrepente, en uno de sus vivos movimientos de alegría, Efímera sintió clavarse una concha en su pie, entonces notó un extraño sentimiento en su interior, algo contrario a la felicidad que solía expresar, esta no le dio mayor importancia y continuó con su satisfactorio día en la playa, donde ocurría el rondó de acontecimientos interminable.
Efímera, sentía una rara sensación de malestar en el estomago debido a la risa, que a pesar de su sonido, no le parecía divertida; el sonido de las olas le parecieron cataratas para su oído, aborreció las cerezas por el cansancio de comerlas, mucho la incomodaba la fastidiosa arena que se le pegaba a los pies cuando trataba de bailar, esta vez con cierto temor e inseguridad y desafortunadamente, sintió cansancio respecto a su amiga más querida, ante la monotonía de las acciones de ambas, se sintió atrapada en un bucle situado en un lugar que para ella, carecía de significado.
Entonces El padre tiempo, manifestado como brisa de la playa, le susurró al oído: “no tengas miedo de que termine, agradece y valora porque lo hará, no disfrutarás del momento si no” y la nombró diosa del momento fugaz, facilitando anular la monotonía, que estropea aquellos bonitos momentos. Al ser “efímeros” se valoran y se viven con la emoción que se merecen, por ello son especiales para nosotros.
“Duró poco, pero perdurará para siempre en el hueco más especial de mis recuerdos”
Francis Octubre
El origen de los pandas
Hace mucho tiempo en la era en la que los dioses gobernaban con crueldad y tiranía por el daño que los hombres le hacían al planeta, los hombres los temían, pues los dioses enfurecidos, les mandaban tempestades, hambruna y enfermedades.
Sin embargo en una pequeña aldea a las afueras de Sicilia, había un hombre llamado Pandanio de cuerpo grande pero con el corazón más bondadoso e inocente aun habiendo perdido a su mujer e hijo en una de esas tempestades, se dedicaba a dar esperanzas a sus vecinos y conocidos de que la furia de los dioses se calmaría y volverían a sus vidas anteriores, sin embargo, las palabras no eran suficientes para dar esperanzas a la gente por lo que para calmar la ansiedad de los habitantes hacía espectáculos a las familias para divertirlos y que se olviden de su miedo, y tras cada espectáculo les daba la carne de los animales que este poseía para ayudarlos con la hambruna que se cernía en el pueblo, causando que en un momento dado se quedara sin carne y tuviera que comer los vegetales que no estaban en buen estado y poco a poco este fue muriendo por una intoxicación.
Los dioses viendo los actos realizados por Pandanio se arrepintieron y detuvieron las tempestades, la hambruna y las enfermedades y crearon, en honor a Pandanio, a los pandas unos osos que aunque deberían comer carne comen bambú un lugar de carne y son unos animales los cuales son queridos por espectáculos que hacen.
Cia Wolf.
Apolo, el dios del sol, se enamoró de una mortal llamada Anastasia, una joven que vivía en Esmirna.
Apolo se convirtió en humano y se hizo pasar por un visitante del pueblo de al lado. La encontró trabajando en una pequeña tienda, cuando la vio se quedó deslumbrado por su belleza y en ese momento decidió que se casaría con ella. Después de varias semanas de insistencia acabó enamorandola. Él le contó quién era de verdad, ella se sintió confusa y preocupada, le gustaba como era su vida en ese momento y que su amado fuese un dios lo cambiaba todo. La relación entre alguien mortal y alguien inmortal era imposible. Apolo tenía que ejercer su trabajo de Dios en el Olimpo, mientras que Anastasia era una simple mortal atrapada en la tierra.
Apolo subió al Olimpo para rogar a Zeus que le permitiese casarse con ella aunque fuese mortal. Zeus se compadeció de Apolo y le dio una manzana, si se la comía se convertiría en inmortal y podrían estar juntos.
Pero cuando Apolo le entregó la manzana, Anastasia se negó a comerla. Ella no quería dejar toda su vida de Esmirna por ser una diosa del olimpo, tenía familia y amigos a los que no quería dejar y rechazó la propuesta de Apolo, aunque eso significase que no se volverían a ver.
Apolo,que no estaba acostumbrado al rechazo, lleno de ira y con su corazón roto quiso vengarse. Si no iba a estar con él no estaría con nadie, y la convirtió en una flor llamada “girasol”. Una flor que seguía al sol allá donde fuera. Así ella estaría obligada hasta el fin de los días a no perder de vista a Apolo, el Sol.
Etoile
el bastón de madera y el origen de la electricidad
Zeus gobernaba el mundo a través del enfado y la ira , siempre castigando a los otros dioses o semidioses y sometiendolos a duelos.
Después del desastre con el carro del sol Zeus se enfadó como nunca lo había hecho , por lo que levantó su bastón para castigar a Faetón , cuando se dió cuenta de que su bastón atraía una especie de luz demasiado deslumbrante que provenía de las nubes. Zeus comenzó a utilizar su enfado para mover con fuerza su bastón y vio que esto continuaba , dándose cuenta de que aquello hizo que los carros de los campesinos comenzaran a moverse mas rápido , los fuegos de las cocinas se hacían automáticamente y toda la civilización estaba celebrando.
Este no entendía que estaba sucediendo pero aún así trato de controlar esta luz , traspasandola a través de su bastón a diferentes objetos. Esto resultó ser la electricidad que provenía de los rayos que provocaban los enfados de Zeus , sólo había que aprender a controlarla para usarla a favor de la sociedad.
Jimena Monet
Onírica
El cielo está repleto de astros y cuerpos celestes, además es hogar de dioses y semidioses, origen de sucesos sorprendentes y cúpula de la tierra. Todo lo que lo envuelve es un misterio que los hombres, a día de hoy, siguen intentando comprender.
Esta historia se remonta siglos atrás, cuando una ingenua diosa viaja a la Tierra y se enamora de un humano. Onírica disfrutaba tranquilamente de la vida celestial sin preocuparse mucho por nada ni por nadie. Eso era lo único que conocía, era hija de dioses venerados, lo que significaba que sólo había contemplado la posibilidad de tenerlo todo. Aunque no todo era perfecto, la joven diosa no conocía el alcance de su don, no tenía ni idea de para qué podía servir. Desgraciadamente, no era la única que se había dado cuenta de esto, el resto de deidades estaban furiosas con ella ya que no era capaz de hacer nada, y por eso, en una de las asambleas acordaron expulsarla a la Tierra para que hallara su destino.
Al llegar al mundo mortal, Onírica se vio perdida y asustada, tan solo podía esperar que sus padres se apiadasen de ella y la devolvieran a su hogar. Con el tiempo fue conociendo a gente y terminó llevando una vida normal: hizo amigas, trabajó, fue feliz, se enamoró y fue madre. Disfrutó unos cuantos años con su enamorado y su hija, hasta que un día los dioses decidieron que ya era hora de que Onírica volviera, así que la secuestraron y la llevaron a la bóveda. Ella solo podía llorar y rogar para que la dejaran volver, explicando que no tenía ningún don y que su vida estaba hecha para ser humana. Esto poco importó, pues no le permitieron volver.
La joven estaba destrozada, y a partir de ese día se acostó llorando cada noche pensando en su hija y en su amor. Tanto era su deseo de volver a verlos que descubrió una forma de poder hacerlo: al caer la noche, Onírica se dormía para encontrarse con su hija. Creó un mundo donde nada había cambiado, seguían siendo una familia, pero solo podían acudir las personas al cerrar los ojos, adentrándose en el mundo de los sueños.
A este mundo onírico solo se accede al dormir, pensando en tus deseos más profundos o en tus miedos más ocultos, convirtiéndose así en pesadillas. Cuando soñamos cosas sin aparente sentido puede que sea la diosa que está danzando por nuestras mentes dormidas, buscando dónde se encuentra la de su hija y sintiéndose orgullosa de sus creaciones.
El mito del fuego
Hace unos 300 años en un pequeño pueblo de Almería, Bacares, una señora mayor paseaba por las afueras del pueblo(bosque), cuando de repente se encontró una piedra fuera de lo normal.
Al sorprenderse de la preciosa piedra, procedió a tocarla cuando de repente empezó a vibrar el suelo, y se le apareció el Dios Ignis y el le ofreció un trato el cual ella acepto.
El trato era ayudar a todo el pueblo para no pasar hambre, y a cambio el le mostraría un gran invento que cambiaria el mundo. La mujer corriendo fue a cumplir con su parte del trato, y pasado unos días ella volvió al bosque, volvió a coger la piedra la cual estaba en el mismo lugar, y el Dios Ignis apareció. El le engaño, le hablo sobre el fuego, sin ella saber que significaba eso, pero le dijo que no sabia cien por cien el como hacer fuego, pero le dijo que algún día ella lo averiguaría y todo el mundo se enteraría de que ella había sido la que había inventado el fuego.
Cuando ella llego al pueblo se lo contó a la gente, pero ellos no le creían. Y al cabo de un año, uno de los días que paseaba por allí, se le volvía a aparecer el dios, y le dijo lo conseguí, ahora te devolveré lo que mereces, le enseño como se hacia fuego, y le dijo ahora todo el mundo sabrá que tu eres la creadora del fuego, por haber creído en mi.
Manéz aicul.