1️⃣ Protector solar: Escoge un protector solar de amplio espectro, con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Aplícalo en todas las áreas expuestas de la piel de tu hijo, incluyendo rostro, orejas y manos, y no olvides repetir la aplicación cada 2 horas o después de nadar o sudar.

2️⃣ Ropa protectora: Viste a tu hijo con ropa de manga larga y pantalones, preferiblemente de un tejido ligero y de colores claros. Los sombreros de ala ancha también son útiles para proteger el rostro y el cuello.

3️⃣ Gafas de sol: Protege los ojos de tu hijo con gafas de sol que bloqueen el 100% de los rayos UVA y UVB. No todos los lentes de sol ofrecen este grado de protección, por lo que es crucial verificarlo antes de la compra.

4️⃣ Busca la sombra: Intenta mantener a tu hijo bajo la sombra durante las horas pico de radiación solar, normalmente entre las 10 am y las 4 pm.

5️⃣ Hidratación: El calor y el sol pueden deshidratar rápidamente a los niños. Asegúrate de que tu pequeño beba mucha agua a lo largo del día.

Recordemos que una protección adecuada contra el sol no solo previene las quemaduras solares, sino también reduce el riesgo de cáncer de piel a largo plazo. ¡Disfruta del verano con seguridad y protección! ☀️💦👒