Bárbara Martín Rubio
Tan doloroso ardor en este pecho
Pero caemos todos sin tal remedio,
pasioń, amor, destrozo en mi cuarto,
más que este desastre de mi corazón,
¿Queremos sufrir buscando ese después?
Dos almas tan bellas unidas allí ,
Pues si en vida digna no soy de amarlo
más en muerte no me rendiré en serlo.
Cuerpo de dios, su olor es perfección,
impacto en mi pecho ,amor eterno,
si me oyes ángel del amor, tráemelo.
Y aquí sigo con mi fiel compañero,
llorando el deshecho de mi alma fría,
¡Ay!, tú ,pañuelo, que guardas mi dolor.
Ismael Martín Anzoátegui
Mi amado ha partido sin dudar,
¿por qué aquella moto se lo llevó?
Ni mensajes, ni llamadas contesta.
Me dejó en mal querer sin un amor.
Del dolor, la muerte consolaba.
Por ti cualquier manzana yo mordía,
ahora lloro rimel en sábana blanca.
Echo de menos la necesidad de soledad
Vi un pájaro muerto en nuestra ventana,
mientras tu playlist triste se sentía.
En qué momento te despedía, amor.
Sí, hoy vuelvo a visitar tu curva,
el lugar donde pagaste a tu Caronte.
Tu camino y el mío se separan.
Guillermo García Aguilera
Atigrada tu cabellera corta
y finas sus negras cejas cortadas
deslumbrantes tus luminosas gafas
no dejan ver tus pupilas oscuras
carnosos labios te favorecen
y chaqueta colorida me llama
de oro, tus cadenas envidio
enamorado desde el primer video
melódica voz llena mi corazón
pero si festejarla jamás podré
¿qué sentido tiene bailar?
Más libertad es lo que yo anhelo
con los colegas improvisando versos,
tener contigo cansancio mañanero
Sara Alegre Pinadero
¿Cómo es que me dejaste sin excusa,
postrada, con el alma en frías manos?
“Yo te amo” era lo que decías siempre,
amargo era el sabor de tus palabras.
Y yo me quedé ahí sin más apoyo,
un coletero tu único recuerdo,
mientras yo revivía escapadas,
sin saberlo mi alma se moría.
Que la única era, me querías hacer ver,
pero luego a otra le repetías
palabras con las que me encandilabas.
Lo negué pero por dentro estaba rota
tu marcha había dejado en mi un vacío
nunca más el amor será lo mismo.
Pablo Domínguez Sánchez
Sentado, viendo tu camisa blanca
tus pantalones desagradecidos
Pregunta: ¿Por qué no puedo parar de pensar en ti?
Respuesta: Porque pienso en ti y todo se para.
Tristes y alegres momentos
estos son mis recuerdos
no los olvido y nunca lo haré
porque aún te recuerdo.
¿Qué siento en esta hora?
Es un fuerte dolor en el pecho
es la muerte que se aproxima a cada paso.
Se ve a la lejanía, ¿lo ves?,
viene con paso lento pero firme.
Ya viene, ya es la hora de morir de amor